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Córdoba, 8 de agosto de 2023

VISTO: Las facultades conferidas por la Ley Orgánica del Defensor del
Pueblo y demás normativa legal vigente y el aumento de la exposición de
niñas y niños en las redes sociales.

Y CONSIDERANDO:

Que, en el marco de la misión institucional de esta Defensoría,


mediante Resolución N° 9412/2012 se crea el Programa de Navegación
Segura por Internet, inspirado en la necesidad de informar a la sociedad
en el uso seguro y saludable de las nuevas tecnologías a fin de procurar una
navegación digital libre de riesgos, todo como materia integrativa de los
derechos humanos que asegura y protege.
Que, desde entonces ha asumido un rol activo en la promoción de
una ciudadanía digital responsable, impulsando la realización de distintas
actividades con el objeto de informar, concientizar y educar a los diferentes
segmentos de la sociedad sobre los riesgos que presenta la irrupción de
internet y las nuevas tecnologías, fundamentalmente en los grupos más
vulnerables.
Que, los riesgos y peligros en la red aumentan día a día por el avance
de las tecnologías y por el acceso masivo a internet, generándose un nuevo
escenario que favorece la expansión de prácticas y acciones que constituyen
verdaderas amenazas para las personas en línea, en especial para la niñez
y adolescencia.
Que, entre ellas, la publicación de fotografías mostrando
detalladamente la vida de hijas/os en redes sociales, se ha convertido en
una de las prácticas más comunes de los usuarios. Esta tendencia o moda
de compartir la crianza de las niñas y niños en internet tiene nombre y se
llama: sharenting o sobreexposición filial.
Que, dicho fenómeno de compartir fotos de personas menores de edad
en Internet entraña peligros potenciales como el ciberacoso, el robo de datos,
la suplantación de identidad, el abuso sexual online o la explotación sexual
infantil, además de perder para siempre el control sobre ese contenido. Pero
lo más importante es que afecta y lesiona directamente derechos
personalísimos que están fuertemente protegidos por leyes especiales.
Frente a ello, se hace necesario proteger el ejercicio del derecho a la
imagen en la niñez, a fin de evitar que cotidianamente sea vulnerado por
mapadres o cuidadores responsables, poniendo en riesgo la seguridad y
entorno familiar además de la integridad de las infancias.
Sobre el tema se han expresado algunos Tribunales del país en causas
concretas de desacuerdo entre los progenitores sobre la publicación de
contenidos de hijos en redes sociales, como el Juzgado Federal N°2 de
Mendoza en autos “P.A.E. c/Facebook Argentina SRL- Medida
Autosatisfactiva”, que enfáticamente en su análisis pondera y da
supremacía al principio del interés superior del niño por sobre la libertad de
expresión de los adultos titulares de perfiles en cualquier plataforma digital.
Que el tema alude claramente al ejercicio de la responsabilidad
parental entendida como el “conjunto de deberes y derechos que corresponde
a los progenitores sobre la persona y bienes del hijo, para su protección
desarrollo y formación integral mientras sea menos de edad y no se haya
emancipado”, según dispone el Artículo 638 del Código Civil y Comercial
(C.C.C.).
Que dicha responsabilidad debe regirse por ciertos principios entre los
cuales se destaca el Interés superior del Niño (Art 639 CCC) cuestión tenida
en cuenta a la hora de resolver la causa mencionada, haciéndoselo valer en
base a efectivizar el Artículo 24 del “Pacto Internacional de Derechos
Civiles y Políticos” citado por la “Convención sobre los Derechos del
Niño”, donde se reconoce expresamente que “todo niño tiene derecho….. a
las medidas de protección que su condición de menor requiere, tanto por
parte de su familia como de la sociedad y del estado”.
Que, para privilegiar este principio, deben operar ciertas medidas
como la establecida en el Artículo 3.1 de la Convención referida en cuanto
dicta que “en todas las medidas concernientes a los niños que tomen las
instituciones públicas…los órganos legislativos, tendrán una consideración
primordial a que se atenderá será el interés superior del niño” como aquella
que establece el compromiso de los Estados partes a “…adoptar medidas
especiales de protección y asistencia a favor de los niños y los adolescentes”
(Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales,
Artículo 10 Inciso 3).
Que, si bien la justicia se ha expedido en casos de divergencias o
desacuerdos entre los progenitores a la hora de publicar imágenes de
hijas/os en común... se considera importante delimitar el ejercicio de la
responsabilidad parental y de esta manera sumar otro freno a la deliberada
acción de exponer a niñas y niños en las redes.
Que la modificación que se propone al Código Civil y Comercial de la
Nación implica un límite y de control entre los progenitores para que sean
ellos quienes custodian mutuamente los derechos de sus hijas/os y el
cumplimiento de este supuesto. Además del recurso que la misma ley prevé
de recurrir a la justicia en casos de desacuerdo entre ellos o con un hijo
adolescente.
Que, fundados en tales reglas y principios, sugerimos y proponemos
al Congreso de la Nación, abrir el debate sobre temas actuales y necesarios
para fijar criterios en el ejercicio de las obligaciones parentales frente al
derecho a la imagen, intimidad y dignidad digital de nuestras niñas y niños.
Que, por ello este Defensor tomando como antecedente el debate
actual del Parlamento Francés, ofrece a los Bloques Parlamentarios del
Congreso Nacional, dar iniciativa, tratamiento y sanción, en caso que así lo
estimen conveniente, al proyecto de ley que se agrega como Anexo Único a
la presente Resolución, para su consideración.

