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El ojo humano y la cámara fotográfica

La cámara fotográfica al igual que el ojo cumple la función de capturar imágenes.


La visión es un fenómeno muy complejo en el que interactúan el ojo, el nervio óptico
y el cerebro. Al mirar un objeto, los rayos de luz reflejados en él, penetran el ojo y
son enfocados, gracias a una serie de estructuras y lentes especiales.

La primera porción del sistema ocular es la córnea; esta estructura inicia los
procesos de convergencia de los rayos de luz.

Iris-Pupila / Diafragma:
Detrás de la córnea encontramos
el iris, que es una estructura
muscular con una perforación
central denominada pupila, y es el
responsable del control de la luz
que incidirá en la retina. Así,
cuando existe poca luz ambiente,
el iris se dilata creando una pupila
muy grande (permitiendo el paso
de mayor cantidad de luz),
mientras que si la luz ambiente es
intensa, el iris se contrae cerrando
al máximo la pupila (reduciendo el
ingreso de luz).
En la cámara fotográfica el diafragma es el encargado de graduar la cantidad de luz
que le llegará al sensor. El diafragma está formado por un conjunto de láminas
metálicas que se mueven
permitiendo cerrar o abrir
su orificio central.

Cristalino / Sistema de
enfoque:
Inmediatamente detrás
del iris está el cristalino y
los músculos ciliares, que
nos permiten modificar el
enfoque de los objetos en
función de la distancia a
la que se encuentren
(visión próxima, intermedia o lejana), esta función se denomina acomodación. en el
caso de la cámara fotográfica este proceso se efectúa mediante un sistema de
lentes.
Retina / Sensor CCD:
El elemento al que llega la luz
en el ojo es la retina. En ella,
las células fotorreceptoras se
encargan de convertir la luz en
señales eléctricas que se
envían al cerebro a través del
nervio óptico. En la cámara
fotográfica nos encontramos
con los sensores, estos
dispositivos son los encargados
de transformar la luz en carga
eléctrica para crear cada pixel
de la imagen. En las cámaras
antiguas, esta función la
realizaban las películas
fotográficas o carretes.

Sensibilidad de la Retina / ISO:


La retina contiene las células fotorreceptoras del ojo (conos y bastones) y hace las
veces del sensor CCD o película fotográfica de la cámara de fotos a la hora de
recibir la información en forma de luz y convertirla en pulsos eléctricos que
interpretará el cerebro/procesador. Una de las características de la retina es su
capacidad para aumentar o reducir su sensibilidad a la luz, su adaptabilidad. En
este sentido, el ojo aumenta su sensibilidad a la luz cuando se encuentra en
ambientes oscuros y la reduce cuando hay luz de sobra. La cámara de fotos por su
parte, cuenta con el factor de sensibilidad ISO que habla del nivel de amplificación
de la señal que recibe el sensor.
La Cámara Oscura

El origen de la fotografía está en la cámara oscura. La cámara oscura originalmente


consistía en una habitación cerrada cuya única fuente de luz era un pequeño orificio
practicado en uno de los muros, por donde entraban los rayos luminosos reflejando
los objetos del exterior en la pared opuesta. El orificio funciona como una lente
convergente y proyectando la imagen del exterior, invertida tanto vertical como
horizontalmente. Aunque la imagen resultaba invertida y borrosa los artistas la
utilizaban para pintar sus cuadros con
mucho detalle.

Con el transcurso de los siglos la


cámara oscura evolucionó y se
convirtió en una pequeña caja
manejable y al orificio se le instaló una
lente óptica para conseguir una
imagen más clara y definida. esto
marcó el principio de lo que hoy
conocemos como el objetivo de la
cámara, el cual permite la captura de imágenes a diferentes distancias y ángulos
obteniendo como resultado imágenes nítidas y luminosas

A partir de este avance varios científicos se dedicaron a perfeccionarla, dando lugar


al desarrollo de la fotografía.
La Cámara Fotográfica

Es una caja oscura que permite el paso de la luz para que la imagen enfocada a
través del objetivo sea registrada por un sensor digital o película.

Sus elementos:

● Objetivo: Dirige los rayos de luz hacia el sensor.


