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Universidad Católica de El Salvador

Centro Regional de Ilobasco

Carrera
Técnico en enfermería

Materia
Desarrollo Personal

Sección
DE

Actividad
Síntesis Reflexiva

Catedrático
Pbro. Lic. Gerardo Antonio Esquivel Ponce

Alumna
Pamela Lisbeth Cruz Mendez

Ilobasco, julio 07, 2023


Enseñanza moral de la iglesia

Jesús es la luz del mundo, y nosotros hemos sido llamados a ser luz también mediante
la fe en él. Sabemos que la luz es algo que nos ilumina y guía en el lugar donde existe
la oscuridad, más en el iluminamos a aquellos que tienen una oscuridad en su vida y el,
un ser perfecto nos guía y nos guarda de todo mal, nos aparta del pecado y de satanás,
y nosotros somos los que nos descarriamos, porque no somos capaces de entender su
misericordia, mas sin embargo la luz siempre permanece en nosotros, aun cuando
pecamos, es justo en ese momento cuando en nuestro interior existe como una espinita
que nos esta exhortando que hemos hecho o actuado mal, es por ellos que cuando
actuamos, pensamos y entendemos, es la inteligencia humana y la sabiduría que Dios
nos ha dado para poder continuar en la recta o en el camino, y a esto junto le llamamos
moral, aunque no es lo mismo la moral humana y que la que la una vida cristiana ofrece,
ya que en la moral humana sabemos discernir en lo que esta mal y lo que esta bien, pero
en la vida cristiana existe una moral en la que tu sabes que lo malo te induce al pecado,
a la falta de respeto a Dios y eso conlleva un castigo o consecuencia, a diferencia de lo
bueno, que en teoría es intentar llevar una vida agradable a Dios. El es el camino, la
verdad y la vida, y solo en el podremos ver la verdad, una verdad que nos hará libres. El
mundo esta cambiando, sus tendencias, deseos, modas, etc., y todo es vanidad, mas
Jesús nunca ha cambiando y la verdad de su evangelio sigue siendo el mismo y no
importa donde nos encontremos o la situación en la que estemos, siempre veremos su
verdad, en cuanto estemos en él, pero en su perfección esta siempre abierto a que los
que no lo conocen, puedan conocerlo, para que puedan tener finalmente la vida. La moral
no esta alejada de la verdad de Dios, sino que tiene una conexión y lo podemos notar en
Mateo:19:16 en la historia del joven que creía tenerlo todo, mas en su interior sabia que
le faltaba algo para complementar su vida, y es cuando le menciona a Jesús que el ha
cumplido con todo los mandamientos, cuando Jesús en respuesta le hace alusión a la
conexión que hay entre el bien moral y el pleno cumplimiento del propio destino, pero en
esta historia nos deja claro que solo Dios es bueno y es ahí donde entendemos que el
nos puede guiar al bien porque el es el bien, es como cuando decimos que somos
perfectos, tomando como base cuando el biblia dice que somos hechos a su imagen y
semejanza, nuestra perfección, no es de que no tenemos defectos y que no nos
equivocamos, mas bien se refiere a que fuimos creados por un ser perfecto y el ser
creados por el nos da esa perfección, ya que el no se equivoca. Osea la perfección en el
y la transmite al crearnos a su imagen y semejanza. Si pensamos bien en que la moral
es hacer el bien, debemos tener en claro que la única manera en la que puedo hacer el
bien a los demás es amándolos, recordando que amar al prójimo es uno de los
mandamientos principales, ya que como diremos amar a Dios si no amamos a nuestro
prójimo o como amaremos a nuestro amigo si no amamos a Dios, y nada de esto podría
ser posible si no intentáramos, hacer el bien, porque por algo hacemos el bien, me refiero
a los motivos que nos llevan a hacer las cosas.