EL DEFENSOR DEL PUEBLO


DE LA PROVINCIA DE CÓRDOBA
RESUELVE:
Artículo 1: SUGERIR al Congreso de la Nación Argentina la modificación
de las normas que regulan el ejercicio de la Responsabilidad Parental del
Código Civil y Comercial de la Nación adecuando su contenido a fin de
reconocer como actos que requieren el consentimiento expreso de ambos
progenitores aquellos que importen la difusión pública de contenidos
relativos a la vida privada de un hijo menor de 13 años, conforme al
Proyecto de Ley que como Anexo Único se agrega al presente.

Artículo 2: REMÍTASE copia al Senado y a la Cámara de Diputados de la


Nación a través de sus Bloques Parlementarios, a fin de dar iniciativa y
estado parlamentario al mismo.

Artículo 3.: Protocolícese, comuníquese y archívese.

RESOLUCIÓN: 11672/2023

Firmado digitalmente por Mario A. Decara


Firmado Digitalmente por Hugo A. Pozzi
ANEXO UNICO RESOLUCIÓN 11672/2023

EL SENADO Y LA CAMARA DE DIPUTADOS DE LA NACION


SANCIONAN CON FUERZA DE
LEY N°

ARTÍCULO 1.- MODIFICASE el Art. 645 del Código Civil y Comercial de la


Nación (Ley 26994), incorporándose el Inciso “f”, el que quedará redactado
de la siguiente manera:

“ARTICULO 645.- Actos que requieren el consentimiento de


ambos progenitores. Si el hijo tiene doble vínculo filial se requiere
el consentimiento expreso de ambos progenitores para los
siguientes supuestos:

a) autorizar a los hijos adolescentes entre dieciséis y dieciocho


años para contraer matrimonio;

b) autorizarlo para ingresar a comunidades religiosas, fuerzas


armadas o de seguridad;

c) autorizarlo para salir de la República o para el cambio de


residencia permanente en el extranjero;

d) autorizarlo para estar en juicio, en los supuestos en que no


puede actuar por sí;

e) administrar los bienes de los hijos, excepto que se haya


delegado la administración de conformidad con lo previsto en este
Capítulo.

f) La difusión, divulgación o exposición pública por cualquier


medio de comunicación o tecnología de la información, de
datos, imágenes o contenidos relativos a la vida privada o
intimidad familiar que lesionen la reputación y dignidad de
un hijo menor de 13 años.
En todos estos casos, si uno de los progenitores no da su consentimiento o
media imposibilidad para prestarlo, debe resolver el juez teniendo en miras
el interés familiar.

Cuando el acto involucra a hijos adolescentes, es necesario su


consentimiento expreso.”

ARTÍCULO 2. De forma.

