Manual

de la Iglesia
edición 2022
Jorge L. Rodríguez
 ¿Por qué tenemos un Manual?
• Porque Dios es un Dios de orden.

• «La iglesia de Cristo está en constante

peligro. Satanás está tratando de destruir
al pueblo de Dios, y no es suficiente la
mente de un hombre, el juicio de un
hombre, para confiar en él. Cristo quisiera
unir a sus seguidores como iglesia,
observando el orden, teniendo normas y
disciplina, y estando todos sujetos unos a
otros, estimando a los demás mejores que
uno mismo» (3T 489).
 Se viene haciendo cada vez más evidente
la necesidad de un manual sobre el gobierno
de la iglesia, para dar a conocer y salvaguardar
nuestras normas y prácticas denominacionales
 ¿Cómo se hacen los cambios?
Cualquier nivel de la
iglesia puede proponer un
cambio, que pasará por los
otros niveles
Solo un congreso de la
Asociación General puede
aprobar cambios al Maual
Si todos los niveles
aprueban, pasa a la
comisión del Manual y
luego al congreso.
Términos usados (p. 5)
Las referencias a la iglesia local por
lo general también se aplican a los
grupos.
*Evita repeticiones innecesarias
 Sin muro de
separación (p. 8)
Los elegidos de Dios constituimos
un cuerpo universal, una nueva
creación, redimidos por la sangre de
Cristo, que está disponible para
todos: «Ya no hay judío ni griego;
no hay esclavo ni libre; no hay
hombre ni mujer, porque todos
vosotros sois uno en Cristo
Jesús» (Gál. 3: 28).

*Se añadió la cita directa de la Biblia.

 Enmiendas varias
Eliminar la palabra «reelección».

Cambiar «ceremonia bautismal»

por «servicio bautismal».

Multiconstituent board

Junta de la Asociación por «junta

directiva de la Asociación»

Eliminar lo que ya no es necesario

 Propósitos misioneros
de la organización (pp. 13-14)
● Nuestra misión permanece inalterable independientemente de la parte del mundo
en que nos encontremos. La Iglesia Adventista del Séptimo Día ha sido organizada
con el propósito de cumplir la misión. Sin embargo, la manera en la que cumplimos
dicha misión necesitará adoptar diversas formas como resultado de las distintas
normas culturales y sociales. A medida que procuramos compartir el evangelio en
contextos multiculturales, nos encontraremos con sociedades en las que
determinados grupos religiosos consideran sagrados otros escritos, en las que a
veces existen restricciones a la libertad religiosa, en las que hay diversos puntos de
vista y prácticas, así como otros desafíos. Para cumplir con la misión en contextos
tan diversos, confiamos en que el Espíritu Santo nos guiará y empleamos un
en-foque flexible para compartir el amor de Dios de manera que este llegue a los
corazones, conservando al mismo tiempo nuestra vocación e identidad únicas como
adventistas del séptimo día.
● Las condiciones que los adventistas del séptimo día
enfrentamos al compartir el mensaje de Jesús con personas
de otras religiones son en gran medida similares a las que
enfrentaron los apóstoles. La forma en que ellos llevaron a
cabo la misión resulta instructiva para nosotros hoy. Aunque
modificaron su enfoque en función del público, nunca se
desviaron de la proclamación de la singularidad de Jesús
como la esperanza del mundo. Nunca sugirieron que habían
venido a ayudar a sus oyentes a encontrar una experiencia
espiritual más profunda dentro de sus propias religiones; al
contrario, los desafiaron a aceptar la salvación provista en
Cristo.
● Debieran formarse grupos para llevar a todas las personas a
una relación salvífica con Jesucristo y a la comunión con la
iglesia remanente. Al formar tales grupos, se debiera desarrollar
y seguir, bajo oración, un plan de acción teológicamente sólido y
que estudie la cultura, con el objetivo de guiar a estos nuevos
creyentes a la membresía. Estos grupos han de establecerse en
colaboración con la administración local y las directrices de la
Iglesia mundial. Los dirigentes de estos grupos procurarán guiar
a las personas a la membresía de la Iglesia Adventista del
Séptimo Día.
● La iglesia es una comunidad misionera y su organización existe
para cumplir dicho propósito.
 Organización de
grupos (p. 28)

Dado que la ordenación no se realiza

en los grupos, no se debieran elegir
diáconos ni diaconisas, sino que la
congregación local debiera escoger
hombres y mujeres que sirvan como
«ayudantes del grupo». Sus
funciones serán similares a las que
desempeñan los diáconos y las
diaconisas de las iglesias
organizadas en actividades que no
requieren de la ordenación.
El discipulado
El discipulado es un proceso continuo mediante el cual una persona se
convierte en discípulo de Jesucristo, madura como discípulo y hace más
discípulos. El bautismo forma parte esencial del proceso de discipulado,
pero no constituye el resultado final de dicho proceso.
 ¿Qué es un discípulo?