El sermón de la montaña constituye la carta magna de la moral evangélica, cuando Jesús


dice “No penséis que he venido a abolir la Ley y los profetas. No he venido a abolir, sino
a dar cumplimiento” (Mt 5, 17), haciendo referencia en que debemos cumplir la ley o lo
que está bien sin pensar que está mal, también Jesús refería en que debíamos cumplir
los mandamientos y el cumplimiento de estos los mostraba como una senda abierta para
un camino moral y espiritual de perfección, cuyo impulso interior es el amor. En cristo
somos libres, pero quien “vive según la carne” siente la ley de Dios como un peso, más
aún, como una negación o, de cualquier modo, como una restricción de la propia libertad.
En cambio, quien está movido por el amor y “vive según el Espíritu” desea servir a los
demás, encuentra en la ley de Dios el camino fundamental y necesario para practicar el
amor libremente elegido y vivido. Pero ojo no se trata solo de cumplir el mandamiento
sino adherirse a la persona misma de Jesús, y esta adhesión será mediante la fe. La
moral no es solo lo que esta bien o mal, ya que requiere de una libertad para su elección,
y esta libertad se ha ido deformando mediante el transcurso del tiempo, porque ahora
pensamos que ser libres es hacer lo que nosotros queremos a nuestra conveniencia y
eso nos induce al libertinaje, que es lo contrario a vivir conforme a como Dios quiere que
vivamos, en Genesis 2:17 cuando Dios le dice a Adán que puede comer de cualquier
árbol del jardín, más del árbol de la ciencia del bien y del mal no, porque de lo contrario
moriría. Queda demostrado que el poder de decidir sobre el bien y el mal no pertenece
al hombre, sino sólo a Dios. El hombre es ciertamente libre, desde el momento en que
puede comprender y acoger los mandamientos de Dios, porque si vemos en ese relato
Dios pone a su disposición todos los árboles del jardín, aunque esta libertad es limitada
cuando Dios le muestra que el único que no está disponible para comer es el árbol de la
ciencia del bien y del mal y debería cumplirse porque está llamado a aceptar la ley moral
que Dios le da. Si anteriormente hablábamos que Dios es bueno significa que él sabe lo
que es bueno para nosotros y lo que nos conviene, además de alejarnos de lo malo, y
es ahí cuando Dios nos garantiza la libertad. La relación que hay entre libertad del
hombre y ley de Dios tiene su base en el corazón de la persona, osea, en su conciencia
moral, hacer lo que Dios nos pide o nos demanda es aceptar la verdad teniendo libertad
en él. Los actos humanos son actos morales, porque expresan y deciden la bondad o
malicia del hombre mismo que realiza esos actos, cabe recalcar que no se nos es licito
hacer el mal para logar el bien, y esto lo vemos cuando algo nos conviene y no nos
importa dañar a las otras personas para lograr nuestro objetivo, también en otras
palabras lo hacemos sin intención, es como cuando decimos que a veces hacemos cosas
que parecen buenas, pero en realidad son malas. Esto pasa cuando nuestra verdad no
esta puesta en Dios sino en nosotros mismos y lo que nos conviene. A través de la vida
moral la fe llega a ser confesión, no sólo ante Dios, sino también ante los hombres,
debemos aprender a dejarnos guiar por quien es la luz y quien es el bien, caminar con
fe y ser fieles a su camino, no dejarnos vencer por nuestro alrededor o las cosas vanas
que el mundo quiera mostrarnos, porque eso nos lleva al pecado y este a la muerte, todo
lo que nos aleja de Dios debemos desecharlo.

El hombre debe observar la norma moral para ser obediente al sagrado mandamiento de
Dios y coherente con la propia dignidad personal. En la vida pasaremos por diversas
situaciones que nos harán dudar de la verdad, y tentaciones que el enemigo pondrá,
pero nuestra fe debe ser más grande y en nuestro pensamiento debemos entender que
si Dios es bueno, quiere lo bueno para nosotros, por tanto, si Dios a mi nunca me falla,
yo no debería hacerlo.

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