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Centro de Investigación y Acción Social por la Paz

Serapio Rendon 57-B, Col. San Rafael C.P. 06740, CDMX.


Tel. (55) 57056621 Correo: ciasporlapaz@gmail.com

Agradecemos la colaboración de Catholic Relief Services


(CRS), Fundación de Apoyo a la Formación de la Infancia
(FAFI), Fundación San Ignacio de Loyola A.C. y Arquidiócesis de
Monterrey, para la elaboración de estos manuales.

Diciembre 2022
Misiones del buen convivir
Etapa Sensibilizar

Objetivo de las Misiones del Buen Convivir

El objetivo de las Misiones del Buen Convivir es conformar


comunidades con habilidades para la reconstrucción del tejido
social en sus territorios. Esto lo hacemos a través de la promoción
de procesos de sanación, transformación y reconciliación
entre las personas y el desarrollo de encuentros eclesiológicos,
cristológicos y mariológicos, para ser signos de la presencia de
Dios y la construcción del Reino en nuestra tierra.

Se trata de emprender un proceso de encuentro personal con el


Dios que eternamente nos ama, y una formación cristiana que
haga recuperar el sentido de comunidad fundamental para el
Buen Convivir. Todo esto con personas situadas en un contexto
que nos separa socialmente y atentas al Dios que eternamente
nos llama para vivir su compromiso cristiano en comunidad.

Se pretende educar en el servicio, a partir de pequeñas


comisiones, para adquirir las habilidades en la animación de
las comunidades, en un proceso que va desde la sanación
personal y social, hasta la transformación de sus contextos y
creación de condiciones para la reconciliación. Es un proceso
acompañado de la oración en comunidad, la reflexión bíblica
y el discernimiento de la misión.

El Buen Convivir es para nosotros una expresión del reinado


de Dios en una época que ha perdido habilidades para
convivir y que habla de esa experiencia de hermandad
cristiana entre personas y con la creación. El Buen Convivir
es una utopía que nos proporciona rumbo, nos ubica, nos
genera memoria sana y nos pone en misión.
Objetivo de la etapa sensibilizar

Esta etapa tiene por objetivo suscitar el interés de las personas


para participar en los procesos de Reconstrucción del Tejido
Social por medio de la presentación de un Dios que nos vincula
y un Jesús que nos llama a una misión. Mientras se sensibiliza se
pretende comprender los conflictos y traumas sociales que han
llevado a la fractura social.

Los temas van desde tomar conciencia de que el trabajo por


la Reconstrucción del Tejido Social implica la participación
de todos hasta la comprensión de lo que es el Buen Convivir.
En un proceso que pretende generar el interés por participar
en las diferentes actividades de la misión y del proyecto de
construcción de paz.

Método de Formación Experiencial Vinculante

El método de formación propuesto para los temas de las misiones


consiste en disponer a las personas para vivir una experiencia
que lleve a la revinculación existencial. Se trata de partir de
experiencias que animen la relación con Dios, como centro y
rumbo de nuestra vida, de tal modo que ayude al orden interno,
a situarse en un contexto, a recuperar la memoria sana, y así, a
vivir en comunidad.

Son cinco pasos fundamentales para generar estas experiencias,


recuperarlas y construir aprendizajes que favorezcan el buen
convivir. Se trata de un camino que va desde la disposición hasta
la celebración, pasando por la generación de la experiencia,
su análisis y su síntesis.

Disposición. Este paso consiste en disponer a las


personas al trabajo por medio de la oración, el juego
o alguna dinámica que ayude a generar confianza
en el grupo. Como parte de esta disposición también
está la motivación para la actividad a realizar,
explicando el objetivo o su importancia para cada
uno de los asistentes, y la explicación del fruto a
lograr, dándole un sentido a la actividad.
Experiencia. Este momento consiste en desarrollar
la actividad o el tema considerando los sentidos de
la persona, se trata de experimentar la vinculación
y hacer conciencia de ella para que se construya
otra energía capaz de recuperar las experiencias de
vinculación presente en la memoria.

Análisis. Aquí se trata de brindar los elementos


bíblicos que permitan analizar lo vivido, tomando
sobre todo las palabras y los gestos de Jesús y así
comprender situaciones existenciales fundamentales
de la persona y los seres vivos.

Síntesis. Una parte importante en todo aprendizaje


es construir la síntesis personal y comunitaria, de tal
modo que se realice una nueva narrativa que lleve
a la vinculación. Y es importante expresarla, para
reforzar el aprendizaje, sea de manera oral o escrita,
de manera gráfica o simbólica.

Celebración. Finalmente, se trata de construir


un ritual que recupere el vínculo con lo sagrado
donde se pueda vivir la reconciliación, el ofertorio
o el agradecimiento que refuerce el compromiso
adquirido.
Temas para adultos

Tema #1:
La Reconstrucción del Tejido Social
es responsabilidad de todos.

Fruto: comprender que la responsabilidad de Reconstruir el


Tejido Social implica a todas las personas y todas las instituciones
porque vivimos en un mundo vinculado.

Material: se construye un altar donde se entroniza una imagen


de Dios Padre, de María Reina de la Paz o de algún santo de la
localidad, y con este símbolo se construye un espacio sagrado
que acompañará la jornada de esta semana. Se coloca el
título de Misiones del Buen Convivir. También se necesita Biblia,
una vela y letreros que se puedan colocar en el pecho con los
nombres: familia, escuela, empresa, gobierno, barrio e iglesia.

DISPOSICIÓN
Se da la bienvenida a los asistentes al tema, diciendo que
inician las Misiones del Buen Convivir, un proyecto de tres
años que consiste en mejorar la convivencia de las familias
y los vecinos desde el encuentro con Dios Padre, como
Creador Misericordioso; con Jesús, como hermano mayor; y
con María, como la madre de todos. Al terminar se explica el
fruto a lograr con este tema.

Se traslada el grupo al espacio sagrado que estará presente


durante esta jornada para encomendar las Misiones a Dios
Padre, a María Reina de la Paz o al santo de la localidad. Se
entroniza la imagen escogida para estas Misiones, haciendo un
canto y una oración inicial para pedir por quienes vivirán este
proceso. Se recuerda que este altar acompañará las reuniones
recordando que Dios siempre está con nosotros.

Al terminar se traslada el grupo al lugar donde se realizará el


tema.
EXPERIENCIA
Se van a realizar seis grupos de personas y cada uno de ellos
representará los siguientes elementos: a) Familia, b) Escuela,
c) Empresa, d) Gobierno, c) Barrio, e) Iglesia. Una vez
divididos, van a responder dos preguntas: ¿qué me duele? y
¿de quién necesito? Al final van a elegir a una persona para
que represente a cada elemento en el plenario y responda
estas dos preguntas como si fuera Familia, Escuela, Empresa,
Gobierno, Barrio o Iglesia.

En plenario, a cada uno de ellos se le va poner un letrero en


el pecho, de la instancia que representa y menciona: “Yo soy
la familia, me duele… y necesito de…”. Así, después de que
cada institución compartió su dolor y su necesidad, se invita al
público a hacerles preguntas sobre lo que les duele y sobre lo
que necesitan.

Ahora, señalando a cada una de las instituciones, se les


pregunta: ¿es responsable la familia de las heridas que tiene
nuestra sociedad?, ¿es responsable la escuela de las heridas
que tiene nuestra sociedad?, ¿es responsable la empresa
de las heridas que tiene nuestra sociedad?, ¿es responsable
el gobierno de las heridas que tiene nuestra sociedad?,
¿es responsable el barrio de las heridas que tiene nuestra
sociedad?, ¿es responsable la iglesia de las heridas que
tiene la sociedad?

En conclusión, todos tenemos una responsabilidad en la


fractura del Tejido Social y todos somos responsables en su
reconstrucción. Vivimos en un mundo vinculado donde lo que
hace uno afecta al otro.

ANALISIS
Lectura: 1 Corintios 12, 12-17.

¿Qué nos dice esta lectura acerca del tema del día de hoy?
La familia, la escuela, la empresa, el gobierno, el barrio y la iglesia
forman un solo cuerpo. Si una parte está mal afecta al resto. Por
tanto todos somos responsables para atender las heridas de
este cuerpo y hacer todo lo posible por sanarlas.
SÍNTESIS

¿Qué aprendizajes tenemos el día de hoy?

CELEBRACIÓN

La sanación de este cuerpo depende de lo comunicado que


se encuentre. Queremos ser levadura que fermente la masa
para sanar a este cuerpo. Ahora se les pide a las personas que
representan a cada una de las instituciones que hagan una
figura que represente un cuerpo sano. Los demás asistentes se
ponen alrededor. Al final se dice: “lo que hace posible sanar
el cuerpo es encontrar preocupaciones o sueños comunes
y hoy una preocupación o sueño común es poder convivir
juntos en la diversidad”.

