S LARIS

Nº III

Todos contra nos Nos contra todos

La voz disidente Una lanza a favor del

Ciriaco @Ciriaco_SPQR progreso
Nubecita @melocotongroyp

Censurado
Baraka @RafaBarakaTV Pragmatismo desacom-
plejado
Beltrán a.k.a. @malagabasada
 Editorial

Editor
Alarico @TheVisigordo

La voz disidente...............................................................3
Ciriaco

Censurado......................................................................6
Baraka

Una lanza a favor del progreso...................................9

Nubecita

Pragmatismo desacomplejado.....................................12
Beltrán
La Tribuna
1
un fastidio en tanto que le alejaba de la ruleta. La vic-
toria como estorbo contra el placer de la lucha. Hete

A lo largo de las próximas páginas encontrarás re-

flexiones sobre el por qué o no de la disidencia,
su naturaleza, propuestas de cambio o embestidas
aquí en lo que podemos convertirnos, en el disidente
porque si, en perder el gusto incluso en nuestra victo-
ria. Podemos ver al Chud tumbado inmóvil en el sofá
contra y a favor de la censura. Yo, por mi parte, haré mirando el techo de un hotel de París en el momento
una pequeña trampa y te daré un consejo, coge aire, exacto en que todas sus fantasías de reacción se han
porque quiero que antes de nada pienses en “disiden- hecho realidad.
cia ¿para qué?”. Mira a tu izquierda, mira a tu dere-
cha, ya estés en el metro, en el trabajo o en el retrete. La cuestión no se limita a la victoria, el momento en
Mira ahora hacia arriba y hacia abajo. Lo más impor- que el objetivo es conseguido: una victoria total es
tante, mira dentro. imposible en el mundo real. Esto amenaza con man-
tenernos fijos en la ruleta, sabiendo que no podremos
Dostoyevski, en su novela El Jugador nos presenta a sacar el premio, lanzando fichas a la mesa una y otra
Alekséi Ivánovich, el tutor de una acomodada familia vez. Es por ello importante que mantengas ahora la
rusa que pasa una estancia en una ciudad balneario imagen del Chud en la cabeza. La disidencia contra el
de Alemania. Alekséi pasa los ratos muertos en el ca- orden que se nos intenta imponer no debe llevarte a
sino junto a la ruleta, al principio como espectador, alojar el odio en el corazón, a hacer de ello tu perso-
pero luego como jugador activo. En un determinado nalidad, vida y objetivos totales. En su lugar, mantén
momento, gana una gran cantidad de dinero y la her- presente para qué adoptas o desarrollas ideas, moral
mosa y joven Blanche se lo lleva a París para malgas- y objetivos. ¿Para qué ser disidente, afrontar la cen-
tar a velocidad de vértigo lo que ha ganado. Pese a sura y adoptar la lucha? Para mejorar tu vida, la de
que Blanche utiliza con descaro a Bibi, como le llama aquellos a tu alrededor, llevar a cabo una acción plena
despectivamente, este responde con un pasotismo que que sea significativa para ti, actuar y vivir como tú
había caracterizado su vida anterior; no se queja del quieres hacerlo y no como pretenden imponerte. No
despilfarro de su acompañante, y ni disfruta ni mucho en un sentido genérico, sino de forma práctica, real y
menos participa de las ostentosas fiestas que organi- concreto: comer aquello que quieres y te hace bien,
za. “Lo corriente era que estuviera en el sofá mirando frente al bugo y el químico; entregar tu actividad
inmóvil el techo” describía. diaria a aquello que te motiva, frente al doomscroll
en que pretenden atraparte; elegir tu acción política,
–¿Con que no lamentas que el dinero se nos acabe frente al sistema que te han impuesto; elegir que mo-
pronto? –Le decía Blanche a nuestro jugador. delo de vida y familia tendrás, frente al de gatos y
– Cuanto antes mejor –respondía Alekséi. lexatin que promueven.

