TRATADO DE

tCfa~
tomo 1
DERECHO SOCIETARIO
 LA INSCRIPCIÓN REGISTRAL
EN EL REGISTRO DE
SOCIEDADES
ACTOS INSCRIBIBLES, CONSTITUCIÓN Y
REPRESENTACIÓN DE LA SOCIEDAD

Jorge Luis GONJ.iJ1S LOU

l. LA INSCRIPCIÓN COMO FORMA DE

ADQUISICIÓN DE PERSONALIDAD JURÍDICA EN
LA CONSTITUCIÓN DE SOCIEDADES
El artículo 6 de la Ley General de Sociedades establece que la adquisición
de la personalidad jurídica de la sociedad está dada por su inscripción en el
Registro. A ella se refiere Elías Laroza< 1> como "la formalidad más importante
del proceso de fundación de la sociedad y, además, es un requisito constitutivo
del derecho de la sociedad a la personalidad jurídica. En efecto esta última
solo· puede adquirirse mediante la inscripción en el Registro( ... ). La inscrip-
ción completa el proceso de publicidad que la ley exige para toda sociedad,
iniciado con el otorgamiento de la escritura pública. Por otra parte, la inscrip-
ción como acto indispensable para la formación del negocio jurídico, sustituye
al antiguo y farragoso de la autorización estatal para la constitución de socie-

(1) ELIAS LAROZA, Enrique. •Derecho Societario Peruano•. Editorial Normas Legales S.A.C. Trujilk>- Perú.
Edición 2001. Págs. 20-21.

187
r
rratsd<> de Derecho Mercantil
La Inscripción reglatral en el Reglatro de Sociedad••
·edades anónimas), que era necesario en países
as (especialmente las ~1 España e Inglaterra".
dad 1 como Francia, 11. SEGURIDAD JURÍDICA E INSCRIPCIÓN
europeos ta es . que la inscripción del comerciante en un REGISTRAL
· nte precisar · ·t t 1
Resulta convenie la~
trícula de gremios ex1s en e en a Edad Me-
. xt La palabra seguridad, según Vásquez Bote('>, deriva etimológicamente del
Registro tie~e su ong matrícula era de "carácter interno Y_ e erno: a efectos vocablo latino securus, significando sin cuidado, sin temor, indiferente; adjetivo
de esta
dia. La finalldad badesaberqui ·énes eran las personas que iban a gozar de los compuesto del prefijo se y del sustantivo cura (ae) en su acepción de cuidado,
d I d .
internos se trata . factos externos de que to o e mun o supiera que manejo; esto es como autocuidado, automanejo. Seguridad es equivalente a
beneficios del gremio, Yate·culadas fabricaban sus productos de acuerdo con la actividad realizada con propio control, hecha exclusión de sucesos impon-
aquellas personas.' alllmatablecidas
n 'por el gremio
· "<2> . Obv1amente,
· s1· bien
• esta derables estimados casi como inexistentes. Presupone, por lo tanto, una cer-
las normas de cah~d es I antecedente del Registro Mercantil, su finalidad era teza acerca de la que se considera excluido cualquier riesgo.
, la de gremios es e · - • •
matncu t aba destinada a reconocer pnv1 1eg1os a quienes los
La seguridad constituye uno de los fines generales del Derecho. De Ángel
distinta, pues ~e enc~n rde nuestro Registro de Sociedades que es más bien
. t raban a d1ferenc1a . .d b , Yagüez( 5>refiriéndose a ella sostiene que: "Al hablar de seguridad nos referi-
in eg . ' d bl'icidad destinado a producir cert1 um re y seguridad en mos, en un sentido amplio, a la garantía de paz social, expresión que desde el
n mecanismo 8 pu 1 · 1 •
u • protegiendo al tercero que se re aciana con a sociedad punto de vista de los miembros de la comunidad puede entenderse como su
el tráfico comercia 1, ·
conciencia o certeza de que la solución de los conflictos no puede producirse a
ismo sentido se pronuncia Broseta Pont<3>, cuando refiriéndose
En este m . •" t . . través del empleo de la violencia y de que el derecho no puede desconocer la
1 fi l
·dad del actual Registro Mercant11expresa que. es a masiva actitud existencia de situaciones de hechos revestidas de una tal apariencia de soli-
aa1na1 • • f d
·neludible necesidad de que el empresario mismo, sus un amentales
crea la dez y rectitud, que su destrucción u olvido solo podrfan acarrear efectos no-
I
circunstancias personales y jurídicas, los datas ob'Jet·1vos de s~ acti v1'd ad eco- civos para el desenvolvimiento de las relaciones económicas y sociales".
nómica (su clase, domicilio, auxiliares que con los que la realizan), así como
cualesquiera otras circunstancias que sean relevantes para la explotación de El concepto de seguridad jurídica ha dado lugar a la distinción entre la
su actividad (p. ej. la emisión de obligaciones o declaración en quiebra), pue- llamada seguridad estática y seguridad dinámica. La seguridad estática está
dan ser en cualquier momento conocidas por terceros que con él se han rela- destinada a proteger al derecho habiente o titular del derecho frente a las tur-
cionado, por los que deseen hacerlo o incluso por el Estado, o sus servicios o baciones o ataques de terceros, que se inmiscuyan o traten de desconocer su
dependencias públicas( ... ). La publicidad así concebida debe ser una obliga- titularidad. En cambio la seguridad dinámica o de tráfico procura brindar pro-
ción que se Impone al empresario mercantil, cuyo contenido debe alcanzar tección a los terceros que se ven involucrados en la circulación de la riqueza,
aspecto este último que se proyecta en dos vertientes: protección de los acrea.
todo lo que pueda directamente interesar a los terceros o al Estado mismo, y
dores del enajenante, que pueden ver burlada la garantía de este crédito con
cuya finalidad fundamental es dotar de seguridad al tráfico y proteger a quie-
enajenaciones fraudulentas; y protección a los adquirentes, que no deben es-
nes se relacionan o pueden relacionarse con aquel sujeto de la actividad eco- tar expuestos a la sorpresa de que el bien que se les transmite se encuentre
nómica·.
gravado, embargado o simplemente no pertenezca al transferente. El carácter
antitético de estos tipos de seguridad ha sido puesto de manifiesto por Ehren-
De este modo, la inscripción registra! como requisito para la adquisición
bergc6>, al señalar que: "La seguridad de los derechos exige que no se pueda
de l_a pe~son~lldad jurídica de la sociedad encuentra su fundamento en la se-
producir una modificación desfavorable de las relaciones patrimoniales de una
gund~d Jurídica de los terceros y ya no en una situación de privilegio del co-
persona sin que concurra su voluntad. La seguridad del tráfico, por su parte,
~=n~e Ode la soci~ad. _ Por Igual_razón, diversos actos posteriores al cons- exige que una modificación favorable en las relaciones patrimoniales de una
frente a• terceros
aben ser obligatoriamente inscritos en el Registro para surtir efectos
En tal t'd . .
tente entre ·.d . se~ 1 0 , resulta conveniente analizar la relación ex1s-
segun ad Jurídica e inscripción registra!.
(4) VÁSOUEZ BOTE, E. "Seguridad y certeza en las relaciones jurldicas inmobiliarias". En: Revista Notarial
Argentina. N' 862. Pág. 903.
(5) DE ÁNGEL YAGÜEZ, R. "Apariencia jurídica, posesión y publicidad inmobiliaria registrar. Univefsidad de
Deusto. Bilbao, 1982. Pág. 13.
(2) Ru12 DE VELASco, Adolfo "Manual de Derecho Mercantil". Ediciones Oeusto S.A. Bllb ao • Espana, Citado por LACRUZ BEROEJO, José Luis y SANCHO REBULLIDA, Francisco. "Elementos de Derecho
1992 Pag 137 . Ma• (6)
Civil 111: Derecho Registra! Inmobiliario". José Maria Bosch Editor. 2" edición retundida. Barcelona, 1984.
(3) BROSETA 199-4 Mi!llet
PONT,
dnd-E.apana, Pag. no·Manual de Derecho Mercantil' . Editorial Tecnos S.A. Oéc1ma Edlc1 0n. Reimpresión 1991 . Pág. 12.
188 189
r----
rr.uadO de oerecho Mercantil
La Inscripción regletral en el Regletro de Socledadee
. f to para ella por circunstancias que ignora
ec1ar srn e ec • • .
no puede qu 'dad del tráfico son, por cons1gu1ente, hasta un
persona , . •d·ca y segun estos de modo que cada uno de ellos sol
c,.,,uridad ¡un I ción, fe pública y oponibilidad con respecto a terceros de buena fe( ... )". En el
(...) ""~ tos contrapu ' 1 t o mismo sentido expresa Pau Pedrón<9l que: "el Registro Mercantil tiene por fina-
, ª~ª~-
. rto grado concep d I otro y cada caso en e que en ran en colisión
e ,
puede ser alcanz . 1 dor un grave problema .
• lidad el proporcionar seguridad jurídica al tráfico mercantil mediante la atribu-
ción de veracidad a los actos y contrato que publica".
supone para el Ieg1s a . .
. G 'a Herguedas, el concepto de seguridad ¡urídica
. n segun are, . .
Ah?rª. b1e , fses será la existenc~a.de ¡ueces y que no se produzca
es relativo. para unos pa ridad jurídica mmIma. Pero en los pueblos evolu- 111. DEL REGISTRO MERCANTIL AL REGISTRO DE
indefensi~n ..É~ta es~~itu~~mente, la seguridad jurídica es algo más que el SOCIEDADES
clonados JU~'~'~ª ~n la discusión civil entre las partes. Es el derecho de los
Derecho al Jurero, eder a instituciones de legitimación de sus actos, contra- En nuestra legislación nacional el Registro Mercantil fue creado por el
particulare_spara acc cuyo ámbito adquieren garantía legal Código de Comercio de 1902, aun parcialmente vigente, comprendiendo los
tos y adqursrclones, en libros de comerciantes, sociedades y buques. Luego, desde la vigencia del
n sistema adecuado de organización del tráfico patrimonial Código Civil de 1936, se eliminó de su contenido al Registro de Buques, que
Portodoe 11o, u
• narderechos fácilmente ·
1dent11ca ·1· bl es Yven·t·1cabl es, cuyo in- más bien pasó a formar parte del Registro de Propiedad Inmueble. Fue objeto
deberá proporcio · ·mee rt'd b · fd' de tres reglamentos (1902, 1936 y 1969), que rigieron sus actividades y funcio-
. se encuentre su¡·eto a excesivas I um res ¡ur 1cas, y que
tercam b,o no .. . namiento, siendo relevante destacar que el Reglamento aprobado por Acuer-
. to de una delimitación lo suf1c1entemente precisa para que puedan do de la Sala Plena de la Corte Suprema del 15 de mayo de 1969, incorporó un
sean ob¡e . •• d t J t
tegidos eficazmente contra las mtrom1s1ones e o ros. us amente, con tercer libro destinado a la inscripción de Poderes Especiales de Sociedades que
serfinalidad,
tal pro ·
es que surgen los Registro~ pu' bl'.1~os en genera1, ta1como _seña-
no contaban con sucursales en el país y cuyos poderes no implicaran la práctica
lan Schafer y 0tt<71: "Como ejemplo de d1spos1cIones _legales de prot~cc1ón de habitual del comercio. De esta manera, hasta la vigencia de la Ley NV 26366, el
la confianza, hay que mencionar, sobre todo, el Registro de la Propiedad, ci- Registro Mercantil se encontraba integrado por los libros de comerciantes,
tando también al Registro Mercantil, al de Asociaciones, el de Bienes Matrimo- sociedades y poderes especiales, siendo también inscribibles en él, por dispo-
niales y el de Buques, pues todos ellos ofrecen seguridad y agilidad al tráfico sición del Decreto Ley Nv 21621 , las empresas individuales de responsabilidad
negocia!, y en último lugar, protección a la confianza, siendo la configuración limitada. Ni la Ley de Sociedades Mercantiles ni la abrogada Ley General de
muy d~erente en cada caso concreto, pues depende de que la inscripción sea Sociedades establecieron especiales regulaciones sobre el citado Registro.
constitutiva, conduciendo entonces a una absoluta protección del tráfico, o
Al entrar en vigencia la Ley Nv 26366 de Creación del Sistema Nacional de
solo sea válida para los que actúan de buena fe, de que su publicación sea
los Registros Públicos y de la Superintendencia Nacional de los Registros Pú-
decisiva, como es la del Registro de la Propiedad. Estas instituciones condu- blicos, el artículo 2 de la citada norma legal estableció la existencia, dentro del
cen a una exoneración de costos de información para el tráfico jurídico". Registro de Personas Jurídicas del Registro Mercantil, el Registro de Socieda-
des Mercantiles y el Registro de Empresas Individuales de Responsabilidad
Consecuentemente, el Registro Mercantil es un mecanismo de publicidad
Limitada; e incorporando el Registro de Comerciantes dentro de los que con-
al servicio de la seguridad jurídica del tráfico. Proporciona la información rele-
forman el Registro de Personas Naturales. Ello no varió significativamente con
~nte Y_con efectos jurídicos respecto a terceros, pues como señala Esturillo<ªl: la vigencia de la Ley General de Sociedades N11 26887, la cual solo dedica,
el Reg1str~ ~ercantil, si en sus orígenes pudiera dar motivos para calificársela específicamente, cinco artículos al Registro, limitándose en su artículo 433 a
como admin,s~ratlvo, es lo cierto que en su concepción actual presenta todas enunciar que toda mención en ella efectuada al "Registro" debía entenderse
las c~racterístrcas de uno jurídico. No se limita a la simple publicación de da- referida al Registro de Personas Jurídicas, en sus Libros de Sociedades Mer-
tos, sino que sus inscripciones se hallan dotadas de los importantes efectos cantiles y de Sociedades Civiles, según correspondiese a la clase de sociedad
que dimanan de principl os básrcos
· tan fundamentales como los de la leg1t1ma-
..
a que se aluda.
(7) BERND SHCAFER, Hans y OTT, Claus. 'Manual de An.tlisls Económico del Derecho e·rvi·,•· Editorial
Temoe Muid, 1986. P~ 332 Isla•
(8) EST\JRluo LOPEz, A11onio. "Ellu<io ele la legislación IObre et Registro Mercantil. Práctica de L.eg (9) PAU PEDRÓN, Antonio. 'Curso de Pnlctica Registrar. Universidad de Comillas. Madrid, 1995. Pég. 186.
ción ltlettanli SociatMia•.Centro de Estudios RegiatraJes. Madrid, 1992. Pág. 40.