Se coloca una vela en el centro y se les dice que el principal


preocupado en sanar este cuerpo para que sus hijos e hijas
vivan en armonía es Dios. Se termina con un Padre Nuestro
tomados de las manos.

Tema #2:
Dios es quien nos vincula con todo lo creado.

Fruto: experimentar cómo Dios nos vincula con todo lo creado


para vivir en la armonía, haciéndonos sentir uno y así ser felices.

Material: letreros que los asistentes se pongan en el pecho:


montaña, sol, luna, aire, venados, caballos, tierra, abuelos, maíz,
trigo, pasto, vacas, lluvia, fuego, nubes, estrellas, familia, niño, etc.
Sería un letrero para cada persona. Si son pocos se hace el
letrero en una hoja y si son muchos se puede hacer el letrero
en media hoja y se la pegan en el pecho al momento de la
actividad. Biblia y una vela para encenderla cuando se lea la
cita del tema.

DISPOSICIÓN

Tomados de las manos hacemos una oración inicial, pidiendo a


Dios nos acompañe con su sabiduría y su amor para hacernos
sentir una sola familia. Hoy nos vamos a disponer en este tema
con un saludo de bienvenida y un abrazo. Se les invita a saludar
a la persona que tienen a su lado, a decirle buenas tardes y
darles un abrazo.

Al final se hace la pregunta, ¿cómo nos sentimos después de


este saludo y este abrazo? ¿por qué creen que nos sentimos
así? Reflexionar en que somos un solo cuerpo y el saludo nos
hace sentirnos vinculados con los demás, así como el abrazo
lleva a sentirnos en familia.

EXPERIENCIA

Se les entrega un letrero a cada persona donde tenga el nombre


de una criatura. Ya que tienen todos su letrero, se lo pegan en el
pecho y se colocan en un círculo. Y ahora se toma una pelota
pequeña o muñeco de peluche y se les pide que lo avienten a
la persona que tienen enfrente repitiendo la palabra que tiene
en su pecho. Así hasta alcanzar a cubrir a todo el grupo.

Al terminar se hacen pequeños grupos, según el número de


personas que asistan, y se les dice que respondan: ¿quién es
Dios? Se solicita que hablen como sol, como familia, como
montaña, como caballo, como abuelo, etc. Después buscan
algo común en la descripción que hacen de Dios y eso lo va a
presentar en el plenario una persona de cada grupo.

En el plenario se comparte lo que concluyeron que es Dios. Al


final se les recuerda que Dios es el que nos vincula con todo
lo creado para hacer posible la vida en el universo. Al ser
Dios el Creador de todo cuanto existe y Padre de todas las
creaturas, es la persona que nos recuerda constantemente
que somos una sola familia.

ANALISIS
Lectura: 1 Corintios 12, 18-24

¿Qué nos dice esta lectura acerca de la experiencia vivida


el día de hoy?

Todas las creaturas forman un solo cuerpo, y es el cuerpo de


Jesús. Esto significa que todas necesitan de nuestro respeto y
de nuestro cuidado. Dios es el constructor de vínculos y Jesús es
quien ha venido a restaurar esos vínculos para formar juntos la
familia de Dios.

SÍNTESIS

¿Qué aprendizajes tenemos el día de hoy?

CELEBRACIÓN
Vamos a agradecer que somos una familia muy grande. Se
forman equipos de cuatro personas, conservando sus letreros,
y cada persona va a agradecer a cada creatura lo que hace
por conservar la vida en esta tierra. Se termina con un Padre
Nuestro, recordando que somos una sola familia.

Tema #3:
La ruptura del Tejido Social

Fruto: comprender las causas que han llevado a la ruptura del


Tejido Social.

Material: se preparan seis papelógrafos que contengan un


triángulo dividido en tres partes. Cada uno de ellos tendrá el
nombre de uno de los componentes de la Reconstrucción del
Tejido Social (familia, escuela, trabajo, gobierno, barrio e iglesia)
y marcadores para escribir en ellos.

DISPOSICIÓN
Hacemos una oración pidiendo a Dios nos regale de su sabiduría
para comprender el porqué se ha generado la ruptura del Tejido
Social que está llevando a muchos problemas sociales. Al final
se les pregunta: ¿qué problemas nos preocupan hoy en día?
Hoy queremos comprender por qué tenemos estos problemas.

EXPERIENCIA
Se forman seis grupos para trabajar en los seis componentes
del Tejido Social: familia, escuela, trabajo, gobierno, barrio e
iglesia. A cada grupo se le entrega un papelógrafo con un
triángulo dividido en tres partes y el título del componente
que van a trabajar. Se les dice que en la parte de arriba van a
anotar los tres principales problemas de ese componente. En
la parte de en medio escriben lo que creen que pasó en sus
relaciones que llevó a esos problemas. Y en la parte de abajo
ponen las actitudes que favorecen esas relaciones dañadas y
los problemas estructurales que también las favorecen.

Se les dan 30 minutos para trabajar y al final se exponen en


plenario los papelógrafos elaborados. Al final, mirando los seis
papelógrafos, analizan su contenido y piensan en cuáles son los
problemas comunes, qué pasó en sus relaciones que llevaron
a esos problemas, qué actitudes y qué problemas estructurales
lo favorecen.

ANÁLISIS
Lectura: Hechos de los Apóstoles 5, 1-11

¿Qué dañó las relaciones de las primeras comunidades


cristianas?
¿Por qué hicieron un fraude Ananías y Safira?
¿Qué nos dice esta lectura del tema que hoy tratamos?

El Tejido Social se ha fracturado porque nos hemos separado de


Dios, como autoridad de todos nosotros. Nos hemos separados
unos de otros porque nos hemos hecho más egoístas y olvidamos
que somos un solo cuerpo. Hemos visto a las creaturas de la
tierra como negocios y a las personas como cosas.

SÍNTESIS
¿Qué aprendizajes tenemos el día de hoy?

CELEBRACIÓN
Hacemos un círculo, poniendo la palabra de Dios y la vela en el
centro. Señalamos que hoy Dios nos da una oportunidad para
Reconstruir el Tejido Social recordándonos que somos una sola
familia y tenemos un mismo espíritu. Lo primero que tenemos
que reconocer es nuestra responsabilidad en dejar que el tejido
se rompa. ¿De qué quiero pedir perdón hoy a la comunidad?
Después de cada petición decimos: perdónanos Señor. Al final
se reza un Padre Nuestro y se invita a darnos un abrazo.
Tema #4:
Jesús nos llama a una misión.

Fruto: Identificar el llamado de Jesús, siendo prestos y diligentes


para seguirlo.

Material: música de meditación para realizar una oración de


contemplación, Biblia y vela, hoja y lápiz para cada asistente.

DISPOSICIÓN
Como vamos a realizar una oración de contemplación, vamos
a buscar que las personas se dispongan física y mentalmente.
Primero se pone música de meditación e iniciamos con unos
ejercicios de relajación. Para esto se les pide que se pongan
de pie y se hacen ocho movimientos circulares con la cabeza,
después con los hombros, con los brazos, con la cintura, con las
piernas y finalmente con los pies. Todos con ocho movimientos.

Después de la disposición física, nos sentamos, en una postura


cómoda, se les pide que pongan sus manos sobre sus piernas
con la palmas hacia arriba. Se hacen ahora unos ejercicios de
respiración, se les pide que respiren profundamente y saquen el
aire tres veces. Ya preparados, se hace una oración pidiendo a
Jesús no ser sordos a su llamado sino prestos y diligentes para
seguir su voluntad.

EXPERIENCIA

Vamos a imaginar un punto azul que se acerca a nosotros, se


hace cada vez más grande y de ahí aparece Jesús. Me saluda…
Dice mi nombre… Yo también lo saludo… Le platico dónde estoy
y con quién estoy. Le platico los temas que hemos trabajado en
estos días, sobre todo los problemas que nos están rompiendo
el tejido social… Ahora, dejo que Jesús me hable… ¿Qué me
dice acerca de lo que le comenté? ¿Qué le preocupa? Se
dispone de un silencio más largo.