● Sensor digital: capta la imagen.
● Diafragma: está en el objetivo, es una apertura variable que permite regular el
paso de la luz.
● Obturador: ubicado entre el objetivo y el sensor, controla el tiempo de
exposición a la luz.
● Visor o pantalla: Nos permite ver a través de él y componer la imagen.
● Disparador: Nos permite escoger el momento de disparo.
● Fotómetro: Mide la luz reflejada por el área de interés para que la cámara
pueda calcular la exposición correcta.
● Chip: procesa la imagen y la almacena en la memoria.
● Batería.

Tipos de cámara
Se pueden clasificar según:
- el soporte de almacenamiento (analógica, digital)
- el tamaño del sensor
- Compactas, Bridge o Reflex
Compactas:
- Son pequeñas, al igual que su sensor.
- Portables
- Cada vez permiten realizar más ajustes, pero limitan la posibilidad de ser
creativos.

Bridge:
- Sensor ligeramente superior (mayor nitidez y calidad de imagen)
- Más funcionalidades, mayor zoom óptico NO intercambiable.
- Fotos de buena calidad, controlando la captura.

Réflex:
- Sensor mucho mayor.
- Objetivos intercambiables: variedad de focales.
- Visor réflex (permite ver directamente a través del objetivo y no una
recreación digital)
- Funcionalidades que permiten la creatividad y controlar el proceso de tomar
la foto
- Gama muy amplia de modelos.
La Exposición

Podríamos definir la exposición como la cantidad de luz que entra por el objetivo y
es registrada por el sensor dentro de la cámara; y se determina por la apertura del
diafragma, la velocidad de obturación, el ISO y la luz ambiental general que haya
en la escena.
¿Por qué es importante? Porque si hay demasiada luz registrada por el sensor y la
fotografía queda sobreexpuesta, veremos la imagen demasiado blanca y carente de
detalle. Por otra parte, si queda subexpuesta, todo estará demasiado oscuro, con
demasiadas sombras y áreas en negro, sin detalle. Es decir que, generalmente, lo
que se busca es que haya un balance perfecto entre las sombras y las luces.
Al momento de captar una fotografía es necesario tomar en cuenta algunos ajustes
básicos para conseguir que la luz sea perfecta: velocidad de obturación, apertura de
diafragma e ISO.
Tendremos que aprender a equilibrar estos valores para que nuestra fotografía
tenga una perfecta exposición. ¿Queremos que el fondo salga desenfocado?
¿Queremos congelar el movimiento? ¿Hay demasiada luz ambiental, o poca?

A esto se llama la Tríada o Triángulo de Exposición, estos tres valores bien


equilibrados nos permitirán obtener la exposición deseada, de tal manera que si uno
es modificado, los demás también se verán afectados, por lo que será necesario
regular otro de ellos para lograr el equilibrio nuevamente.
Si la imagen captada refleja la luz existente fielmente diremos que la toma está bien
expuesta.
En el caso de haber captado menos luz que la real, diremos que está subexpuesta y
quedará oscura.
En el caso contrario,es decir, si la imagen aparece con mucho brillo, la foto estará
sobreexpuesta y aparecerá demasiado clara o “quemada”.

● La cámara mide la cantidad de luz ambiental mediante el fotómetro.


● Con estos valores ajustamos “cuánta luz” dejaremos pasar por el objetivo con
la apertura de diafragma.
● Además, modificaremos cuánto será el tiempo que la luz va a estar llegando
al sensor, ajustando el tiempo de exposición.
● Y decidiremos qué cantidad de luz es capaz de absorber el sensor ajustando
su sensibilidad (ISO)
Apertura de Diafragma
El diafragma forma parte del objetivo, funciona como el iris del ojo humano,
abriéndose y cerrándose para permitir que ingrese más o menos luz, según la
necesidad.
La apertura del diafragma se mide tomando como referencia una escala cuyo valor
es el llamado número f. El “salto” de un valor a otro se denomina Stop o Paso.
Una escala clásica de números f es la siguiente (aunque puede variar de acuerdo al
modelo de objetivo):

La relación entre los números f es: por cada paso, la luminosidad se duplica o divide
por dos, si aumentamos o disminuimos respectivamente. Así por ejemplo f11 aporta
el doble de luminosidad que f16 y la mitad que f8.
A menor número f es mayor la apertura y a mayor número f menor la apertura del
diafragma.