Aquí es donde radica el alma de El Jugador y donde Aunque se puede transformar la sociedad a través
está el peligro que nos rodea. Ivánovich jugaba por de actos individuales, a veces deberás celebrar haber
el hecho de jugar en sí, ganar dinero suponía incluso transformado tu propia vida.
¡Τί συμφορά, ἐνῷ εἶσαι καμωμένος
γιὰ τὰ ὡραία καὶ μεγάλα ἔργα
ἡ ἄδικη αὐτή σου ἡ τύχη πάντα
ἐνθάρρυνσι κ’ ἐπιτυχία νὰ σὲ ἀρνεῖται ˚
νὰ σ’ ἐμποδίζουν εὐτελεῖς συνήθειες,
καὶ μικροπρέπειες, κι ἀδιαφορίες.
Καὶ τί φρικτὴ ἡ μέρα ποῦ ἐνδίδεις
(ἡ μέρα ποῦ ἀφέθηκες κ’ ἐνδίδεις),
καὶ φεύγεις ὁδοιπόρος γιὰ τὰ Σοῦσα,
καὶ πιαίνεις στὸν μονάρχην Ἀρταξέρξη
ποῦ εὐνοϊκὰ σὲ βάζει στὴν αὐλή του,
καὶ σὲ προσφέρει σατραπεῖες, καὶ τέτοια.
Καὶ σὺ τὰ δέχεσαι μὲ ἀπελπισία
αὐτὰ τὰ πράγματα ποῦ δὲν τὰ θέλεις.
Ἄλλα ζητεῖ ἡ ψυχή σου, γι’ ἄλλα κλαίει ˚
τὸν ἔπαινο τοῦ Δήμου καὶ τῶν Σοφιστῶν,
τὰ δύσκολα καὶ τ’ ἀνεκτίμητα Εὖγε ˚
τὴν Ἀγορά, τὸ Θέατρο, καὶ τοὺς Στεφάνους.
Αὐτὰ ποῦ θὰ στὰ δώσει ὁ Ἀρταξέρξης,
αὐτὰ ποῦ θὰ τὰ βρεῖς στὴ σατραπεία ˚
καὶ τί ζωὴ χωρὶς αὐτὰ θὰ κάμεις.
Κωνσταντίνος Καβάφης
Η Σατραπεία
(1910)
¡Qué lástima! Cuando estás hecho
para las hermosas y grandes hazañas,
este injusto destino tuyo siempre
te niega el estímulo y el triunfo.
Son tus obstáculos las viles costumbres,
mezquindades y desidias.
Y qué horrible el día que cedes
(el día que te rindes y cedes),
y te pones de camino para Susa
y te acoges al soberano Artajerjes,
que magnánimo te acepta en su palacio
y te ofrece satrapías y honores semejantes.
Y tú aceptas escéptico
aquello que no ansías.
Busca tu alma otras cosas, por otras llora;
el aplauso del Pueblo y los Sofistas,
los difíciles e inestimables bravos;
el Ágora, el Teatro, las Coronas.
Cómo esto va a darte Artajerjes,
cómo esto vas a encontrar en la satrapía
y qué vida sin esto vas a hacer.
Konstantinos Cavafis
La Satrapía
(1910)
 3

La voz del disidente

Ciriaco

C uando tenía unos quince años, mi profesor de fi-

losofía planteó en clase un debate sobre el abor-
to. Antes de comenzar la discusión, reorganizamos
El consenso es una prisión de papel y basta dar un
paso contra sus muros para derribarlos.