190 191
 Tretsdo de oerecho Mercantil
. encia de la actual Ley General de Sociedad
desde la V19 • d
En este sen tidO, ba evidente la carenera e ~na regulación regl _
enero de 1998) resu 1_ta lados con la actividad reg1stral-societaria hab~1
(1 de ctos vrncu . . , •
mentaría de los as pa A lamento del Registro Mercant11vigente desde el año
da cuenta de que el las disposiciones de la abrogada Ley de Socieda
1969, adem~s de ret:rs~do evidentemente obsoleto an~e los grandes carn:
des Mercantrl~s, iunciones experimentad~s por el Sistema Nacional de
bios de _organrz!c'? Y sobre todo a partir del ano 199~- Es en este contexto
los Registros PubliCOS, lución del superintendente nacional de los Registro
que, mediante la :~~UNARP/SN publicada el 27 de julio del 2001, se apro~
Públicos Nº 200·2 d Registro de Sociedades (a partir de ahora "RAS") el
I
bó el Aeglamen!o ªv,·gor conforme a su Sétima Disposición Transitoria 1
· mo que entro
mrs . d en ,
Nótese .
que el citado Reg Iamento adopta, correcta-
' de créditos. Por su parte, hay un capítulo especial para la sociedad anónima
de setJembre 12002 s ·
d einación· de "Registro de ociedades" , que s1· bº1en no existe ni
mente, 1ªdª~ación del Sistema Nacional de los Registros Públicos ni en la
en laGLey 8 d~ Sociedades, es la que mejor se condice con su contenido, en
Ley enera 1 · te Ios actos ·mscrr'b'bl
.d en que se desarrollan exclusivamen , es relacio-
la medI a . 'd'
nados con dicha clase de personas ¡un 1cas.
No existe ya, por tanto, el Registro Mercantil, sino solamente el Registro
de Sociedades, en el cual se inscriben, en armonía con el artículo 1 del RRS: a)
Las sociedades consmuidas en el país y sus sucursales; b) Las sucursales de
sociedades constituidas en el extranjero; y c) Los poderes otorgados por socie-
dades constituidas o sucursales establecidas en el extranjero. Consecuente-
mente ha quedado derogado, desde la vigencia del RAS, además del Regla-
mento del Registro Mercantil aprobado por la Sala Plena de la Corte Suprema el
15de mayo de 1969 (excepto en lo referido al Libro de Comerciantes que actual-
mente integra el Registro de Personas Naturales). Asimismo, se han derogado
las normas sobre la inscripción de reorganización de sociedades constituidas
en el extranjero aprobadas por Resolución N11 1O3-98-SUNARP del O1-07-1998;
las normas sobre inscripción de poderes otorgados por sociedades extranje-
ras que no tienen su domicilio en el país aprobadas por Resolución N11 188-
2000-SUNARP/SN del 26-08-2000 y las disposiciones contenidas en el Regla-
mento de las Inscripciones, referidas a las sociedades civiles (arts. 129 al 131 ).
Beaumont Callirgos' 1º1, quien fue miembro de la comisión elaboradora del
~royecto de Reglamento del Registro de Sociedades, resume el contenido del
~itado RAS expresando que: "Tiene un título preliminar con seis normas que
incluyen
. . los P_
n·ncrpros
· · reg1strales,
· regulando en particular los de especialidad,
fe publica r~istral Ytracto sucesivo, así como tratando el asunto de los títulos
que dan mérito a la ins crrpc1
· ·ón. En cuanto a las reglas aplicables a todas las
(!O) BEALt.lONT CAU.IRGOS, Ricardo. "Nuevo Reglamento de Registro de Sociedades". En: Legal Express.
f'ltllicacldn mensual de Gacel¡ Jurldica S.A. Ano 1. N8 B. Agosto det 2001 . Pág. 3.
192
La Inscripción reglatral en el Reglatro de Sociedades
es
sociedades, se precisan los actos inscribibles y los no inscribibles, las excep-
ciones al principio de tracto sucesivo, el alcance de la responsabilidad del re-
gistrador, las anotaciones preventivas, el contenido de los asientos, el índice
de sociedades y la reserva de preferencia registra!, el objeto social, el cambio
de domicilio y la efectividad de la entrega de los aportes incluido el de cónyu-
ges. Al abordar el tema de la sociedad anónima, se regula el capítulo de la
junta general de accionistas, la junta universal, la lista de asistentes y las cla-
ses de acciones. En cuanto al directorio, la calificación del registrador, la cons-
tancia de convocatoria y el quórum del directorio, las resoluciones tomadas
fuera de sesión y las sesiones no presenciales. Se regula también la modifica-
¿, ción del estatuto, el aumento de capital, el contenido del acta y la capitalización
cerrada y otro para la sociedad anónima abierta. Se dicta la normatividad con-
veniente para las otras formas societarias. Y en cuanto a las normas comple-
mentarias, el reglamento fija estipulaciones muy precisas en lo tocante a la
transformación, a la fusión y a la escisión. Por último, el reglamento trata el
tema de la reorganización de sociedades constituidas en el extranjero, así como
en general, los capítulos de disolución, liquidación y extinción, para concluir
con los poderes otorgados por sociedades constituidas o sucursales estableci-
das en el extranjero".
Obviamente, la sola vigencia del RAS, que viene a constituir una regla-
mentación actualizada con la legislación societaria vigente, es un importante
avance, sin perjuicio de los diversos errores y omisiones e imperfecciones que
contiene. No obstante ello, consideramos, compartiendo la opinión de Gonzá-
lez Barrón< 11 >, que dicho reglamento tiene un gravísimo error conceptual que lo
vicia desde su nacimiento: su aprobación mediante resolución de superinten-
dente nacional de los Registros Públicos. Al igual que hemos comentado res-
pecto al Reglamento General de los Registros Públicos< 12>, no se encuentra
dentro de las facultades de la Superintendencia Nacional de los Registros Pú-
blicos la de reglamentar disposiciones legales. Y es que se ha pretendido am-
parar la promulgación tanto del Nuevo Reglamento General de los Registros
Públicos como la del Reglamento del Registro de Sociedades, en lo estableci-
do en el artículo 18 inciso b) de la Ley N11 26366, que textualmente se refiere a
la atribución del Directorio de la SUNARP para "dictar las normas registrales
requeridas para la eficacia y seguridad de la función registra!". Dicha atribución
se refiere a normas organizativas internas del Sistema Nacional de los Regis-
tros Públicos, pero no a aquellas que reglamentan disposiciones legales (como
el Código Civil o la Ley General de Sociedades), que en armonía con el inciso
(11) GONZALEZ BARRÓN, Gunther. "Tratado de Derecho Registra! Mercantil• Registro de Sociedades'.
Jurista EditC1res. Lima, Perú, 2001 . Págs. 38-39.
(12) Permftasenos remitimos a lo vertido en nuestra obra "Comentarios al Nuevo Reglamenlo General de los
Registros Públicos'. Gaceta Jurídica S.A. 11 edición. Lima, Perú, 2002. Pág. 669.
193
 rratadO de oereohO Mercantil
8) del artículo 118 de la Constitución Política de 1993, deben san .
diante o,c,eto supremo. Esta situación resta trascendencia )urldi cionarse me-
sas no- contenidas en et RAS, pudiendo hacer que la aplica~: 1 las dlver-
p,eceptos, sobre todo en caSo de controversias en sede Jurisdicclo~ ad de sus 0
rada ocuandO menos cuest1011ada, por el detecto existente en su aprobación.
al, sea 1gn •
SCRIBIBLES EN EL REGISTRO DE
IV.ACTO S IN
SOCIEDADES
. todos los actos que realiza una sociedad tienen naturale-
Obviamente, n0 t 1 • capitalización de utilidades resultantes del mismo, sí podrá acceder al Registro
. . 'bl Al egistro y a los terceros que contra an con a sociedad solo les
~a inscnbi e. erraquellas situaciones jurídicas relevantes de la persona jurídi-
1nteresa conoc t t'
ca que por tal razón , merecen gozar de los efectos. sus an. 1vos que determina
'. . 'ón registra!. En especial merecen acogida registra! aquellos actos
la 1nscnpc1 . · d d d · •
f 'dos a la responsabilidad de la misma soc1e a Y e quienes actuan en su
13
~:;~sentación. Esto es reconocido por Pau_Pedrón< > cuando ~~ñala que: "El
Registro Mercantil ha pasado a ser un registro de responsabilidad (un Haf-
tungsregister, como ha puesto en reliev~ la doct~n_a a~emana), de ahí que su
fundamento resida básicamente en publicar las lim1tac1ones de la responsabi-
lidad, además de otras cuestiones íntimamente ligadas a ella: quién es el suje-
to afectado por esa responsabilidad, quienes son las personas que, con su
actuación, pueden poner en juego esa responsabilidad. Por eso puede decirse
que la publicidad registra! versa sobre tres cuestiones: el régimen de respon-
sabilidad, la identificación del empresario y su representación".
Nuestro Registro de Sociedades, atendiendo a que solo deben acceder al
registro aquellos actos de relevancia para la existencia de la persona jurídica
en su relación con terceros, ha optado por el sistema de "numerus c/ausus", al
establecerse (art. 3 del RAS) un catálogo de actos inscribibles en el mismo.
Concordamos con esta opción adoptada por la nueva reglamentación, puesto
que, como señalan numerosos autores, uno de los peligros de admitir el ingre-
so a la publicidad registra! sería el de la "inabarcabilidad" de su contenido,
permitiendo la existencia de un sinnúmero de asientos registrales, que, ade-
más de carecer de interés alguno para terceros interesados en contratar con la
sociedad, solo complicarían la búsqueda de datos en las partidas registrales,
rlagadas de asient~s inútiles e intrascendentes. Téngase presente que en la
ey ~eneral de Sociedades (a partir de ahora "LGS") no existe norma alguna
refe nda a los actos que deberían ser materia de inscripción limitándose en
forma totalmente carente d . t á . . de' manera disper-
.
. . . e sis em t1ca alguna a enunciar
sa la Pos1b1hdad de la In · 'ó • '
scnpc1 n reg1stral de algunos actos societarios.
(13) PAU PEDROO, Antonio. Op ot. Pág. 186.
194
La lnecrlpclón registra! en el Registro de Socledacle•
A esta posibilidad de acceder a la publicidad registra! es que se refiere,
también, el artículo 32 inciso b) del Nuevo Reglamento General de los Regis-
tros Públicos (en adelante uNRGRP'') cuando expresa como obligación del re-
gistrador la de "verificar( .. .) la naturaleza inscribible del acto o contrato que,
contenido en el título, constituye la causa directa e inmediata de la inscripción".
Así, por ejemplo, la aprobación de un balance general de una sociedad anóni-
ma, si bien de suma trascendencia para la vida de dicha persona jurídica,
carecerá de mérito para acceder a la publicidad registra!, siendo un acto no
inscribible en el Registro de Sociedades; mientras que el aumento de capital
adoptado en la misma junta general de aprobación del balance, al acordarse la
de Sociedades, pues resulta relevante para terceros conocer el nuevo capital
social que determina los límites de responsabilidad frente a terceros.
El análisis del artículo 3 del RAS nos permite observar que no existen
mayores novedades en el mismo, determinando como inscribibles los siguien-
tes actos:
a) El pacto social que incluye el estatuto y sus modificaciones.
b) Las resoluciones judiciales o arbitrales sobre la validez del pacto social
inscrito; asimismo, las que se refieran a sus modificaciones o a los acuer-
dos o decisiones societarias inscribibles.
c) El nombramiento de los administradores, liquidadores o de cualquier re-
presentante de la sociedad, su revocación, renuncia, modificación o susti-
tución de los mismos; los poderes, así como su modificación y, en su
caso, su aceptación expresa. La revocación de sus facultades, la sustitu-
ción , delegación y reasunción de las mismas.
d) La delegación de las facultades y atribuciones de los órganos sociales.
e) La emisión de obligaciones, sus condiciones y sus modificaciones, así
como los acuerdos de la asamblea de obligacionistas que sean relevantes
con relación a la emisión, su ejecución u otros aspectos de la misma. Las
resoluciones judiciales o arbitrales que se refieren a la emisión de obliga-
ciones de una sociedad y los aspectos referidos tanto a ella como a los
acuerdos inscritos de la asamblea de obligacionistas.
f) Las resoluciones judiciales o arbitrales que afecten las participaciones
sociales.
g) La fusión , escisión, transformación y otras formas de reorganización de
sociedades.
h) La disolución, los acuerdos de los liquidadores que por su naturaleza sean
inscribibles y la extinción de las sociedades.
i) Los convenios societarios entre socios que los obliguen entre sí y para
195
 ----
Tn1tad0 d• oe,echO Mercantil
'edad siempre que no versen sobre las acciones y no te
con la _SOCI . •re ic· io de los derechos inherentes a ellas. ngan
--
por objeto e1eJe
•os que versen sobre participaciones o derechos que co
Los conveni . . d . rres-
J) pondan a los socios de sociedades distintas e 1as anónimas.
k) El establecimiento de sucursales y todo acto inscribible vinculado a és-
tas; y,
I) En general, tos actos o contratos que modifiquen el contenido de los a .
· · 'ó 1 1 1RG sien-
tos registrales o cuya 1nscnpc1 n prevean as eyes o e s.
El antecedente de este artículo del RAS es el artículo 25 del abro gado
·1 t · · •
Reglamento del Registro Mercant1 • cuyos errrnnos eran, principalmente . .
• 1 1 ·t t 1 1 • simi-
lares. se agrega una c1ausu a genera • no ex1s en e en a reg amentación b 0
gada, constttuida por •tos actos o contratos que modifiquen el contenido da ; -
asientos registrales•, que permite el acceso al Registro de actos distint e os
los en~ncia?Ds en los lite~~les anteri~res, pero que de alguna manera mº~1~
quen situaciones ya publicitadas reg15t_ralmente. Es evidente que este inci fi
se ha tomado del apartado 11 del articulo 94 del Reglamento del R .stso
Mercantil Español, cuyos términos reproduce casi literalmente. eg, ro
Destacable es, también, que se haya considerado expresamente la posi-
bilidad de la inscripción de los •convenios societarios• entre socios. Recorde-
mos que a los mismos se refiere el artículo 55 de la ~GS c~':'1º susceptibles de
ser contenidos por el estatuto de la sociedad. Esta d1sposic1ón debe ser obvia-
mente coocordada con el artículo 8 de la misma ley, que se refiere a la validez
ante la sociedad de "los convenios entre socios o entre éstos y terceros, a
partir del momento en que le sean debidamente comunicados". Ahora bien, si
PARA LA SOCIEDAD bastará que dichos convenios le sean comunicados, no
ocurrirá lo mismo frente a terceros ajenos a ella, para los cuales será indispen-
sable su previo registro que los dote de oponibilidad. En este mismo sentido se
pronuncia HUNDSK0PF EXEBIO'"' cuando señala que: "Una de las más im-
portantes innovaciones en la nueva Ley General de Sociedades es, en nuestra
opinión, la aceptación y reconocimiento por parte de las sociedades, de los
convenios celebrados entre socios, o entre éstos y terceros. En efecto, la nue-
va ley reconoce plena validez a los convenios suscritos entre socios o entre
éstos Yterceros, a partir del momento en que sean debidamente comunicados
a la soc~d Yregistrados por ésta, siendo exigibles en todo cuanto les sea
concemmente, con lo cual nuestro ordenamiento se ha equiparado con las
modernas legislaciones europeas•.
