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Introducción al estudio de la composición de la materia

Objetivo: Clasificar un material según su composición, teniendo en cuenta sus propiedades


observables.

Antes de comenzar, es importante definir el concepto de propiedad. Cuando hablemos de


propiedad, nos referiremos a cualquier característica observable de un material (Ej. Color,
sabor, textura, dureza, consistencia, densidad, viscosidad, etc.) Como ya definimos que las
ciencias se basan en las observaciones, y como una propiedad es algo que podemos observar, el
fundamento de la química será describir y explicar las propiedades de la materia.

A partir de sus propiedades, podemos clasificar la materia en las siguientes categorías:

En una substancia pura, las propiedades serán siempre las mismas, bajo determinadas
condiciones. Un ejemplo de substancia pura es el agua. Si observas el agua en un vaso, te darás
cuenta de que toda esta agua es igual; no podrías reconocer una diferencia entre secciones
diferentes de esta agua, pues toda el agua tiene las mismas propiedades. Además, no importa de
dónde sea el agua que observemos: si está bajo las mismas condiciones (a una misma
temperatura y presión), siempre tendrá las mismas propiedades.

Las mezclas, en tanto, están formadas por dos o más substancias puras, en una cantidad variable.
De lo anterior se sigue que las propiedades de determinada mezcla no siempre serán iguales. Un
ejemplo de mezcla es el agua con sal (agua y sal son dos substancias puras). Podemos comprobar
fácilmente que el agua con sal no siempre será igual, pues sus propiedades dependerán de la
cantidad de sal o agua que pongamos (la propiedad más evidente que podríamos comprobar es el
sabor; la mezcla será más o menos salada dependiendo de su cantidad de sal en relación al agua)

A su vez, podemos clasificar a las mezclas en homogéneas y heterogéneas. En las mezclas


heterogéneas se pueden reconocer sus componentes, pues dentro de la misma mezcla podemos
identificar secciones con diferentes propiedades. Piensa en una piedra, o un trozo de madera, o
una mezcla de agua y arena. ¿Tiene todo este material las mismas propiedades? Si miras con
atención, podrás reconocer secciones de diferente color en cualquiera de ellos, por lo que no todo
el material tiene las mismas propiedades, y estaremos hablando de una mezcla heterogénea.
Por el contrario, no podemos reconocer los componentes de una mezcla homogénea, pues si
separáramos determinada mezcla homogénea en secciones, todas estas secciones tendrían las
mismas propiedades. Un ejemplo de mezcla homogénea es el bronce, formado por cobre y estaño
(cobre y estaño son dos substancias puras). Si miras una placa de bronce, como toda ella tiene las
mismas propiedades, no podrás reconocer ninguna diferencia en ninguna parte de ella, no importa
qué sección de la placa estés mirando. (Como aclaración, aunque las propiedades en una misma
placa de bronce sean iguales, estas podrías ser diferentes a otras placas de bronce, pues, al igual
que en el caso del agua con sal, sus propiedades estarían determinadas por la cantidad de cobre y
estaño que la compongan. Esto es otra evidencia de que el bronce no es una substancia pura)

En la siguiente sección explicaremos cómo es que la teoría atómica puede explicar las
particularidades de las categorías que acabamos de ver, pero antes de avanzar debes completar
las siguientes actividades para reforzar lo aprendido.

Actividades

1. Nombra 5 mezclas homogéneas, 5 mezclas heterogéneas y 5 substancias puras que


puedas encontrar fácilmente en tu vida cotidiana.

2. De la lista que confeccionaste en la pregunta anterior, elige 1 mezcla homogénea, 1


heterogénea y 1 substancia pura y describe al menos tres propiedades de cada una de
ellas.

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