Leo dos veces la cita bíblica de Marcos 3, 13-15. Jesús nos llama
a subir al cerro a estar con él; sabe de mi necesidad y por eso
quiere estar conmigo… Jesús hoy me dice: “¿qué necesitas?
¿qué necesita tu corazón?” Dejo que mi corazón le responda
a Jesús (silencio más largo). Y después Jesús también me invita
a trabajar con él, ¿qué quiere que predique? ¿qué quiere que
haga en mi casa, mi trabajo, mi escuela o mi ciudad? Dejo
que Jesús me hable… (silencio más largo).

Toca despedirnos de Jesús, le agradezco estos momentos


vividos con él y me despido… ¿Qué palabras me dice?
¿Qué palabras le digo? (silencio más largo) Y al final me da
su bendición. Terminamos con un Padre Nuestro. Al final se les
invita a mover poco a poco su cabeza, sus manos, sus pies y
conforme estén preparados van abriendo sus ojos.

ANÁLISIS
Vamos a realizar el examen de la oración de manera personal.
Para esto respondemos las siguientes preguntas:
1. ¿Qué momento tocó lo profundo de mi corazón?
2. ¿Qué palabra resonó en mi corazón?
3. ¿A qué me siento llamado por Jesús?

SÍNTESIS
Ahora, por grupos comparten las respuestas realizadas de
manera personal y, una vez que todos comparten, como
grupo responden la siguiente pregunta: ¿a qué nos sentimos
llamados como grupo?

CELEBRACIÓN
Se pone la Biblia y la vela en el centro. Celebrar el llamado de
Jesús es reconocer que él está vivo amándonos y llamándonos,
por eso queremos agradecer los frutos recibidos. Se reúnen los
grupos y comparten el llamado que sienten que Jesús hace al
grupo. Todos responden: te damos gracias Señor.

Tema #5:
El buen convivir

Fruto: comprender lo que significa el Buen Convivir como signo


de la presencia del reinado de Dios entre nosotros.
Material: seis papelógrafos donde se responda la pregunta
sobre el Buen Convivir.

DISPOSICIÓN
Se invita a las personas a saludarse, primero con las manos,
después con los codos, después con las rodillas y al final con
la cabeza. Iniciamos con una oración pidiendo nos permita
conocer cómo Jesús construía el Buen Convivir con las personas.

EXPERIENCIA

Nos dividimos en seis grupos para responder la pregunta: ¿qué


significa el Buen Convivir? Cada grupo lo hará en uno de los
componentes de la Reconstrucción del Tejido Social: familia,
educación, trabajo, gobierno, barrio e Iglesia. Por ejemplo, para
el primer componente la pregunta sería; ¿qué significa el
Buen Convivir en la familia? Al final los equipos comparten el
trabajo realizado.

En plenario, cada equipo comparte su trabajo y al final se les


pregunta: ¿qué significa para nosotros el Buen Convivir? Y se
escribe en otro papelógrafo.

ANÁLISIS
Ahora, nuevamente en grupos, van a leer una cita bíblica y
responder en una hoja: ¿qué significa el Buen Convivir para
Jesús? Las citas bíblicas a repartir son las siguientes: Juan 10,
10; Marcos 9, 35-37; Juan 6, 5-13; Lucas 15, 4-7; Mateo 7, 21-
29. Al final se hace un plenario con la exposición de cada uno
y sus aportes se anotan en un papelógrafo.

Al final se compara lo que significa el Buen Convivir para


nosotros y lo que significa para Jesús. El Buen Convivir es
construir las condiciones sociales para que todos tengamos
vida en abundancia, todos nos sintamos incluidos, se apoye a
los necesitados, y así vivir en la armonía de hijos e hijas de Dios.

SÍNTESIS
¿Qué aprendizajes tenemos el día de hoy?
CELEBRACIÓN

En círculo con la Biblia y la vela en el centro, se agradecen los


frutos recibidos y se les invita a darse un abrazo como signo del
Buen Convivir.

Temas para jóvenes

Tema #1:
La casa común

Fruto: Comprender que tenemos una casa común que es


necesario cuidar para las futuras generaciones.

Material: Se construye un altar donde se entroniza una imagen


de Dios Padre, de María Reina de la Paz o de algún santo de la
localidad, y con este símbolo se construye un espacio sagrado
que acompañará la jornada de esta semana. Se coloca el
título de Misiones del Buen Convivir. Se tienen dos juegos de
letreros que se puedan poner los jóvenes en su espalda con los
nombres de: aves, árboles, ríos, tierra, flores, venados, gallinas,
lluvia, semillas, hombres, mujeres y sol.

DISPOSICIÓN
Se da la bienvenida a los asistentes al tema, diciendo que
inician las Misiones del Buen Convivir, un proyecto de tres años
que consiste en mejorar la convivencia de las familias y los
vecinos desde el encuentro con Dios Padre, como Creador
Misericordioso; con Jesús, como hermano mayor; y con María,
como la madre de todos. Al terminar se explica el fruto a lograr
con este tema.

Se traslada el grupo al espacio sagrado que estará presente


durante esta jornada para encomendar las Misiones a Dios
Padre, a María Reina de la Paz o al santo de la localidad. Se
entroniza la imagen escogida, para esto se hace un canto
y una oración inicial pidiendo por las Misiones que vamos a
realizar. Se recuerda que este altar acompañará las reuniones
recordando que Dios siempre está con nosotros.

Al terminar se traslada el grupo al lugar donde se realizará el


tema.

EXPERIENCIA
Se les pide a los dos equipos que se pongan los letreros que
representan los elementos de la casa común. Un equipo va a
ser A y el otro equipo va a ser B. El equipo A escenifica con
sus cuerpos cómo está la casa común, que es nuestra tierra.
Si es un río imagina cómo están los ríos y lo representa con su
cuerpo; si son bosques, lo mismo hace. Y teniendo la escena
de la casa común, se le pide a B que tome uno de los cuerpos
de A, lo levante y junto con todo el equipo de B vuelvan a la
armonía al grupo A. La persona del grupo A va a fijarse el letrero
de la persona que le hizo volver a la armonía. Al final, cuando
están los cuerpos de A en una postura de armonía, se lee el
texto de Isaías 11, 6-9.

Ahora se pide que hagan dos círculos, en el centro A y afuera B.


Viéndose de frente van a caminar uno a la izquierda y otro a la
derecha, y cuando el coordinador lo señala se detienen frente
a frente. B le agradece a A según el elemento que represente.
Por ejemplo, si me toca la lluvia voy a agradecer lo que hace
por la tierra: la vida que genera, las frutas que he comido y las
plantas que nos hacen sentir el amor. Se deja un minuto y siguen
dando vueltas hasta que vuelven a parar y agradece B a A. Así
se hacen cinco rondas. Al final, se les pide que se unan los que
son una misma especie; es decir, las semillas, los hombres, las
aves, etc. Y van a pensar en qué pedir a los hombres y mujeres.

ANÁLISIS
Ahora se forma un círculo, sentándose juntas las personas que
representan una misma especie y van a expresar la petición a
los hombres y mujeres, que estarán sentados juntos. Después
de la ronda, los hombres y mujeres van a pensar qué hacer
para cuidar la casa común y al final lo expresan en forma de
compromiso.
SÍNTESIS

Como síntesis, vamos a recuperar la experiencia con las


siguientes preguntas:
¿Qué aprendemos de esta experiencia?
¿Por qué necesitamos cuidar la casa común?

CELEBRACIÓN
Leemos el texto bíblico Marcos 16, 15
Se le entrega una tarjeta y ahí van a escribir cómo ser una
buena noticia para la creación. Al final la comparten y ponen
en el altar.

Tema #2:
La importancia de un orden superior

Fruto: asumir a Dios como principio y fundamento de nuestra


vida.

Material: cruz, vela, tierra, piedras, agua y flores de colores, para


construir un altar del Buen Convivir en el piso. Biblia.

DISPOSICIÓN
Hacemos una oración pidiendo que todas mis intenciones,
acciones y operaciones sean puramente ordenadas en servicio
y alabanza de su Divina Majestad.
EXPERIENCIA
Con nuestros cuerpos vamos a formar una mandala donde
todos estemos conectados. Esto se realiza en el piso acostados
boca arriba. Cuando terminan de elaborar la mandala se les
invita a guardar silencio, hacer respiraciones para concentrarse
y, una vez que estén en completo silencio, se les pedirá que
tomen conciencia de cómo se siente su cuerpo y cómo sienten
el cuerpo de los otros. Después se les pide que imaginen que
son el universo, cada uno es un planeta o una estrella; hay una
orden que hace posible su existencia. Finalmente se les pide que
imaginen que son la tierra y cada uno representa una creatura
conectada con la otra; nos damos cuenta que hay un orden
que hace posible la vida en el planeta. Agradecemos esta
experiencia de sentirnos conectados y lo hacemos diciendo:
Padre Nuestro… Al terminar se ponen de pie y hacen un círculo
para analizar la experiencia.