114) EXEBIO, Oswaldo "Derecho Comercial . Temas Societarios". Tomo 111. Universidad de
l..na FOlll)J dt Oes,,mio Edlorial. 11 ediáOn. Lima • Peni, 2000. Pág. 164.
_J
La Inscripción reglatral en el Registro de Sociedades
Obviamente, cuando dichos convenios se refieran a temas vinculados so-
bre las acciones, como p.ej., limitaciones a su transferencia, el registro en que
deberán inscribirse dichos convenios pactados conforme al artículo 101 de la
Ley General de Sociedades, no será el Registro de Sociedades, sino la Matrícu-
la de Acciones de la misma Sociedad. Por ello, en el artículo bajo comentario
del RRS, se hace la distinción expresa respecto a los convenios referidos a
dicha clase de títulos valores. Por lo demás, en el literal b) del artículo 4 del
RAS se alude expresamente al carácter no inscribible de "la transferencia de
acciones u obligaciones emitidas por la sociedad; los canjes y desdoblamien-
tos de acciones u obligaciones; la constitución, modificación o extinción de
derechos o gravámenes sobre las mismas, ni las medidas cautelares o sen-
tencias que se refieran a las acciones u obligaciones", cuya inscripción debe
efectuarse en la matrícula a que se contrae el artículo 92 de la LGS.
Finalmente, cabe indicar que la relación de "actos no inscribibles" que
contiene el artículo 4 del RRS, tiene carácter meramente enunciativo, siendo
su finalidad poner de manifiesto aquellos actos que generan mayor confusión
a los interesados respecto a la posibilidad de su inscripción en el Registro de
Sociedades. Es claro que los tres supuestos contenidos en este artículo son
meros ejemplos, entre otros muchos más, pues la regla general es el carácter
limitado de los actos inscribibles y no lo contrario.
V. PRINCIPIOS REGISTRALES APLICABLES AL
REGISTRO DE SOCIEDADES
Los principios registrales, dentro del sistema español, surgen de los deno-
minados "principios hipotecarios" referidos al Registro de la Propiedad, que es
el de mayor antigüedad y desarrollo en sus instituciones. Estos principios son
caracterizados por García García( 15> como "las notas o caracteres o rasgos
básicos del sistema". En nuestro Derecho Registra!, los principios registrales
se encuentran previstos en el Código Civil (arts. 2010 a 2017 del C.C.), que si
bien en principio se encuentran destinados a todos los registros jurídicos, es-
tán fundamentalmente diseñados para su aplicación en el Registro de la Pro-
piedad Inmueble, no siendo pacífica ni sencilla su adaptación a los Registros
de Personas Jurídicas y, en especial, el de Sociedades.
El RAS opta por reconocer la aplicación de los principios registrales con-
tenidos en el Código Civil y también desarrollados por el Titulo Preliminar del
NRGRP, al establecer una mera remisión a ellos en el artículo II de su Título
(15) GAACIA GAACIA, José Manuel. "Derecho Inmobiliario Registra! o Hipotecario". Editorial Civitas S.A.
Tomo l. Madrid, 1988. Pág. 534.
197
 Tratado de oerechO Mercantil
'derar necesario dictar regulaciones especia.
1
Preliminar. Sin emba:~~~ : 0c~: iedades, establece ~n artículos 111, IV, v y
les aplicables al Re~i~ rmas respecto a los Pnnc1p1os de Especialidad
VI de su Título _Prellmmart n~ucesivo y ntulación Auténtica. Ello implica que 1~
0
Fe Pública Reg~st ral, Trae . cipios de publicidad material, publicidad formal
remisión se re_ tiere
1
f ~t
p~~ón prioridad de rango y prioridad excluyente. Co~
esta regul~ción, ~is
rogación, leg_ahdad,r ~ i:ra ve~ se consagra en disposición normativa, la ple-
~rincipios Registrales al Registro de Sociedade~, pues ni
na aplicación ded soc·edades ni el abrogado Reglamento del Registro Mer-
la L~Y General :ada ~ respecto. Antes, su utilización en el Registro Mercantil
1 La rogatoria alcanza a todos los actos inscribibles contenidos en el título,
cantil regulaban secuencias de lo preceptuado en el artículo 2009 del Código
era una de 1as con d' .
.. t la aplicación de las normas del Có 190 sustantivo a los demás
Civil, respec o a .
registros regulados por leyes especiales.
En el presente trabajo solo vamos a proceder a comentar aquellos Princi-
pios Registrales especialmente reg~~ados por el RAS. R,especto a los d~más,
t ndiendo a razones de la extens1on del presente articulo, nos permitimos
:u~erir al lector la lectura de nu~str~ obra referid~ al Reglame~t~ Genera~ de
los Registros Públicos1161. Cabe 1nd1car que también el proce?1m1ento de ins-
cripción en el Registro de Sociedades ~n~uentr~ ~u regulación en el mismo
Reglamento General de los Regi~tros '.u~hcos, hm1t~n~ose el RAS a e~table-
cer requisitos especiales para la 1nscnpc1ón de los distintos actos refendos a
dicho registro, pero sin incluir un procedimiento distinto del establecido en la
reglamentación general.
Los principios registrales a los cuales el RAS ha hecho simple remisión,
tienen la siguiente formulación en el Nuevo Reglamento General de los Regis-
tros Públicos:
a) Publicidad material: "El Registro otorga publicidad jurídica a los diversos
actos o derechos inscritos. El concepto de inscripción comprende tam-
bién a las anotaciones preventivas, salvo que este Reglamento expresa-
mente las diferencie.
El contenido de las partidas registrales afecta a los terceros aun cuando
éstos no hubieran tenido conocimiento efectivo del mismo" (art. 1del Títu-
lo Preliminar del Reglamento General de los Registros Públicos concor-
dante con el art. 2012 del Código Civil).
b) Publl~ldad formal : "El Registro es público. La publicidad registra! formal
garant12a que toda persona acceda al conocimiento efectivo del contenido
de ~as partidas registrales y, en general, obtenga información del archivo
reg1stral.
(16) GONZALEs LOU, Jotge Luis. "Comentarlos al Nuevo Reglamento General de los Registros Públioos •.
Gaceta Jurfdca S A 1 edición. l.ím¡ . Peni, 2002.
1
198
La Inscripción registra! en el Registro de Sociedades
El personal responsable del Registro no podrá mantener en reserva la
información contenida en el archivo registra!, salvo las prohibiciones ex-
presas establecidas en los Reglamentos del Registro" (art. 11 del Título
Preliminar del Reglamento General de los Registros Públicos concordan-
te con el art. 2012 del Código Civil).
e) Principio de rogación: "Los asientos registrales se extienden a instancia
de los otorgantes del acto o derecho, o de tercero interesado, en virtud de
título que conste en instrumento público, salvo disposición en contrario.
salvo reserva expresa.
Se presume que el presentante del título actúa en representación de los
sujetos legitimados para solicitar la inscripción" (art. 111 del Título Prelimi-
nar del Reglamento General de los Registros Públicos concordante con el
art. 201 Odel Código Civil).
d) Principio de legalidad: "Los registradores califican la legalidad del título
en cuya virtud se solicita la inscripción. La calificación comprende la veri-
ficación del cumplimiento de las formalidades propias del título y la capa-
cidad de los otorgantes, así como la validez del acto que, contenido en
aquél, constituye la causa directa e inmediata de la inscripción.
La calificación comprende también la verificación de los obstáculos que
pudieran emanar de las partidas registrales y la condición de inscribible
del acto o derecho. Se realiza sobre la base del título presentado, de la
partida o partidas vinculadas directamente a aquél y, complementariamente,
de los antecedentes que obran en el Registro" (art. V del Título Preliminar
del Reglamento General de los Registros Públicos concordante con el art.
201 Odel Código Civil).
e) Principio de legitimación: "Los asientos registrales se presumen exac-
tos y válidos. Producen todos sus efectos y legitiman al titular registra!
para actuar conforme a ellos, mientras no se rectifiquen en los términos
establecidos en este Reglamento o se declare judicialmente su invalidez"
(art. VII del Título Preliminar del Reglamento General de los Registros
Públicos concordante con el art. 2013 del Código Civil).
f) Principio de prioridad de rango: "Los efectos de los asientos registra-
les, así como la preferencia de los derechos que de éstos emanan, se
retrotraen a la fecha y hora del respectivo asiento de presentación (art. IX
del Título Preliminar del Reglamento General de los Registros Públicos
concordante con el art. 2016 del Código Civil).
g) Principio de prioridad excluyente: "No puede inscribirse un título in-
compatible con otro ya inscrito o pendiente de inscripción, aunque sea de
igual o anterior fecha" (art. X del Título Preliminar del Reglamento General
de los Registros Públicos concordante con el art. 2017 del Código Civil).
199
 rratado de oerecho Mercantil
La Inscripción reglatral en el Registro de Sociedades
I0 DE TRACTO SUCESIVO
VI. EL PRI NCIP .
incipios registrales recogidos en nuestra legislación la SUNARP, no es menos cierto que el Principio de Tracto Sucesivo, aun elimi-
Dentro de Ios Pr . e 1- f , se nadas las referencias del ordenamiento civil abrogado ("enajenación", "domi-
. •p,
·o de Tracto Sucesivo o on inuo, cuya ormulación n
ncuentra el Pnnc1 1 eód· e · ·¡ d or- nio", etc.), nació diseñado para el Registro de Propiedad Inmueble, por lo que
e . á v,·sta en el artículo 2015 de 190 1v1 e 1984, bai·o el .
mat1va est pre . .. . h . s1- su "adaptación" a los Registros de Personas (Registro de Sociedades, Regis-
. xt . "Ni·nguna inscripc1on, salvo la primera, se ace sin que esté in
gu1ente te o. .. p d . s- tro de Personas Jurídicas, Registro de Sucesiones Intestadas, etc.), no puede
. . •ba el derecho de donde emane . ue e apreciarse que a d'f
cnto o se 1nscn . . .. d ,,Tl . • 1e- realizarse en forma mecánica, sin analizar la verdadera naturaleza de los ac-
. d rtículo 1045 del Código e1v1I deroga o , no restringe su aplicac·ió
renc1a eI a . • • .. • • n tos inscribibles y si en verdad nos encontramos frente a la "inscripción del
ransmisión o gravamen, m 1a inscr1pc1on previa tiene que ref
a 1os casos de t ·ó • . e- derecho de donde emana" o, más bien, ante casos de "inscripción del acto
. dominio O propiedad. Esta nueva formu 1ac1 n 1eg1slat1va ha llevado
nrse a1 . ,1si f. d a previo necesario o adecuado para su extensión".
diversos autores, como Guevara Manrique , ª.a 1_r~ar que ada la amplitud
de la redacción del artículo 2015 del e .e., el Pri~c1p10 de Tracto Sucesivo no Al respecto, precisa Esturillo López!20> que "este principio nació dentro del
se orienta exclusivamente al Registro de la Propiedad Inmueble, sino que re- campo inmobiliario registra!, como consecuencia lógica de su denominación.
sulta de observancia en otros Registros como el de Mandatos, Testamentos Pensemos que, gramaticalmente, la palabra tracto significa 'espacio que me-
Mercantil, entre otros. Empero esta afirmación, en principio aceptable, no re~ dia entre dos lugares' y la de sucesivo, el hecho de que una 'cosa siga a la
sulla exacta en todos los casos, como demostraremos en los puntos siguien- otra'. Solo en el Registro de la Propiedad, que tiene por objeto la inscripción de
tes, puesto que no debe confundirse tracto sucesivo con la necesidad de la bienes, podría darse esa concatenación sucesiva de actos relacionados con
inscripción del acto previo. una misma cosa, al contrario de lo que sucede en el Registro Mercantil propia-
mente dicho, que por tener como materia inscribible, hechos. actos y relacio-
Roca Sastre señala que el principio de tracto sucesivo o de continuidad nes jurídicas, no puede producirse aquella con el mismo significado y naturale-
registra! consiste en "procurar que el historial jurídico de cada finca inmatricu- za". Continúa dicho autor precisando que "la previa inscripción es un requisito
lada, respecto de los sucesivos titulares registrales que hayan adquirido el indispensable exigido por la mecánica propia de la llevanza del Registro Mer-
dominio o derechos reales sobre la misma, figure con plena continuidad ininte- cantil por el sistema de hojas personales. Es obvio que de no constar con
rrumpida en su encadenamiento de adquisiciones sucesivas, cronológicamen- primera inscripción del sujeto al que la hoja se refiere, se crearían situaciones
te eslabonadas las unas con las otras, de modo que el transferente de hoy sea anómalas y monstruosas. Pero, sobre todo, estimamos que la previa inscrip-
el adquirente de ayer y que el titular registra! actual sea el transferente de ción de los sujetos, así como la de los actos principales que se modifican o
mañana"l' 91 • extinguen por otros posteriores, o la de los administradores o apoderados, son
exigencias todas ellas impuestas por la necesaria conexión que debe existir
El Nuevo Reglamento General de los Registros Públicos enuncia este entre un acto y la situación jurídica en que se apoya( ...). Luego, es indudable
principio registra! en el artículo VI de su Título Preliminar de la siguiente mane- que la exigencia de previa inscripción en todos los casos contemplados en
ra: "Ninguna inscripción, salvo la primera, se extiende sin que esté inscrito o se nuestra normatividad vigente en materia registra! viene determinada por la
inscriba el derecho de donde emana o el acto previo necesario o adecuado necesidad de conexionar el acto que se pretende inscribir con el sujeto que
para su extensión salvo disposición en contrario". Se nota, inmediatamente, según el registro debe realizarlo o con aquel otro acto inscrito que se trata de
que se agrega a la formulación establecida por el artículo 2015 del Código modificar o extinguir. En suma, son supuestos de legitimación y no de tracto
Civil, la expresión "o el acto previo adecuado para su extensión". Ello obedece sucesivo, aunque externamente aparezca en los libros del Registro una inscrip-
a que, como señalamos precedentemente, si bien la amplitud de la formula- cion como antecedente previo de la otra. Entre éstas existe, efectivamente, con-
cion del artículo 2015 del e.e. permite sostener que el Principio de Tracto catenación de asientos, pero no el encadenamiento de transmisiones de carac-
Sucesivo puede aplicarse a todos los Registros Jurídicos de competencia de ter real, que es lo propio del principio de tracto sucesivo rectamente entendido".
