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RESUMEN El ser humano es el ú nico animal que ríe. La risa es un programa motor
altamente especializado que puede ser desencadenado por un estímulo interno o
externo y que manifiesta la emoció n conocida como alegría. Este estímulo tiene su
procesamiento a nivel del sistema nervioso central en á reas primarias, secundarias y
de asociació n multimodal. En el sistema Iímbico se lleva a cabo el procesamiento de
las emociones y es probablemente el origen de los potenciales motores que
caracterizan a la risa, incluidos la expresió n facial y los movimientos de los mú sculos
que controlan la ventilació n y fonació n. Una vez procesado el estímulo, ademá s de los
actos motores automá ticos mencionados, se lleva a cabo una activació n autonó mica
generalizada la cual tiene salida por diversas vías, incluyen el eje hipotá lamo-hipó fisis
y sistema nervioso autó nomo. Todos estos componentes conforman la emoció n,
proceso que involucra, cuando se trata de alegría, el acto motor llamado risa.
Human being is the only animal that laughs. Laughter is a highly specialized motor
program, triggered by an internal or external stimulus and is the manifestation of an
inner process of joy. This stimulus, has its processing in central nervous system in
primary, secondary and multimodal association areas. The processing of emotions is
carried out in the limbic system, which probably is the origin of motor potentials that
characterize laughter, including facial expression and the movements of ventilatory
muscles and phonation. Once the stimuli is processed, besides the automatic motor
acts above mentioned, there is a generalized autonomic activation, and it has different
output ways, including hypothalamus-hypofisis axis and autonomic nervous system.
All these components conform emotions; a process involving, in the case of mirth, the
motor act called laughter (Arch Neurocien 5(1): 43-49, 2000).
En el caso de la risa, el estímulo causa una emoció n que por lo regular es alegría;
definida ésta como el sentimiento de placer originado generalmente por una viva
satisfacció n. Tras el procesamiento de la emoció n suceden los cambios autonó micos y
sobreviene el acto estereotipado: la risa. Estos acontecimientos no se aprecian
separados y forman parte de un todo que requiere la integridad de las partes
involucradas del sistema nervioso central (SNC) y periférico (SNP).
La risa con alegría puede ser desencadenada de varias formas (figura 1): por
estímulos externos que pueden ser percibidos en modalidades visuales, auditivas o
somatosensoriales (cosquillas); y por estímulos internos que provienen de la
representació n mental de objetos o situaciones absurdas o iró nicas, de recuerdos y
durante las ensoñ aciones (risa onírica).
044001.jpg: Figura 1. El estímulo llega al SNC por diversas vías y es procesado por
á reas primarias, secundarias y de asociació n multimodal. Ver texto. SL=Sistema
límbic, SRA=Sitema reticular ascendentes, SNC=Sistema nervioso central. Los
nú meros ará bigos corresponden a las á reas de Brodmann.
Los estímulos sensoriales externos viajan por vías específicas (visual, olfatoria y
auditiva) a las á reas sensoriales primarias (figura 1). En el caso de estímulos
somatosensitivos como las cosquillas el estímulo llega a la médula o TC tal vez por
medio de las mismas fibras que transmiten el dolor lento, es decir, las fibras C y el
fascículo espinotalá mico[sup4,11]. Es importante mencionar que la respuesta a las
cosquillas puede ser considerada primariamente como un mecanismo de defensa, ya
que si las cosquillas las hace un individuo no familiarizado con el sujeto a quien se le
hacen, la respuesta habitual es de rechazo y evasió n del estímulo, sin producir
risa[sup12].
Una vez en la médula, el impulso nervioso llega por la vía paleoespinotalá mica a los
nú cleos de la línea media e intralaminares del tá lamo, lugar de secreció n de β-
endorfinas, aunque parece no haber aumento significativo de éstas durante la risa con
alegría[sup13]; de ahí pasa directamente a la parte anterior del giro cingulado y a la
corteza sensorial primaria (giro parietal ascendente)[sup2] (figura 1).
Después de llegar los estímulos por las respectivas vías sensoriales-sensitivas a la
corteza, son integrados por las diversas á reas de asociació n multimodal para ser
procesados en diversas formas (figura 1). Algunos de éstos procesos está n
comenzando a ser estudiadas (mediante tomografía por emisió n de positrones -PET- o
de fotó n ú nico -SPECT-) registra el aumento del metabolismo en diversas regiones y
situaciones o bien con base a inferencias que se hacen de la patología[sup9]: Las
modalidades somá ticas son integradas en las á reas de asociació n sensorial[sup4], las
visuales en las á reas 18 y 19 de Brodmann y giro temporal basal[sup4]. El hemisferio
izquierdo es el hemisferio dominante para el lenguaje[sup14]. El lenguaje hablado es
percibido en el á rea auditiva primaria (giro de Heschl, á reas 41 y 42) en el giro
temporal superior y transmitido al á rea de Wernicke (á reas 22 y 39), donde éste es
comprendido[sup14]. El componente del giro temporal superior del á rea de Wernicke
(á rea 22) se ocupa de la comprensió n del lenguaje hablado, mientras que el giro
angular (á rea 39) y las regiones adyacentes se ocupan de la comprensió n del lenguaje
escrito[sup4,14]. Las modalidades auditivas se integran en el giro temporal
superior[sup4]; la prosodia emocional en el ló bulo frontal derecho[sup15]; el
contenido emocional de una cara en las regiones prefrontales, ínsula, amígdala y otras
á reas subcorticales[sup15]; la comprensió n de metá foras activa la corteza prefrontal,
giro temporal medio, precú neo y cíngulo posterior, todos ellos del lado
derecho[sup16] y el procesamiento del contenido emocional de la risa en el cíngulo
anterior y corteza temporal basal (giros fusiforme y parahipocampal)[sup2,17].
