El mercurio como tratamiento.

La práctica clínica de la cual estaré hablando, será el tratamiento del mercurio que
se usaba para algunas enfermedades. En este caso el de la sífilis donde se usaron
diferentes recursos terapéuticos desde a finales del siglo XV.

Entre los muchos recursos terapéuticos utilizados a lo largo de la historia fue el

mercurio, entre otros componentes tóxicos.

Entonces continuando con el mercurio; es un diurético, y este tratamiento se

conocía previamente por Guy de Chauliac el cual fue un gran cirujano de la Edad
Media, el cual escribió en su obra “Chirugia Magna” donde defendía al mercurio
como un medicamento excelente y el mas adecuado para cicatrizar las lesiones de
la piel. (Leitner et al., 2007)

Según Leitner et al. (2007). Los cirujanos fueron los que propagaron el uso del
mercurio como tratamiento para la sífilis y a comienzos del siglo XVI, ya era muy
famoso por todo Europa, tanto la sífilis como el mercurio. Al ver que otros métodos
no funcionaban consideraron que le mercurio era le mejor tratamiento donde varios
médicos comenzaron a defenderlo, pero como se sabe, el mercurio es toxico, así
que con el tiempo se fue dando evidencia de que no servía como tratamiento debido
a su toxicidad y desafortunadamente muchos pacientes morían debido a eso, sin
embargo, a pesar de todas las desventajas aun así el mercurio se siguió usando por
siglos como terapia para la sífilis. Se utilizó también mediante emplastos,
especialmente para tratar las ulceraciones, o mediante lavados, con una mezcla de
sublimado corrosivo y agua, aplicada sobre todo o parte del cuerpo.

Para 1504 se comenzaron a usar fumigaciones de mercurio como sulfuro de

mercurio, donde el paciente se colocaba en una cabina sobre una estufa que
producía gran calor con el objetivo de que los pacientes respiraran este gas toxico
pero de nuevo el tratamiento fue muy toxico causando, reacciones adversas sobre
todo para las personas que tenían enfermedades respiratorias. Donde las
consecuencias iban desde asma, caída de dientes, abundante saliva, dolores de
cabeza e incluso la muerte. Sin embargo, el tratamiento era muy doloroso así que
muchos enfermos preferían morir que someterse a ese tratamiento. Después en
1776 pasaron de una cabina completa una cabina con solo el cuerpo donde la
cabeza quedaba de fuera, esto hizo que el tratamiento continuara y se expandiera
por Italia, Francia e Inglaterra. Así que para finales del siglo XVIII, el mercurio era el
mejor medicamento de elección para el tratamiento de la sífilis y el embarazo no era
una contraindicación para utilizarlo. A lo largo del siglo XIX la popularidad del
mercurio creció sobre todo porque ya había diferentes vías de administración, como
la oral o la cutánea, sin embargo, esta última era muy dolorosa y causaba nódulos
por eso mismo y debido a las diferentes reacciones adversas, de intoxicación,
muerte y las ya mencionadas, como asma, dolor de cabeza, entre otras y la llegada
de la penicilina, se dejo de utilizar el mercurio. (Ros-Vivancos et al., 2018).

Y actualmente el mercurio se dejo de usar por obvias razones, al ser un metal de

alta toxicidad mejor se comenzó a usar para otros métodos.
Conclusión.

Para finalizar con estos temas podemos decir que las personas en aquel tiempo
tenían el derecho de decidir si tomar aquel tratamiento o no, la desventaja es que
no estaban consientes de la gravedad que el mercurio podía contribuir a la salud
humana, sin embargo no era un tratamiento obligatorio. Ahora hablando de la
religión, no se menciona en el artículo acerca del tema, pero de manera personal
puedo decir que probablemente no era algo bien visto, ya que la sífilis es una ETS,
anteriormente no era bien visto tener relaciones sexuales antes del matrimonio y
que la sífilis se haya propagado en grandes masas debido a la colonización, podría
deducir que se culpaba de pecadores a los infectados.

Por otro lado, la ética en ese tiempo tampoco es algo que era muy “usado” por decir
así, es decir; para ese entonces podría ser ético usar ese tratamiento, sin embargo
para nosotros es totalmente una negligencia medica usar el mercurio, ya que
actualmente sabemos la cantidad de toxicidad que puede traer. No tiene nada de
ética que los pacientes tuvieran efectos adversos de los que ya tenían con la sífilis,
no solo eso si no que también adquirieran asma o se les callera los dientes, incluso
llegar a convulsionar o morir. Pero actualmente hay nuevas investigaciones, con
nuevos tratamientos que a lo mejor en un futuro no so buenos tratamientos como lo
creíamos. Sin embargo, también hay otros muy buenos que si funcionan y ayudan
a los diferentes padecimientos.
Referencias.

• Leitner, R., Körte, C. G., Edo, D., & Braga, M. E. (2007). Historia del tratamiento de
la Sífilis. Anais Brasileiros De Dermatologia, 88(1), 6-19.
http://scielo.org.ar/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1851-
300X2007000100001&lng=es

• Ros-Vivancos, C., González-Hernández, M. F., Navarro-Gracia, J. F., Sánchez-

Payá, J., González-Torga, A., & Portilla-Sogorb, J. (2018). Evolución del tratamiento
de la sífilis a lo largo de la historia. Revista Española De Quimioterapia, 31(6), 485.
https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC6254479/