ANÁLISIS

Estando en un círculo tomamos conciencia de lo vivido en esta


experiencia y respondemos las siguientes preguntas:
¿Cómo logramos hacer una mandala?
¿Qué hace posible la vida en el planeta?

El caos permite el cambio y el orden permite la existencia de


la vida. El mundo tiene tiempos de caos y necesita tiempos de
orden. La creación surgió del caos. La vida surgió de la confusión.
La claridad es posible verla porque existe la oscuridad.

Lectura: Génesis 1, 1-5


Con esta lectura nos damos cuenta de que en el principio todo
era confusión y no había nada en la tierra. Dios empieza a crear
la vida dándole orden a lo existente. La vida es posible porque
todo está vinculado con todo: la lluvia con la tierra, la tierra con
el sol, el sol con la luna, la luna con los mares, los mares con los
peces, los peces con la sal, la sal con la comida, etc.

Esa vinculación genera un orden en el universo que hace


posible la vida. Se trata de un dinamismo de cuidado que hace
posible la existencia de las especies. Por eso, asumir que existe
un orden superior que orienta nuestra vida hacia la armonía
social es fundamental para convivir juntos.

SÍNTESIS
¿Qué aprendemos el día de hoy?

CELEBRACIÓN
Armamos un altar en el piso que represente el orden superior,
para lo cual ponemos una cruz en el centro y a los lados
ponemos los cuatro elementos: fuego, tierra, aire y agua.
Podemos colocar flores y símbolos del lugar. Nos ponemos
alrededor de ese espacio. Recordamos que ese orden superior
decidió encarnarse entre nosotros a través de la persona de
Jesús, para tener alguien de nuestra misma especie que nos
permita comprender nuestra propia existencia. Se les invita a
agradecer lo recibido durante estos días. Al final se reza un
Padre Nuestro y un Ave María, agradeciendo a nuestro Padre y
nuestra Madre el cuidado que han tenido de nosotros.

Tema #3:
Las causas de la violencia

Fruto: comprender las causas que han llevado a la violencia en


nuestra comunidad.

Material: seis papelógrafos, seis marcadores, Biblia y vela, cuatro


letreros que digan Dios, tierra, ancestros y comunidad.

DISPOSICIÓN

Tomados de las manos hacemos una oración pidiendo a Dios


que nos regale su sabiduría para comprender las causas de la
violencia. Se termina con el canto de San Francisco “Hazme un
instrumento de tu paz”.

EXPERIENCIA
Se forman seis grupos y a cada uno se le entrega un componente
del Programa de Reconstrucción del Tejido Social para que
piense en las causas de la violencia desde el tema que les tocó.
Los componentes son: familia, escuela, trabajo, gobierno,
barrios y espiritualidad. La pregunta sería ¿qué ha pasado
en la familia que ha llevado a la violencia?, y así con cada
componente. Al terminar comparten en plenario.

En el plenario, cada grupo expondrá el contenido de su


papelógrafo sobre las causas de la violencia. Se colocan los
papelógrafos de familia, educación, trabajo, gobierno y barrios
alrededor, y el papelógrafo de espiritualidad en el centro. Se les
invita a pensar en las principales causas que han llevado a la
violencia y se escriben en el papelógrafo de espiritualidad. La
propuesta es que el grupo mismo construya sus conclusiones
sobre las causas de la violencia.
ANÁLISIS
Lectura: Hechos de los Apóstoles 5, 1-11
¿Qué dañó las relaciones de las primeras comunidades
cristianas?
¿Por qué hicieron un fraude Ananías y Safira?
¿Qué nos dice esta lectura del tema que hoy tratamos?
La violencia se genera porque nos hemos separado de Dios,
como autoridad de todos nosotros; nos hemos separado unos
de otros, porque nos hemos hecho más egoístas y olvidamos
que somos un solo cuerpo; hemos visto a las creaturas de la
tierra como negocios y a las personas como cosas.

SÍNTESIS
¿Qué aprendemos el día de hoy?

CELEBRACIÓN
Hacemos un círculo, poniendo la palabra de Dios y la vela en
el centro. Señalamos que hoy Dios nos da una oportunidad
para volvernos a vincular para detener la violencia. Ponemos
en el centro unos letreros que digan Dios, tierra, Ancestros y
Comunidad, y se invita a pensar cómo nos hemos separado de
estos elementos. Además, se plantea que como un compromiso
por la paz queremos recuperar nuestra relación con ellos. Se les
invita a decir una palabra a Dios, a la tierra, a los ancestros y la
comunidad, como símbolo de esta vinculación que queremos
fortalecer, y se termina con un Padre Nuestro.

Tema #4:
La necesidad de un referente en la vida: Jesús

Fruto: conocer a Jesús como un modelo de vida que orienta


hacia el amor y el servicio.

Material: se necesitan seis biblias y escribir las seis preguntas


para el trabajo en equipos. También una imagen de Jesús.

DISPOSICIÓN
Se inicia con una oración pidiendo conocer a Jesús para más
amarlo y seguirlo. Se inicia con el canto de Cristobal Fones SJ
que se llama “Tu modo de proceder”.

¿Quiénes son los modelos de vida hoy en día?


¿Qué valores nos transmiten?

Hoy necesitamos un modelo de vida que oriente nuestras


búsquedas, que nos permita elegir aquello que más nos ayuda
a crecer en libertad, que nos haga ser auténticos y recuperar
el sentido de hermandad con las personas y con la creación. Y
ese modelo lo encontramos en Jesús de Nazaret.

EXPERIENCIA
Vamos a conocer a Jesús. Para esto se forman seis grupos y a
cada uno de ellos se les entrega una cita bíblica y una pregunta
para leer y responder. La respuesta la pueden hacer con un
dibujo o con palabras.

Lucas 4,14-21: ¿Cuál era la misión de Jesús?


Lucas 5, 27-32: ¿Cómo formó su equipo de trabajo?
Lucas 6, 17-23: ¿Cuál era su plan de trabajo?
Juan 6, 1-13: ¿Qué hacía ante los problemas de la gente?
Juan 8, 1-11: ¿Cómo se comporta ante la mujer adúltera?
Marcos 9, 33-37: ¿Quién tenía el liderazgo dentro de su
grupo?

Los grupos presentan en plenario su trabajo presentando sólo


la respuesta a la pregunta.

ANÁLISIS
Para profundizar en el trabajo se hacen las siguientes preguntas:

1. ¿Qué propuestas nos presenta Jesús que hoy nos


sirven para construir la paz?

2. ¿Cómo podemos conocer más a Jesús?

Ante un mundo que confunde nuestros sentidos, necesitamos


un referente de vida que nos ayude a tener claridad y rumbo en
la vida. Un hombre tan libre para amar y servir sólo Dios. Jesús
es la expresión del Dios que eternamente nos ama y nos llama.
En Jesús tenemos la oportunidad de conocer lo que hay en
el corazón de Dios; es el amigo y el compañero que necesita
nuestro corazón.
SÍNTESIS

¿Qué aprendemos el día de hoy?

CELEBRACIÓN
Se pone la imagen de Jesús en el centro y las personas alrededor
de la imagen van a agradecer lo que hoy conocieron de él.
Cada uno agradece lo que más le llamó la atención de la
persona de Jesús. Se termina con la canción inicial de Cristobal
Fones SJ y se invita a darse un abrazo.

Tema #5:
El buen convivir

Fruto: comprender lo que significa el Buen Convivir como signo


de la presencia del reinado de Dios entre nosotros.

Material: seis papelógrafos donde se responda la pregunta


sobre el Buen Convivir.

DISPOSICIÓN
Hoy vamos a saludarnos con las manos, después con los codos,
con las rodillas y al final con la cabeza. Después de este ejercicio
vamos a iniciar con una oración pidiendo a Dios nos ayude a
conocer lo que significa el Buen Convivir en la familia, en la
escuela, en el trabajo, en el gobierno, en el barrio y en la Iglesia.