el aula: los que estén a favor, a la izquierda; los que Ese paso puede adoptar muchas formas y es natural
estén en contra, a la derecha; en medio, los indecisos. cuestionarse si merece la pena darlo. Si el precio que
uno paga por destacarse como voz disidente compra
En la zona de indecisos se situaron apenas tres o cua- algo de algún valor. Yo sostengo que sí.
tro pupitres. Todos los demás se agolparon en el lado
izquierdo, a favor. Todos menos dos: Ingrid y yo. In- Puede que quizás el lector de Solaris haya sentido en
grid es adoptada y sabía que lo que allí se discutía era el pasado una cierta soledad. Una sensación de ex-
si su existencia misma debió evitarse. Yo no tenía un trañeza al ver la televisión, oír la radio, o incluso al
motivo personal, sólo una convicción moral. Aquel presenciar una conversación en el trabajo. La aliena-
día es importante en mi memoria porque recuerdo ción que produce contemplar a adultos intercambiar
perfectamente la sensación de discutir con el mundo lugares comunes y afirmaciones obviamente falsas
entero (con quince años, tus amigos y tu clase son el sin que nadie levante una ceja. Esa enervante sensa-
mundo entero) y salir airoso. A lo largo del debate, al ción de presenciar un teatrillo con la certeza de que
menos uno de los indecisos se unió a nuestras filas. todo el mundo es consciente de estar participando en
Ninguno se unió a la mayoría contrincante. Eso para el numerito, pero que nadie quiere admitirlo. Recor-
mí es ganar. dará entonces la sensación que le produjo encontrar
en fanzines, en podcasts, vídeos o tweets a otros en
En la vida real, a diferencia de las películas, no hay su misma situación. La liberación de saberse en com-
triunfos totales y perpetuos. Sólo pequeñas victorias pañía moral. Por arduo que sea (y a menudo no lo es,
con las que mover un milímetro la fibra moral del puede ser bastante divertido), emitir esa voz disidente
mundo. por cualquier medio a nuestro alcance es importante.
El resultado puede parecer nimio por invisible,
Recurro hoy a esta historia porque, para hablar de di- pero invisible es también el eco que
sidencia, debemos reconocer que el ejercicio de di- amplifica y multiplica una sola
sentir, de constituirse en disidencia, requiere, antes de voz a través de las montañas.
la acción política, de una transformación psicológica:
la superación del terror antropológico al rechazo de
la tribu. Un movimiento disidente necesita de tempe-
ramentos disidentes que lo impulsen. Esto no es algo
que podamos esperar de la mayor parte de la gente,
claro, llevar la contraria a todo el mundo, incluyen-
do personas a las que aprecias, no es una experien-
cia agradable ni cómoda. Pero hay un indeciso en los
pupitres de en medio que sólo está esperando a verte
a ti enfrentar los gritos y el viento, impasible, enrai-
zado en la firmeza de tus convicciones, para unirse
a tu causa. Detrás de aquel vendrán más, que nunca
hubiesen enfrentado los elementos en solitario, pero
que lo harán en compañía.
Cicerón denuncia a Catilina (1889) por Cesare
Maccari, Palazzo Madama.
(Primera página) Idyll (1880) por Frederic Leigh-
ton, colección privada.
 4
Que el resultado no sea obvio e inmediato no significa Es decir, no hay más camino que el de la radicalidad.
que no exista, sólo exige una mayor convicción para Mis posturas personales no son, comparativamente,
perseverar. especialmente extremas, pero son radicales. No me
interesan las cuestiones que no se dirigen a la raíz.
Hace algunos meses, el usuario tuitero conocido como También es radical mi filosofía a la hora de defender-
@ilustradotroll me abordó acerca de la posibilidad de las. Lo que no funciona, por agradable o reconfortan-
unirme al proyecto de podcast que venía pergeñan- te que resulte, no sirve.
do con @corazondepana. Acepté inmediatamente. En
parte por vanidad, en parte porque no sé decir que no En cualquier caso, a mi juicio, las ideas concretas que
a los amigos. En parte, también, porque creo que la se difundan no son tan importantes como el ejerci-
voz de uno, por insignificante que sea, debe usarse cio de desacralizar las presunciones que operan como
para el bien. Finalmente, acepté porque creo que las dogmas laicos de la sociedad contemporánea. Porque
iniciativas de esta clase funcionan. No por sí solas, esos son los diques que impiden el fluir de todas las
claro. Por ambiciosos y exitosos que sean nuestros demás ideas.
proyectos de base, ninguno de ellos, individualmente,
podrá competir en un plazo razonable con los grandes El oyente de La Orden ha visto
medios financiados desde el esta- cuestionada la democracia libe-
blishment. Pero es que ese no debe ral, el monopolio estatal de la
ser el plan. violencia, el de la acuñación de
moneda, el sistema de pensiones,
El plan de acción de una disidencia la industria musical, la sanidad y
eficaz pasa por el efecto agregado educación públicas, la relación
de un mar de podcasts, revistas, entre economía y termodinámi-
tweets, canales de youtube, aso- ca, el discurso abortista y hasta el
ciaciones y acciones de toda índole sistema métrico, entre otros.
(incluyendo memes terribles que
corren como la pólvora por los gru- No se trata de acertar de forma
pos de whatsapp). La vanidad pue- precisa el cien por cien de las ve-
de hacernos desesperar por la apa- ces en las recetas propuestas, sino
rente falta de relevancia personal, de ofrecer las alternativas razona-
pero no es el trabajo de una sola das que poco a poco derriben esta
abeja devolver la primavera a todas ficción de consenso, que tiren
las flores. Y la primavera llega si abajo la prisión de papel, de tal
las abejas trabajan. forma que tanto nosotros como
aquellos que no la derribarían por
Resulta un empeño que excede mi capacidad el de sí mismos, pero anhelan escapar de sus muros en
identificar todas las ideas a las que merece la pena nuestra misma dirección, encuentren cauces libres
dedicar nuestros afanes, pero, cualesquiera que sean, para la difusión de sus ideas. Y que estas ideas inun-
deben dirigir su ataque a los cimientos mismos del or- den el mundo.
den inicuo. Por definición, la disidencia opera en des-
ventaja y no puede permitirse desperdiciar sus recur- A la espera de constituirse en la nueva mayoría, el
sos en la crítica del fruto, ni en la poda de las ramas disidente no debe desesperar por verse en desventaja.
del árbol de la perversidad. Sólo aquellas ideas que Ese es el espacio propio de la disidencia. Un espacio
desentierren las raíces y derriben el tronco merecen que debe persistir en su ánimo aún tras el triunfo de su
nuestra atención. proyecto. La voz del disidente, dirigida al enemigo,
no es a este a quien habla, sino al aliado durmiente
Jacques Cathelineau (1816) por Girodet, Musée d’art et d’his-
toire de Cholet. Obra encargada por Luis XVIII para conmemo-
esperando amanecer. La voz del disidente, hable de
rar a este héroe contrarrevolucionario. Conocido como “el santo lo que hable, proclama un único y peligroso mensaje:
de Anjou” fue generelassimo de las fuerzas que se opusieron al no estás solo.
Gran Terror de la Primera República francesa.
 6