De ello se desprende que el NRGRP, en el afán de establecer normas
aplicables a todos los Registros Jurídicos, ha incluido dentro de la definición de
(17) Mfculo 1045delCódigoCivilde 1936. tracto sucesivo, la de inscripción de acto previo, entendiendo que si bien exis-
'Nlll!ltQ inscripción, aalYo la primera de dominio, se hará sin que esté inscrito o se insai>a el derecho de
donde emana la transmisión o gravil\'Jlln".
(l8) GUEVARA MANRIOUE, Rubén. "Derecho Registra!". Ediciones FECAT. 41 edición. Urna, 1990. Pág. S4.
9
(! ) ROCA SASTRE, Ramón YROCA SASTRE MUNCUNIL, luis. "Derecho Hipotecario". e• edición. casa (20) ESTURILLO LÓPEZ, Antonio. "Estudio sobre la legislación sobre el Registro Mercantil • Práctica de la
Edtorial Bosch. Tomo 11. Ban:elona, 1996. P~. 87. Legislación Mercantil Societaria". Centro de Estudios Registrales. Madrid, 1992. Págs. 307. 316-317.
200 201
 Tratado de oerecho Mercantil
La Inscripción registra! en el Registro de Sociedades
otro anterior inscrito, no se exige que el der
. tre un acto co n . .. d e.
tirá conex1 6n en As,· p eJ· en la const1tuc1on e una sociedad s
e del otro. , · ·• . . e Otra manifestación del requisito de inscripción de acto previo en el RAS
cho de uno em~n . de actuación de los diversos órganos societarios, a la
establecen los limite:e los actos que ellos efectúen y pretendan inscribir, Pero se encuentra contenido en el artículo 48 del citado reglamento. En el mismo se
que deberán adecuar derecho de éstos emana del acto constitutivo. establece que "los acuerdos adoptados en junta general con participación de
no podrá sostenerse que eI acciones representadas en certificados provisionales o en anotaciones provi-
sionales en cuenta, solo se podrán inscribir después de haberse inscrito el
. 1 se orienta el artículo V del Título Preliminar del Re.
fd
aumento de capital que originó la emisión de tales acciones". Ello implica que
En el mis;: ~s~~0 d~ Sociedades, que, ~unque continúa ~tilizando la de.
glament~ de~e tr~cto sucesivo, en su redacción recoge más bien la exigencia hasta que se inscriba el correspondiente aumento de capital, lo que recién
nomi~ació~ . . d I acto previo necesario o adecuado para la extensión de la permite la emisión de los certificados definitivos de acciones, en armonía con
. . . e que concuerda, casi· te xt uaImen te, con Io establ ecido
de la 1nscnpcion · en el artículo 87 de la LGS, no podrán inscribirse los acuerdos que se adopten en
nueva inscnpci6n. 10 GAP S f 1 "ó 1 · · función de una nueva participación accionaria derivada de un aumento de ca-
. VI d Título Preliminar del NR . u ormu ac1 n es a siguiente·
el articulo e I t 1
es previstas en las leyes o en es e reg amento, para ex-
• pital aun no registrado. Sin embargo, es conveniente señalar que la inscripción
"Salvo las excepelon • · · ·b del aumento de capital puede efectuarse conjuntamente, es decir en el mismo
tender una m . scripción se requiere que. esté
. ,. mscnto o se mscn a el acto previo título que el que contiene los acuerdos correspondientes, no debiendo enten-
necesario o adecuado para su extens1on . derse literalmente el término "previa inscripciónª. Así lo ha entendido el Tribu-
recisión establecida por el RAS es la eventual existencia de excep- nal Registra! de la ORLC, en la Resolución Ng 039-2000-ORLC/TR de 17 de
01 ra p · · · · d t · E febrero del 2000.
•• principio de tracto sucesivo o 1nscnpc1on e ac o previo. stas excep-
ciones a1 . • · ·ó d 1 •
ciones no se refieren, obviamente, a 1~ pnm~~a mscnpc1 e a sociedad, sino
a supuestos particulares en que por ~1s~os1c1ones e~pec1ales,_resp_ecto .ª ~na
partida registra! ya abierta con antenondad, no sera _n_ecesana la. msc~1~1ón VII. EL PRINCIPIO DE ESPECIALIDAD
del acto previo aparentemente adecuado para p..erm1tir 1~ nueva m~cr!pc1ón.
El Principio de Especialidad es llamado también Principio de Determina-
Así, p. ej., el artículo 5 del RAS establece c~m~. excepciones al Pnnc1pio de
ción. Como manifiesta García García121>"este principio está relacionado con la
Tracto Sucesivo•, la inexigibilidad de la inscnpc1on de los acuerdos o decisio-
necesidad de dar claridad al Registro. A éste solo deben acceder situaciones
nes societarias registrables, para la inscripción de las resoluciones judiciales
jurídicas que estén perfectamente determinadas, porque solo de ese modo se
referidas a dichos acuerdos (p.ej. impugnación de acuerdos, nulidad de los producirá una plena claridad en los asientos que es la base de la publicidad
mismos, etc.). De igual modo, para la inscripción de resoluciones judiciales o registra! y del fomento del crédito territorial." Continúa indicando que "la nece-
arbitrales que afecten las participaciones sociales tampoco será necesaria la sidad de determinación de situaciones y relaciones jurídicas inscribibles se
previa inscripción de los acuerdos o decisiones correspondientes que han dado predica respecto a la finca, al titular, al derecho real y al acto jurídico, todo lo
lugar a las mencionadas resoluciones. cual constituye un conjunto de manifestaciones del principio de especialidad o
determinación." Es decir es un haz de situaciones que deben ser publicitadas
Cabe mencionar que si bien es saludable que se hayan precisado estas
del modo más adecuado para que tanto el propio registro como el tercero
·excepciones·, a fin de cautelar más adecuadamente la exactitud y efectos
puedan utilizar la información y derechos en ella generada para la satisfacción
sustantivos que emanan de la publicidad registra!, consideramos que en es- de sus intereses. El mismo autor nos precisa las distintas manifestaciones del
tricto, no constituyen excepciones al tracto sucesivo o a la inscripción del acto Principio de Especialidad, señalando que en relación con la finca, se aplica el
previo, puesto que en nuestro criterio, nunca debió haberse exigido la previa sistema de folio real, mediante el cual se asigna a cada finca un historial separa•
inscripción del acto o acuerdo materia de impugnación judicial, habida cuenta do, en la cual se señalarán los derechos y actos reales relativos a la finca. En
que la publicidad negativa que emana, por ejemplo, de la anotación de deman- cuanto al titular registra!, el principio de especialidad se manifiesta en la necesi-
d~ de impugnación de un acuerdo de junta general de accionistas, no requiere dad de determinación del mismo con todas sus circunstancias. Con referencia a
(rn es presupu~to necesario o adecuado) para su extensión que el acuerdo se la especialidad en relación con el acto jurídico, manifiesta que es una necesidad
encuentre _ registrado. Inclusive, una interpretación más adecuada del artículo de que conste con claridad en el documento la clase de acto realizado.
86 ~1- recientemente abrogado Reglamento del Registro Mercantil hubiera
per_mitrdo consta~r que ~o se exigía expresamente que para extender las ano-
taciones preventivas de impugnación de acuerdos societarios el acuerdo se
(21) GARCÍA GARCÍA, José Manuel. "Derecho Inmobiliario Registra! o Hipotecario". Editorial Civitas SA
encontrase previamente inscrito. ' Tomo l. Madrid, 1988. Pág. 552.
202
203
 Tratado de oerecho Mercantil
. d las nociones del Principio de Especialidad 0
como puede ap~eciarse e dentemente, tanto el artículo IV del Título Pre-
Determinación enunciadas Precrt'eculo 111 del Título Preliminar del RRS, no regu.
RP como e1a 1 • ·f ·
liminar del NRG doctrinalmente considerados como m~rn estaciones del
lan todos los aspectos . ntan a regular el elemento (bien o persona) en
· que solo se .oneán las partidas registra
· 1es. La ex1genc1a
· · de la ex-
mismo, sino
función del cu~I se orJaniz:a origen al acto o derecho inscrito se encuentra
presión de la ca~sa ~~edel NRGAP, mientras que los requisitos generales
prevista en el articulo s asientos registrales, encuentran su regulación en el
I
qu~ deben con st ª~e;p en los diferentes reglamentos es~ecíficos aplicables
articulo 50 del NA . tros contormantes del Sistema Nacional.
a cada uno de los reg1s
. . de otros Principios Registrales, el Principio de Especialidad 0
A d1ferencIa
. .. se encuentra previsto en el Co· d.190 c·1v1·1, por 1o que, hasta la
Determ1nacIon n0 . • •
. . d NRGRP se encontraba disperso en 1as normas espec1f1cas de
vIgencIa . teI en sus 'distintas manifestaciones
. · de fo1·10 rea 1o persona 1(Regla-
cada regIs ro, . .. 1 d 1 1 · ·
mento de las Inscripciones, AmphacI~n del Reg ª'.11ento e .as nscnpc1ones,
to de Inscripciones del Registro de Propiedad Veh1cular, Reglamen-
Aeg Iamen . • t asientos de inscripción en discos ópticos u otros sistemas de almacenamiento
to del Registro de Testamentos, et~)- No ex1st1a, en onces, una reg 1a general
aplicable a todos los Registros Jund1cos.
· Por esta razón, el NRGRP ha establecido una regla general en el sentido
de que cada bien o persona jurídica de~er~inará 1~ apertura .de una partida
registra!, lo que corresponde a los dos p~1nc1~al~s sistemas ~x1stentes: el folio
real y el folio personal. Obviamente, las inscripciones posteriores a la inmatri-
culación del bien o persona jurídica deberán practicarse en la misma partida
registra! donde se extendió la primera inscripción.
La formulación del mencionado principio para el Reg istro de Sociedades,
contenida en el artículo 111 del Título Preliminar del RAS , establece que: "Por
cada sociedad o sucursal se abrirá una partida registra! en la que se extenderá
su primera inscripción, que será la del pacto social o la decisión de establecer
una sucursal, respectivamente, así como los actos inscribibles posteriores re-
lativos a cada una. Para la inscripción del primer poder otorgado por una socie-
dad constituida o sucursal establecida en el extranjero se abrirá una partida
registra!, en la que se inscribirán todos los poderes y demás actos que los
modifiquen o extingan".
Es indudable que nuestro RRS ha optado por el sistema de folio personal,
en ~I cual e_s la persona jurídica societaria la que determina la apertura de una
p~rtida ~egistra_ l, en la cual deben inscribirse todos los actos de la misma, a
diferencia del sistema utilizado en el Registro de la Propiedad Inmueble en el
que se em Pea1 e1sistema
· • real, por el cual es el bien el que da origen
de follo • a
1ª apertura de un~ partida registra! específica. El artículo 2 del abrogado Re-
g1amento del Registro Merean1-I1 de 1969 tamb1en . . consagraba dicho sistema
204
La inscripción registra! en el Registro de Sociedades
("Por cada comerciante o sociedad se abrirá una hoja especial. .") sin ef~c-
tuar precisión alguna respecto al caso de las sucursales o podere~ de s?c1e-
dades constituidas en el extranjero, que también determinan la ex1stenc1a de
una partida diferente, sin que pueda exigirse la previa inscripción de la consti-
tución de la sociedad.
Nótese que se ha utilizado el término "partida registra!" y no ficha u hoja,
puesto que el artículo 6 del NRGRP ha establecido esta denominación como
concepto unitario para todos los casos. La partida registra! es la unidad de
registro, conformada por los asientos de inscripción organizados sobre la base
de la determinación del bien o de la persona susceptible de inscripción; y, ex-
cepcionalmente, en función de otro elemento previsto en disposiciones espe-
ciales. Como también puede apreciarse, la definición de partida registra! pres-
cinde por completo de la referencia a libros y folios que contenía el Reglamen-
to de las Inscripciones o a fichas movibles que se encontraba prevista en la
Ampliación del Reglamento de las Inscripciones. Esto en razón de que actual-
mente las oficinas registrales han reemplazado el soporte físico de las inscrip-
ciones por medios informáticos de almacenamiento magnético, constando los
de datos, con especiales condiciones de seguridad. Al respecto, a través de la
Resolución del superintendente nacional de los Registros Públicos Nº 124-97-
SUNARP de fecha 15 de agosto de 1997, se autorizó la sustitución de los
asientos extendidos por medios físicos, por el sistema de microarchivos deno-
minados "asientos electrónicos" generados mediante la captura de huella digi-
tal de los registradores, al que comúnmente se conoce como Sistema de Infor-
mación Registra!, sistema que fue inicialmente aplicado por la Oficina Regis-
tra! de Lima y Callao; y que, actualmente, de conformidad con la Resolución
del superintendente nacional de los Registros Públicos Nº 096-2001-SUNARP/
SN de fecha 6 de abril del 2001 se ha implementado en todas las oficinas
registrales a nivel nacional.
