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LA COMUNION EN LA IGLESIA DE CRISTO020

base bíblica: Filipenses 1:3-8 La Roca, 25/06/2023

Oración de Pablo por los creyentes 3  Doy gracias a mi Dios siempre que me acuerdo de
vosotros,  4  siempre en todas mis oraciones rogando con gozo por todos vosotros,   5  por vuestra
comunión en el evangelio, desde el primer día hasta ahora;  6  estando persuadido de esto, que el
que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo;  7  como me
es justo sentir esto de todos vosotros, por cuanto os tengo en el corazón; y en mis prisiones, y en
la defensa y confirmación del evangelio, todos vosotros sois participantes conmigo de la
gracia. 8 Porque Dios me es testigo de cómo os amo a todos vosotros con el entrañable amor
de Jesucristo.

DECLARACION DE FE: 
Una iglesia que tiene una buena comunión entre sus miembros está llena del amor de Dios.
Tal condición le ayudará a soportar las crisis, lograr grandes proyectos y caminar con gozo
en el avance del reino de los cielos.

INTRODUCCIÓN
¿Cuál fue la última vez en que recibimos una demostración de apoyo en la iglesia? ¿Y
cuándo nos mostramos solidarios y comprensivos con alguien que nos necesitaba?
La naturaleza humana es egoísta.  Sin Cristo, el hombre únicamente piensa en sus propios
problemas y sus necesidades. Sólo la obra del Espíritu Santo en nuestros corazones nos
convierte en personas compasivas, misericordiosas y solidarias, con suficiente amor para
ayudar a los demás.
En este mensaje recordaremos la importancia de procurar mantener la unidad y armonía
entre los hijos de Dios, Como un testimonial efectivo de que el evangelio de Jesucristo es la
solución a una sociedad fracturada, separada y con una gran necesidad de una comunión
verdadera.

1. LA COMUNION: SE REFLEJA EN LOS MIEMBROS DE LA IGLESIA


La palabra “comunión” proviene del griego koinonía, que posee varios significados:
relación, compañerismo, asociación, participación. Cuando Pablo habla en el versículo
5 “por vuestra comunión en el evangelio” de los filipenses, se refiere a ese apoyo que
recibió de la iglesia para que el siguiera proclamando el evangelio en otros lugares.
La comunión que Cristo produce en los corazones de quienes se entregan a él, se manifiesta
no solo en el compañerismo con Dios y nuestros hermanos en la fe, sino también en el
compromiso con la obra del Señor.

1 Produciendo Corazones Agradecidos.


Han pasado los años y el apóstol Pablo no olvida el apoyo que le brindaron los hermanos
Filipenses. El de Tarso tiene en su mete grabados los momentos en que la iglesia fue
solidaria con él. Para algunas personas es mis fácil recordar solo lo malo y no lo bueno que
han recibido.
El salmista dijo: “Bendice, alma mía, a jehová, y no olvides ninguno de sus beneficios”
(Salmos 103:2). Pablo es un gran ejemplo de quien trae a la memoria las bendiciones y no
se deja amargar por las experiencias negativas que le ha tocado vivir en el pasado. Por
ejemplo, más que acordarse de la cárcel, los latigazos y el cepo en Filipos, recordaba a
aquellos que habían sido receptivos al evangelio y habían credo. Traía a su mete el amor y
la generosidad de esa congregación que decide el principio se comprometerse con la causa
del evangelio

2. Moviéndolos a la oración
Cuando Pablo se acordaba de los filipenses era para orar por ellos. El apóstol se
refiere a ellos Como “los Santos en Cristo” (v. 1). Seguramente estos hermanos no eran una
iglesia perfecta. Tenían sus dificultades, y había entre algunos ciertas diferencias. Pero,
como hemos visto, la congregación despertaba en el apóstol principalmente un sentimiento
de gratitud. No había ninguna situación que no pudiera ser superada con la oración e
intercesión.
Orar los unos por los otros fortalece la comunión que debe existir en la iglesia. Esta
práctica espiritual se vuelve clave cuando la congregación emprende algún proyecto de
avance dentro de la obra de Dios, así como cuando se enfrenta con cualquier tipo de crisis.
No dejemos de interceder por nuestros hermanos de la fe.