censurado
Rafa Baraka

A lo largo de nuestra vida, nuestras decisiones se

basan en lo que creemos que es mejor para no-
sotros, y cuando elegimos solemos hacerlo en base
decir hoy eso es saber que te sitúas ante un paredón
de la inmoralidad, pues no hay mayor deseo para las
hordas del mal que llevar a cabo actos obscenos con
a nuestro concepto de bien o mal. Este concepto lo menores: desde la defensa de la pedofilia hasta permi-
hemos aprendido a través de la educación y valores tir que un hombre disfrazado de mujer enseñe cuentos
enseñados en nuestro hogar y en la escuela. El bien o realice espectáculos grotescos en presencia de esos
o el mal, dos opciones que se entienden claras para menores a los que hay que proteger.
cualquier persona, puesto que se supone que todos
queremos hacer el bien, pero ¿qué pasa cuando la idea No sin olvidarnos de que ya han acabado con la de-
de bien no es la correcta? ¿Cuándo el mal es visto finición de familia, englobando en dicha palabra a
como el bien y viceversa? cualquier ser que cuanto más inmoral sea su idea o
concepto de familia, más aceptado está, a la vez que
Centrémonos en la palabra «Censura». Lo primero critican y denuncian a los defensores de la única fami-
que se nos viene a la cabeza es «prohibición», «eli- lia real, padre, madre e hijos.
minación», y si lo relacionamos con un Y es que, los mismos que se llenan la
sistema de gobierno, todos pensarán en boca de Franco, actúan peor que nuestro
el totalitarismo, en la dictadura. Cuan- Generalísimo. Atacan nuestros valores,
do un dictador censura una acción, una nuestra historia y hasta nuestra FE, en
propuesta, una actividad, lo hace por- definitiva, nuestra forma de ser y de vi-
que considera que es malo para su go- vir la vida, obligando al resto de la so-
bierno o para las personas sobre las que ciedad a adoptar lo que ellos defienden.
ejerce el poder o incluso malas para su Las tornas están cambiando, nadie hu-
propio beneficio. Mientras que quienes biera pensado hace años que la ventana
son censurados tienen una opinión total- de Overton se moviera como está ocu-
mente distinta y ven sus acciones como rriendo, con más facilidad de la sospe-
buenas y las del dictador como malas. chada.
Dos puntos de vista que hoy, «en pleno
siglo XXI» como diría cualquier progre, son cada vez Aun así, todavía queda mucho por hacer, ya que la
más claros. mayoría de la disidencia, los que tienen un altavoz
mayor, los considero disidencia controlada. Pienso
No se trata de que la censura sea mala en sí, cuando a esto porque no luchan totalmente contra el mal de Es-
simple vista y más cuando enciendes una TV, la cen- paña, que es la Constitución y todo lo que rodea al
sura es más que necesaria. Debemos dejar claros los Régimen del 78 y la partitocracia. Personas que hace
conceptos del bien y el mal y censurar ese mal, pero 10 años callaban o defendían el sistema puede que ha-
sobre todo acabar con esa progresía moderna que en- yan rectificado, pero no buscan el bien, no buscan el
sucia los valores decentes e imponen normas, teorías fin auténtico y necesario para salvar a nuestra patria.
y estilos de vida que solo llevan a la destrucción de Buscan volver a una época en la que ellos eran felices
Occidente. porque eran parte del sistema y luchaban por censu-
rar las ideas que ahora dicen defender. Un ejemplo de
Toda persona en su sano juicio rechaza cualquier ac- ello, es Alvise Perez.
ción contra los niños, es más, desea el mal para el cau-
sante de cualquier agresión a un menor. Sin embargo, No voy a negar que Alvise está haciendo un trabajo
fenomenal contra la «mafia partitocrática» pero no ve
(pagina anterior) Burn their books (2023) por The
Restoration Bureau.

