ESTOY CONTIGO

No pretendo ocupar «el lugar»

de quien se ha ido,
sino más bien
(y muy contrariamente)
anhelo encontrar
el compás del son de tu alma
para escuchar que tus latidos,
armonizan la melodía
que, para ti, he concluido;
y hacerte ver que, simplemente:
hoy, yo estoy contigo.

ME PREGUNTO SÍ

Me pregunto muy seriamente

si tienes algún espacio para mí,
dentro de tu vida...
si en verdad existen
uno o dos motivos
para quererme...
Me pregunto si hay posibilidades
de un futuro que pueda
trascender mucho más allá
de nosotros mismos.

MORDISCO

Quiero darte
un pequeño mordisco
en el cuello, para ver
si en el acto, despierto
un poquito de pasión
en tu pecho.

TEN CUIDADO

A partir de ahora,
ten cuidado
al mirar mis ojos,
pues espontáneamente
y sin tapujos
te dejarán en claro
lo mucho que me gustas.

INOCENTE DE 'PECADO'

Puedes parecer tan inocente

como quieras, pero tu mirada
delata 'tu pecado'...
Me deseas con tanta pasión,
que llevas el fuego
del infierno ardiendo
dentro de tu cuerpo.

NOCHES A SOLAS

Mis noches a solas

(en la intimidad de mi cuarto)
llevan tu nombre y apellido
impregnado en la almohada
que abrazo con fuerza,
mientras imagino tu rostro,
tu cuerpo y aroma,
como si fueras tú.

TE DIBUJÉ

El niño que fui

te dibujó con sus crayolas;
y hoy en día que me encontré
aquellas hojas, descubrí
que mis bocetos
fueron una predicción
de mi futuro y, entonces,
esbocé tu rostro nuevamente
(usando ahora un bolígrafo),
con la intención
de continuar contigo
volviendo nuestro, el porvenir.

NARRÁNDONOS

Te nombro con poemas

y te describo en cada verso...
Te acaricio en los fonemas
con que rimo cada texto...
Te desnudo con mis letras
y te descubro aunque estés lejos...
Me disfrazo en las siluetas
del deseo y el misterio;
el cual, develaré ante ti
para deshacernos de los miedos,
que quedaron en los dos
por las heridas y tropiezos
de un pasado que del todo,
no ha matado a nuestros sueños.

PODEMOS DECIRLE AL MUNDO

Si quieres, podemos
decirle al mundo que
nos encontramos
por accidente; aunque,
en cierta medida,
el destino ya estaba
planeado para hallarnos
entre la gente.
ESA NOCHE

Esa noche, yo también

confundí la soledad
con una maldita sensación de vacío
y desolación existencial:
con aquello que
coloquialmente llaman:
«amor a primera vista»…
Quizás por ello,
hubo tanta química entre nosotros;
y tal vez por eso mismo,
no la volví a verla nunca más…
Ni siquiera en aquel bar
en el que, aquella noche,
muy a gusto congeniamos.

SORDO

Dejó tanto silencio con su partida

que, la ausencia de sonido
comenzó a taladrarle
cada uno de los tímpanos
a causa del abandono que
depusieron sus latidos;
dejándole sordos aquellos oídos
que afirman tenemos en el corazón.
ALARDEO

Y cuando más alardeaba públicamente:

«no tener corazón», comenzó a dolerle la garganta
a modo de una aparente contradicción de su propio cuerpo,
quien le decía sutilmente: ¡Mientes, y lo sabes!

MI ADICCIÓN: SUS MENTIRAS

Con un gélido abrazo

pretendía decirme 'sinceramente' que me quería;
mientras que, sus dulces labios,
destilaban el veneno
que intoxicaba cada uno de los ideales
que se hallaban en la profundidad de mis adentros;
cuya esencia, desfallecía paulatinamente
por estar con ella; entre tanto,
me volvía un perfecto adicto a su persona…
A su cuerpo; y a ese tipo de mentiras
que te convencen por completo
y, en consecuencia: nunca te cuestionas;
pues, con determinante astucia
las inventaba cada tarde
para alcanzar la misión de su objetivo
que, se resumía en
«manipularme por completo» …
Y cual si fuese una droga
que me pedía a gritos:
«seguirla consumiendo»
(idiotamente y sin medida);
tal como lo hace un adicto,
me aferraba a buscarla por doquier
para seguirme destruyendo…
Quizás, porque en el fondo,
esperaba ansioso a que
me sorprendiera mi propia muerte;
pues simplemente creía merecérmela,
si ella se negaba por completo,
a quedarse junto a mí.

DESTRUCCIÓN Y SUTILEZA
A veces, la forma más sutil de odiarse,
es aferrarse a quien está prohibido
porque, de entrada, sabemos que nos hace daño
y eso, es lo que creemos merecer.