3. Llenos de gozo. V 4. “siempre en todas mis oraciones rogando con gozo por
todos vosotros,”
La palabra “gozo” es usada frecuentemente por el Apóstol Pablo en esta carta. Esta es una
actitud ejemplar que el apóstol nos muestra y desafía a seguir: …rogando con gozo por
todos vosotros… Una oración de agradecimiento genuina debe efectuarse con regocijo. Tal
actitud es una prueba manifiesta de la obra del Espíritu Santo en el creyente que permanece
unido a Cristo. –
El gozo bíblico no depende de las circunstancias ni del momento que viva la persona, sino
de su dependencia del Señor.
Oramos por los que nos ayudaron en los momentos de crisis, pero ¿orarías por aquellos que
te fallaron en el momento crítico? Esto es algo para meditar y evaluar.

1. LA COMUNION , ES OBRA DEL ESPÍRITU SANTO. 

El término griego “agathos” se traduce comúnmente Como “bueno”. Sugiere la idea de


algo que es provechoso, lo que es placentero o agradable, o bien, que produce un beneficio.
Cuando Pablo habla de la buena obra, sin duda se refiere a la salvación con todo lo que
implica, la cual los filipenses deben estar seguros de que llegará a su etapa final cuando
Cristo venga
1-  lnicia con la salvación.
“Desde el primer día . . . el que empezó” (ver. 5, 6). Ambas expresiones se refieren al
momento en el que los filipenses tuvieron su encuentro salvífico con Jesús. Lidia, el
carcelero y otros más, son los rostros que vienen en a la mente del apóstol recurrentemente.
Han pasado aproximadamente diez años; sin embargo, esto no es razón para no guardar los
recuerdos de lo que han vivido Como iglesia. Esto muestra el vinculo
sólido que había entre ellos, gracias al amor del Señor en sus vidas.
No puede haber una buena relación entre las personas si primer no existe la comunión con
Dios. Cuando el hombre se une a Cristo, también lo hace con sus hermanos de la fe. Si
alguno dice: Yo amo a Dios, y aborrece a su hermano, es mentiroso. Pues el que no ama a
su hermano a quien ha visto, ¿como puede amar a Dios a quien no ha visto? (1 Juan 4:20).

2. Continua en el presente
Lo más difícil no es empezar a hacer algo, sino mantenerse. Perseverar en la comunión es el
desafío para el cristiano en la actualidad. Es un hecho que muchos creyentes comenzaron
en la vida cristiana con gran entusiasmo y luego fueron apagando su fervor; descuidaron su
comunión con el Señor, y algunos abandonaron la fe y se apartaron del Camino de
salvación.

Pablo da por sentado que el que comenzó en vosotros la Buena obra la perfeccionará…
Vivir para Dios no es producto del esfuerzo humano. Por nosotros mismos es imposible
perseverar, debido a nuestras deficiencias y limitaciones; es necesario mantener la fe en el
Señor y depender en todo tiempo de su inagotable gracia. Es el Espíritu Santo quien
sostiene a su pueblo en todo momento. El Señor no ha terminado su labor en nuestra Vida.
El nos seguirá moldeando, hasta conformarnos según la Imagen de Cristo; seguirá
trabajando en nuestra Vida hasta perfeccionarnos. ; No debemos rendirnos!

3. Terminará con la venida de Cristo.


Cuando Dios comienza algo tiene el plan de terminarlo; él no deja su obra a medias. EI
apóstol Pablo esté convencido de tal verdad. Por eso menciona: hasta el día de Jesucristo…
Jesucristo desea que cada alma que le conoció en Filipos llegue a la meta final, que es el
encuentro Cara a Cara con él Salvador y Señor.
Tenemos que seguir caminando hacia el frente, hasta llegar al nivel en que podamos imitar
las palabras del apóstol a los gentiles: “He peleado la Buena batalla, he acabado la
carrera, he guardado la fe” (2 Timoteo 4:7).