Un discípulo es una persona También conlleva enseñar a a través de la consejería, los

que se está pareciendo más a los nuevos creyentes a cómo grupos pequeños, los
Jesucristo en todos los armonizar sus vidas con la estudios bíblicos, el servicio,
aspectos (Efe. 4: 15). El Palabra de Dios etc.
proceso de hacer discípulos
es continuo.
 El crecimiento del discípulo

01 02 03

Adoración/devoción Ministerio en favor de Testificación

personal los demás
 04 05

Obediencia Alcance a la comunidad

Transferencia de miembros

Si un miembro solicita por escrito

ser dado de baja de los registros de
feligresía, la junta de la iglesia
deberá acceder a dicha petición. Se
puede informar a la iglesia de la
solicitud del miembro, pero no se
discutirá (p. 51).
Revisión del registro
de miembros con
fines redentores
La iglesia local debe mantener al día el registro
de miembros. El siguiente nivel administrativo de
la organización puede revisar el registro de
miembros de la iglesia. Esta regla, que también
se aplica a cada institución o nivel de la
organización, proporciona la mayor privacidad
posible a la información personal de los
miembros y se debe aplicar siguiendo las leyes
locales (p. 52).
No hay pruebas adicionales de discipulado
La autoridad para establecer pruebas
de discipulaado pertenece al
Congreso de la Asociación General.
Por lo tanto, cualquier persona o
entidad que trate de aplicar otras
pruebas, fuera de las que se
establecen en este MANUAL, no está
representando debidamente a la
Iglesia (p. 62).
Derechos de los miembros
Ninguna iglesia puede tomar un acuerdo para
disciplinar a un miembro de la feligresía en
circunstancias que lo priven de estos derechos.
La iglesia debe informar por escrito al miembro,
al menos dos semanas antes de la reunión de la
junta y dos semanas antes de la reunión
administrativa e incluir las razones de la
reunión disciplinaria (p. 63).
 Periodo de servicio

El período de servicio para los

dirigentes tanto de la iglesia como de
sus organizaciones auxiliares será de
un año, excepto cuando la iglesia local,
en una reunión administrativa, haya
tomado el acuerdo de realizar
nombramientos cada dos años […]. En
circunstancias excepcionales, y en
consulta con la asociación, el periodo
de servicio puede prolongarse un año
más (p. 71).
 Junta de ancianos
Cuando una iglesia tenga varios ancianos,
debe organizar una junta de ancianos
presidida por el pastor o por la persona
designada por él. El primer anciano, u otro
anciano, servirá como secretario de la
misma. Esta junta se encargará de distribuir
las responsabilidades, coordinar las
contribuciones de los ancianos al bienestar
de la congregación e instruir y capacitar a
los nuevos ancianos. La junta de ancianos
responde ante la junta de la iglesia (p. 71).
Ordenación del anciano
Por sí sola, la elección de alguien para el puesto
de anciano no lo califica para actuar como tal. Se
requiere la ordenación antes de que un anciano
pueda ejercer la autoridad de su cargo. Cuando
una iglesia, en reunión administrativa, vota la
elección de nuevos ancianos, también está
autorizando su ordenación (p. 72).
El fomento del estudio de la Biblia,
de la oración, la educación y el
crecimiento espiritual de los
miembros. El anciano debe ser
modelo de compromiso en el estudio
de la Biblia y en la oración y debe
apoyar y promover todos los
ministerios y programas de la iglesia
local, así como de la asociación.
También deben comprometerse a
nutrir e inspirar el crecimiento
espiritual de los miembros de la
iglesia. (p. 74).
La instrucción de los miembros
por parte del tesorero. El
tesorero debe insistir en que todo
el dinero que los miembros
entreguen, aparte de las ofrendas
regulares, lo coloquen en un sobre
de diezmos y ofrendas, a no ser
que se haya puesto en marcha
un método alternativo
aprobado por la asociación,
como los pagos electrónicos (p.
85).
 Ministerios
adventistas
de las
posibilidades
Este ministerio procura inspirar, equipar y
movilizar a aquellos que tienen
necesidades especiales y a los sordos
(p. 88).
Escritos del Espíritu de Profecía. El
director o coordinador de Espíritu de
Profecía es elegido por la iglesia a fin de que
promueva la importancia y el uso correcto
de los escritos del Espíritu de Profecía en
colaboración con el director o coordinador
del Ministerio de Publicaciones (p. 107).
Aventureros, de 4 a 9 años, y
Conquistadores, de 10 a 15
años; Jóvenes (Embajadores, de Ministerio
16 a 21 años y Jóvenes Adultos:
de 22 a 30 años); Estudiantes juvenil
Universitarios, de 16 a 30 años
o más (p. 101).
adventista
 Los nombramientos