EXPERIENCIA

Nos dividimos en seis grupos para responder dos preguntas:


¿qué significa el mal convivir? ¿qué significa el Buen
Convivir? Cada grupo lo hará en uno de los componentes
de la Reconstrucción del Tejido Social: familia, escuela,
trabajo, gobierno, barrio e Iglesia. Por ejemplo, para el primer
componente, la pregunta sería ¿qué significa el mal convivir
en la familia? ¿qué significa el Buen Convivir en la familia?
De igual forma sería para los siguientes componentes. Al final
los equipos comparten el trabajo realizado.
ANÁLISIS

En plenario se va a pensar cómo se relaciona un componente


con otro componente para la realización del Buen Convivir y
qué influye de un componente en otro para el mal convivir. Se
trata de comprender cómo todo está conectado y el trabajo
por el Buen Convivir implica hacer una labor simultánea en
diferentes instancias. Se sugiere revisar alguno de los siguientes
textos de los evangelios para profundizar desde la propuesta
del reino de Dios que propuso Jesús de Nazaret: ​​Juan 10, 10;
Marcos 9, 35-37; Juan 6, 5-13; Lucas 15, 4-7; Mateo 7, 21-29.

SÍNTESIS
En plenario, después de haber realizado el análisis anterior, se
les pregunta: ¿qué significa para nosotros el Buen Convivir?
¿cómo podríamos crecer como grupo en el Buen Convivir? Y
se escribe en otro papelógrafo.

CELEBRACIÓN
En círculo, con la Biblia y la vela en el centro, se agradecen los
frutos recibidos y se les invita a darse un abrazo como signo del
Buen Convivir.

Temas para niños

Tema #1:
Todos formamos un solo cuerpo

Fruto: que los niños comprendan, mediante el juego, que todas


las personas son importantes en la familia, en la escuela y en la
comunidad.

Material: crayones, tijeras, pegamento blanco, masking tape,


un globo o una flor por niño, y plumones indelebles.
DISPOSICIÓN
Se reúne a los niños en un jardín o punto público. Se les explica
que, así como los jóvenes y los adultos inician hoy una serie
de actividades para vivir las Misiones del Buen Convivir, los
niños también iniciarán sus actividades a través de juegos y
actividades que nos ayuden a comprender el sentido de estos
días.

Se entrega a cada niño una flor o un globo para que con plumón
indeleble escriban un saludo a Papá Dios. Posteriormente se
hace una breve peregrinación hacia la capilla o templo, donde
los niños colocarán sus globos o flores como un modo de saludar
a Dios. Él está dentro y fuera de la capilla acompañando nuestro
camino en todo momento por si deseamos platicar con él.
Al terminar se traslada el grupo al lugar donde se realizará el
tema.

EXPERIENCIA
Se organiza a los niños en círculo y se les indica que para esta
actividad, haremos un ejercicio que nos ayude a reconocer
nuestro cuerpo y a sentir cómo es moverlo con alegría.

Se comienza diciéndoles que imaginaremos una llovizna y


haremos el sonido con nuestros pies. Primero golpeando con
mucha suavidad el piso, como acariciando la tierra con cada
golpecito. Tocando de modo suave, saludando a la naturaleza
a través de nuestros pies. Luego, de modo gradual, se irá
aumentando la energía con que se golpea el piso, imaginando
que se acaricia cada vez con mayor energía a la Tierra. Se crea
una lluvia más intensa como para alimentarla cuando tiene
sed. Posteriormente se les dice que imaginen que le dan un
masaje con energía a través de sus pies.

Cuando el sonido es mucho más alto, se indica a los niños


que se hará un viento fuerte con las manos moviéndolas en
alto, como para refrescar la tierra. Se pueden ayudar haciendo
sonidos mientras mueven sus brazos, sus piernas, su cadera, su
pecho y su cabeza cada vez más rápido, con alegría. Sin parar
el movimiento, pueden gritar el nombre de alguien en quien ellos
piensen que les quiere mucho. Al final los niños, en un conjunto
de movimientos, se encontrarán percutiendo el piso con sus
pies, moviendo el cuerpo completo incluyendo su cabeza y
gritando el nombre de alguien que para ellos representa cariño.
Se detiene el movimiento y se les pide que cierren sus ojos. Que
se den cuenta cómo está su cuerpo, cómo respiran, en qué
parte de su cuerpo sienten mayor energía, qué parte es la más
fuerte, la más alegre o la más suave. Finalmente se les pide
que imaginen qué parte del cuerpo humano les gustaría ser y
se les ayuda a formar entre todos la forma de un solo cuerpo.
Cuando ya están todos listos, se les pide que se abracen por los
hombros para quedar unidos y hagan que ese cuerpo camine.
Es importante que el cuerpo humano esté totalmente formado
desde la cabeza hasta los pies y que los niños tengan presente
qué parte del cuerpo son.

ANÁLISIS

Lectura: 1 Corintios 12, 18-19.


¿Qué parte del cuerpo me gustaría ser y porqué?
¿Qué parte del cuerpo es cada persona en mi casa, en mi
escuela o en mi comunidad?
A Dios le agrada que cada uno de nosotros haga algo como
parte de un mismo cuerpo y nos fortalece para que hagamos
mejor nuestra función.

SÍNTESIS
¿Qué otras partes del cuerpo me parecen importantes para
que yo me sienta mejor y me lleve mejor con los demás?

CELEBRACIÓN
Dios es quien que eternamente ama y llama. Imaginemos
que Dios le habla directamente a cada parte de mi cuerpo y
escribamos en hojas de colores lo que nos gustaría que nos
dijera.

Tema #2:
Dios es un Padre que nos vincula

Fruto: Que los niños comprendan cómo aprendemos de


nuestros papás y abuelos la manera en que platicamos o
tratamos a las demás personas.

Material: Papel crepé y palitos de madera para que cada


niño haga una flor de papel. En vez de esto, se puede sustituir
por cualquier otro material con el que los niños puedan hacer
un regalo de material reciclado o muy económico y fácil de
conseguir.

DISPOSICIÓN
Se pide a los niños que comiencen a caminar respirando e
imaginando cómo respira cada una de las personas con las
que viven. Por ejemplo su mamá, su hermano menor, alguno
de sus abuelos o tíos. Luego elegirán a varios imaginando que
se convierten en ellos y haciendo cada una de las siguientes
acciones:

· Imagina cómo camina alguno de tus tíos cuando está


muy apurado.

· Cómo movería los brazos tu mamá si estuviera


bailando muuuy rápido.

· Cómo se sacudiría el polvo tu abuelo si se hubiera


caído y estuviera rodado en un campo de fútbol.

· Cómo se quitaría el lodo de encima tu vecino si se


hubiera caído en un charco de agua.

· Cómo caminaría tu papá si estuviera muy mareado.

Se pueden agregar tantos personajes y movimientos como se


quiera, mientras sean movimientos rápidos y enérgicos.

EXPERIENCIA
Esta es la historia de dos amigos, Pedro y Ramón, que se querían
como hermanos a pesar de no tener vínculo familiar alguno.

Tenían una amistad tan grande que para todos los moradores
del pueblo eran como inseparables hermanos o gemelos sin
mucho parecido físico, ya que uno era más alto y el otro más
gordo, uno rubio y otro moreno.
Su vínculo surgió desde que eran niños.Vivían cerca uno del otro
y desde pequeños se adaptaron a jugar juntos y a desempeñar
todas las tareas en conjunto.

Podía vérseles lo mismo jugando a las escondidas que


correteando de aquí para allá o dándose un chapuzón en la
laguna, o jugando con animales. En fin, todo lo que un niño
hace en sus días divertidos.

De igual forma, los dos ayudaban mucho en sus casas y


compartían las tareas del colegio, por lo que los padres de
cada uno querían al otro como un hijo más.

Así, Pedro y Ramón fueron creciendo y también lo hicieron su


amistad y las labores que hacían juntos.

Por supuesto, a medida que maduraban no hacían lo mismo


que antes, pero igual se les podía ver juntos haciendo cualquier
tarea típica de hombres de pueblo de leñadores: talando árboles,
llevando madera al aserradero, vendiéndola o contribuyendo
con su fuerza a la ejecución de las obras del vecindario.

Asimismo, compartían partidas de ajedrez y naipe, asados,


horas de bares y muchas cosas más.

Tan inseparables eran que incluso cuando se casaron y tuvieron


que construir su casa y su familia, lo hicieron uno al lado del otro
para que sus familias fuesen partícipes también del bello lazo
de amistad que los unía.

Son muchos los ejemplos y las historias que reafirman que


pocas veces se ha visto una amistad como la que unía a estos
leñadores. Sin embargo hay una que resulta excepcional.

Resulta que un día estaba Pedro profundamente dormido en


su hogar, junto a su esposa e hijo pequeño. Había tenido una
jornada bastante tranquila en el trabajo y no había sucedido
nada que se saliese de su rutina habitual. Sin embargo, de
repente despertó sobresaltado, como quien tuviese una gran
preocupación o tormento en su cabeza.