más allá, no ve que el mal no está en esos políticos
que se quedan con dinero público y lo malversan o
gastan en prostitutas. El mal está en la democracia,
desde el primer momento en el que la mayoría decide
sobre el resto, en el considerar que el problema es el
diputado que se va de putas y se mete farlopa, cuan-
do el verdadero problema son en aquellos ciudadanos
que van a seguir votando al mismo partido que ha per-
mitido esa situación.
7
Por eso pese a toda la censura que suframos, pese a to-
das las críticas que nos hagan por defender la Verdad
y luchar por el bien, pese a todo ello, debemos seguir
rechazando el mal de este mundo y nunca rendirnos.
Como dijo Jesucristo:
«Veritas vos liberabit».

Hoy, en 2023, hay un grupo de «homosexuales fa-

chas» y hasta una «drag queen facha» a los que el
progresismo considera disidencia, cuando no son más
que marionetas que quieren llamar la atención. Sin
ir más lejos, hasta hace 5 o 10 años eran centristas y
hasta del PSOE y callaban ante la depravación actual.
Ahora solo lloran porque no les dejan ser depravados
fachas. Ante los hechos sucedidos en Twitter, cuando
pusieron el grito en el cielo porque muchos les critica-
ban por la vergüenza que daban, las mayores críticas
fueron contra la «juventud facha». Y no solo críticas.
Ellos mismos piden la censura a personas como tú y
como yo por defender la Verdad, porque ellos solo
quieren volver a esos años 90, donde «todo parecía ir
bien». Ahora se llenan la boca de que quieren barrios
seguros y no quieren inmigración ilegal, pero hasta
hace no mucho, nosotros, éramos racistas por defen-
der eso mismo.

La ventana de Overton se mueve, y más podría hacer-

lo si esta derecha española no fuera tan acomplejada,
tan cobarde y tan miserable que solo piensa en el ca-
pitalismo, en llenarse los bolsillos y sobre todo en que
no les señalen como «fachas», mientras piden el voto
para no hacer nada. Y es que ese es otro problema,
el voto, el defender unas ideas por un voto y no por
unos principios, el seguir creyendo que la decisión de
la mayoría es lo mejor, aunque esta sea una decisión
errónea.

Ulises y las sirenas (1891) por John William Waterhouse,

National Galleri of Victoria.
Queremos que España recobre el sentido universal de
su cultura y de su Historia. Si esto ha de lograrse en
algún caso por la violencia, no nos detengamos ante la
violencia. Porque, ¿quién ha dicho –al hablar de “todo
menos la violencia”– que la suprema jerarquía de los
valores morales reside en la amabilidad? ¿Quién ha
dicho que cuando insultan nuestros sentimientos, an-
tes que reaccionar como hombres, estamos obligados a
ser amables? Bien está la dialéctica como primer ins-
trumento de comunicación. Pero no hay más dialéc-
tica admisible que la dialéctica de los puños y de las
pistolas cuando se ofende a la justicia o a la Patria.

