Está en la página 1de 7

1

¡Conquista la pureza! Un reto que vale la pena

Jesús Cortez de Rosario

Fundación el Peñón
Español
Marco Antonio Bonilla Lavín
23 de junio de 2023
2

Introducción:

En la actualidad vivir la pureza resulta todo un reto, esto se debe a que la pureza es una

virtud resultante, es decir que necesitas que la totalidad de tu espíritu funcione bien porque si

algo falla lo que suele aparecer es una dificultad para controlar la inclinación sexual. Si la

persona no tiene bien equilibrado su funcionamiento espiritual se les hará casi imposible vivir la

pureza. Pero claramente Dios no pide cosas imposibles.

Vivir esta virtud nos trae alegría y amor contrario a lo que supone la impureza que solo

esclaviza y arruina la existencia de millones de jóvenes.

Cuerpo:

El amor es una emoción que tiene mucho por detrás, hablando en términos bioquímicos,

es una bomba de cambios químicos en el cerebro que regulan nuestras emociones, además de que

este tiene un aumento de dopamina, lo que hace que nos sintamos motivados a ser amado. “La

dopamina genera una reacción en cadena que consiste en la transmisión de estímulos eléctricos

que viajan mediante las sinapsis a través de todo el cerebro” (CIENCIA-UANL, 2012, p.115). En

este sentido podemos entender que la dopamina es una sustancia que desencadena respuestas

eléctricas que viajan a través del cerebro, proporcionando más energía y felicidad a nuestro

organismo.

Hablando de amor, a veces este se corrompe en malos hábitos, buscando solo la propia

satisfacción, dejando de un lado lo que en realidad nos aporta salud mental, de tal manera que

caemos en vicios, como es la masturbación, que no es mala, pero viéndola desde un punto

adictivo, puede causar un mal para la salud pues muchas veces este interrumpe las actividades

cotidianas, provocando tener menos energía, y más sueño o cansancio.


3

Sin el cerebro, nada de esto ocurriría. Este órgano es el canalizador de las emociones que

experimentamos a través de todos los sentidos, y es importante entender qué le ocurre cuando

nos excitamos. Es así la a oxitocina, por su parte, la cual transmite excitación, además de que

tiene efectos analgésicos, al igual que está presente la serotonina que tiene relación con el estado

de ánimo y el sueño.

Siendo cierto que cuando decimos que el cerebro es el principal órgano sexual, ya que

actúa de diferentes maneras en diferentes partes de nuestro cuerpo. Las hormonas son un factor

muy relevante en el auge de nuestra adolescencia ya que gracias a esta surgen nuevos cambios en

nuestra persona como lo es el acné y los deseos sexuales, debido a esto los jóvenes

experimentan, fantasías, recuerdos y emociones que se activan por la estimulación sexual, al

igual que la disminución de la testosterona, que provoca disminución del deseo en el varón. Es

un proceso por el cual muchos podemos pasar, pero no podemos olvidar que tiene sus

complicaciones, debemos de ser firmes en las decisiones que tomemos a través de esta etapa, que

es muy importante para nuestra vida futura, ya que esto habla como persona, siendo nuestra

mente y cuerpo muy valiosos como para desperdiciarlo en vicios que no nos aportaran en nada.

Primero que nada, para vivir esta gran virtud debemos reconocer que el amor implica un

orden y como tal vivir la pureza es lograr el orden en el amor. Esta virtud hace referencia al

anhelo mas profundo del hombre que consiste en amar y ser amado. Cuando la persona esta bien

centrada en al terreno del amor es capaz de vivir limpiamente, sucede lo contrario en aquellos

que tienen un descontrol en el amor que reciben y en el que dan.

A veces cuesta mucho fortalecer esta virtud ya que en el mundo hay muchas distracciones

negativas que te incitan a cometer actos impuros, es como nadar contra corriente, parecería que

lo bueno seria dejarse llevar por el desorden sexual y que contenerse resulta absurdo, pero la
4

realidad es que todo depende de como veamos esta virtud y que la logremos entender a

profundidad, ver la otra cara de la moneda, la podemos ver como una virtud prehistórica que solo

reprime o como la fuerza que capacita para dar y recibir el amor en plenitud, mirarla como una

completa respuesta a la libertad, a la capacidad de vivir la vida como entrega, como una

donación que nos lleva a una felicidad plena. Es esta virtud que ordena e integra el amor, que se

encarga de encausar y ordenar todos nuestros deseos hacia el amor verdadero. Es toda esta

actitud de vivir buscando el amor verdadero.

Cuando te has encontrado con el amor verdadero, cuando sabes que quieres amar de

verdad, quieres ordenar el amor hacia el otro por una convicción verdadera porque te mueve,

porque quieres responder este llamado al amor.

“La pureza es un reto que te dará una gran recompensa. Es difícil, pero es un reto que

produce una honda dicha” (Sada Fernández, 2018, p. 28). La verdad es que, si se requiere pasión,

esperanza y lucha, mucha valentía y convicción, mucha fe y voluntad para realmente lanzarte a

no conformarte con menos, es luchar porque realmente tienes puestos los ojos en ese amor lleno

de vida, aventura y paz que realmente estas buscando desde el fondo de tu corazón.