Sin dar explicación a su cónyuge, extremadamente intrigada


por la agitación de su marido, tomó una linterna y fue rápido a
casa de su vecino y amigo Ramón, al que tocó la puerta con la
dureza típica de una persona apurada.

En unos segundos, también asustado, Ramón abrió su puerta y


al ver a su amigo tan pálido le preguntó:
-¿Pasa algo Pedro? ¿Por qué me tocas a la puerta tan tarde en
la noche y con ese sobresalto?
El interpelado no pudo responder pronto, pues su nerviosismo y
agitación no le dejaban aún recuperar el aliento y acomodar
sus ideas para narrar lo sucedido.
Ante este silencio Ramón volvió a intervenir.

-En serio, dime –le pidió. –Me tienes preocupado. ¿Pasa algo en
tu casa? ¿Intentaron robarte? ¿Están bien tu esposa e hijo? ¿Te
sucede algo a ti, te sientes enfermo acaso?
Ante tanta insistencia, y un poco más recuperado, Pedro pudo
responder a Ramón.

-Amigo, no pasa nada. Sucede que dormía profundamente


y de repente me vi en un extraño sueño donde corrías un
grave peligro. Disculpa mi agitación y mis formas, pero tenía
que asegurarme de que tanto tú como tu familia estaban en
perfectas condiciones.

Agradecido y feliz, Ramón contestó:


-¡Qué disculpas ni ocho cuartos! ¿Cómo vas a pedir mi perdón
por algo que debería agradecer yo? Tener un amigo que se
preocupe así por uno es de lo más grande que se puede desear
en la vida. Ahora te digo, ten por seguro que yo haría lo mismo
por ti, sin importar la hora que fuese.

Y así ambos amigos se fundieron en un abrazo y fueron a jugar


una partida de naipes y a beber una cerveza hasta que a Pedro
se le calmase su sobresalto.

Su amistad después de ese día siguió siendo igual de fuerte, tal


vez un poco más. Esto demostró a todos los que lo conocían,
y a nosotros que nos enteramos ahora de sus peripecias, que
amistades como la de ellos hay realmente pocas. Los verdaderos
amigos son aquellos que siempre están ahí el uno para el otro,
tanto en las buenas como en las malas.
En sus familias la historia se repitió con sus hijos, luego con sus
nietos, bisnietos y así indefinidamente. Aunque, por supuesto,
esas ya serían otras historias y otros sueños para narrar.

ANÁLISIS
Se pregunta a los niños qué parte del cuento les gustó más.
Después se les pide que recuerden una historia que les haya
contado algún familiar adulto y que ellos hayan disfrutado
mucho. Pueden comentarla por pequeños grupos o en parejas.
¿Qué aprendieron en esa historia?

Al final se les pide que recuerden a algún familiar que les haya
enseñado algo que ellos después hayan enseñado a otra
persona. Se cierra la experiencia comentando que, así como en
los cuentos y en las historias que nos platican aprendemos de
otros, nosotros enseñamos a los demás cosas que aprendemos
en la convivencia.

SÍNTESIS
¿Qué aprendizajes tenemos el día de hoy?

CELEBRACIÓN
El Padre constructor de vínculos (Marcos 4, 33-34). Jesús
platicaba de su Padre en parábolas, según lo que las personas
pudieran entender; pero a sus amigos les platicaba todo en
privado. Se pide a los niños que construyan una flor de papel
o un regalo con que puedan agradecer a algún familiar o
vecino, algo que les haya enseñado y lo entreguen al terminar
la actividad.

Tema #3:
El mal es todo aquello que destruye los vínculos

Fruto: Experimentar los hechos que generan el mal y fracturan


los vínculos.

Material: Hojas blancas y tijeras para los niños.


DISPOSICIÓN
Se pide a los niños que recuerden la actividad del primer día,
en donde todos juntos formaban un solo cuerpo. Quien guía
la actividad se asegurará de que con sus cuerpos formen una
figura humana. Una vez formada, le darán movimiento sin soltarse
y poco a poco se guiará el movimiento con mayor rapidez sin
soltarse, de manera que los niños pasen de caminar a correr
juntos. Se debe guiar el juego llevándolos a mayor movimiento
hasta que por accidente se vayan soltando o algunos decidan
separarse del grupo.

EXPERIENCIA
Se recupera la experiencia comentando que el mal es como
una enfermedad. Se puede apoyar en el siguiente cuento:
“Cierto día, Daniel se levantó temprano para ir a la escuela.
Aunque su mamá se enfadó con él, sólo quiso tomar un
pastel para desayunar. Al salir de casa para ir a la escuela
con su amiga Margarita, su mamá le colocó un cubrebocas,
advirtiéndole que debía tomar precauciones para no infectarse
con el coronavirus.

Nada más dio vuelta en la esquina, Daniel se quitó el cubrebocas


aún cuando Margarita le pidió que no lo hiciera.

Daniel tampoco hizo caso de los consejos que dio la profesora a


los niños del salón para protegerse del coronavirus. ¿Sabes qué
le pasó a Daniel unos días después? Comenzó a estornudar
y a toser, también le subió la temperatura y le dolían todos los
músculos del cuerpo.

Su mamá le llevó a la consulta con el doctor, le hicieron pruebas


y le dejaron ingresado en el hospital. Daniel lloró y lloró durante
horas porque no quería estar allí, y una enfermera muy simpática
le dijo:
– No llores Daniel, todos te avisaron que debías tomar
precauciones para no enfermar: colocarte el cubrebocas, no
tocar cosas que podían haber tocado las personas enfermas,
lavarte las manos con frecuencia, jamás llevar las manos a la
boca sin haberlas lavado antes, llevar una alimentación y una
vida sana, y muchas cosas más. No hiciste caso y ahora estás
enfermo. Llorando no vas a quitarte el coronavirus –le aseguro–.
Debes tomar las medicinas y seguir los consejos de los adultos.
No podrás salir a jugar ni ver a tus amigos ni patear la pelota en
la calle ni ver a tus compañeros en la escuela o ir a nadar con
tus papás.

ANÁLISIS
Lectura: Lucas 5, 30-32.

“Y los fariseos y sus escribas se quejaban diciendo a Jesús:


¿Por qué coméis y bebéis con los pecadores? Respondiendo
Jesús, les dijo: Los sanos no tienen necesidad de médico,
sino los que están enfermos. No he venido a llamar a justos,
sino a pecadores.”

¿Cómo se siente estar enfermo?

¿Qué tenemos ganas de hacer cuando nuestro cuerpo se


enferma?

¿Cuáles son las enfermedades de nuestra comunidad?

Se cierra el trabajo comentando que así como la enfermedad


nos obliga a aislarnos, el mal nos limita para no relacionarnos
alegremente con las personas que nos quieren.

SÍNTESIS
¿Qué me parece que Jesús venga a visitarnos cuando
estamos enfermos?

¿Qué aprendizajes tenemos el día de hoy?

CELEBRACIÓN
El mal como destructor de vínculos. Se pide a los niños que
recorten una cruz del tamaño de una hoja tamaño carta
y que escriban en ella una frase para agradecer a Dios que
está presente en el mal de las personas que conocemos. Por
ejemplo:

Gracias Dios por acompañar a mi hermano que no me


quiere hablar desde ayer.
Estas cruces blancas, se colocan dentro de la capilla a la vista
de quienes entren.

Tema #4:
Jesús es el constructor de vínculos

Fruto: Conocer a Jesús como ejemplo de persona que construyó


vínculos entre las personas.

Material: música de meditación para realizar una oración de


contemplación, Biblia y vela. También una hoja y un lápiz para
cada asistente.

DISPOSICIÓN
Se facilita el juego del papalote:

Se organizan grupos de cinco a diez niños.

Se pide a todos los niños que se tomen de las manos en una


sola fila. Se les indica que el objetivo del juego es correr por un
rato hasta llegar a la meta sin soltarse de las manos.

En caso de que alguien caiga perderá todo el equipo, de


modo que mientras corren también tendrán que cuidar a sus
compañeros. Se trata de que el camino sea ondulado y no en
línea recta, para generar caos.

Al final se elige a un equipo ganador, que como premio podrá


elegir qué pueden hacer para que el resto de los niños se sientan
felices de ser parte del grupo a pesar de no haber ganado este
juego.

EXPERIENCIA
Se lee a los niños la parábola de los viñadores como si fuera un
cuento: Mateo 20, 1-16.