Seguramente hay muchas otras formas de procesamiento hechas por diversas
regiones específicas y que está n por ser descritas.
Una vez integrados e interpretados los estímulos en las diversas á reas de asociació n
multimodal, es llevado a cabo un procesamiento del humor, es decir, la génesis del
sentimiento de alegría. En los estudios de estimulació n llevados a cabo por Arroyo et
al se observó un fenó meno poco comú n que puede aportar algo de entendimiento
acerca de la localizació n de la alegría y los mecanismos de la emoció n. En dos de los
tres pacientes con crisis gelá sticas, la risa se asoció con un afecto divertido apropiado.
Hubo alegría cuando los giros fusiforme y parahipocampal fueron estimulados. Estos
hallazgos tienen dos connotaciones importantes. Primero, el hecho de que la
estimulació n cortical provocara risa significativa sugiere el involucro de la corteza
temporal basal en el procesamiento de la alegría. Segundo, el procesamiento de
percepciones auditivas y visuales puede evocar un estado emocional (humorístico). El
giro parahipocampal, por virtud de sus extensas conecciones con las á reas de
asociació n multimodal (parietal para modalidades somá ticas, temporal basal para
modalidades visuales y del lenguaje, y temporal superior para modalidades auditivas)
y con el hipocampo y el resto del SL, puede contribuir al procesamiento cognoscitivo,
y operaciones perceptivas y de memoria. Por ello, es probable que estructuras clave
para el procesamiento de la alegría sean los giros fusiforme y
parahipocampal[sup2,17] (figura 2). En éste mismo estudio, Arroyo, et al[sup2]
concluye que la regió n del cíngulo anterior está involucrada en el acto motor de la
risa, mientras que, como ya se discutió , la corteza basal temporal lo está en el
procesamiento del contenido emocional de la risa en el hombre.
046001.jpg: Figura 2. Después de procesado en las diversas á reas de asociació n
multimodal, se lleva a cabo el procesamiento del humor y se tiene finalmente una
respuesta compleja que incluye la consolidació n amnésica, los actos motores y la
activació n autonó mica que caracterizan a la risa. Ver texto. SL=Sistema límbico,
SRA=Sistema reticular ascendentes.
Por ú ltimo, otro de los fenó menos que acompañ an a la risa son las contracciones
rítmicas, automá ticas del diafragma y mú sculos abdominales (figura 2). Los
movimientos respiratorios voluntarios y automá ticos son sustentados, al menos
parcialmente por vías neurales separadas[sup23,24]. En raras ocasiones una lesió n
discreta del SNC, puede producir pará lisis selectiva de un tipo de respiració n y
respetarla el otro. Un ejemplo de tal disociació n es la "Maldició n de Ondina" en la cual,
lesiones medulares bilaterales altas pueden ocasionar pará lisis de la respiració n
automá tica mientras que la voluntaria permanece intacta[sup4,23,25]. El síndrome
inverso -pará lisis de la respiració n voluntaria pero no de la automá tica-no ha sido
muy estudiado[sup24]. Munschauer et al describen un paciente con pará lisis selectiva
de la respiració n voluntaria al mostrar que la respiració n automá tica es
cuantitativamente normal y no puede ser alterada de forma voluntaria, pero puede ser
modulada por estímulos emocionales[sup23]. Este caso demuestra la separació n de
las vías que sustentan la respiració n automá tica y voluntaria. En este caso la lesió n se
confina al puente ventral (se interrumpen las vías cortico-bulbar y cortico-espinal),
perdiéndose la respiració n voluntaria; mientras que la ventilació n automá tica
(sustentada al parecer por fibras que transcurren por las partes dorsolaterales del
puente), incluyen suspiros espontá neos, tos y estornudos permanecieron
intactos[sup23].
Existen muchas funciones superiores y del SL que quedan por ser descritas; ademá s,
hay que recordar que muchas de esas funciones se explican mejor no adjudicá ndoles
"centros" específicos, sino interpretá ndolas desde un punto de vista holístico, es decir,
en términos de una totalidad indivisible e interactuante y que no es só lo la suma de
sus partes. Es evidente que muchas á reas de la corteza, ganglios basales y nú cleos del
TC intervienen en la risa. Sin duda alguna, fenó menos como la risa y muchos otros
llegará n a ser comprendidos con mayor profundidad a mediano o largo plazo, pero es
justificable tal espera ya que ello implica conocer algo má s del funcionamiento de la
má quina má s compleja que ha originado la evolució n bioló gica.
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