La comunión del evangelio no es temporal, sino permanente, hasta que nos encontremos
con el Señor. Somos llamados no solo a comenzar esta carrera, sino a terminarla.
Mantengamos esa actitud de unidad, solidaridad y apoyo unos con otros como hermanos en
Cristo. Con la ayuda divina esto es posible.

III. LA COMUNION; ES FRUTO DEL AMOR DE DIOS

El verbo que en la Reina-Valera se traduce por “sentir” es froneo. En ocasiones se traduce


Como “pensar” “juzgar” o “razonar”. Pero su sentido es mucho más amplio. Tiene que ver
principalmente con tener una mentalidad o mostrar cierta actitud o disposición. No era una
simple buena opinión la que Pablo tenía respecto a los filipenses, sino un profundo afecto,
arraigado en el corazón.
1. Que llega al corazón. Versículo 7ª “como me es justo sentir esto de todos
vosotros, por cuanto os tengo en el corazón”
¿Acaso no está justificado esto que siento por ustedes? Los llevo muy dentro del
corazón. Pablo nos da un ejemplo de amorosa expresión. A pesar de su trasfondo, de su
testimonio pasado, gusta de expresar su cariño a la iglesia. Sus palabras son fervorosas,
afectivas; las expresaba no por lo que ellos fueran, Sino por lo que Cristo producía en su
corazón.
El apóstol se convierte en un mensajero de amar al pueblo. Ellos leen lo que seguramente
de la cárcel romana les envía su padre espiritual. La necesidad de afecto en nuestra
sociedad debe preocupar a la iglesia del Dios de amor que muestra la Biblia.

2. Que se muestra en toda circunstancia. Los votos matrimoniales se dan en el


tenor de la promesa. En salud o enfermedad, riqueza o pobreza, y demás. Pablo
recibió el apoyo de la iglesia de Filipos cuando estuvo en la cárcel y al salir de
ella. El, por su parte, hacía apología de la fe ante quien fuese necesario.
Seguramente recibió de los hermanos palabras de ánimo, oraciones de
intercesión y también sus ayudas Financieras.
Así el evangelio necesita de al menos estos tres aspectos para seguir siendo promulgado.
Evangelistas, misioneros, pastores y demás ministerios requieren el apoyo de la iglesia en
todo momento

3. Y sólo Cristo lo puede hacer. V 8 Porque Dios me es testigo de cómo os amo


a todos vosotros con el entrañable amor de Jesucristo.
El versículo ocho inicia con la expresión: Dios sabe con qué amor les amo, “los amo desde
mis entrañas”. Nuevamente Pablo se expresa de forma efusiva hacia la iglesia Filipenses,
enfatizando en la segunda parte del mismo versículo: con el tierno amor que me infunde
Cristo
La tendencia de la naturaleza pecaminosa es la del odio, la rencilla y la división. En
cambio, lo que Cristo infunde en el corazón del creyente es amor, para tener comunión
entre todos y en todo tiempo.

La comunión del evangelio inicia en Cristo y permanece en él. De manera que el hombre
necesita hacer un compromiso con Jesús para que su Vida cambie, y su corazón sea lleno
del amor de Dios.

La iglesia tiene un Gran desafío en la actualidad: que las personas sean alcanzadas para
Cristo. Es nuestra responsabilidad como siervos de Cristo, evangelizar en todo lugar
cercano y lejano. Si nos mantenemos en comunión iglesia-ministro, lograremos que mucha
gente conozca a Jesús esto es un trabajo de equipo

Unámonos para el avance del reino de Dios. Seamos todos participes del evangelio.
Si así lo hacemos, encontraremos siervos contentos, dando su vida por la causa de Cristo, y
la iglesia bendecida en un avance continuo.
La tarea es más fácil si mantenemos la unidad y la armonía los unos con los otros.
Oremos..
PASTOR DAVID 24 DE MARZO 2021

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