José Antonio Primo de Rivera

(29 de octubre de 1933)
 9

Una lanza a favor del progreso

Nubecita

¿ Por qué definirse como progresista? En primer

lugar, creo que el valor que le damos a los con-
ceptos es importante; progresista implica ser activo
de simplemente conservar lo que les dejaron sus pa-
dres.

mientras que conservador parece ser pasivo, siempre
a la defensa, lo que en una parte explica la actitud
pusilánime de la derecha. Nietzsche, filólogo de pro-
fesión, entendió el valor de la palabra, de ahí su obra
la Genealogía de la Moral. Pero no quiero limitarme
aquí a discutir de semántica. Mi objetivo es ir más
allá y fomentar un cambio de mentalidad, olvidar el
enfoque en la reacción y buscar un thelos, un fin para
nuestra empresa.
No os engañéis, nuestros enemigos no son progresis-
tas sino reaccionarios: desmantelan nuestra industria,
quieren quitarnos el automóvil y comer carne todas
las veces que queramos, pretenden que volvamos a
vivir en modo de vida comunal propio de una aldea
africana.
Si sabemos que su idea del progreso es falsa, ¿por qué
dignarles de progresistas?

Si no tienes un proyecto de sociedad, algo a lo que
apuntar, lo único que te queda es reaccionar a lo que
haga el enemigo. Podemos ver cómo en Twitter se re-
acciona constantemente a las últimas majaderías de la
izquierda, creando un bucle de resentimiento y frus-
tración. Con esta forma de resistencia, nuestro único
plan de futuro es “abrirles los ojos” a los demás, con-
virtiendo nuestro movimiento en una suerte de estafa
piramidal. Constantemente se le echa en cara a la de-
recha actual que es incapaz de crear arte, y ciertamen-
te en lo que más está especializada es en la crítica, la
ironía o la parodia.
¿Cómo podemos entonces definir el progreso en nues-
tros propios términos? A muchos les vendrá a la ca-
beza las maravillosas construcciones del Imperio ro-
mano, o las catedrales góticas, quizás los rascacielos
de Nueva York de comienzos del pasado siglo. Si hay
algo que nos gusta son los monumentos. Otros quizá
pensarán en Colón y Cortés viajando al nuevo mundo,
en las expediciones árticas o en las creaciones de von
Braun llevando al hombre más allá de la atmósfera.
Dos cosas obsesionan al hombre: descubrir los secre-
tos del universo y dejar nuestra huella en él. Para ello
es necesario el desarrollo tecnológico.

Una de las razones por las cuales la idea de progreso En la derecha online hay mucho ludismo, y hay unas
es tan atractiva para los jóvenes es porque pueden to- cuantas razones que lo justifican, pero renunciar a la
marlo como algo suyo, ser los protagonistas, en vez tecnología no sólo implicaría renunciar a comodida-
des banales, sino también a todas las maravillas de la
antigüedad hasta nuestros días. Kaczinsky teorizó que
El Anciano de los dias (1794) por William Blake,
Fitzwilliam Museum, frontispicio del libro Europe a Prophecy.

