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TEMPLO
NATURAL
Se reunían en el sitio
Algo solía pasar
Los cuerpos se estremecían
El humo los iba a cambiar
Un par de años después del cambio de milenio ocurrió lo que para mí es una bella
vivencia, parte de la cual quiero plasmar en este texto con el ánimo de que algunas de
las cosas compartidas en aquella época no se queden sólo como un borroso recuerdo o
peor aún se hundan en el olvido.
El templo natural hace referencia a un lugar en el que nos reuníamos con cierta
frecuencia un grupo de muchachos por lapso de unos cuatro años. Aunque vivíamos
pegados a una gran ciudad, también estábamos cerca a las afueras de ella, y es en las
afueras en donde encontramos un bello lugar que nos fue acogiendo y en el que nos
fuimos amañando, y aunque no era un gran terreno ni tenía gran diversidad natural, sí
nos permitía alejarnos por momentos de esa vida citadina tan contaminante y
aturdidora como suele ser.
Fue allí entre la magia de un pequeño bosque de eucaliptos, una pequeña área de
vegetación nativa y radiantes rocas, en donde encontramos un refugio para hallar
tranquilidad, para compartir nuestras vivencias, la música y ante todo para tener un
poco de conexión con la naturaleza, conexión que hace tanta falta en las ciudades.
Así como el que siente gusto por la medicina no significa que sea médico, igual sucede
con la espiritualidad, aunque sin duda en ambos casos, no se trata de ser o no ser, sino
más bien del aprendizaje, que es un camino largo de recorrer en el que se va
avanzando por muchos niveles. Mientras seamos humanos, siempre va a haber algo
que nos falta superar, siempre van a haber errores, siempre van a haber lecciones por
aprender, entonces que alguien sea espiritual o que le guste o busque la espiritualidad
no significa que sea perfecto, que no cometa errores, o que no tenga problemas por
superar, pues hasta los más grandes sabios, los más grandes maestros, los religiosos
más entregados, etc., siempre van a tener errores y cosas que superar, de lo contrario
no serían humanos; La espiritualidad no se trata de hacer rituales, meditaciones,
oraciones, acudir a sitios sagrados, tener talismanes, vestir o hablar de cierta forma,
etc. (aunque posiblemente estas cosas pueden ayudar), la verdadera espiritualidad se
ve reflejada principalmente en los actos o comportamientos, y también en los
pensamientos que expresan las personas, se trata pues de lograr cada vez más
consciencia, un mejor entendimiento de nuestro mundo, de nuestras vidas, de nuestra
situación como seres humanos y de actuar y comportarse de acuerdo a ese
entendimiento (sabiduría) que vamos adquiriendo.
A través de los tiempos los conocimientos siempre se han ido transmitiendo de unos
seres humanos a otros, y en este caso, sentí desde un principio que tenía una buena
cantidad de conocimientos para compartir, dado que desde mi niñez se me
trasmitieron muchas cosas y con el tiempo esa mentalidad se fue enriqueciendo con la
lectura, la investigación y el razonamiento, por supuesto no quiere decir esto, que sólo
tuviera yo una posición de transmitir o enseñar únicamente, pues como lo expresé
varias veces en aquella época, siempre estaba también yo atento a aprender lo que
pudiera de los temas, dilemas, experiencias y vivencias compartidas por los demás, de
hecho una parte de los temas se generó gracias a reflexiones alimentadas por varias
personas. Debo aclarar también que nunca yo me autonombré o me postulé como
‘maestro’, y si algunas personas me llamaron o me consideran así, entiendo que es
porque algo aprendieron o algo les sirvió de los conocimientos que en algún momento
les quise compartir. Realmente los conocimientos siempre van fluyendo en un
entramado o una red mental entre los seres, y es así como evoluciona nuestra mente
humana, pero depende del entendimiento de cada cual, cómo se transmitan, perciban
o utilicen dichos conocimientos; entonces en algún sentido todos somos maestros de
todos y a la final es la misma experiencia de vida nuestra gran maestra.
Por eso escogí de entre muchos otros, una serie de temas para compartir a
continuación, que son quizá los más básicos, los que más recuerdo y que considero
fueron importantes en esa etapa. Claro está que como no todas las personas iban
todas las veces, es posible que algunos no recuerden que se hayan tocado nunca
algunos temas, también es posible que algunas personas de las que fueron en algunas
ocasiones no escucharon nunca absolutamente nada de estos temas, ni siquiera algo
cercano, y la razón de ello, la expondré más adelante dentro de uno de los contenidos.
Algo que me parece que es muy importante resaltar, es que en este documento (al
igual que en todos mis escritos), NO considero que alguna afirmación, teoría, concepto
o creencia, sea la verdad absoluta, y mucho menos nunca he forzado u obligado a
nadie a que deba pensar igual, o a aceptar ciegamente nada, más bien siempre he
tratado de aceptar y promover la libertad de pensamiento y por lo general siempre
estoy abierto a los debates sanos (los considero enriquecedores), en los que se
exponen argumentos sin pretender por supuesto, que alguien deba de ceder o cambiar
de posición sin que le satisfagan los argumentos opuestos. Dado que cada mente es un
mundo diferente, me parece un gran error tratar de imponer alguna idea o
pensamiento, ya que el camino de cada quien es distinto y cada quien va en su
proceso, en su escala y a su ritmo.
Para algunos, sólo bastará con el leer el título de un tema, para recordarlo y
entenderlo, sin embargo, trataré de explicar someramente cada uno, presentando la
visión actual que tengo de ellos, que no necesariamente corresponde a la visión de
aquella época, y tal vez use palabras o conceptos diferentes, pero en esencia la
enseñanza es la misma. También cabe la posibilidad de que, en algunos de los temas,
caiga en errores o que algunos conceptos sean vulnerables a ser cambiados a futuro,
pues como ya lo he sugerido: somos humanos y nuestra mente está en constante
evolución.
MANTENER SIEMPRE LA MENTE ABIERTA
Esta, creo que es la regla más básica para cultivar el conocimiento y para forjar la
sabiduría, mantenerse en ese estado no es fácil con la influencia de la sociedad en la
que vivimos, pues desde pequeños se nos induce a rechazar, a juzgar o a burlarnos del
que piensa o actúa diferente. Tanto así que en muchos casos se queda clavado ese
pensamiento que muchos solemos tener en la etapa de la adolescencia, de que ya todo
lo sabemos (al menos todo lo que necesitamos saber) o de que ya definimos como
somos y como pensamos y eso ya no va a cambiar en toda la vida. Ese pensamiento
produce realmente un estancamiento mental, pues nos estamos negando la
oportunidad de evolucionar.
Incluso viéndolo bien, cada día que pasa ya no somos los mismos del día anterior, ya
que cada dato, cada suceso, cada experiencia, nos van transformando la manera de
sentir, de pensar y de actuar.
La obtención del conocimiento es un tema filosófico profundo, pero bastará decir que
el ser humano en general se enfrenta a una incapacidad de lograr el conocimiento
verdadero o lo que se llamaría la verdad absoluta, y hasta la ciencia, que es la que se
encarga de buscar y establecer las leyes que rigen nuestro mundo, ha cometido
errores y ha tenido que modificar lo que antes ya se había establecido como una
verdad absoluta. Los estudiosos perciben y saben que entre más estudian y aprenden,
se van dando cuenta que es mucho más lo que no se sabe o lo que falta aprender o
entender, y ese gran desconocimiento se presenta como un enorme mounstro ante
muchas personas, puede inspirar tal miedo que prefieren cerrar su mente y vivir solo
con su nivel de pensamiento instintivo. Pero, aunque es cierto que no podemos lograr
el conocimiento o entendimiento absoluto, también es cierto que nuestra evolución
mental y espiritual como civilización, se basa en desarrollar poco a poco los
conocimientos parciales o relativos tratando de acercarnos cada vez más a la verdad;
pues lo contrario, sería como pensar, que como no podemos saberlo todo, entonces no
podemos saber nada. Además, como todos sabemos nuestra capacidad cerebral en su
mayor porcentaje esta desaprovechada o inutilizada, y eso tiene mucho que ver en
este asunto.
Entonces mantener una mente abierta se trata de estar atento a cualquier idea,
planteamiento, pensamiento o acción de los demás (dentro de los límites de nuestra
moral), sabiendo que detrás, siempre existe una razón o una causa, y esa comprensión
nos permite husmear un poco en la mente de otras personas, y cada mente al ser un
mundo completo, muy probablemente siempre tiene algo que podemos aprender,
desde el niño más pequeño, el ser más loco, el más radical, el más anciano, etc.
En ocasiones nos encontramos con personas que por su forma de ver la vida, quizá
tratando de llevar todo a la máxima simplicidad, o que creen tener ya todo definido en
sus mentes, no se prestan para analizar algún tema o profundizar en él, y al
cuestionarlas, suelen pensar que se les está reprochando algo, o que se les está
obligando a cambiar sus creencias y no están dispuestas a confrontar sus verdades;
lamentablemente son seres que cierran sus mentes antes de darse la oportunidad de
interrogarse a sí mismos y poder ampliar su conocimiento y su entendimiento.
A veces solemos juzgar y rechazar apresuradamente las ideas ajenas, sin darnos
cuenta de que nuestras certezas más evidenciadas, no son más que una gota dentro
del gran océano del conocimiento.
La idea no es, creer o aceptar algo ciegamente, porque alguien dice que es así, o
porque algún sabio lo escribió o porque la religión o la ciencia nos dicen que esa es la
verdad. Lo ideal es usar al máximo nuestra capacidad mental para aceptar o creer en
algo porque lo hemos analizado y nuestra razón o nuestra intuición nos lo dicta así.
Por eso es de gran importancia analizar y cuestionar cualquier información e incluso a
nuestros mismos pensamientos.
Hay que ver, que la naturaleza nos otorgó la capacidad de pensar y de preguntarnos
cosas que tal vez no nos podamos responder inmediatamente, pero dicha capacidad
existe con el objetivo de abrir cada vez más nuestra mente y nuestro entendimiento
para ir avanzando poco a poco en nuestra evolución y en la consecución del
conocimiento y de su comprensión.
El pensar por sí mismo está muy ligado al ‘razonamiento’, y razonar no es más que
utilizar la lógica para procesar las ideas y conceptos, la lógica vendría siendo como las
matemáticas, pero no con números, sino con ideas, entonces por medio de la lógica se
puede comprobar cómo una idea es el resultado de la interacción de otras ideas y
cuando ese resultado es válido o no, claro está que cada persona puede manejar un
nivel de lógica diferente (comparativamente, mientras unos usan sólo la aritmética,
otros pueden usar el álgebra, la trigonometría o el cálculo etc.). Dado que muchas
veces no se tienen las bases o conceptos suficientes como para definir si algo es cierto
o no por medio del razonamiento, entonces entra a jugar un papel importante también
‘la intuición’, que nos suele indicar que hay algo que nos parece o no nos parece cierto,
aunque en teoría no sepamos por qué. Esa intuición está relacionada con las
estructuras mentales internas de cada persona.
En cada mente ‘el entendimiento’ se podría comparar con una red tridimensional que
va uniendo las ideas o conocimientos, y según el conocimiento y entendimiento que
cada persona maneje, esta red puede ser muy pequeña y sencilla o muy amplia y
compleja y en todos los casos, puede sentirse que está bien unida, entretejida, o que le
faltan muchos eslabones, piezas o conexiones. Por eso es posible que haya
contradicciones entre los pensamientos de una persona, pues probablemente muchas
veces necesitamos tener por un tiempo ideas erradas, para poder luego llegar al punto
de darnos cuenta y buscar corregirlas.
Algunos sienten que su entendimiento está completo porque no necesitan de más
ideas que las suficientes para sobrevivir cotidianamente. Pero cuando empezamos a
pensar por nosotros mismos, nos damos cuenta que nos falta mucha información, que
hay muchas cosas que no sabemos realmente, y es ahí cuando empezamos a ampliar
nuestro conocimiento y entendimiento, pues empezamos a tener sed de aprendizaje,
empezamos a cuestionar las ideas que nos han sido impuestas y comenzamos a armar
ese rompecabezas que es nuestro entendimiento, buscando nuevas fichas-ideas,
haciendo nuevas conexiones y muchas veces aceptando como ciertas ideas que luego
nos damos cuenta que no encajan y tenemos que modificarlas o debemos modificar
otras ideas anteriores en las que se basaban esos resultados.
Pensar por sí mismo, es utilizar toda nuestra capacidad mental para entender nuestra
vida y nuestro mundo. No significa que nos basemos sólo en nuestras propias ideas, ya
que en realidad, ninguna idea de por sí proviene de uno mismo, todas las ideas que
manejamos, son aprendidas o percibidas de otros seres humanos y en algunos casos
son transmitidas por otros seres telepáticamente. Cuando creamos ideas o nos
inspiramos, en realidad sólo estamos tomando ideas ya existentes y las combinamos,
las razonamos, las relacionamos o las mezclamos, dándoles nuevas formas.
Así que a la final no importa tanto que pienses o creas, lo importante es que lo hagas
porque así lo entiende tu mente y no porque alguien te dijo que es así como debe ser.
En general hay dos tipos de seres humanos: los que aplican su capacidad natural de
ser libres pensadores y los que como rebaño se someten a obedecer ciegamente y a
dejar que los demás piensen por ellos.
TODO ES ENERGÍA
Actualmente es muy común escuchar que ‘todo entra por los ojos’, que ‘la imagen es la
que vende’ o que ‘la primera impresión es la que vale’, y seguramente así es para un
gran porcentaje de la gente. Sin duda todas las personas solemos emitir algún tipo de
juicio ante la primera impresión que nos llevamos cuando conocemos a alguien,
incluso a veces solo bastan algunos segundos de distinguir a alguien para ya sentir que
nos choca o que nos cae mal, y esto es muy natural por la interacción y compatibilidad
de las energías y de las personalidades.
Pero lo ideal es no darle tanto valor a esa primera impresión, ya que también está
bastante comprobado que ‘las apariencias engañan’, además naturalmente todos
cuando conocemos a alguien tratamos de mostrar la mejor parte y de dar la mejor
impresión posible, y con el tiempo ya empiezan a aflorar las otras facetas no tan
agradables que tenemos. Por lo que es pertinente tomarnos un buen tiempo al
compartir con alguien, para ahí sí emitir algún juicio o emitir alguna opinión sobre esa
persona.
También sucede que, en un mundo con tanta hipocresía y codicia, así como hacen
muchos políticos, las personas usan la demagogia para convencer a los demás de
cualquier cosa, tratan de identificarse con las personas, acuden a hablarle de temas
que les toquen fibras sensibles, etc. para lograr quedar lo mejor posible para sus
propios intereses y en ocasiones con el único fin de ganar admiración para enaltecer o
alimentar su ego; por eso lo mejor es tomarse el tiempo de estudiar, analizar con
profundidad, conocer y guiarse más por las acciones y comportamientos que por las
palabras.
El aspecto personal o apariencia personal es algo fundamental en la sociedad actual, y
todos de una u otra forma procuramos mostrar algo o dar algún mensaje por medio de
nuestra apariencia, sobre nuestros gustos, nuestra manera de pensar o nuestra forma
de ver la vida. Sin embargo, así como para algunas personas es bastante importante el
material de las prendas o las marcas de la ropa, es muy probable que para las
personas más sabias y más humanas eso carezca de alguna importancia, pues más allá
quizá del aseo personal, su real interés está en las acciones, la mentalidad y el espíritu
de las personas, que son a la final los factores que realmente definen al ser humano y
no el estilo, la moda, el valor de las prendas o sus posesiones.
Una crítica se emite muy fácilmente, lograr una comprensión profunda es mucho más
difícil, requiere esfuerzo y paciencia.
Aunque antiguamente lo normal era pensar que solamente en el planeta tierra había
vida inteligente, y pensar lo contrario era una locura, hoy día parece que se ha
invertido el asunto. Es que es en realidad una locura pensar que en un universo tan
enorme no haya más posibilidades de vida sino sólo en el planeta tierra, sabiendo ya
por observaciones científicas que existen por lo menos cien mil millones de galaxias, y
que cada galaxia contiene por lo menos cien mil millones de astros como lo es nuestro
sol, y que cada astro puede tener varios planetas orbitándolo, entonces es muy difícil
creer que sólo en nuestro planeta se dieron las condiciones necesarias para la vida,
aparte de que también existe la posibilidad de que existan muchos otros tipos de vida
que requieren condiciones totalmente distintas a las que requerimos nosotros.
Por otro lado, existen miles de testimonios de avistamientos de naves o de seres no
humanos, hay muchísimos videos que se ha confirmado con estudios que no son
montajes, aparte de los cientos o tal vez miles de personas que dicen haber sido
contactados o que aseguran canalizar o recibir mensajes telepáticamente de otros
seres, también existen cientos de hallazgos arqueológicos que son evidencia clara de
esto.
Sea como sea, la vida abunda en el universo, y es ilógico pensar que en un sistema tan
inmenso todo sea inerte menos nuestro planeta, eso sería como regresar a el
pensamiento medieval de que todos los astros, planetas y el universo entero gira en
torno a la tierra.
Tener esto presente crea grandes cambios en nuestra mente y amplia nuestra visión
de la vida y su sentido, también nos ayuda a sentirnos más unidos como raza humana
y como planeta tierra.
EL SISTEMA DE LA EVOLUCIÓN
EL KARMA Y EL DARMA
Una de las leyes fundamentales que rigen y mantienen en orden nuestro universo es la
ley de causa y efecto, así como sucede con la interacción de los cuerpos en la física, en
donde toda acción tiene una reacción, igual pasa con las acciones, comportamientos e
incluso con los pensamientos.
La ley del karma nos dice que cuando actuamos mal o hacemos algo malo, tarde o
temprano nos va a pasar algo malo, y el darma nos indica que cuando hacemos el bien
y actuamos correctamente, en algún momento nos va a llegar la recompensa. Claro
que estos resultados la mayoría de veces no llegan inmediatamente, ni de la misma
forma en que se produjeron las causas, sino que de la forma menos pensada o de la
persona que menos nos imaginamos se produce ese efecto. Dicha ley también se le
conoce como la justicia divina.
Este tema está muy ligado a la ética, pues son las normas morales en general las que
nos señalan lo que es un comportamiento bueno y uno malo; esto puede parecer muy
sencillo, ya que desde que adquirimos el uso de razón empezamos a aprender qué está
bien o qué está mal según el contorno y la sociedad en que nos criamos. Pero
particularmente siempre hay asuntos muy complejos que nos hacen cuestionarnos
sobre lo que es realmente correcto, por ejemplo, una acción que alguien hace para
salvar a un ser querido, pero que afecta a un desconocido. Entonces se debe sopesar o
medir que es lo mejor, y cual necesidad o derecho está por encima de cual.
Existen diferentes tipos de moral que se podrían clasificar en diferentes grupos, y cada
persona, aunque puede tener mayor tendencia a regir su moral de cierta forma,
depende de cada acontecimiento particular la forma en que elija comportarse. En
general, una de las formas en que se pueden dividir los comportamientos es así; las
personas creen que algo es bueno o malo según: 1. la obediencia o miedo al castigo, 2.
los intereses u objetivos personales, 3. la necesidad de encajar en el entorno
(complacer a los amigos o familiares), 4. el sentido común o lo socialmente aceptable,
5. las leyes y normas del lugar, 6. principios aplicables universalmente. Este último es
la cúspide de la ética y sería lo ideal que todo ser humano basara su comportamiento
en esos principios, mientras que los tres primeros son los más faltos de consciencia;
saber de qué forma estamos actuando y bajo que preceptos vemos nuestras acciones
como buenas o malas, nos ayudará sin duda a ser más sinceros con nosotros mismos y
a construir de mejor manera nuestra moral.
Cuando actuamos de una forma en que resulta afectado algún ser (incluso nuestro
propio cuerpo o mente) seguramente estamos creando un karma y esa causa tarde o
temprano traerá un efecto, claro que si fuimos conscientes desde un principio de que
se iba a causar esa afectación seguramente será más pesado el karma, pero si se causó
sin culpa, posiblemente será más leve. Algunas personas piensan que, si hacen algo
malo y luego hacen algo o varias cosas buenas, de alguna forma se compensa o
balancea y se elimina el karma, realmente eso no es muy coherente con la ley de causa
y efecto, pues lo hecho, hecho está, y esas causas que se han formado sin duda traerán
sus efectos, lo que si podemos hacer es evitar formar más karmas en base y después
de ese, pues los karmas muchas veces se forman en cadenas de causas y efectos,
debido a no saber afrontar los eventos o situaciones que consideramos negativas. O
sea que, si formamos un karma y cuando nos llega el efecto, reaccionamos de mala
manera, seguramente formaremos otro y así sucesivamente, lo mejor es tratar de
afrontarlo de la mejor manera posible sin crear más daños y procurando aprender la
lección que es lo más importante.
Para los que creemos en la reencarnación, esta ley del karma y el darma aplica
durante sucesivas vidas, pues muchas veces los efectos llegan en la siguiente o
siguientes vidas a la que se formó la causa, y eso daría respuesta a muchas de las cosas
que vemos como injusticias absolutas, por ejemplo, la enfermedad o el sufrimiento de
pequeños niños que se consideran inocentes, o las desgracias o tragedias que suceden
a personas que son notoriamente correctas, etc., el principal argumento en contra de
esa teoría es que, ¿porque razón tendríamos que pagar por algo de lo que no nos
acordamos? Y la razón seria que lo hecho, hecho está, y su efecto es infalible así no nos
acordemos, y si no nos acordamos muy posiblemente es debido a nuestra falta de
consciencia completa, pues debemos recordar que nuestra mente también se
compone de una parte inconsciente y otra subconsciente que muy posiblemente capta
todo lo que conscientemente no captamos, además muy seguramente después de la
muerte y de ir a otro plano, allí sí nos acordaremos de las sucesivas vidas y de la
coherencia entre las causas y efectos que hemos formado y de los acontecimientos y
aprendizajes que están relacionados a ellas.
No sobra aclarar que, en su origen los términos Darma y Karma tienen un significado y
connotación distinta a la mencionada (que es el uso más común y simple en el mundo
occidental), ya que son designaciones básicas en los contextos de las religiones
hinduistas y budistas, en donde se usan de forma algo distinta.
EL CUIDADO DE LA NATURALEZA
Para muchos los recursos naturales son sólo materiales que se encuentran ahí para
que el ser humano disponga de ellos a gusto y conveniencia, pero no se dan cuenta de
que el planeta es un ser vivo y todos los seres que lo habitamos podríamos
representar órganos, sistemas o células de él. Existe un equilibrio sorprendente entre
las especies, los recursos y las condiciones de la tierra, por eso la explotación
desmesurada de los recursos y la altísima contaminación crean desequilibrios que a la
final enferman el planeta, ponen en riesgo la vida de sus habitantes y termina
afectando la vida y la mente del ser humano.
El planeta es nuestro hogar, nuestro sustento y además resulta ser una gran nave
espacial que nos va transportando a velocidades sorprendentes por la galaxia y el
universo; es sorprendente ver cómo piensan algunos, que ponen por encima de todo,
su desarrollo individual ante los demás seres vivos y el planeta, si lo vemos bien es
como si una o varias células nuestras se revelaran contra nosotros y comenzaran a
destruirnos desde adentro pensando que son organismos independientes de nuestro
cuerpo.
Aunque el planeta no nos hable en nuestro idioma y con palabras, seguramente tiene
una inteligencia superior a la del ser humano, pero algunos creen que el ser humano al
ser la especie más inteligente del planeta puede poner a su disposición todo lo que
encuentre para su beneficio y evolución, este tipo de pensamiento egoísta tiende a
creer que lo más importante es el avance del ser humano y que los seres vivos y los
recursos están en un segundo plano, pues basta con que el ser humano evolucione lo
suficiente para poder llegar a otro planeta en pos de sus recursos. Afortunadamente el
universo es muy ordenado y tiene leyes inquebrantables, muy seguramente colonizar
otros planetas parecidos al nuestro, no va a ser posible hasta que logremos aprender a
cuidar y a vivir en armonía con nuestro propio planeta.
Todo sistema de vida depende de la interacción y equilibrio entre los seres vivos y los
recursos de cada ecosistema. Si pensamos, no como ser individual, sino como ser que
es parte de una humanidad y de un planeta vivo, comenzaremos a ver la importancia
de la conservación del equilibrio natural y de los recursos existentes, pues
dependemos de ellos totalmente para nuestra propia evolución.
Vivir en una gran ciudad hace muy compleja la tarea de proteger los recursos
naturales, ya que lamentablemente muchas cosas están tan mal diseñadas que se hace
casi imposible que podamos vivir de una forma armónica con la naturaleza, desde que
entramos al baño contaminando el rio, los productos tóxicos de aseo que usamos, los
empaques de los productos que consumimos, el aporte contaminante de las industrias
para generar la cantidad de cosas que adquirimos, los combustibles de los medios de
transporte que usamos, etc. pero por algo se empieza, y en esta crisis ambiental que
sufre actualmente el planeta, cualquier grano de arena cuenta y sirve, hay muchas
cosas que podemos hacer para cambiar nuestros hábitos y contaminar menos, pero
quizá lo principal es luchar contra nosotros mismos para evitar el consumismo, y esto
se puede lograr dejando de buscar la felicidad o satisfacción en la adquisición
descontrolada de cosas y productos innecesarios que más bien nos meten en un
círculo vicioso de consumismo que nos sume en el materialismo.
Actualmente ya es mucha la información ambiental que circula y son muchos los
consejos y soluciones que se dan a las diversas problemáticas, así que no me
extenderé en mencionar todas las cosas, productos, formas y comportamientos que
contaminan y todo lo que podemos hacer para mejorar en cada aspecto.
Lastimosamente todos nuestros actos en contra de la armonía y del equilibrio natural
del planeta traerán muchos resultados nefastos en el futuro y un gran sufrimiento y
desdicha para las próximas generaciones, que en muchos casos serán simplemente las
futuras encarnaciones de los que hoy viven y son indiferentes hacia toda la
contaminación que producen.
A través de la historia y en todos los tiempos han sucedido acontecimientos que son
una clara muestra de la existencia de otros planos distintos al material, en donde se
manifiesta también la vida. Van desde visitas al infierno, posesiones demoniacas,
comunicación con muertos, percepción de almas en pena, visión de fantasmas, hasta
viajes astrales a otros mundos, comunicación con ángeles, contactos con Dios, visitas
al cielo, regreso de la muerte, telepatía con seres extraterrestres, canalización de
mensajes del más allá, etc., y otra cantidad de eventos y nombres que se le han dado a
esos fenómenos ‘sobrenaturales’
Llamamos ‘sobrenatural’ a cosas o eventos que vemos que están por fuera de la
naturaleza que hasta ahora conocemos, pero a decir verdad ni siquiera conocemos o
entendemos bien la naturaleza material y aún menos la de otras dimensiones y planos
de existencia, pero cada plano y cada dimensión también tienen unas leyes naturales
en base a las cuales funciona, y es debido a nuestra ignorancia sobre ellas que usamos
nombres como: sobrenatural, paranormal, milagroso, etc.
Lo importante es abrir la mente y comprender que existen otros tipos de vida
distintos a la vida material, muchos al no poder conocer, entender o percibir esto,
deducen que no existe nada más que lo que ven, tocan y sienten, y que además al estar
viviendo en la materia de nada nos sirve conocer acerca de estos fenómenos, pero
sobra decir que el hecho de que no percibamos algo, no quiere decir que no exista, y la
importancia de comprender y dar cabida en nuestra mente a otras formas de
existencia, de seguro va a influir en nuestra evolución, ya que al parecer las
dimensiones y planos están todos interconectados y de alguna forma tienen que ver
con el plano material, las manifestaciones más comunes se perciben ya sea por sueños
premonitorios, dejavus, desdoblamientos, percepción de familiares muertos,
experiencias místicas o religiosas, y hasta en la propia muerte.
Es muy normal que le tengamos miedo a lo desconocido, pero hay que ver que el
universo es inmensamente maravilloso y aún desconocido para nosotros en su mayor
parte, hay que comprender que la vida existe en miles de formas distintas y nuestra
existencia y caminar por el cosmos no se trata sólo de vivir esta vida y ya, todo
termina, sin algún sentido o propósito superior, sino que el universo es muy
organizado y todo tiene un orden, y debido al sistema de la evolución es muy posible
que nuestro paso por esta vida no sea más que un instante, comparativamente podría
ser como un año escolar, o un día de vida antes de ir a dormir o como un día de
colegio. Entonces como seres compuestos de energía que somos, nuestra vida
energética o espiritual realmente es eterna y nuestro camino de aprendizaje es muy
largo, en el que seguramente iremos pasando por diferentes planos y dimensiones de
existencia para perfeccionar cada vez más nuestro entendimiento y nuestro ser.
Primero que todo es muy importante señalar que absolutamente todas las religiones,
sectas, filosofías y creencias merecen todo el respeto, ya que toda religión en principio
está conformada para buscar el avance espiritual y moral del ser humano. Es habitual
que muchas personas al encontrarse desorientadas, confundidas y desconectadas de
la espiritualidad, necesitan y buscan algún ser o institución religiosa que les brinde
esa seguridad que les falta, que les ayude a encontrar una comprensión del mundo,
que los guíen en cuanto a cuál es la forma correcta de comportarse, que les haga sentir
que son parte de un propósito superior y que brinden respuestas a tantas inquietudes
que por lo regular se tienen. Entonces la intención y finalidad puede ser la misma en
todos los casos, pero los caminos pueden ser muy distintos, y dado que todo ser
humano es un mundo distinto, se debe respetar el camino y proceso que cada quien
transita.
Existen en la actualidad aproximadamente 4.000 religiones distintas y cada una de
ellas tiene una razón de ser y se deben a una forma particular de pensamiento, pero
absolutamente todas se apoyan y justifican en testimonios de curaciones, milagros,
contactos con Dios, iluminaciones, cambios de vida etc. Lo que personalmente siempre
he destacado de las religiones, es que en muchos casos ayudan a las personas a ser
unos mejores seres humanos, a cambiar malos hábitos y a veces a salir de las
condiciones más precarias, lamentablemente también hay casos contrarios en que las
personas adquieren más defectos de los que arreglan, y ni que decir de todos los que
usan la religión para aprovecharse de la fe de las personas y usarla para beneficio
propio. Uno de los errores más frecuentes es generalizar y juzgar a las personas por
pertenecer a alguna religión, es decir pensar que todos lo que profesan X religión son
iguales y tienen los mismos defectos, en realidad podemos percibir, que como seres
humanos que somos, en todas las religiones hay gente muy buena, con muy buenas
intenciones y comportamientos y también gente muy mala, con doble moral, codicia y
comportamientos muy erróneos, entonces no es por el hecho de pertenecer a una u
otra religión que podemos asegurar que una persona es correcta o no lo es.
Pueden ser muchas las diferencias ideológicas que se tienen entre las distintas
religiones, sectas, filosofías, escuelas místicas, etc., y por lo regular siempre se juzga,
se señala, se critica y se condena a los demás, cayendo en el juego del separatismo,
siendo que casi todos los caminos espirituales y formas de pensamientos se dirigen
hacia el mismo lado, o por lo menos tienen en común muchas cosas básicas, como la
búsqueda de una vida armoniosa, con buenos valores, equilibrada, comprensiva, en
paz, y un trascender, evolución, elevación, salvación, etc., entonces lo mejor que
podemos hacer es tratar de concentrarnos más en encontrar y desarrollar nuestras
coincidencias y no tanto en rivalizar nuestras diferencias.
Si bien a través de los siglos las religiones en muchos casos han despertado la
espiritualidad de las personas y han impulsado buenos comportamientos y el amor a
todos y al todo, también a las principales religiones (las que más adeptos tienen) se
les suele culpar de grandes engaños y de actos horrendos, totalmente reprochables y
muy contrarios a lo que profesan, y es ahí en donde las religiones se quedan cortas,
pues la sola fe o espiritualidad o conexión con Dios o como se quiera llamar, sin el
conocimiento, entendimiento y coherencia de la acción con el pensamiento, por lo
general dejan estancado al ser humano en su evolución, tanto al punto de que en
algunas, se les trata de prohibir a las personas que cuestionen y piensen por sí mismas
y se les induce a que desistan de su derecho natural de hacerlo. Entonces tal vez son
innumerables todos los engaños que cada religión ha ejercido a través de los tiempos
sobre el ser humano, pero en esta ocasión sólo quisiera referirme a uno, que por lo
general casi todas las religiones tienen en común.
El más grande engaño está en hacer creer a las personas que únicamente mediante esa
religión se van a salvar, o van a ir al cielo, o van a trascender o van a llegar al lado de
Dios etc. Indudablemente ninguna religión puede asegurar que es la única llave de
entrada al cielo o como se quiera llamar, y mucho menos que la salvación consiste
solamente en asistir a cierto templo, o seguir cierta fe, o bautizarse en cierta creencia,
o aportar a cierta iglesia, o por leer, orar, cantar o alabar x número de horas diarias,
etc. la verdadera espiritualidad es un trabajo individual que nadie puede hacer por
nadie y mucho menos se puede comprar. Claro que en muchas ocasiones se necesita
un guía, un consejo, alguna técnica, explicación etc., pero el real cambio es un trabajo
personal que cada quien debe realizar en su interior, incluso una verdadera
transformación espiritual no se anuncia o publicita, sino que esos resultados se ven
reflejados en el cambio de pensamiento y comportamiento, así como en las acciones y
objetivos a los que se destina la vida. Entonces, aunque todas las religiones aseguran
que son las únicas verdaderas y que son el único medio para trascender, más bien
podríamos decir que sin importar que fe, religión o creencia se tenga, la única forma
de trascender es mediante un duro trabajo interno de conocernos más a nosotros
mismos, comprender y manejar nuestras emociones e instintos, entender más nuestro
mundo y nuestra tarea en él, tener cada vez más consciencia, formar de la mejor
manera nuestros principios morales y ser lo más coherentes posible entre nuestras
pensamientos, palabras y acciones.
Entre otras cosas, el ateísmo resulta siendo también una creencia cuando se piensa
que no existe algo porque no se puede percibir o comprobar; esa creencia está basada
en pensar que nuestros limitados sentidos físicos y nuestra limitada tecnología nos
brindan una versión pura de la realidad del universo.
En este caso hablaré, no de los sueños que tenemos mientras dormimos, sino de
aquellos sueños que todos en algún momento de la vida tenemos, son esas grandes
metas que quisiéramos lograr, esos objetivos que a veces parecen lejanos y hasta
imposibles, son esos anhelos que muy en nuestro interior añoramos hacer realidad
para sentir mayor felicidad o satisfacción en la vida.
Normalmente desde la niñez todos tenemos sueños, de lograr ejercer alguna
profesión, vivir aventuras o hacer alguna hazaña, en algunos casos pasada la niñez, se
mantienen, en otros casos entrada la adolescencia o la juventud, esos sueños cambian
adaptándose más a la realidad, a lo que puede estar al alcance, o a nuevos gustos o a
habilidades recién descubiertas. Lamentablemente en la mayoría de casos, entrada la
adultez, esos sueños pasan a un segundo o tercer plano, hasta que se van quedando en
el olvido, casi siempre debido a la falta de oportunidades, falta de recursos, falta de
apoyo, adquisición de responsabilidades como hijos, pareja, padres, familia, deudas,
etc., incluso a veces, con el tiempo, ya ni se recuerdan o se cambian muchas veces por
cosas como llegar a tener una casa, una camioneta, una finca, comodidades,
independencia económica y demás cosas materiales… que gran diferencia con los
sueños de niños, que muchas veces tienen que ver con ayudar a los demás, salvar o
mejorar vidas, inventar cosas que beneficien a la humanidad, ayudar a educar, viajar y
explorar el mundo, viajar al espacio exterior, defender y salvar animales, alegrarle la
vida a las personas por medio de algún arte, prestarle algún servicio a la gente, etc., es
como si a medida que crecemos, vamos perdiendo el ánimo, vamos olvidando la magia
de la vida y la seguridad de poder lograr cualquier cosa, queda atrás la pureza de los
sentimientos humanos y la inocencia de percibir un mundo que nos acoge y conspira a
nuestro favor.
En cuanto a los sueños de ejercer alguna profesión, todos somos diferentes y por ende
cada quien tiene gustos diferentes y alguna habilidad o talento diferente, y de esto
depende en buena parte la capacidad y el potencial que tenemos para determinado
oficio. Dicen que cuando a uno le gusta lo que hace, lo hace con amor y de la mejor
forma posible, y esas suelen ser las tareas y trabajos mejor hechos y a consciencia,
lastimosamente por diversas causas, muchas personas no pueden hacer lo que más les
gusta y se ven obligados a trabajar en lo que sea que les aparezca, en otros casos se
escogen carreras y trabajos haciendo lo que más les de dinero, y esto genera muchos
problemas para la persona y para la sociedad, pues al ser el crecimiento económico su
principal objetivo, muy seguramente van a hacer las cosas mediocremente, con tedio,
sin un sentido humano y son los más asequibles a dejarse comprar o a cometer todo
tipo de actos de corrupción; de casos de esos está llena nuestra sociedad en todos los
ámbitos e instituciones tanto públicas como privadas. También es clave aprender a
identificar y a diferenciar lo que más nos gusta y en lo que más tenemos talento,
aunque el ideal es que sean la misma cosa, a veces no sucede así, y entonces se ven
casos en los que a alguien le puede gustar mucho alguna profesión u oficio, pero tiene
gran talento para otra cosa diferente, es ahí donde hay que tatar de encontrar un
equilibrio y tratar de cogerle el mayor gusto al oficio en el que se es más hábil, o poner
el mayor esfuerzo en tratar de adquirir más habilidad en lo que le gusta; sin duda, sea
como sea, lo más importante es luchar por estudiar y/o ejercer la profesión en la que
mejor nos sintamos, la que hagamos con más agrado y que se acerque más a nuestros
sueños.
Todo ser humano en el fondo de su alma, sabe cuáles son los caminos que debe
recorrer en la vida, y los sueños pueden ser una señal de ello, pues se puede decir que
los sueños son los anhelos del alma, pero hay que saberlos diferenciar de los deseos y
caprichos del ego. Procurar dirigirse hacia esos sueños puede significar ‘vivir’ la vida
en su esplendor, pues a veces la misma sociedad o el sistema nos empuja a sólo
‘subsistir’ o a ‘sobrevivir’, muchas veces nos dejamos llevar por la corriente, por la
inseguridad o el miedo, y simplemente nacemos, crecemos, nos reproducimos y
morimos superficialmente sin experimentar la vida de una forma más provechosa y
profunda, nos llenamos de limitaciones y olvidamos lo que venimos a aprender y que
nuestra muerte no es más que un parpadeo en nuestra verdadera existencia.
Lo normal es que los sueños sean transitorios, pues comúnmente poco después de
alcanzar alguna meta, o cumplir un sueño u objetivo, aparecen nuevos retos, nuevos
caminos y nos colocamos nuevas metas y tenemos nuevos sueños, porque cumplir un
sueño o llegar a un objetivo no quiere decir que llegamos a un punto de satisfacción o
felicidad estático y eterno, eso no existe al menos en este plano, cumplir nuestros
sueños no es más que dar pasos en el largo caminar de nuestras existencias y
aprovechar al máximo nuestra oportunidad de vivir.
EPILOGO
Sé que son muchos los temas que quedan por fuera, y tal vez algunos de ellos son bien
importantes, pero quizá los he excluido por el grado de complejidad, o por el nivel de
polémica que producen o por las susceptibilidades que fácilmente pueden herir,
también sé que probablemente surjan muchas más preguntas que respuestas, y es que
para tratar estos temas se podría hasta escribir un libro completo de cada uno, por
ello traté de hacer las explicaciones lo más cortas y sencillas posibles. Y en verdad es
muy positivo poder generar dudas y preguntas, ya que esto nos lleva a cuestionarnos
a nosotros mismos y a evaluar los argumentos en los que basamos nuestros
pensamientos y creencias.
Con gusto estaré atento a las observaciones o críticas constructivas, y a responder las
preguntas que surjan, pero antes es importante que primero se las hagan a ustedes
mismos varias veces y traten de encontrar una o varias respuestas por su cuenta, este
ejercicio les puede producir otras cuestiones más profundas o les puede hacer dudar
de algunas de las creencias que tenían como certezas, incluso idealmente repitan ese
ejercicio durante varios días o semanas distintas, ya que el pensamiento no funciona
todos los días igual, se darán cuenta que lo que antes era una gran duda, otro día
puede ser algo insignificante, o lo que antes era imposible de entender, otro día se
vuelve claro y entendible. Si después de hacer esto siguen las dudas o surgen otras
distintas, estaré gustoso de recibirlas y pondré mi mayor esfuerzo en responderlas, e
incluso estaré muy dispuesto a cambiar de opinión, de conceptos, o de términos si la
pregunta u observación así lo ameritan.
Casi veinte años después, muchas cosas en el mundo han cambiado y es mucha la
información que cada vez más sale a la luz, así que aparte de todos los temas que se
trataron en esa época y que quedaron por fuera de este texto, ahora hay muchísimos
conocimientos más que quisiera compartirles, pero eso depende de cosas que sólo
resolverá el tiempo. De todas formas, estoy seguro de que con muchos, no es esta vida
la primera en la que nos encontramos, y quizá no será la última, pues cuando se crean
lazos fuertes, nuestras vibraciones se atraen y hasta muy posiblemente se pueda
llegar a compartir vivencias en otros planos de existencia.
Las enseñanzas, consejos u opiniones expresadas no se deben ver como parte de una
receta para lograr la felicidad o llegar al éxito de la vida, sino más bien como
principios de una apertura mental que puede conducir a la generación de más
consciencia de nosotros mismos, de nuestro mundo y de nuestra misión en él. Sé que
para muchos seguir o aplicar todas las pautas y comportamientos propuestos en los
diferentes temas, será casi imposible e incluso para algunos será todo un reto poder
aplicar alguno de ellos, pues la mayoría implican ir contra la corriente y eso no es
nada fácil, pero recuerden que todo camino se empieza con un paso y entrar en un
camino espiritual no es para facilistas, la evolución mental y espiritual es un muy largo
sendero solitario, lleno de retos, que requiere un arduo y constante trabajo interior
para poder generar cambios importantes a nivel de consciencia, de nuestro
desempeño en el planeta y en nuestra travesía por el universo.
Aunque este escrito está inspirado en lo que se compartió alguna vez entre un grupo
particular, decidí enviar este texto, sólo a algunas de esas personas, tal vez a las que
creí que más les interesaría, así sea sólo para evocar un recuerdo, pero a esas
personas y a todos los que lo lean, les dejo en total libertad para compartirlo con
quienes ustedes crean pertinente, o con quienes crean que valga la pena, y que tal vez
podrían sacar algún provecho mental o espiritual de la lectura.
Gracias… y…
Que tu mente se llene de consciencia
Que tu energía se funda con el universo
Que el cosmos te arrulle en su armonía
Que la espiritualidad te torne despierto.
Año 2.020.