Para efectos de clarificar el concepto de "partida registra!", resulta nece-
sario precisar el desarrollo de las distintas técnicas de inscripción utilizadas
por el registro hasta la actualidad. La partida registra! se encuentra compuesta
de diversos asientos, referidos a los diversos actos jurídicos inscribibles, los
cuales, si el primer asiento es de alguna antigüedad, pueden haberse extendi-
do en uno o más folios de un tomo (técnica original adoptada por el registro
desde su creación) o bien en fichas (sistema adoptado por la Ampliación del
R~glamento de las Inscripciones expedido en el año de 1970) y no a través de
asientos electrónicos que recién vienen aplicándose desde 1997 en la Oficina
Registra! de Lima y Callao, y en algunas otras oficinas registrales a nivel nacio-
nal. Sin embargo, sin importar la técnica de inscripción que se utilice en los
a~ientos posteriores al primero, todos ellos (bien extendidos en nuevas fojas del
mismo tomo, en ficha o en partida electrónica) constituyen una continuidad de
205
 Tratado de Derecho Mercantil
0
los actos referidos al mismo bien o persona (Sistema de Folio Real p
de acuerdo con el Registro especifico al que corresponda la partida.) ersonal
VIII. EL PRINCIPIO DE FE PÚBLICA REGISTRAL y
EL TERCERO REGISTRAL SOCIETARIO
El Principio de Fe Pública Registra! se encuentra reg~lado por el artículo
del Código Civil, el cual encuentra su _an~e_ cedente directo en el artículo
2014
de la Ley Hipotecaria Es~a~~la. Este prrnc1p1?·. ~: acuerdo con 1~ Exposi-
34
ción de Motivos del Código C1v1I, protege la adq~1s1c1on efe~tuada a ~1tulo one-
con buena fe de quien aparece en el Registro como titular regrstral, que
ros 0 Y . .t t d d. h
se inscribe en el registro, contra c~alqu~er rn en º. e e~ervar . 1c a ad~ui~ición,
que se fundamenta en causas no rnscrrtas -~ntes . ?1ferenc1a del Prrncrpio de
Legitimación, que solo brinda una prot:ccron ~ro_v1s_ 1o~al y por ta~to suscepti-
ble de declaración de invalidez ante el organo iurrsdrccronal, el Principio de Fe
Pública Registra! confiere una garantía de seguridad jurídica plena a quien,
bajo la fe que emana del Registro, adquiere un derecho. De este modo, el terce-
ro registra! no será afectado por los vicios que pudieran tener los asientos registra-
les, pues la aplicación de este principio determinará que su derecho sea inata-
cable y no susceptible de ser privado de eficacia, aun en sede jurisdiccional.
Entrando directamente al análisis de este principio, debemos precisar los
requisitos exigidos por nuestro ordenamiento civil vigente para que éste resul-
te aplicable, que son los siguientes:
a) Debe existir un acto o derecho inscrito que contenga una causa de nuli-
dad, anulabilidad, rescisión o resolución , que publicita la existencia de
facultades dispositivas para el transferente de un derecho.
b) Un tercero, respecto a la relación jurídica que da lugar al acto o derecho
inscrito, adquiere un derecho mediante un acto plenamente vá lido.
c) La adquisición del tercero se efectúa a título oneroso.
d) ~o ~eb~n constar en el Registro las causas que determinen la invalidez o
mefrcacra del acto o derecho inscrito.
e) El tercero debe proceder con buena fe.
1) El tercero deb e ·mscn·b·rr su derecho en el Registro correspondiente.
Civil Cselaro es que es~~s _requisitos planteados por el artículo 2014 del Código
encuentran drngrdos al te •
registro de bienes (inm bl rcero regr st r.al que adquiere un derecho en un
ñado para su aplicación:re~:aºa~~e~les regrS tra_ bles), no encontrándose dise-
caso de las participaciones en la egi_ Stro de S~cr~dades, en el cual, excepto el
s sociedades drstrntas de las anónimas, no se
206
La Inscripción registra! en el Registro de Sociedades
inscriben titularidades dominiales, sino situaciones jurídicas relevantes, que
otorgan oponibilidad a las mismas y determinan imputaciones y límites de res-
ponsabilidad.
En este sentido, en el artículo 8 del Reglamento del Registro Mercantil
Español se establece una modalidad especial del Principio de Fe Pública, bajo
la formulación siguiente: "la declaración de inexact itud o nulidad de los asien-
tos del Registro Mercantil no perjudicará los derechos de terceros de buena fe
adquiridos conforme a Derecho. Se entenderán adquiridos conforme a Dere-
cho, los derechos que se adquieran en virtud de acto o contrato que resulte
válido con arreglo al contenido del Registro". En nuestro ordenamiento nacio-
nal vigente, el artículo IV del Título Preliminar del RRS ha efectuado la adapta-
ción del Principio de Fe Pública Registra! al Registro de Sociedades, precisan-
do que: "La inexactitud o invalidez de los asientos de inscripción del registro no
perjudicará al tercero que de buena fe hubiera celebrado actos jurídicos sobre
la base de los mismos, siempre que las causas de dicha inexactitud no cons-
ten en los asientos registrales".
Como apunta Esturillo, este tercero del Reg istro de Sociedades es dife-
rente al tercero de los Reg istros de Bienes, puesto que "Indudablemente, su
concepto no puede coincidir con el que tiene dentro del campo inmobiliario, en
el que, después de una copiosa literatura defensora de las más diversas inter-
pretaciones, se llegó a clarificar el problema, considerando como tal al adqui-
rente considerado fuera de su condición de parte frente a un determinado con-
tenido registra/. Se trata, por tanto, de un tercer adquirente considerado frente
al contrato, anulado y resuelto, y del que fue parte el transmitente y no aquel.
( .... )Para nosotros, el tercero de buena fe, al que se refiere el art. 20.2 del C.
de C. y 8.1 del RRM no tendrá necesidad de inscribir su derecho en el RM para
gozar la protección que tales preceptos le brindan. Ni tampoco será exigible
que el derecho concretamente adquirido por el mismo se halle previamente
inscrito a nombre del sujeto que lo transfiere . El registro se lleva por personas
y no por bienes, por cuanto que éstos no se inscriben . Estimamos, pues, que el
aludido tercero es toda persona que ha entrado en relación jurídica con alguno
de los sujetos inscritos y que, confiado en lo que publica el RM, sobre él realiza
un acto o contrato cualquiera afectante a sus intereses, aunque éste, por las
22 l.
razones dichas, no sea inscribible"C
Personalmente, consideramos saludable e importante que el RRS haya
"adaptado" el Principio de Fe Pública Registra! al Registro de Sociedades, lo
que permitirá proteger a aquellos que realizan actos no inscribibles con dicha
clase de personas jurídicas (p. ej. un contrato de obra) , a los efectos de que no
sean perjudicados por causas de inexactitud reg istra! (entendida en sentido
(22) ESTURILLO LOPEZ, Antonio. Op cit Págs 274-275
207
 Tratado de oerecho Mercantil
. . . ada orla invalidez, ineficacia o_error e~ lo pu~licitado). Sin
amplio como ongin d _P de observarse que no existe a nivel legislativo (ni e
em barg O, no puede e1ar . . e·Iv1·¡ u ora
. d des ni en el Cod1go t norma con Jerarqu
. ·n
la Ley General de Sacieatfvo que habría sido "reglamentado" por el Reglame~ª
de ley) el p~ecepto ~ºrn:1edades. Ello, en nuestro concepto, podría originar u ·
to del_Regi~tro d~e :~plicación a nivel jurisdiccional , en la medida en que la;
cuestionamie~~o d se encuentran establecidas por la Ley General de Socieda-
causas den~ 1 ~ - . siendo discutible que a nivel reglamentario puedan esta-
1
des Yel Código . ,vie,s al efecto de "arrastre" de la declaración de nulidad de
blecerse excepcion
. . cr·
itos respecto a los celebra dos so b I b
re a ase de los mis-
diversos actos .,ns ente correspondía
• a una reforma ¡eg,s· 1at,va,
•
que podría dar-
mos Esto, obvIam , . G .
· . delco·digo Civil como en la propia Ley eneral de Sociedades
se tanto a rnve 1
en la ue ya existen disposiciones que protegen a lo~ terceros, pero solo respec-
to a d~terrninados supuestos (nulidad del pacto social o del estatuto)1 1_
23
uentemente, este nuevo tercero societario se diferencia del pre-
ConSec 1 . . t
visto en el artículo 2014 del Código Civil en o s,guien e:
a) El acto celebrado entre la socie~~d y el terce:o _no req~ iere ser a título
oneroso para merecer la proteccIon de la fe publica reg istra!. Alternativa
adoptada por el RAS que consideramos _errónea, pu~s_to qu_ e _no guarda
armonía con el principio general establecido por el Cod1go C1v1I, que solo
protege al tercero que actúa a título oneroso, sin que exista fundamento
alguno para otorgarse mayor protección.
b) El acto celebrado entre la sociedad y el tercero no requ iere (por regla
general) ser inscrito. Sin embargo, resulta evidente que cuando el mismo
se refiera a la adquisición de un derecho sobre un bien inscrito en un
registro de bienes (p.ej. compraventa de un inmueble o un vehículo auto-
motor), el tercero adquirente deberá proceder a su inscripción, a los efec-
tos de acogerse al principio de fe pública registra! reg ulado por el artículo
2014 del Código Civil.
Respecto a los demás elementos integrantes del principio de fe pública
registra!, sí resultan aplicables los demás requisitos antes mencionados referi-
dos a la necesidad de la validez del acto celebrado por el tercero, la buena fe
con que éste proceda y la falta de constancia de las causales de inexactitud en
el registro.
. P~ra pr~sentar un ejemplo respecto a la aplicación práctica de este princi-
pio registra! incorporado en el RAS, podríamos enunciar el caso de una sociedad
(23) Articulo 37 de la LGS .. Terceros de buena fe
i.a sentencia firme que declara la nulidad del paclo social o del eslaluto no surte efectos frente a los
terceros de buena te·
208
La inscripción registra! en el Registro de Sociedades
que se obliga frente a un banco, como fiadora solidaria de una operación de
endeudamiento otorgado a favor de una empresa vinculada a ella. El contrato
es suscrito por el gerente general de la sociedad que otorga la fianza, cuyo
nombramiento figura inscrito y vigente en el Registro de Sociedades. Poste-
riormente, se declara judicialmente la nulidad de la junta general de accionis-
tas en la que fue designado el gerente general de dicha sociedad, por defectos
existentes en su convocatoria. Ello, aplicando estrictas categorías de nulidad
civil, implicaría que el gerente general que concertó dicha operación con la
entidad bancaria, dado el efecto retroactivo de la declaración de nulidad, nun-
ca hubiera tenido facultades para otorgar fianza en representación de la socie-
dad frente a la entidad del sistema financiero, por lo que, de no existir la protec-
, ción al tercero registra! societario, la sociedad fiadora podría alegar que dicho
acto jurídico no la obliga contra el banco. Bajo este supuesto, la entidad del
sistema financiero podría ampararse en el hecho de que si bien el nombra-
miento del gerente general adolecía de causales de nulidad, dicho vicio no
puede perjudicarlo, por haberse encontrado dicho nombramiento inscrito y vi-
gente a la fecha de la celebración del contrato, amparándose en el principio de
fe pública reg istra! previsto en el artículo IV del Título Preliminar del RRS .
Sin embargo, en el mismo ejemplo a que se refiere el párrafo precedente,
si es el contrato mismo (fianza solidaria) celebrado por el tercero (banco) con
la sociedad, el que presentase una causal de nulidad, no resultaría aplicable la
protección del principio registra! bajo comentario, habida cuenta que no es el
acto jurídico celebrado por el tercero que contrata con la sociedad el que debe
encontrarse sujeto a hechos que determinen su invalidez o inexactitud, sino
que más bien el acto celebrado por el tercero debe ser VÁLIDO mientras que
los asientos registrales sobre la base de los cuales contrató el tercero son los
que pueden presentar causas de inexactitud o invalidez.
Resulta innecesario referirnos a las causas que pueden determinar la nu-
lidad, anulabilidad, rescisión o resolución de los actos inscritos en la partida de
la sociedad a partir de los cuales contrata el tercero, toda vez que la regulación
de dichos supuestos se encuentra en la legislación sustantiva pertinente (civil ,
societaria, etc.) siendo más bien recogidos por nuestro sistema registra!. Em-
pero, quizás sea necesario precisar que dentro de la formulación de "nulidad",
también debería considerarse comprendida la "falsedad" del título causal de la
inscripción anterior a la del tercero, bien sea ésta total o parcial, incluyéndose,
también, la suplantación de las partes contratantes. Asimismo , la privación de
los efectos del título precedente podría originarse en supuesto de nulidad del
asiento (nulidad formal) prevista en el artículo 94 inciso c) del NRGRP o en un
error en los asientos registrales (art. 90 del NRGRP) . Al respecto, García Gar-
cía expresa que: "La tercera de las ideas-clave o ideas-fuerza del art ículo 34,
es la existencia de una inexactitud registra! (.. .). Ahora bien, se trata de una
inexactitud derivada solamente de "nulidad o resolución del título precedente
209
 Tratado de Derecho Mercantil
La Inscripción registra! en el Registro de Sociedades
lva' dice el art. 34 LH), a las cuales puede equipar-
al del tercero ('anule~ redsudee nulidad de la inscripción previa a la del tercero del Principio de Fe Pública Registra! prevista en el artículo VIII del Título Preli-
se la .1nexac11·1ud deriva( rta 1 · (
31 LH) 0 por errores de a misma art. 220 LH), 0 a
'
minar del NRGRP y en el artículo IV del Título Preliminar del RAS, prescinde
por defectos de !orma a -~ al del tercero ((art. 40.d) LH]"<2•>. de la utilización del término "después", precisamente a los efectos de evitar
la falsedad del titulo prev1 interpretaciones como la antes mencionada.
ue puede ser declarada la invalidez o ineficacia
Aespacto al momento en q •
. d tercero algún autor nacIona 1, tomando fundamental- Un tema más difícil es el referido a la buena fe del tercero. Algunos auto-
I
del título antenor a1. e de Lac~z Berdejo respecto al artículo 34 de la LH ha res<21> la dividen en buena fe "subjetiva" (desconocer la inexactitud del Regis-
men te los comentanos
. .
.