el progreso tecnológico lleva necesariamente a una
degeneración moral. Pero tenemos el caso de Japón,
un país moderno que llegó a rivalizar técnicamente de
tú a tú con América, siendo una sociedad patriarcal y
étnicamente homogénea. La degeneración moral no
apareció de la nada: movimientos como el de Civil
Rights no surgieron orgánicamente, sino que fueron
forzados, os animo a investigar sobre el incidente de
Little Rock.
Nosotros fuimos capaces de aprovecharnos de la
tecnología, reuniéndonos en foros y redes sociales,
escribiendo blogs y siendo los pioneros en los pod-
casts políticos; todo esto mientras el principal medio
de la izquierda sigue siendo la televisión. Podemos
ver cómo la izquierda intenta parar el desarrollo de
la inteligencia artificial por cuestiones de “ética”, o
considera más importante dar de comer al Sur Global
que la exploración espacial.
Al contrario de lo que piensan los marxistas, el pro-
greso tecnológico no ocurre mágicamente, es necesa-
rio el sacrificio de grandes hombres como Newton o
Tesla para hacerlo marchar. Sin este sacrificio o bien
se para o se da vuelta atrás, como ocurrió con la in-
dustria espacial. En el mundo actual esos hombres
son condenados a pasar medio día encerrado en ese
panóptico llamado escuela, suprimiendo su espíritu.
10
Quiero enfatizar que el progreso no está en contra de
la tradición, nos exhorta a tomarla no como un ídolo
al que adorar, sino como un heurístico para saber qué
cosas funcionan y qué no. Un ejemplo de ello sería
el matrimonio, el cual a día de hoy no sólo no tiene
ninguna utilidad para el hombre sino que además es
perjudicial, por lo tanto seguirlo por el puro hecho de
ser una “tradición” es poco más que LARP (por lo
menos hasta que sea restaurado).
Dos cosas de gran importancia para los conservado-
res son la comunidad y las instituciones. Qué decir
de éstas últimas, en los últimos 50 años hemos visto
cómo la derecha perdía la confianza en ellas: la cons-
titución, el rey, la democracia... Ya ni hablemos de la
Iglesia.
Abogando a la comunidad lo único que conseguire-
mos es caer en una suerte de “socialismo basado”. Lo
woke no surge como exaltación del individualismo,
siendo sin exagerar el mayor atentado en la historia
contra la libertad de expresión.
¿Y a qué deberíamos apuntar? Casarse y tener hijos
en tranquilidad se ha convertido hoy en un acto heroi-
co, pero no deberíamos conformarnos sólo con eso.
Vivir la dolce vita, tomar negronis con la camisa de
lino desabotonada, todo eso es sólo querer vivir la
vida de un pensionista. La imagen de señoras coti-
lleando sentadas en sillas de plástico es el enemigo,
no nuestra meta.
En su lugar deberíamos aspirar a creaciones que ridi-
culicen en magnitud y belleza a lo que tenemos ahora.
Colonizar nuevos planetas. Hacer de nuestras ciuda-
des un paraíso y no una cárcel. Crear un mundo en el
que el trecho entre la imaginación y realidad se haga
cada vez más estrecho.
La única forma de honrar a los antiguos es recuperan-
do nuestra sed de conquista. Vorwärts.
El tiempo de alianza Karel Thole.
 12

Pragmatismo desacomplejado
beltrán a.k.a. @malagabasada
>eso no son tus valores, es oportunismo. el momento en el que son más fértiles. una situación
>tus valores son abrirte de piernas. adversa puede estimular una voluntad fuerte, pero
>pues al final va a resultar que sí que eres activista: para ello tiene que existir una voluntad en primer lu-
activista por el puterío. gar. Voluntad de existir, de prevalecer, de experimen-
tar, de ver a dónde llega uno.

A hí tenéis tres frases para dedicarle a aquella chi-

ca que se fué de vacaciones a menorca “con un
amigo”. Aquí una cuarta: tu vagina es una reserva de
la biosfera.
Un escritor es un artista, no está “trabajando”, por
mucho que muchos se empeñen en hacer de ello un
trabajo. “Se gusta”, saca cosas “para la grada”, como
hacía Ronaldinho cuando jugaba. Su triunfo radica en
ser desinteresado (disinterested, que no uninterested),
lo cuál lo coloca en una posición en que ya ha ganado
de entrada, independientemente de la repercusión ma-
terial de lo producido.
En general, existen dos tipos de persona: los que pien-
san que en la vida hay ganadores y perdedores (win
/ lose) y los que saben que la vida es una victoria en
sí misma (win / win). Bukowski dijo que encontrarte
cada noche durmiendo en tu cama era un triunfo ab-
soluto sobre los elementos, y era verdad; porque era
un artista.
Cuando eras pequeño, rollo 11-12 años, siempre pen-
sabas que como mínimo trabajarías en un banco (sa-
lario de 2000 netos en arriba), o como ejecutivo de
algún tipo (y maldiciendo tu suerte; como los prota-
gonistas de las novelas de Houellebecq). Un tío lis-
to, competente, de familia bien situada, en 2004 no
podía esperar otra cosa. Que tendrías muchas novias,
en cuanto crecieras, incluso amantes; esposa, fami-
lia. Ibas a seguir los pasos de tu padre, como hombre,
como rey del cotarro. Hijos, estaba claro que acaba-
rían llegando, casi automáticamente; la gente tiene
hijos, tarde o temprano. ¿Vivienda? Bueno, eso no
estaba ni en discusión: tu piso, como cualquier hijo
de vecino. Todo eso sin entrar a pensar a lo grande;
simple y llanamente como “plan de vida”, materiali-
zable. Veinte años después es pura ciencia ficción..