FUNDAMENTOS

Las niñas, niños y adolescentes cuentan con un amplio marco


normativo que amparan su derecho a la intimidad e imagen: la Constitución
Nacional, los Artículos 51, 52 y 53 del Código Civil y Comercial de la Nación
(C.C.C.), la Convención de los Derechos del Niño, la Ley 26061 de Protección
Integral de Niñas Niños y Adolescentes y el decálogo sobre “Los e-derechos
de niños y niñas” formulado por UNICEF para esta era digital.
Específicamente, en relación al tema que nos ocupa, el Artículo 10 de
la Ley 26061 dispone: “Las niñas, niños y adolescentes tienen derecho a la
vida privada e intimidad de y en la vida familiar. Estos derechos no pueden
ser objeto de injerencias arbitrarias o ilegales.”
Por su parte, el Artículo 22 de la misma ley expresa: “Las niñas, niños
y adolescentes tienen derecho a ser respetados en su dignidad, reputación y
propia imagen. Se prohíbe exponer, difundir o divulgar datos, informaciones
o imágenes que permitan identificar, directa o indirectamente a los sujetos de
esta ley, a través de cualquier medio de comunicación o publicación en contra
de su voluntad y la de sus padres, representantes legales o responsables,
cuando se lesionen su dignidad o la reputación de las niñas, niños y
adolescentes o que constituyan injerencias arbitrarias o ilegales en su vida
privada o intimidad familiar.”
De la legislación transcripta surge claramente la protección especial
que la ley ha dado a estos derechos. Sin embargo, la publicación en redes
sociales de registros fotográficos sin los debidos recaudos y por ende, la
afectación al derecho a la imagen y dignidad de esas niñas y niños, ocurre
con muchísima frecuencia y, la mayoría de las veces, proviene de los propios
progenitores y del círculo familiar más íntimo de los afectados.
Tales publicaciones representan un avasallamiento real o potencial en
los derechos personalísimos de esa niña o niño afectado como también
implica la afectación de su huella e identidad digital.
Si bien la justicia se ha expedido en casos de divergencias o
desacuerdos entre los progenitores a la hora de publicar imágenes de
hijas/os en común... se considera importante delimitar el ejercicio de la
responsabilidad parental y de esta manera sumar otro freno a la deliberada
acción de exponer a niñas y niños en las redes.
Entendemos por identidad digital aquella dada por los datos e
información que la misma persona o terceros (familia, amistades, gente del
trabajo/escuela, desconocidos) vuelcan en el ecosistema digital, redes
sociales, foros, blogs y que nos individualiza frente a los demás. Es la
expresión del yo digital de una determinada persona. Al igual que con los
derechos referidos, son los progenitores quienes deben velar por la
protección de esta identidad digital.
Conforme lo da a conocer un informe del Defensor del Pueblo de la
Provincia de Córdoba, sobre la práctica del Sharenting de 2021 por parte de
la población adulta de la Ciudad de Córdoba Capital: “El riesgo de mostrar
sin límites a nuestros hijos en la web”, de los cordobeses consultados, el
98% de quienes publican fotos o videos de hijos/sobrinos/ nietos/ahijados
en las redes sociales, lo hace mostrando el rostro de los menores.
Este dato alarmante, se condice con las proyecciones posibles y los
datos que a nivel mundial indican que “Un niño de 13 años tiene un promedio
de 1.300 imágenes de sí mismo circulando en Internet…fotos que pueden ser
utilizadas indebidamente para pornografía infantil o que pueden conducir a
la intimidación en el entorno escolar” tal como lo expresa el parlamentario
francés, autor del proyecto que discute actualmente el Senado de Francia
para regular el ejercicio de la responsabilidad parental cuando se trata de
la difusión pública de contenidos relativos a la vida privada de un hijo.
Nuestro Código Civil, en relación al régimen de Responsabilidad
Parental refiere al conjunto de deberes y derechos que corresponden a los
progenitores sobre la persona y bienes del hijo, para su protección,
desarrollo y formación integral mientras sea menor de edad y no se haya
emancipado, conforme el Artículo 638, estableciendo para su ejercicio
determinados principios y parámetros como excepciones para aquellos
supuestos en que la ley busca exigir el consentimiento expreso de ambos
progenitores por tratarse de temáticas especiales, disponiendo también que
si el hijo menor afectado es un adolescente, requiere del consentimiento
expreso de éste.-
En este marco de regulaciones y derechos, creemos necesario abrir el
debate sobre un fenómeno tan extendido como lesivo de derechos, cuyas
consecuencias no terminamos de dimensionar: el riesgo de mostrar sin
límites a nuestros hijos e hijas en la web.
La propuesta busca modificar el Artículo 645 de nuestra ley civil,
incorporando como acto que requiere el consentimiento expreso de ambos
progenitores, en casos de hijos con doble vínculo filial, el siguientes su-
puesto: “La difusión, divulgación o exposición pública por cualquier medio
de comunicación o tecnología de la información, de datos, imágenes o
contenidos relativos a la vida privada o intimidad familiar que lesionen la
reputación y dignidad de un hijo menor de 13 años.”
Proponemos su redacción armonizando los derechos y alcances
fijados en la Ley de Protección Integral de Niñas, Niños y Adolescentes y, la
edad de 13 años, en consonancia con lo regulado en el Artículo 25 de C.C.C.
que define como adolescente a la persona menor de edad que cumplió 13
años.

En definitiva, la protección de la intimidad familiar, de la imagen,


identidad y dignidad en los entornos digitales es una obligación derivada de
la responsabilidad parental que no podemos renunciar y que, las
tendencias, modas o prácticas actuales no pueden avasallar so pena de
afectar y victimizar a nuestros propios hijos e hijas, mutilándoles derechos
reconocidos.
La modificación que se propone al Código Civil y Comercial de la
Nación implica un límite y de control entre los progenitores para que sean
ellos quienes custodian mutuamente los derechos de sus hijas/os y el
cumplimiento de este supuesto. Además del recurso que la misma ley prevé
de recurrir a la justicia en casos de desacuerdo entre ellos o con un hijo
adolescente.
Por las razones expuestas, solicitamos dar iniciativa legislativa al
presente proyecto para que una vez tomado estado parlamentario, se avance
en la discusión y oportuna sanción si así se los considera conveniente…

Firmado Digitalmente por Hugo A. Pozzi Firmado digitalmente por Mario A. Decara

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