Un día les dijo Jesús: el reino de los cielos es semejante a un


hacendado que salió muy de mañana para contratar obreros
para su viña.Y habiendo convenido a los obreros con un denario
al día, los envió a su viña. Y salió como a la hora tercera, y vio
parados en la plaza a otros que estaban sin trabajo; y a éstos les
dijo: “Id también vosotros a la viña, y os daré lo que sea justo”. Y
ellos fueron.Volvió a salir como a la hora sexta y a la novena, e hizo
lo mismo.Y saliendo como a la hora undécima, encontró a otros
parados, y les dijo:“¿Por qué habéis estado aquí parados todo el
día sin trabajar?” Ellos le dijeron: “Porque nadie nos contrató”. El
les dijo: “Id también vosotros a la viña”.Y al atardecer, el señor de
la viña dijo a su mayordomo: “Llama a los obreros y págales su
jornal, comenzando por los últimos hasta los primeros”. Cuando
llegaron los que habían sido contratados, como a la hora
undécima, cada uno recibió un denario. Y cuando llegaron los
que fueron contratados primero, pensaban que recibirían más;
pero ellos también recibieron un denario cada uno. Y al recibirlo
murmuraban contra el hacendado diciendo: “Estos últimos han
trabajado sólo una hora, pero los has hecho iguales a nosotros
que hemos soportado el peso y el calor abrasador del día”. Pero
respondiendo, él dijo a uno de ellos:“Amigo, no te hago ninguna
injusticia; ¿no conviniste conmigo en un denario? Toma lo que
es tuyo, y vete; pero yo quiero darle a este último lo mismo que
a ti. ¿No me es lícito hacer lo que quiero con lo que es mío?
¿O es tu ojo malo porque yo soy bueno? Así, los últimos serán
primeros, y los primeros, últimos”.

ANÁLISIS
Comentar con los niños las siguientes preguntas:

1.¿Cómo me sentí de que mis compañeros me cuidaran?

2. ¿Cómo puedo yo hacer para que otros niños se


sientan cuidados por mi?

3. ¿Cómo nos cuida Jesús?


SÍNTESIS
Entre las opciones para incluir a los niños que no ganaron el
juego se propone:

· Compartir alguna bebida fresca o golosina.

· Rifar una serenata entre las abuelas o abuelos de


los niños (es el grupo de niños quienes cantarán la
serenata).
· Ayudar a sembrar un árbol en algún espacio público
para cuidarlo entre todos.

· Cualquier otra actividad que propongan los niños.

CELEBRACIÓN

Jesús nos llama a estar y trabajar con él. Se coloca a los niños
por parejas y se les pide que compartan con el otro algo que
les guste de su compañero, por ejemplo:

“Me gusta que me acompañas mientras termino mi tarea


cuando tú terminas primero la tuya”

Tema #5:
El camino de Dios nos lleva a la comunidad.

Fruto: Tomar consciencia de que Dios nos comparte su amor


todos los días a través de las personas.

Material: Un letrero de colores que diga: “El camino de Dios nos


lleva a la comunidad”. Agua de sabores (unos dos litros por
niño) y vasos desechables.

DISPOSICIÓN
Tensión y relajación:
Hacer que los niños tensen el cuerpo poco a poco, comenzando
por las manos, los puños, los brazos, las piernas, la cabeza, el
abdomen, el pecho. Mantener la tensión mientras se cuenta
hasta diez y luego soltar poco a poco para volver al estado
de reposo. Este ejercicio puede hacerse de pie, sentado o
acostado.

Se repite este ejercicio entre cinco y diez veces y luego se invita


a los niños a patalear como si estuvieran “haciendo berrinche”
mientras aprietan los puños, golpean el piso con sus piernas y
gritan muy fuerte su propio nombre.

Esta última parte se repite otras cinco veces y se pide a los niños
que respiren muy despacio imaginando que por su cabeza
entra un tubo de luz de color rosa intenso a iluminar su cuerpo
y llenarlo de cariño.

EXPERIENCIA
Se pide a los niños que compartan cuáles son los diez lugares
públicos que les parecen más importantes fuera de su casa.
Se toma nota de esos lugares y se traza una ruta para dar un
paseo entre todos.

En peregrinación, se visitan los lugares elegidos por los niños.


En el camino ellos irán repartiendo agua a las personas que se
encuentren en el camino, en las casas, en los comercios o en
los espacios abiertos.

ANÁLISIS
Se pide a los niños que compartan cómo se sintieron al ir
repartiendo agua de sabores entre la gente de la comunidad y
cómo se sintieron al ser mirados y recibidos de esa manera en
que lo hacía la gente.

SÍNTESIS
Se lee con los niños la lectura siguiente: Marcos 9:35-37

Entonces Jesús se sentó, llamó a los doce y les dijo:“Si alguno


quiere ser el primero, que sea el último de todos y el servidor
de todos”. Luego tomó a un niño y lo puso en medio de ellos.
Abrazándolo, les dijo: “El que recibe en mi nombre a uno de
estos niños me recibe a mí; y el que me recibe a mí no me
recibe a mí, sino al que me envió”.

Al final se pide a los niños que relacionen lo leído en este


texto con lo que hicieron en la actividad de las aguas y se les
pregunta en qué otros momentos han servido a otras personas
de su comunidad.

CELEBRACIÓN
El Reino de Dios es como un gran banquete.

Se recuerda a los niños que así como ellos llevaron alegría


a las otras personas, también otros han hecho cosas por los
niños. Se les entrega media hoja de papel de colores para que
escriban un agradecimiento a alguien que ellos recuerden y
que lo guarden para entregarlo en el contexto de la misa de
Resurrección o en la celebración final de las Misiones como
símbolo de la gratitud que sienten por las personas que les
cuidan.

CELEBRACIONES

Celebración #1:
Dios: el que eternamente ama y llama

Marcos 4, 1-9 El sembrador salió a sembrar.

La semilla que trae Dios en su morral es la semilla de la paz, es


decir, la semilla de la armonía personal, familiar y comunitaria. Es
la semilla que invita al Buen Convivir como signo de la presencia
de Dios entre nosotros. Esa semilla tiene la fuerza suficiente para
sanar, transformar y reconciliar; los tres elementos que pide a
gritos nuestro mundo.

Dios siembra la semilla de la paz en todos lados, en el camino,


en las piedras, entre espinos y en la tierra buena. A todos nos
invita a construir la paz, porque todos somos responsables de
nuestra realidad. El problema es que no siempre somos tierra
fértil para responder a su llamado. Muchas veces la semilla cae
en la prisa de la vida, ahí llegan los pájaros y se la comen. Otras
veces cae en la superficialidad de la vida, ahí la poca tierra no
las deja crecer. Otras veces cae en las preocupaciones de la
vida, ahí las espinas hacen que se sofoquen. Y finalmente, otras
semillas caen en quien escucha y desea poner en práctica la
palabra, ahí la semilla crece y da fruto.

Hoy que iniciamos estas Misiones del Buen Convivir vamos a


escuchar al Dios que eternamente ama y llama.Vamos a limpiar
los oídos para escuchar bien y ponernos las botas de trabajo
para emprender esta tarea. Dios ya está trabajando por la paz,
y ahora nos invita a trabajar con él en esta labor. Necesitamos
dejar las prisas de la vida, dejar la superficialidad y que no nos
ahogen las preocupaciones. Esta es la conversión que hoy
nos pide Dios, por el bien de las futuras generaciones vamos a
trabajar por el bien común. Entramos a un tiempo de reflexión
y práctica que para hoy son los cristianos amantes de la paz.

Celebración #2:
El padre reconstructor de vínculos

Marcos 4, 26-29 La semilla que crece por sí sola.

Dios es como un hombre que esparce la semilla en toda la


tierra. Cuando Dios creó todas las criaturas que habitan en
la tierra les esparció semillas del Reino de Dios. Esas semillas
están presentes en las palmeras, las matas de plátano, las flores,
las mariposas, los peces, las tortugas, los perros, los gatos, las
gallinas, los caballos y las personas.

¿Qué hace esa semilla sagrada? Esa semilla vincula una


criatura con otra criatura de manera que cada una pueda
realizar su función en esta tierra. Cuando una yegua tiene
su cría cuida de ella hasta que pueda valerse por sí misma,
le protege de los peligros, le alimenta y está con ella. Una
palmera crece hasta dar frutos con los cuales es capaz de
hacer crecer otras palmeras a su lado, después de varios
frutos muere.Así también en las personas,esa semilla nos lleva
a crear vínculos con otras personas, pero no cualquier tipo
de vínculos. Los vínculos que crea esa semilla son vínculos
que ayudan a dar frutos: relaciones fraternas. Y los vínculos
no sólo son entre personas, sino también con la naturaleza.
Dios ha capacitado a la naturaleza para relacionarse con
nosotros de manera fraterna, y que nos ayude a desarrollar
nuestra función en esta tierra.