“La pureza es la mejor forma de comprender y valorar el amor entre el hombre y la

mujer” (Sada Fernández, 2018, p. 72). Esta virtud se encarga de liberar el amor verdadero de una

actitud que a veces solemos tener de uso porque se busca el placer, viene a ordenar y darme las

virtudes que necesito para llevarme al verdadero amor. Es lo que estamos llamados a vivir dentro

del amor. Nos lleva a amar de verdad, a ser felices y a encontrar ese amor que nos da la libertad.

“Muchos piensan que el sexo se limita al placer genital y es falso porque el hombre esta

inseparablemente integrado por un cuerpo y un alma” (Sada Fernández, 2018, p. 97). Cuando

tocas un cuerpo tocas un alma. No solo tocas un cuerpo tocas a una persona que tiene
5

sentimientos, un nombre, una historia. Conocer esta verdad hace que seas consiente de cuidar

ambas partes, la vida espiritual y el cuerpo que también es templo vivo del espíritu santo.

Decir que los impulsos sexuales son irresistibles no es científico. La biología

moderna declara que los reflejos genitales pueden dominarse con el ejercicio de la

voluntad. El poder del espíritu sobre el cuerpo, de lo psíquico sobre lo físico, es muy

grande. Esto lo confirma la psicología actual. (Sada Fernández, 2018, p. 120)

La ciencia anteriormente no tenía información que respaldara la pureza, los pocos

avances limitaban el comunicar a los jóvenes nuevas posturas respaldadas. En los últimos años

se han publicado nuevas investigaciones, desde un punto de vista critico revelan, lo posible que

es vivirla sin consecuencias negativas que a lo largo de los años se han ido agregando cada vez

más. El ejercicio de la voluntad es un trabajo constante, al inicio podrá ser poco entendible pero

conforme se practique no solo se enriquecerá sino también se fortalecerá.

Además de los medios humanos que puedas poner en práctica, no olvides el

proyecto de dios sobre ti. Él te ha hecho hijo suyo, lo cual quiere decir que te eleva el

orden de su propia naturaleza, la naturaleza divina. En otras palabras, que eres -que

somos- mucho mas que hombres, pues hemos sido destinados a vivir en la intimidad

divina por toda la eternidad. Quienes dan rienda suelta a sus deseos sexuales olvidan esta

verdad y entonces se degradan. (Sada Fernández, 2018, p. 133)

La frase “te hace más hombre” es tan común no solo en estos días, desde mucho tiempo

atrás se ha ido consolidando, hasta jugar como una verdad absoluta entre las juventudes, se ha

olvidado que somos mas que hombres, como ya lo cita el texto anterior se esta destinado a vivir

la intimidad divina. No ejercer un orden en la vida sexual nos desvía del fin último, animalizando
6

a las personas, al convertirse en seres esclavos de sus deseos y placeres. El plan de dios es

perfecto que interrumpirlo es un grave error del que muchas veces no se es consciente.

Si has caído en el vicio de la masturbación, intenta ver la castidad como una meta

que podrás lograr, relacionándola con la nobleza de los ideales de superación y la belleza

de la virtud, como hemos dicho la manera honda de solucionar el problema desde su

origen es viviendo en la esfera del amor. Tener en tu horizonte a la persona de cristo.

(Sada Fernández, 2018, p. 150)

El concepto de masturbación se ha ido popularizando a grandes pasos. El libertinaje sin

control ni responsabilidad ha impulsado mucha desinformación, en sitios web, en libros o incluso

en las mismas escuelas. Tener la mirada fija y reconocer que somos hijos de Dios, brinda una

gran fuerza voluntad. Ser propensos es demasiado fácil con consentimiento o sin consentimiento,

la gran escala de los medios lo permite, sin embargo, solo las decisiones propias lo hacen

posible.

Un noviazgo es bueno si los dos mejoran, si son capaces de crecer en esta maravillosa

virtud de la pureza (algunos la llaman santa pureza), de modo que no supongan uno para la otra

ocasión de pecar y por tanto de perjudicarse. Ella y tu cada día tendrán que ser más castos, más

puros.

Para lograr un matrimonio exitoso tuviste que haber pasado por un noviazgo. Los

noviazgos no siempre son como se pensaría la integración de nuevas definiciones entre los

jóvenes han deconstruido su esencia, los placeres y la falta de fuerza de voluntad, ha

desencadenado otros muchos problemas. Vivir un noviazgo en castidad no es imposible,

reconocer la esencia de nuestro ser como hijo de Dios y reconocerla en otras personas, nos

acerca a la pureza dentro del noviazgo.


7

Conclusión:

La pureza es un gran SI al amor verdadero y a ordenar todo ese impulso hacia la entrega

con el otro, hacia ser un don para el otro y acoger el don del otro. La pureza se vive siempre, se

vive en el noviazgo en el matrimonio, te enseña a amar de verdad de una forma increíble. Es esta

virtud que te permite integrar rectamente la sexualidad en si misma y en las relaciones con los

demás, ordenándola al verdadero amor.

Referencias

Guerrero, P. H. (2012). Bioquímica del amor. CIENCIA-UANL, 15(57), 114-120.

file:///C:/Users/alder/Downloads/Dialnet-BioquimicaDelAmor-3835412.pdf

Sada Fernández, R. (Ed.). (2014). ¡Conquista la Pureza! Un reto que vale la pena. Minos

También podría gustarte