La apertura del diafragma, (además de modificar el caudal de luz que ingrese al


sensor) nos permitirá decidir cómo trabajamos la profundidad de campo en la
imagen que queremos lograr. Básicamente la profundidad de campo es la distancia
por delante y por detrás del punto enfocado que aparece con nitidez en una foto.
Por ejemplo, a mayor apertura de diafragma, menor profundidad de campo, es decir,
menor superficie enfocada.

Dependiendo del modelo del objetivo, encontraremos aperturas máximas fijas o


variables. Esto está indicado en el frente del objetivo.
Tiempo de Exposición
El obturador se ubica frente al sensor de nuestra cámara, está formado por un par
de cortinillas que se abren al momento de disparar y limita el tiempo que el sensor
estará expuesto a la luz que llegará al sensor. Por lo tanto, el obturador controla el
tiempo de exposición.
Los tiempos se miden en segundos o fracciones de segundo, los valores más
usuales están expresados en el siguiente esquema.

Existe un modo llamado BULB en el que la foto se expone mientras se mantenga


pulsado el botón del disparador, en este caso el fotógrafo decidirá el tiempo de
exposición deliberadamente.

¿Tiempo de exposición o Velocidad de Obturación?


En fotografía se utilizan ambos términos que se refieren a lo mismo, solo que el
orden de magnitud está invertido. Así, reducir el tiempo de exposición será lo mismo
que aumentar la velocidad de obturación, y viceversa.

El ajuste de la velocidad de obturación, nos permitirá decidir cómo capturaremos el


movimiento en nuestra imagen. Cuanto más alto sea el número (velocidad lenta)
con el que trabaja el obturador, más luz entrará en la cámara y quedará registrada
en el sensor, lo que significa que el movimiento se registrará de manera borrosa.
Por otro lado, cuanto más bajo sea este número, más rápido conseguiremos el
disparo, “congelando” el movimiento.
Sensibilidad ISO

Los sensores pueden trabajar a diferentes sensibilidades. De este modo, a mayor


sensibilidad, mayor cantidad de luz son capaces de captar. La sensibilidad es un
parámetro que también puede modificarse en cada foto.

La sensibilidad se mide según el estándar ISO, en el cual, cuanto mayor es el


número, mayor es la sensibilidad. Son valores típicos: ISO 100, 200, 400, 800, 1600.
En cada uno de estos saltos se obtiene el doble, o la mitad de sensibilidad, según
hacia donde nos movamos en la escala.

Es necesario tener en cuenta que al aumentar la sensibilidad de nuestro sensor,


estamos perdiendo definición y aumente el ruido. El ruido o grano son unos puntos
de colores que van apareciendo, especialmente en las zonas oscuras o de sombras.

Es decir que: Cuando elevas el ISO, tu cámara aumenta «artificialmente» la luz en


la fotografía, y esta amplificación de luz aumentará la cantidad de grano y ruido en
ellas. Por lo tanto, de acuerdo a las condiciones lumínicas disponibles, elegir la
sensibilidad más baja posible, a menor ISO mayor calidad de imagen.

Para tener en cuenta:


Al momento de realizar una fotografía, lo primero que tenemos que pensar es cómo
queremos que sea. ¿Queremos prestar atención a la profundidad de campo, a la
velocidad?
Por ejemplo; para retratos en exteriores daremos más importancia a nuestro sujeto
si el fondo queda desenfocado. En fotografía de deportes tendremos que prestar
atención a la velocidad de disparo para que la imagen no salga borrosa.
¿Qué pasa si tengo ya la apertura que quiero (porque quiero tener el fondo de este
modo) y no puedo bajar más la velocidad porque es posible que me salga movida
pero mi fotografía está quedando subexpuesta? En este caso, podemos recurrir al
ISO, sólo tenemos que aumentarlo para compensar la exposición, teniendo cuidado
con el grano.

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