. "Como puede apreciarse de una lectura detenida de la
. ,
tro) y buena fe objetiva ("que en el Registro no consten las causas de inexac-
·sado lo sIguIen1e. . titud"). En nuestro criterio, dicha división es artificiosa , pues la buena fe exigida
preci . . del tercer adquirente de buena fe Y a titulo oneroso se
rma la proteccIon . ,
no ' b d·nada a que inscriba su derecho, AUNQUE DESPUES se al tercero no es más que una: la que deriva del desconocimiento de la inexac-
encuentra su or I p . titud reg istra!, siendo que la inexistencia registra! de las causas de inexactitud,
cinda resuelva el título del transferente. ero, ¿q_
O
ue ocurre si AN-
anule, res t ero i·nscriba el título del transferente ya ha sido anulado? De es solo un elemento que servirá como presunción juris tantum para aliviar la
TES que eI ere , . . . carga de la prueba respecto a la existencia de dicha buena fe. La buena fe que
. etación literal debemos concluir que en este ultimo caso, el tercero
una m1erpr ará garantizado por la fe pu' bl.Ica .t 1
reg1s ra, ya que e 1 rt ' 1o 201 4
a 1cu se exige al tercero no implica una verificación de la exactitud del contenido de
no se enco ntrcuando la nulidad (u otra causa I que decre te 1a ·1nef'1cac1a · del acto las inscripciones, ni una creencia especial respecto a ella, sino, simplemente,
so 1o pro tege . . .. 1 11 1·1· 1 . el desconocimiento de las causas que motivan su inexactitud. De ello, siguien-
• ·d·co) ha sido posterior a la inscnpcIon de tercero, Ypor e o u I iza os termi-
1
iun "aunque · · t b' · do a García García<2ª>, pueden establecerse las siguientes características de la
nos después" (... ). Por otr? l~do, e~ta •in terpre tac1on am 1en permiti-
·a sostener que el principio de fe publica registra! no alcanza a las causales de buena fe exigida al tercero registra!:
~ulidad absoluta ya que esta categoría radical de invalidez opera ipso jure, y la a) La buena fe, contrario sensu del párrafo segundo del artículo 2014 del Códi-
declaración judicial de nulidad solo tiene eficacia de~!ararativa; por lo cual el go Civil (equivalente al párrafo segundo del art. 34 de la LH), es un estado
tercer adquirente nunca podría invocar que la anulac1on se ha producido des- de desconocimiento de la inexactitud del Registro y no el de una creencia.
pués"<25>.
b) La buena fe no exige más diligencia al adquirente, que la resultante del
Dicha interpretación literal (que el mismo autor después intenta dejar atrás Registro. No pueden exigirse constataciones distintas de la verificación
mediante una aplicación conjunta de otros principios registrales) sin dejar de del contenido de los asientos registrales. Al respecto, debe tenerse en
ser interesante, no ha sido mantenida por el mismo Lacruz Berdejo, como cuenta que al referirse a "asientos reg istrales", se alude a los que hay en
apunta García García al indicar que: "Buena prueba de que el propio Lacruz no todos los Registros Jurídicos existentes en nuestro Sistema Nacional.
estaba convencido de su opinión, es que en la última edición de su Derecho c) La mala fe debe ser demostrada, pues el solo hecho de no constar las
Registra/ Inmobiliario no solo ha prescindido de dar esas opiniones que vertía causas de inexactitud en el registro, determinará la aplicación de la pre-
en la edición de 1968, sino que incluso cita una jurisprudencia del Tribunal sunción de buena fe a que se contrae el segundo párrafo del artículo
Supremo en el sentido de que en el artículo 34 se comprende no solo la anula- 2014 del Código Civil. En este sentido expresa la Exposición de Motivos
bilidad sino también la nulidad absoluta"l26>. En nuestra opinión, el adecuado del C. C. : "El tipo de conocimiento que debe tener el adquirente de la
sentido del término "después se anule, rescinda o resuelva" utilizado por nues- inexactitud registra! a efectos de señalar su mala fe, debe ser un conoci-
tro Código Civil, se refiere no a la fecha en que se produce tal declaración miento perfecto, directo, probado de un modo concluyente, por mérito de
(inclusive cuando legalmente opere de pleno derecho), sino al momento en actos realizados por el mismo adquirente o de hechos que forzosamente
que se inscribe tal circunstancia en el registro respectivo, pues solo lo que se deben ser conocidos por él, o dicho de otro modo, cuya ignorancia no es
encuentra inscrito perjudica al tercero (art. l del T.P. del NRGRP). La redacción posible sustentar".
(24) GARCÍA GARCÍA, José Luis. 'Oerecho Inmobiliario Registral o Hipotecario" Editorial C1v1tas S A. Tomo
11 Madrid, 1993. Pág. 236.
(25) GONZÁLEZ BARRÓN, Gunlher Hemán ' El Principio de Fe Pública Reg1stral Una necesaria acla ra• (27) ARIAS-SCHREIBER PEZET, Max y CÁRDENAS OUIRÓS, Carlos "Exégesis del Código Civil Peruano
ción'. En- Temas de Derecho Registra!. Ediciones Legales. 11 edición. Setiembre . 2000 Págs 138, 140 de 1984' . Tomo X. Registros Públicos. Gacela Jurídica 11 edición. Lima, 2001 . Págs 146-148
(26) GARCÍA GARCÍA. Op. cit Tomo 11. Págs. 232-233 (28) GARCÍA GARCÍA Op cit . Tomo 11 Págs 299 y ss
210
211
 Tratado de oerecho Mercantil
La Inscripción registra! en el Registro de Sociedades
. •n con lo que propiamente debe entenderse respe
. te en re 1acI0 . c-
FIna 1men , d d. ha inexactitud o invalidez no consten en los asient 0
I delimitar exclusivamente las causas de inexactttud, que pueden enervar la buena
to a que las "causa~ e a ~er la más importante precisión que contiene tanto ~
fe del tercero adquirente, al contenido de los "asientos registrales", descartan-
registrales", ést~ vienpe ¡·minar del RAS como el artículo VIII del Título Prelim~-
. lo IV del T1tu 1o re 1 . .. . 1 'd 1 do toda posibilidad de admitir el mismo valor respecto de los títulos archiva-
art icu RP Durante mucho tiempo se d1scut10 s1 e conteni o de los títulos dos. Adicionalmente, debe expresarse que no hubiera sido admisible la valida-
nar ~e NRG d. . enervar la buena fe del tercero. ción de los datos de los títulos archivados en contra de la publicidad de los
archivados po ia
asientos de inscripción. En este contexto, refiriéndonos a la eficacia del título
Exposición Oficial de Motivos del Código Civil no era con-
Al respecto, Ia · 1as d.1stintas
· archivado frente al asiento de inscripción, consideramos que no admitir el valor
. ·t. dose a plantear el problema y a resumir posicio-
I solo complementario de los citados títulos hubiera implicado establecer un nuevo
cluyente, . t lImtesan • ·
en los siguientes terminos: •¿ Este pnnc1p10
· · · (fe pu· bl.1ca registra!)
elemento de inseguridad jurídica, en cuanto cada interesado, sin importar la
nesexIs en -ón en relacion. . a lo que aparece de 1os asientos
• de ·inscrip-
otorga su tecc I calificación ya efectuada por el registrador, debería efectuar su propia califica-
. d proque se expresa en los titulos . que provocan d.1chos asientos?
· ( ) ción de los títulos archivados para establecer si no existen vicios que pudieran
c1ón, o e Io · 1 · • .. •
n cuestión la podemos ensayar en dos nive es. Primero, el juris- afectar la seguridad de su adquisición .
La respues ta e · ( ) L d"f · ·
prudencial y segundo el puramente legalista. ... a e~enc1a entre inscrip-
ción y asiento ha sido aceptada por parte de nuestr~ Jurisprudencia cuando La forma más frecuente en la que las causas de la inexactitud constarán
señala que "el tercero no es amparad~, por~u~_la" nu_lidad a~arece de !ºs mis- en el Registro, será a través de las anotaciones preventivas (especialmente
s documentos que sirvieron para la inscnpc1on (eJecutona del 7 de Junio de las de medidas cautelares de anotación de demanda), que desvirtuarán la pre-
~; )_ (... ) Dichas decisiones judiciales d~sti~~uen entr~ tí!ulo y ~siento y exi- sunción de inexactitud y validez del contenido de las inscripciones. En otros
17 casos, la causal que determinaría la invalidez o ineficacia del contenido de las
gen para amparar al tercero y aplicar el pnnc1p10 de fe p~blic~ reg1stral , que su
adquisición provenga de títulos válidos _pero además ins~ntos y no solo de inscripciones, debe constar claramente de los mismos asientos registrales,
asientos que no exhiban la causal de nulidad.(... ) Cabe senalar, por otro lado, para enervar la buena fe del tercero.
que limitar la aplicación del principio de fe pública registra! al solo contenido del Concluimos los comentarios respecto a este importante principio registra!
asiento, tendría lógica si el público y en particular el que pretende ser tercero, incorporado a la actividad societaria, reiterando la necesidad de que el mismo
tuviera acceso solamente a los asientos. Sucede, sin embargo, que tenemos sea consagrado mediante una norma con jerarquía de ley, en una próxima
acceso también a los libros, títulos archivados, índices y demás documentos, reforma de la Ley General de Sociedades. La importancia del mismo amerita
lo cual puede permitir que la publicidad y sus distintas manifestaciones puedan que la protección al tercero societario sea verdaderamente efectiva y no se
extenderse al concepto más general del término inscripción, esto es, a todo lo encuentre sujeta a cuestionamientos por el nivel de la norma que consagra la
que tiene acogida en el Registro y no solo al término restring ido del asiento aplicación del Principio de Fe Pública Registra! para el Registro de Socieda-
(... ). Concluyendo, parte de la jurisprudencia nos puede llevar a señalar que el des. Téngase presente que existen normas en la Ley General de Sociedades
principio de fe pública registra! se extiende al título representado por el asiento respecto a validez de los actos celebrados por representantes para negocios u
y no solo al asiento mismo(... ). Pero si intentamos una respuesta puramente operaciones no comprendidas dentro del objeto social (art. 12 de la LGS) o en
legalista, tenemos que concluir que el Código Civil de 1984 al igual que el relación a la carencia de efectos, frente a terceros, de la sentencia firme que
Código del 36, permite la vigencia del artículo VII del Título Preliminar del Re- declara la nulidad del pacto social o el estatuto (art. 37 de la LGS), que protegen
glamento General de los Registros Públicos<29 > y por lo tanto, aceptando lo la contratación del tercero en supuestos puntuales y da escasa incidencia, por lo
ordenado por este artículo, bien puede concluirse que el principio se aplica que con mayor razón debería encontrarse en la citada Ley General el principio
respecto del contenido solo del asiento.( ... ) Creemos en todo caso que el pro- de fe pública registra! societaria, cuya protección integral al tercero, p.ej., englo-
blema está planteado, y que cualquiera que sea la decisión legislativa que se baría dentro de sus alcances a lo previsto en el citado artículo 37 de la LGS.
adopte ~eberá tener en cuenta el nivel de eficacia de los Registros Públicos y
la necesidad y posibilidad de otorgar las garantías más amplias a quienes bus-
quen su amparo". IX. FORMALIDAD DE LOS TÍTULOS INSCRIBIBLES
EN EL REGISTRO DE SOCIEDADES
La opción adoptada tanto por el RAS como por el NAGAP ha sido la de
El artículo 201 O del Código Civil establece el denominado principio de
titulación auténtica o documentación pública, cuyo texto vigente (de acuerdo
(29) Se refiere al derogado Reglamento General de los Regislros Públicos de 1968.
con la Segunda Disposición Final de la Ley N2 26741), es el siguiente: "La
212 213
 Tratado de oerecho Mercantil
La inscripción registra! en el Registro de Sociedades
.. •rt d de título que conste en instrumento público, salv
.
1 . c on se hace en v1 u
nscnp 1 . • De acuerdo con la . .. d M .
Expos1c1on e ot1
vos Oficial delo interesados; precisa que en su creación haya intervenido una persona dotada
. ·1
d1spos1c ·ón
. .en• contrario •
. h . strumentos .
son de tres tipos, .
dependiendo de la natu- por el Estado de facultades legales para conferirles carácter de públicos Y
Código Civil: D1c os líl . . . auténticos"< 32J.
raleza de la función de quien los expida.
'bl·co notarial como los partes notariales. Sin embargo, este principio registra! contempla la posibilidad, expresa-
• instrumento pu 1 ' mente prevista en el artículo 201 O del e.e., que una disposición en contrario
.blico ·udicial como los partes judiciales y las copias certifi pueda permitir que las inscripciones se efectúen sobre la base de instrumen-
• lnstrumen to Pu 1 ' •
cadas de actuados judiciales. tos privados. Estos supuestos excepcionales no tienen que emanar de dispo-
úblico administrativo, como las resoluciones admin istrativas sición con jerarquía de ley, sino que inclusive puede tratarse de normas de
• 1ns trume nto P · rt·f· d d 1 · rango inferior. En ese sentido, el artículo VI del Título Preliminar del RRS esta-
con carácter de cosa juzgada, y las copias ce 11ca as e as partidas de
blece la siguiente redacción respecto a los títulos que dan mérito a la inscrip-
los registros del estado civil. ción en el Registro de Sociedades: "La inscripción se efectuará en mérito de
documento público, de resolución arbitral o de documento privado en los ca-
cualquiera de estos instr_u~entos so~ los r~queridos par~ la inscripción
sos expresamente previstos. Pueden realizarse inscripciones en virtud de do-
correspondiente, salvo dispos1c1on cont~ana, la ~rnsma _q~e no tiene ne~esaria- cumentos otorgados en el extranjero siempre que contengan actos o derechos
mente que ser una ley, exigencia que s1 conterna el Cod1go derogado . inscribibles conforme a ley peruana; se presentarán en idioma español o tra-
Entonces, este Principio de Titulación Auténtica no es diferente del que ducidos a éste y legalizados, conforme a las normas sobre la materia".
normalmente se ha denominado de Instrumentación Pública, como una clase Al respecto, partiendo de la definición que en sentido negativo contiene el
de principio que constituye requisito de la extensión de los tos de inscrip- ª~!en artículo 236 del Código Procesal Civil, se considera instrumento privado a aquel
ción. El término •~itulación auténtica" es frecuentemente utilizado por los co- que carece de las características de un documento público, precisando que la
mentaristas de la legislación hipotecaria española, habida cuenta que constitu- legalización o certificación de un documento privado no lo convierte en público.
0
ye la expresión empleada por el artículo 3 de la LHP J Sin embargo, documento Consecuente con ello, los instrumentos notariales extraprotocolares, como las
público o documento auténtico tienen el mismo significado reg istra 1, pues como actas y certificaciones previstas en los artículos 94 y 95 de la Ley del Notaria-
acertadamente precisa Roca SastreP1J: "la única diferencia es que el primero do, NO CONSTITUYEN PROPIAMENTE INSTRUMENTOS PÚBLICOS para
alude más al origen o formalización pública y el segundo se refiere más al los efectos de la inscripción y el cumplimiento de la exigencia de titulación
resultado de hacer fe o autenticidad; pero, en el fondo , son conceptos análo- auténtica, aunque, de manera errónea, la Ley del Notariado denomine a su
gos. La jurisprudencia del Tribunal Supremo y de la Dirección General de los capítulo 111 de su Título 11 : "De los instrumentos públicos extraprotocolares".