En España, si estás bien de salud, en plan, no te falta

una pierna, y tu familia está medianamente estruc-
turada, se vive de puta madre; empecemos por ahí.
Hace sol, ir a la playa es gratis, hay bibliotecas, segu-
ridad: no notas que eres pobre, aunque lo seas. A lo
sumo está el agravio comparativo, pero eso ya es cosa
tuya, de estar comparándote. “Nunca te compares con
los demás porque, si lo haces, te estás insultando a
ti mismo”, dijo una vez el emperador de Europa, que
también era un artista. Esa es la situación de la que
debe partir el disidente: de la de “estoy de puta ma-
dre”. Es un tema psicológico: ninguna revolución sur-
ge de que “las condiciones materiales empeoraron”.
Los grandes los grandes cambios vienen de la sobrea-
bundancia al igual que los cuerpos son mas bellos en
Tyler durden haciendo esculturas con troncos en la playa. Ge-
nerado por IA.
Escultura del Colosseo Quadrato (Roma, 1940), construido por
Giovanni Guerrini, Ernesto Bruno La Padula y Mario Romano.
 13
¿Que por qué eres disidente? Porque tienes tu propia en “la sexta”. ¿A quién te crees que convences con
visión del mundo, y no coincide con la que se ha ido con argumentos, cuándo está claro quien es del Barça
imponiendo en los últimos veinte años. Eres varón, y quien del Madrid? La democracia se basa en extraer
autóctono y defensor del orden tradicional: quieres recursos de unos colectivos para comprar los votos de
patriarcado, propiedad privada, “la mujer en casa otros; lo demás es ornamento.
cuidando a los niños”, etc; y no te avergüenza reco-
nocerlo. La “justicia” o no de todo ello te la trae al Disidencia = ser tú mismo. También ser consciente de
pairo: hay que ser egoísta porque si no otros lo son en qué mundo vives; a quién puedes abrirte y quién
por tí, y tu costa. vida, que se tenga constancia, no hay no. conservar tu trabajo, en la medida en que te con-
más que una. venga hacerlo; hacer que tus actos sean una expresión
de tu ser. ¿Como quién? Pues como el pibe que estaba
¿Tu filosofía? Pragmatismo desacomplejado. La jugando al GTA en el Ministerio de Igualdad. ¿Que no
“justicia” para los jueces y para los curas. existió? Pues claro que no, porque la gente hoy día no
retiene soberanía ni sobre el fuero interno; pero hu-
>no, perdona, no voy a donar 10€ a “open arms”: biera estado guapo. Disidencia es coger un billete de
por mi que se ahoguen todos en el mar. 50€ y escribirle “mira al cielo: nos fumigan”; y seguir
>¿que dani alves hizo qué? perdona, qué necesidad con tu vida. El anonimato es un arma poderosa; un
tenía un futbolista multimillonario de violar a nadie aviso de bomba en el que no se dice dónde, ni cuántas
cuando hasta “paquirrín” tiene pretendientas por ser bombas, y por tanto no pueden desactivarse. Te aviso
famoso. solamente para que sepas que estás impotente; que el
que controla soy yo. Piénsalo: si el diesel “bueno”
Navaja de Ockham; juego al toque, al pie. fuese realmente “bueno” la gasolinera no te insistiría
para que lo echaras.
¿Que a quién vas a votar? Pues de momento a “vosss”,
que es lo que más te conviene. simple as: live una- Escribo ésto el día de un Barça-Madrid, con el país
pologetically. Mujeres 45 años “barriendo pa’ casa”, vendido, hasta el último policía pendiente de la panta-
votando en bloque cada vez lo que les conviene, cómo lla, para decirte que eres Tyler Durden y que el mundo
es lógico, y sudándoles el papo si te perjudica, o si el es tu patio de juegos: diviértete.
país se va a ir al garete; diputadas del supuesto partido
conservador abiertamente a favor del aborto porque,
ante todo, son mujeres y les conviene maximizar sus
opciones. Política de facción en tiempos de debates

Policías mirando el Barça-Madrid. Generado por IA.

(pagina siguiente) Give a man rules (2023) por The

Restoration Bureau.