La iglesia puede decidir, en función de sus

necesidades, que lo mejor sería contar con una
comisión de nombramientos permanente.

Para estos fines, puede nombrar una comisión que

funcionaría durante todo el año para hacer los
nombramientos de las vacantes que se abran o para
ocupar los cargos regulares señalados en este
MANUAL DE LA IGLESIA (p. 117).
 Procedimiento para los
nombramientos
Se tratará por todos los medios de que haya una representación
equilibrada en la comisión de nombramientos que refleje el rango de
edades que componen la iglesia, así como miembros de ambos sexos y
limitando la representación a no más de dos miembros de la misma
familia inmediata (p. 119).
 Oradores autorizados

El pastor de la iglesia local solo invitará a ocupar el púlpito a

oradores dignos de confianza, en armonía con las directrices
provistas por la asociación.* Tras consulta con el pastor y en
armonía con las directrices provistas por la asociación, los
ancianos locales o la junta directiva de la iglesia también
pueden invitar oradores. No debe dárseles acceso al púlpito
a personas que ya no sean miembros de la iglesia o que se
encuentren bajo disciplina eclesiástica (p. 130).
 Hacer discípulos (p. 141)

La misión de la iglesia es hacer discípulos de Jesucristo que

vivan como sus testigos amantes y proclamen a todo el
mundo el evangelio eterno en el contexto de los mensajes de
los tres ángeles en preparación para el pronto regreso de
Jesús (Mat. 28: 18-20, Hech. 1: 8; Apoc. 14: 6-12). Como
cuerpo de Cristo, el propósito de la iglesia es discipular a los
miembros, para que ellos continúen en una activa y
fructífera relación con Cristo y su iglesia.

Funciones de la junta de la iglesia

 Frecuencia de las
Donde las leyes locales lo reuniones
permitan, los miembros de la
junta pueden participar en las
reuniones mediante medios
electrónicos que permitan que
todos los participantes se
comuniquen entre sí al mismo
tiempo. La participación
mediante estos medios se
considerará igual a la presencial
en dicha reunion (p. 143).
 La consejería
prematrimonial
(p. 169)
En vista de que el matrimonio es la relación más
importante, y también la más desafiante, la
consejería prematrimonial tiene el objetivo de
ayudar a las parejas que están pensando en dar el
importante paso hacia el matrimonio a estar mejor
preparadas. El principal objetivo de la consejería
prematrimonial consiste en preparar a las parejas
para los desafíos que enfrentarán al iniciar la vida
de casados.
También tiene el objetivo de fortalecer y mejorar la
felicidad futura de las parejas de esposos y reducir
la posible tasa de divorcio. La consejería
prematrimonial debe ser impartida por un
consejero profesional o por alguien que haya
recibido entrenamiento especial para estos fines,
incluyendo a los dirigentes que han recibido
entrenamiento espiritual.
 Notas

Capacitación y preparación de los

ancianos locales. Aunque el pastor
es el principal responsable en la
tarea de preparar a los ancianos
locales, es conveniente que la
Asociación Ministerial de la
asociación, en conjunto con los
distintos departamentos, organicen
encuentros periódicos destinados a
capacitarlos (p. 193).
¡Muchas gracias!

¿Preguntas?