Registros así lo entiende. No obstante, en el Código Civil e incluso en la ley de
enjuiciamiento civil se emplea prevalentemente el concepto de documento Las copias certificadas de las actas de diversos acuerdos societarios, para
público, el cual goza de más modernidad". los que no se encuentra establecida la formalidad de escritura pública, pueden
inscribirse en virtud de las copias certificadas notarialmente del acta respecti-
A este principio se refiere Manzano Solano, expresando que: "No basta va, tal como establece el artículo 46 de la LGS concordante con el art ículo 6
sin embargo, cualquier título o documento, sino que, además, ha de ser docu~ del RRS. En este caso, la copia certificada tampoco constituye un instrumento
ment~ público y auténtico. Ésta sería la segunda nota básica del procedimien- público, en la medida en que el notario solo se limita, conforme al artículo 104
to _re~1~tral en nuestro sistema: principio de documentación pública frente al de la Ley d~I Notariado1331 , a certificar la transcripción, pero no asume respon-
prmc1p10 de documentación privada. Es insuficiente, pues, que los documen- sabilidad ni da fe del contenido del libro o acta, ni de la firma, identidad, capa-
tos que contengan derechos inscribibles estén solamente suscritos por los cidad o representación de quienes aparecen suscribiendo el acta respectiva.
(30) Artículo 3 de la Ley Hipotecaria Española (32) MANZANO SOLANO, An1onio "Derecho Registra! lnmoblllario Para iniciación y uso de universitarios·
·Para que puedan ser inscritos los títulos expresados en el artículo anterior, deberán estar consignados Cen1ro de Estudios Registrales. Madrid, 1992. Vol. 11 Pág. 439.
en escritura pública, ejecutoria, o documento auténtico expedido por autoridad judicial o por el Gobierno (33) Artíc ulo 104 de la Ley del Notariado.- El notano expedirá copia certificada que contenga la transcripción
o sus agentes, en la terma que prescriban los reglamentos · (Ef resaltado es nuestro) hiera! o parte pertinente de actas y demás documentos. con indicación, en su caso. de la legalización del
hbro u hojas sueltas, folios de que consta y donde obran los mismos, número de firmas y otras circu nstan-
(31) Citado por ESTURILLO LÓPEZ, Antonio. "Estudio de la Legislación sobre ef Reg1s1ro Mercantil Práciica
cias que sean necesarias para dar una idea cabal de su contenido
de Legislación Mercantil Societaria". Centro de Estudios Reg1strales. Madrid, 1992 Pág 202
214 215
 echo Mercantil
Tratado de oer
La Inscripción registra! en el Registro de Sociedades
. . od . ser a través de cualquier medio. ya sea
·pc1on p ra
eabe 1•ndicar que la. transen fotocopia. do, tal como reconoce
nografiado, impreso 0
.
expresamente el
.
unas (erróneas) 1nterpretac1ones registra-
cación conjunta del artículo 421 de la LGS y el artículo 161 del RAS). Obvia-
mente, si la sociedad así lo desea, dichos acuerdos también podrán constar en
meca 6 del RG s, que pone
rtículo ªIg
, fin. a "transcripcIon
• • " emp 1eado por Ia Ley del Nota- escritura pública, en la que se inserte la parte pertinente del acta que contenga
ª1 sen el sentido de que el termino ·ado criterio éste absurdo, en la medida en el acuerdo válidamente adoptado por el órgano social competente, tal como
e I del fotOCOPI • .
reconoce para el caso de nombramientos y poderes, el artículo 31 del RAS.
riado descartaba e uso . ba porque la copia era producto de una nue-
.ó se configura · ·
que la transcripc1 n nO . su identidad con el acta ong1na 1, que obvia-
va digitación de los datos, sino p:ntizada con el fotocopiado de la misma. En cuanto atañe al segundo párrafo del artículo VI del Título Preliminar del
mente se encuentra aun más ga . . . RAS, referido a la posibilidad de inscripción de documentos otorgados en el ex-
. . • nes en el RAS se practicaran bien a través tranjero, dicha norma es concordante, teniendo similar formulación, con el primer
era las inscnpc10 , bl. t . .
De es ta man . ·. tales como la escritura pu 1ca 1 sen enc1a Judicial 0 párrafo del artículo 11 del NRGRP, conteniendo los siguientes elementos:
de instrumentos pubh~os ( •rtud de instrumentos privados como, princi-
. · t t va) o en v1 a) La necesidad de que los actos o derechos sean considerados inscribibles
resolución adminis ra I l das notarialmente de las actas de los diversos
palmente, la~ co?ias certi ~ª 1
O
a aquellos acuerdos para los cuales la normati-
por la ley peruana, sin importar si la ley correspondiente al lugar de otorga-
miento del documento establezca o no tal calidad.
órganos societario~, resfet amiento de escritura pública. Para citar algunos
O
viciad vigente no exigGe e ?greg expresamente el otorgamiento de escritura pú- b) La necesidad de que los documentos otorgados en el extranjero se en-
. los en que la L 5 ex1 . . cuentren traducidos al idioma castellano y que cuenten con la legalización
e¡emp . . . , de dichos actos tenemos los siguientes: pacto social y
blica para la ,~scnpci;~s modificaciones (art. 5 de la LGS), aumento de capital pertinente.
el estatuto as, cGom)o ducción de capital (art. 215 de la LGS), transferencia de
(art •• 201
.
de
.
la L 5 , reociedad colectiva (art. 271 de la LGS). trans ferencIa · de Cabe mencionar que cuando el citado artículo del RAS se refiere a "lega-
part!c!paciones en ª soc·iedad comercial de responsabilidad limitada (art. 291
1 lizaciones", no alude a legalizaciones notariales, sino a la certificación de las
part1c1pac1ones en 1a s . . • facultades con que actúan los diversos funcionarios que autentican o certifican
. . d LGS) usufructo y prenda de partic1pac1ones en 1a sociedad comer-
mfme e Ia , GS) 1 ·• d · los documentos otorgados en el extranjero. Al respecto, debe tenerse en cuenta
. d onsabilidad limitada (art. 292 de la L ; exc us1on e socio en la
c1a 1 e resp · · d ( rt 293 d I LGS) · ·· lo establecido en el art iculo 582 del Reglamento Consular, en el sentido de que
· dad comercial de responsabilidad hm1ta a a . . . e a _; em1s1on "los documentos públicos extendidos en el extranjero, para surtir efectos en el
~~~~ligaciones (art. 308 de la LGS), c~nstitució~ de sindicato de obligacionis- Perú, deben estar legalizados por los funcionarios consulares". Concuerdo con
tas (art. 318 de la LGS), transformacion de s~~1~dades (~rt. 336 de la LGS), ello, el artículo 584 del mismo Reglamento, que establece que la competencia
fusión de sociedades (art. 357 de la LGS), esc1s1on de sociedades (art. 381 de para reconocer firmas corresponde al jefe de la Oficina o Sección Consular,
la LGS), entre otros. Para la presentación en el Re~i~tro de estos in~trumentos respecto a aquellas de las autoridades oficiales de la jurisdicción consular; de
públicos notariales, serán de aplicación las prev1s1ones establecidas por la los funcionarios extranjeros nombrados o acreditados en la localidad; de las
Sección Quinta de la Ley del Notariado (Decreto Ley N2 26002) que regula la autoridades judiciales y notarios de la sede consular cuando les sean conoci-
expedición de los traslados de los mismos. As í. el artículo 82 de dicha ley das; y de los particulares cuando son escritas en su presencia , previa verifica-
establece que el notario podrá expedir testimonio, boleta y partes a quien lo ción de los firmantes.
solicite, de los instrumentos públicos notariales que hubiera autorizado en el
ejercicio de su función . De este modo, p. ej., tratándose de una escritura extendida ante notario
norteamericano, será normal que la firma del notario y la comprobación de la
Respecto a las inscripciones que se practican en virtud de instrumentos vigencia de sus facultades, sean certificadas por un funcionario de la Secreta-
privados, entre otras tenemos: la reserva de preferencia registra! (solicitud con- ria de Estado de los Estados Unidos. Luego, la firma del funcionario de la
forme al artículo 20 del RAS); nombramiento de administradores, liquidadores Secretaría de Estado es legalizada por el cónsul peruano; y, finalmente , la
y demás representantes de sociedades y el otorgamiento de poderes de éstas, firma del cóns ul peruano será legalizada por un funcionario del Ministerio de
así como su revocación, renuncia, modificación o sustitución (copia certificada Relaciones Exteriores del Perú, encargado de las legalizaciones de documen-
notarialmente de la parte pertinente del acta conforme al artículo 14 de la LG S), tos provenientes del exterior. En otros supuestos, cuando la escritura sea ex-
establecimiento y cancelación de sucursales (copa certificada notarialmente tendida en el extranjero, ante cónsul peruano, solamente se requerirá la legali-
d_el acta ~e acu~~do con los artículos 398 y 402 de la LGS), acuerdo de disolu- zación de la firma del cónsul, por el funcionario competente del Ministerio de
ción (copia ce_rt1f1_cada n?t~rialmente del acta como exige el art ículo 412 de la Relaciones Exteriores del Perú. Los supuestos pueden ser diversos, y diver-
LGS) Yde extinción (solicitud con firma legalizada de los liquidadores en apli-
216 217
 Tratado de oerecho Mercantil
sos tos funcionarios de IOS pafses extranjeros, dentro de su especial
1
ción interna, que deberán certiftar
. las rt·t·
firrnas pertinentes
1 y acred,·tarorga~iza.
la v
cia de ias tacuttades del notano que'dced 1,que e acto o contrato · s·m emb 9en.
que permitirá estable<•'
• la 1legal,
• a det·fa cadena de legaliza c1ones . argo ,
10 del cónsul del Peru en e pa,s res pee ,vo.
firma es la
Respecto a la naturaleza inscribible de los actos, atendiendo a
pueden concoder derechos mayores a los actos o derechos extr . que no se
~s torrn~izadOS en el territorio nacional, será exclusivamente ~n¡eros que a
ª
peruana la que determinará la naturaleza de inscribible o no de 1 leg,sf ación
nd
que para tal aspecto sea relevante si son inscribibles en el paii~ m,smos, sin
malizaron: De modo tal, no ~drá alegarse que según fa ley del ~ e se _lor-
el acto es 1nscnb1ble, siendo umcamente aplicable fa ley perua pais extran¡ero
ce los actos y derechos inscribibles. En el caso del Registro ~a que_estable-
deberá verif""'e que el acto se encuentre específicamente c e Sociedades
de los establecidos en el articulo 3 de RRS. omprend,do dentr~
X. REPRESENTACIÓN DE LA SOCIEDAD
El artículo 14 de la LGS establece que el nombramient? de admi_ nistrado-
. idadores de cualquier representante de la sociedad, as1 como el
O expresa que: "la sociedad anónima, para su vida de relación interna y externa,
res, de lIqu
iento de poderes por ésta, surten efec to des de su aceptac1on
· · expresa
otorga m - 1 f ·· · necesita valerse de un órgano ejecutivo y representativo a la vez que lleve a
desde que las referidas person~s dese~penan a unc1on o eiercen tales
0
poderes. Dicha redacción legislatI~a no deJ_a lug~r a dudas de que n?. es la
inscripción registra! la que determina la ex1stenc1a de la representac,on, no
obstante lo cual, el segundo párrafo del mismo artículo 14 de la LGS establece
que dichos actos deben ser materia de inscripción. Obviamente, si bien la ins-
cripción de la representación aludida no es requisito para su ejercicio , la falta
de registro de la misma impedirá que el tercero que contrata con el represen-
tante de la sociedad pueda encontrar protección en el principio de fe pública
registra!, entre otras consecuencias que se derivan de los efectos sustantivos
de la inscripción registra!.
Ahora bien, la inscripción de los actos mencionados en el párrafo prece-
dente deberá efectuarse exclusivamente en la partida registra! de la sociedad
o su sucursal, tal como establece el artículo 32 del RAS, que expresamente
contiene la prohibición de su inscripción en oficinas registrales diferentes. No
e~ ~plicable, por tanto, la norma establecida en el artículo 2037 del Código
C1v1I referida a mandatos o poderes para la representación de personas natu-
rales, respecto a los cuales sí se exige la inscripción en el lugar "donde perma-
nenteme_ nte se _va a ejercer el mandato o la representación". Consecuente-
~ente, sI la sociedad se constituyó e inscribió en el Registro de Sociedades de
Lima, no será necesaria la inscripción de sus representantes en ningún Regis-
218
La Inscripción registra! en el Registro de Sociedades
tro de Sociedades de otra Oficina Registra!, aunque dicha representación ten-
ga que ser ejercida en localidad diferente, p. ej, para inscribir una compraventa
celebrada por un representante de la sociedad, respecto a un inmueble ubica-
do en Cajamarca. Sobre este aspecto, se ha expedido la Directiva Nº 008-
2001-SUNARP/SN , aprobada por la Resolución del Superintendente Nacional
de los Registros Públicos Nº 255-2001-SUNARP/SN de 1Ode octubre del 2001,
en la que se precisa que cuando se solicite la inscripción de un acto en el que
interviene una persona jurídica inscrita en una Oficina Registra! distinta, cuyo
órgano o representante se basa en un poder inscrito en la partida de la perso-
na jurídica, el Registrador verificará los alcances del poder y su vigencia, te-
niendo en cuenta aquella partida. Consecuentemente, el solicitante deberá
presentar un certificado de vigencia de poder expedido por la Oficina Registra!
donde se encuentra inscrita la sociedad, sin exigir ninguna inscripción adicio-
nal. Ello, obviamente, hasta que la Superintendencia Nacional de los Registros
Públicos culmine el proceso de interconexión entre sus Oficinas Registrales,
concluido el cual el Registrador tendrá acceso directo, mediante conexión in-
formática, a todas las partidas existentes en cualquier Oficina Registra!.
Comentario especial merece la lamentable falta de disposiciones en el
RRS que consagren la representación orgánica en materia societaria. Uría'341
pone de manifiesto la importación de los órganos de administración cuando
cabo la gestión cotidiana de la sociedad y la represente en sus relaciones
jurídicas con terceros. El órgano de administración es necesario y permanen-
te: necesario, tanto para constituir la sociedad como para su ulterior funciona-
miento( ... ). Y, permanente, porque despliega una actividad gestora dirigida a
la consecución de los fines sociales; que no puede sufrir solución de continui-
dad". En el mismo sentido se pronuncia Ruíz de Velazco<351 , cuando señala
que: "el órgano de administración es el centro alrededor del cual gira toda la
actividad de la sociedad anónima".
Los órganos de administración de una sociedad no ejercen una represen-
tación especial, limitada textualmente a los alcances de una ritual literalidad.
