Se emplea para mostrar una serie de eventos en orden cronológico, para
indicar las fases de un proceso, o diagramar las fases de una planificación. En los grados con los cuales estamos trabajando podemos emplearlo, por ejemplo, para trabajar un texto instructivo, representando los pasos que se ha seguido en el proceso de elaboración de un producto. También podemos emplearlo para trabajar textos informativos, organizando hechos históricos o sucesos que han llevado a que se desarrolle un conflicto. En el análisis de un cuento o biografía, puede servirnos para mostrar las secuencias de las acciones de los personajes reales. Después de haber trabajado con un texto instructivo, por ejemplo, luego de haber leído y preparado una receta, pasamos a presentar al grupo un gráfico como el siguiente: