En ingeniería, el ensayo de compresión es un ensayo técnico para
determinar la resistencia de un material o su deformación ante un esfuerzo
de compresión. En la mayoría de los casos se realiza con hormigones y metales, aunque puede realizarse sobre cualquier material. Se suele usar en materiales frágiles. Los ensayos de compresión se llevan a cabo para caracterizar el comportamiento de un material bajo carga de compresión. Durante el ensayo, se ejerce una presión sobre una probeta mediante los platos de compresión, a través de la cual se determinan varias propiedades del material. Se usan para determinar el comportamiento de un material sometido a cargas aplastantes aplicadas y, generalmente, se desarrollan al aplicar presión compresiva a un espécimen de ensayo (frecuentemente con forma de cubo o cilindro) usando platinas o accesorios especializados en una máquina. Describen el comportamiento de un material cuando está sometido a una carga de compresión a una velocidad uniforme. La norma general para materiales plásticos es la UNE-EN ISO 604. En la práctica, las cargas a compresión no siempre se aplican instantáneamente. El fin del ensayo de compresión puede ser determinar las propiedades de un material o el comportamiento de un componente o sistema completo frente a una solicitación externa. Determinación de las propiedades del material: ejemplo: norma EN 196-1 resistencia mecánica de cementos y morteros. Se busca obtener valores “absolutos” de resistencia del cemento, de forma que se puedan clasificar y comparar. En esta normativa se describe todo el proceso de ensayo de forma que su preparación, curado y proporción de componentes no pongan en compromiso la comparación de resultados entre diferentes fábricas y países. Las probetas se preparan mediante la mezcla controlada del cemento, junto con los áridos y el agua en composición, cantidades y con un procedimiento muy detallado. Las propiedades mecánicas del cemento determinadas en el ensayo de compresión según EN 196-1 dependen directamente del proceso de preparación de probeta, su curación y por supuesto de la máquina de ensayo y el procedimiento de ensayo de compresión. Comportamiento del elemento a ensayar: en este caso, el objetivo está orientado principalmente a la determinación de los límites de trabajo del elemento en cuestión: fuerza máxima, deformación a rotura, inicio de grieta, etc. Estos valores permitirán verificar que los diseños realizados teóricamente se corresponden con los valores empíricos obtenidos en una simulación real de trabajo. Para que el ensayo se realice de forma precisa y repetitiva, se necesita una máquina de ensayo que garantice que tanto las mediciones como el control, como su comportamiento son por lo menos como lo requiere la norma. Por último, es necesario disponer de un software de ensayo de materiales capaz de permitir al usuario configurar el ensayo, realizar los cálculos acordes a la normativa en cuestión, representar gráficas y analizar valores.