Así, es importante tener en cuenta lo expresado por Espinoza<36> cuando seña-
la que: "Se debe distinguir, como ya señaláramos en otra sede, la representa-
ción orgánica que corresponde a los directivos de la persona jurídica y en la
cual los poderes se confieren al cargo (u órgano) , por ejemplo, al gerente, al
(34) URiA, Rodrigo ·Derecho Mercantil". Marcial Pons Ediciones Jurídicas S.A. Vigésimoprimera edición.
Madrid, 1994 Pags 337-338
(35) RUÍZ DE VEL.AZCO. Adolfo. Op. Cll Pág 288.
(36) ESPINOZA ESPINOZA, Juan "Derecho de las Personas· . Editorial Huallaga. 31 edición. Lima • Perú ,
octubre, 2001. Págs 423-424.
219
 oerecho Mercantil
rratadO
d
·ª~------------- La Inscripción registra! en el Registro de Sociedades
·o directivo, de la representación vo/unta .
'd nte de1consel d' na
director o al pres,_e d r a una persona, indepen 1entemente de su rel , Lamentablemente, la existencia de esta resolución originó la errónea exi-
en la cual se confiere el Pº, a- gencia de las instancias de calificación registra!, en el sentido de que los pode-
. d' ha persona ¡urid1ca .
c1ón con Ic . . res de disposición y gravamen del Directorio debían constar de manera literal,
. donde se aprecia la d1fer~nc1a entre la representació
expresa e indubitable en el estatuto social, no admitiéndose su existencia en
Un supuesto típico 'ón orgánica es el referido a los actos de disposic· . n
. y la representacI . Corno es sab'ido, canfor ion vía de interpretación del artículo 172 de la LGS.
voluntaria . de la sociedad anónima.
y gravamen de los biene~eneral de sociedades, el directorio de las Socie;e Un segundo enfoque, más cercano a la adecuada calificación de las facul-
al artículo 172 ~e la ~e\acultades de gestión y representación legal neces a- tades de gravamen y disposición del Directorio, se encuentra plasmado en la
des Anónimas t,~~e as_ón de la sociedad dentro de su objeto, con excepc· ~- Resolución Nº 481-98-ORLC/TR de 30 de diciembre de 1998, en la que se
. pa ra la adm1nistracI .
ley el estatuto atribuyan a 1a ¡unta general" ¿Ello ion
!
nas desecha la aplicación supletoria del Código Civil, postulando, más bien, que la
I O
de !º.s asunt~! q~: directorio, sin que conste ~xpresamente dich~ facult=~ interpretación del artículo 172 de la LGS permite concluir que el Directorio, si
suf1c1ente pal q oc1·aIes y sin autorización de la ¡unta general de accionistas bien tiene facultades de gestión y representación legal necesarias para la ad-
en los estatu os s tos de disposición. o gravamen de Ios b',enes de 1a sociedad?
. , ministración de la sociedad, solo puede ejercer las mismas dentro del objeto
pueda efectuar ac . social estatutariamente establecido. Bajo esta línea interpretativa, el Directorio
. s pronunciamientos del Tribunal Registra! de Lima y Callao de una Sociedad Anónima dedicada a la actividad inmobiliaria, sí tendría facul-
Los pnmearfnterpretación de las facultades del directorio sobre la base de tades de disposición y gravamen de bienes inmuebles (por estar comprendi-
postu Iaron un · 1 156 167 d · das estas actividades en su objeto social), pero carecería de las mismas facul-
la (incorrecta) aplicación supletoria de los art1cu os Y el ~odigo Ci-
vi11J1,. Así, en la Resolución Nº 080-96-ORLC/TR de 01-03-96 se consideró que: tades para la disposición o gravamen de sus veh ículos automotores, en la
medida en que la compraventa de los mismos no se encuentra considerada
) Si bien el estatuto reconocía al directorio la facultad de celebrar todo tipo dentro de su objeto social.
ª de contratos esa generalidad "contradice el mandato de especificidad con-
Es relevante lo vertido en el octavo considerando de dicha resolución,
tenido en lo~ artículos 156 y 167 del Código Civil".
pues si bien en los considerandos precedentes se efectúa una correcta inter-
b) Es necesario que los estatutos ~econozc~n expresamente al directorio la pretación de las amplias facultades con que cuenta el Directorio, dejando atrás
facultad de disposición de los bienes sociales. la cómoda exigencia de literalidad expresa, se concluye inexactamente en una
afirmación limitativa de sus facultades al afirmar que: "si bien el Directorio po-
Estas afirmaciones eran obviamente inexactas, puesto que las facultades dría adoptar decisiones referidas a actos de administración de carácter ex-
del Directorio no emanan de una representación orgánica, en la que la persona traordinario, con las salvedades establecidas en la ley y el estatuto, también es
jurídica no es un incapaz (sujeto a representantes legales), sino que expresa cierto que tales facultades no pueden adquirir carácter ordinario, como si fue-
su voluntad a través de sus órganos, en el marco de las facultades legales y ran parte del objeto social, dado que implicarían una modificación de éste sin
estatutarias para ellos establecidas. Por el contrario, en el caso del Directorio, guardar las formalidades legales; en este sentido, no resulta factible que el
tanto la derogada como la vigente Ley General de Sociedades le reconocen Directorio de Santander Sociedad Agente de Bolsa incluya dentro de su régi-
las más amplias facultades, pues es el órgano de gestión y representación men de poderes que otorga a sus directores y terceros, actos de disposición y
permanente de la sociedad anónima, siendo más bien que solo debería en- gravamen con carácter ordinario y sin especificación alguna de las limitacio-
contrarse fuera de su competencia, aquello expresamente reservado por la ley nes legales".
o el estatuto, a la junta general de accionistas. Como puede apreciarse, esta resolución constituye un avance respecto al
criterio anterior, pero omite considerar el hecho de que el objeto social de una
sociedad, conforme al artículo 11 de la LGS , comprende también los actos
relacionados con el mismo que coadyuven a la realización de sus fines , aun-
que no estén expresamente indicados en el pacto social. Así , una empresa
dedicada a la actividad inmobiliaria, para los efectos de la construcción de
(37) Articulo 156 del Código Civil.•Para disponer de la propiedad del representado o gravar sus bienes, se
requiere que el encargo conste en torma indubitable y por escritura pública, bajo sanción de nulidad. inmuebles, requiere adquirir y obviamente renovar (vía venta y nueva adquisi-
Articulo 167 de/Código C/vf/,. Los representantes legales requieren autorización expresa para realizar ción) veh ículos como camiones, volquetes, camionetas, etc., siendo actos que,
los siguientes ados sobre los bienes del representado: si bien no se encuentran comprendidos dentro de su objeto social , coadyuvan
1.- Disponer de ellos o gravarlos( ... )
221
220
 1tatado de oerecho Mercantil
La Inscripción registra! en el Registro de Sociedades
. trario es evidente que una sociedad ded·ic
tidocon , - ·• d ada
. ación. En sen , quiere para la rea 11zac1on e sus activid d
a su rea lIz ehiculos, re h.b. . . a es d) A diferencia del directorio, si bien el gerente no requiere facultades espe-
venta de v . i•nmuebles para Ia ex 1 1c1on y comercial·
a la comP ra • y diversos . b. 12a. cíficas respecto a los actos de disposición o gravamen, éste sí deberá
un Iocal administrat1v~ mobiliarias, lo que, no s1en_d? su o ¡eto social, Permite restringir dichas facultades a los actos o contratos ordinarios correspon-
ción de las unidade~ in al Registra!, cualquier act1v1d~d que no se encontrase dientes al objeto social. Vale decir, que para evaluar las facultades del
ealizarlo. Para el Tnb_ u~ en su objeto social, no pod1a ser complementaria gerente, dado que solo está autorizado para "celebrar y ejecutar los con-
r ·dentemente enuncia ª ue limitaba de manera innecesaria e ilógi·c a tratos ordinarios correspondientes al objeto social", conforme al artículo
evI ·smo 1o q d. . a el
la realización de 1 mi d disposición y gravamen del 1rectono. 188 de la LGS, sí será necesario revisar que los actos de disposición o
ámbito de las facultades e . . gravamen que efectúe, se encuentren expresamente comprendidos den-
en reciente jurisprudencia de observancia obligatoria tro de las operaciones o negocios lícitos descritos detalladamente en el
Afortunadamente, 1 . • n del Tribunal Nll 240-2001-0RLC/TR de 18 d ,
.da orla Raso uc10 .. 1 El P d. . . e objeto social.
constituI P . d en el Diario Of1cIa eruano e 1c1on del 4 de f
2 (publica a . . "E e.
enero del 200 arriba a la siguiente conclus1on: ~cepto Ios asuntos que la e) Consecuentemente, los registradores, en la calificación de los títulos en
brero del 2002) se . a la ¡·unta general u otro organo o excluyan de 1 los que se evalúe el alcance de las facultades de disposición o gravamen
ley o el es.ª t t to atribuyen. dicho órgano social
u . t
.
se encuentra facuitado par
a del directorio, NO DEBERÁN EXIGIR QUE ELLAS CONSTEN EXPRE-
del dIrec Oíl 0 ' d' . .. a SAMENTE EN EL ESTATUTO NI MENOS QUE SEAN VINCULADAS CON
competenelª .
11
t de administración y Ispos1c1on .
realizar todo tipo de ac os EL OBJETO SOCIAL.
tal afirmación nos lleva a las siguientes consecuen-
Como puede verse, Son interesantes los argumentos vertidos por el Tribunal Registra! para
cias prácticas: sustentar la modificación del criterio interpretativo que es objeto de comenta-
. que en el estatuto se faculte expresamente al directorio rio, siendo importante la distinción que se efectúa entre el término "administra-
a) No es necesan 0 de disposicIon . . o gravamen. 8 asta que no se reserve ción de la sociedad" con "actos de administración". En una sociedad anónima,
para efec tuar actos . . la administración de la misma es efectuada (con distintas competencias y
dicha facultad a la junta general, para los efectos que el directorio pueda
amplitud de facultades) , por la junta general de accionistas, el directorio y el
realizar tales actos. gerente general. Esta administración de la sociedad no se encuentra limitada a
b) Las facultades del directorio, para actos_ de disposi_c i_ón o gravamen, no se los denominados "actos de administración", sino que incluye los "actos de dis-
uentran limitadas a aquellas operaciones Yact1v1dades expresamente posición", con distintos niveles. En tal sentido, salvo disposición legal o estatu-
~~~prendidas dentro del objeto social. En tal s_entido , bastará al registra- taria en contrario, la administración de la sociedad atribuida al directorio com-
dor que el directorio considere que el o~org~'.111ento d~ facu ltades de dis- prende las facultades de administración o disposición de los bienes de la so-
posición Ogravamen, coadyuve a la reahzacIon de los fines de la sociedad ciedad anónima. Concordamos con dicha distinción, que abandona la errónea
anónima, para los efectos que puedan ejercer dichos actos u otorgar po- asimilación terminológica de los actos de administración civil, con la "adminis-
deres a otros órganos societarios o inclusive a terceros. La evaluación de tración societaria", que debe interpretarse con el sentido órgánico que es co-
dicha conexión o complementariedad con el objeto social (art. 11 de la herente con la existencia y el desarrollo mismo de la sociedad.
LGS) no corresponde al registrador sino al mismo directorio, por lo que no
Por todo ello, es sumamente desafortunada la redacción del artículo 33
puede ser materia de calificación registra!.
del RAS que exige que en los asientos de inscripción deban consignarse las
c) Obviamente, el directorio no tendrá facultades para los actos de disposi- facultades que importen actos de disposición o gravamen, así como las condi-
ción o gravamen que legalmente son atribuidos a la junta general. Así, por ciones de su ejercicio, siempre que consten en el título y tal como están expre-
ejemplo, los supuestos previstos en los artículos 77 y 115 inciso 5) de la sadas en él. Una norma de esta clase, además de innecesaria, vuelve a acer-
LGS, referidos a las adquisiciones a título oneroso de bienes cuyo importe carnos a la falsa idea de la necesidad de que dicho tipo de facultades conste
exceda el 10% del capital pagado, efectuadas dentro de los seis meses literal, expresa e indubitablemente en los títulos que dan lugar a la inscripción
de la constitución de la sociedad; o, a la enajenación, en un solo acto, de respectiva, lo que si bien podría aplicarse a las representaciones especiales no
acti~os cuyo valor contable exceda el cincuenta por ciento del capital de la es compatible con la naturaleza de la representación orgánica, tal como ha reco-
~oc1edad. En estos casos, la LGS exige la aprobación o el acuerdo de la nocido la jurisprudencia registra!. Cualquier clase de "enumeración" respecto a
Junta general de accionistas, por lo que, en principio, el directorio carece de facultades de representación orgánica no solo es irrelevante sino perjudicial,
facultades para su ejercicio u otorgamiento a terceros .
222 223
 Tratado de Derecho Mercantil

o señala pau Pedrón 138>: "No tiene relevancia que el

pues eOrn . ) f. acto e
cuya naturaleza se discute (s1 es o no neutro 1gure entre las Iacult oncreto
administradores; porque, corno advierte la R. Cit. de 1990, 'la en ades de los
las facultades en la escritura resulta de todo punto innecesaria ~meración de
no añade nada. Si las actividades están cubiertas por el objeto s~ Oda Vez que
común podría leerse], el apoderamiento [la resolución
· · emplea estcial_ [Por el fin
e terrn·
d
d ba de un. a ministrador]
sentido amplio, porque se.trata .. [ para real·izar tal 1no en
vidadescon independencia e su cons1gnac1on ... ]'. El Reglame t es acti-
tro Mercantil del 19 de julio de 1996 ha acogido esta doctrin n del Regís. °
cierta timidez, disponiendo en sus artículos 124, 4 y 18S 6 a, a~nque con
inscribirse en el Registro Mercantil la enumeración de las f~cul;1~e No Podrá
no de administración que sean consignadas en los estatutos'_E~ es del órga.
rnento debería haber ido rnás allá, Yhaber prohibido incluso que ,nuevo Regla-
se enumerasen en los estatutos". En este sentido, esperamos as facultades
artículo 33 del RAS sea derogado en una próxima reforma de d-q~e el referido
!ación, sustituyéndolo rnás bien por disposiciones que regulen•~ ª reglamen.
pecífica la representación orgánica, recogiendo las recientes t manera es.
prudenciales antes comentadas. en enc,as juris-

PAU ~EDRÓN, Antonio. "La ca acld

Madnd, 1998. Págs. 64-65· P ad en los negocios sobre inmuebles" Centro de Estud'10s Aeg,strales
(38)
.

224