Y ya duerma o esté despierto, sea de noche o de día, la semilla


brota y crece, sin que él sepa cómo. Al ser Dios el autor de esa
semilla, el control no lo tenemos nosotros. Hay algo en nuestro
interior que nos conduce hacia la fraternidad, la vida en
abundancia, la intimidad con algo mayor, la unión con Dios.
El evangelio, como Palabra viva de Dios, lo tenemos inscrito en
nuestro corazón. Sólo se necesita que nuestro corazón sea una
buena tierra para que la semilla sagrada crezca.

¿Cómo trabaja esa semilla? La semilla sagrada está presente


desde la eternidad en nuestro ser y en la creación. Esa semilla
trabaja, estemos dormidos o despiertos, sea de noche o de
día, ahí crecen los vínculos con las criaturas para animarnos
a vivir en la fraternidad. ¿Cómo ha sido posible que algunas
comunidades se quedaron sin religión y sin embargo tengan
vínculos fraternos? Porque la relación con la naturaleza les
ayudó a conservar una buena tierra en su corazón para que
crecieran las semillas sagradas. En cada amanecer el sol
animó a levantar su corazón; en las flores miraron la alegría de
Dios; con el movimiento de las olas aprendieron a bailar; con
el calor supieron calentar el corazón; con los aires recordaron
la frescura del Espíritu. La relación con la creación nos hace
ser pueblos creyentes. Tanta belleza y tanta bondad sólo puede
venir de Dios.

La tierra da fruto por sí misma: primero la hierba, luego la espiga,


y por último la espiga se llena de granos. La tierra da fruto por
sí misma porque contiene la semilla sagrada que le conduce
a realizar su misión. Hay un proceso lento que le hace pasar
de hierba a espiga y de espiga a granos. La buena tierra hace
posible que esa hierba pueda transformarse en granos.

¿Dónde está trabajando la semilla de Dios en nuestra


comunidad? Para saber dónde está creciendo la semilla
sagrada necesitamos ver dónde se crean vínculos en nuestra
comunidad, y tenemos que valorar el tipo de vínculos para
saber si ha habido la tierra buena para que den granos.
¿Dónde se construyen vínculos? Familia, trabajo, escuela,
calles,mercado,reuniones de cooperativa,celebraciones,etc.
¿Qué valores se construyen ahí? Hermandad, misericordia,
etc.

Y cuando el grano está maduro, se le mete la hoz, pues


ha llegado el tiempo de la cosecha. El grano maduro está
preparado para transformarse y vincularse de otra manera con
la creación. Ya sea transformándose en un pan para alimentar
a otra criatura o para hacer crecer una nueva planta. Cuando
la semilla sagrada crece en nuestro corazón hay que permitirle
dar los frutos, compartir los frutos o dejar que otros cosechen de
nuestros frutos. Los frutos que Dios nos regala se hacen mayores
cuando se comparten. La cosecha es para acoger los frutos y
compartirlos.

¿Qué papel tiene nuestra comunidad cristiana? La


comunidad cristiana está llamada a ser una semilla
sagrada en la comunidad que ayude a arar la tierra de la
comunidad para que Dios siga construyendo los vínculos de
fraternidad. La Iglesia colabora con Dios llevando su Palabra
a los corazones de otras personas para que la semilla siga
creciendo en la dirección del Reino de Dios. En Jesús tenemos
el referente para saber si va creciendo correctamente esa
semilla.

Celebración #2:
El padre reconstructor de vínculos

Marcos 9, 33-37 Si alguno quiere ser el primero.

Dios es quien construye vínculos en todo lo creado, haciéndonos


hombres y mujeres sostenidos, y el mal es quien destruye los
vínculos: destruye el vínculo con nuestro origen, con nuestra
tierra, con nuestra memoria y con la comunidad.

Los niños eran los pequeños, los que no tenían valor en la


comunidad, y en este texto podemos ver cómo Dios es quien
construye los vínculos de los pequeños con Jesús y con la
comunidad.“Al que recibe a uno de estos pequeños a mí me
recibe” es una muestra de cómo Jesús construye vínculos y,
en consecuencia, el mal los destruye.

La unión con Jesús nos lleva a la unión con un horizonte de vida:


el servicio. En los gestos de servicio está la reconstrucción de los
vínculos, y en la ambición de ser el primero como dominio está
la ruptura de los vínculos. Dios reconstruye desde la cercanía,
la atención a las necesidades, la dignificación de la persona y
ayudarles a valorar su fe.

El trabajo de Dios es vincular a las creaturas por medio del amor


para que cada una de ellas pueda realizar su misión en este
mundo. El sentirnos amados hace posible que brote y crezca lo
mejor de nosotros mismos, nos hace creer que el otro es bueno
y que puede ser mi amigo. Nos hace tener una visión positiva
de la vida. En cambio, el mal tiene como objetivo principal
destruir los vínculos entre nosotros, y entre nosotros con las
demás creaturas.

Dios se hace servidor de toda la creación, quiere reconstruir


todos los vínculos, ama a todo lo existente y quiere que
todo se salve. Constantemente busca el pretexto para que
salgamos de nosotros mismos. La posibilidad de sentirme
amado está en la otra persona y en mi apertura al amor. El
mal me centra en mí mismo y me hace creer que yo soy el
mundo.

Los vínculos se alimentan compartiendo la vida con las personas,


pero quien quiera ir adelante en esto necesita hacerse servidor
de todos. Ese Dios trabaja en y desde nuestro corazón para hilar
a todos en un bello tejido de colores. Por eso nos devuelve la
mirada, para ver el color de cada persona y de cada creatura.
Cada color representa lo mejor de cada uno de nosotros y en
el conjunto muestra la alegría del Jesús Resucitado.

Todos estamos en el camino a la espera de cariño y cuando


reconocemos que el gesto de amor ha estado presente en
nuestra vida miramos de otra manera. El sentirnos amados nos
hace mirar el amor que existe en nuestra historia y en la historia
de los otros. La mirada se nos limpia con el amor silencioso y
lento.

Celebración #4:
Jesús nos llama a estar y trabajar con él.

Marcos 3, 13-15. Elección de los doce apóstoles

Jesús nos llama a estar con él y trabajar con él. Estar y


trabajar son dos verbos que se complementan. No puedo
estar sin trabajar y no puedo trabajar sin estar. Dejar que
sea Dios quien reine en este mundo implica tener los afectos
puestos en Jesús, así evitaremos la tentación del dinero, de
la fama o del poder.
Estar con Jesús implica dedicarle tiempo para platicar con él,
implica conocer su forma de pensar y su modo de proceder en
la vida. Esto requiere de la oración y el silencio, donde podemos
concentrarnos en su vida y su persona. Así se cuidan los afectos
de las ideas que pretenden confundirnos para destruir los
vínculos con Dios y todo lo creado.

Seguir a Jesús también implica trabajar con él, es decir, colaborar


en su misión de atender las necesidades de este mundo. Nos
sumamos a una misión, donde Él tiene el protagonismo. Jesús
es quien nos va dando la pauta para dejar que Dios sea quien
reine en este mundo.

Hoy somos llamados a estar con Jesús y trabajar con él. No


podemos ser sordos a un llamado que surge desde la sangre
derramada, las lágrimas y el dolor de tantas víctimas de la
violencia. Ahí Dios nos hace un llamado: ayudar a su hijo.

Celebración #5:
El reinado de Dios es como un gran banquete.

Lucas 5, 27-32. Jesús llama a Mateo

Jesús nos llama a una misión que se llama libertad. Mateo,


un cobrador de impuestos, es llamado en su trabajo. Ahí
Jesús le dice “sígueme”. Y Mateo dejándolo todo lo siguió,
como dice el texto del evangelio. Esa libertad le llevó a
organizar un banquete en su casa, donde se sentaron a la
mesa cobradores de impuestos y gente de toda clase.

Ahí aparece Jesús viviendo su apuesta por este mundo: el


banquete donde todos quepan. El banquete donde los que se
sentían excluidos son invitados, siendo ahora los invitados de
honor. Así, este banquete se convierte en un signo de esperanza
para los necesitados y descartados, en un signo del reinado de
Dios.

Hoy Jesús nos llama al Buen Convivir que inicia con un banquete
donde todos nos sintamos incluidos. ¿Cuál es el banquete que
hoy necesitamos construir para sanar a las personas que se
han sentido fuera de esta comunidad? A eso estamos invitados
como cristianos, como seguidores de Jesús, a organizar los
banquetes para recuperar la armonía.

Notas:
Notas:

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