Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Lengua y Literatura
Prof. Verónica Alizzi
Técnicas de estudio
Técnicas de estudio
El momento de estudiar es uno de los más importantes del día. Durante el mismo, se requiere mantener un
elevado nivel de concentración y disciplina para eliminar las distracciones y enfocarse en el aprendizaje.
No obstante, esto puede resultar bastante difícil en algunos casos. Afortunadamente,
existen múltiples técnicas de estudio que te ayudarán a concentrarte y retener
información de forma más sencilla.
Una de las características más notorias de estas estrategias es que pueden aplicarse muy fácilmente a cualquier
área de estudio. Al mismo tiempo, son muy sencillas de llevar a cabo, por lo que pueden ser aprendidas en un
período de tiempo muy corto.
Como se ha destacado con anterioridad, las técnicas de estudio sirven para ayudar a los estudiantes a sacar el
mayor provecho posible a sus rutinas de estudio.
Esto se logra al organizar los estudios, crear esquemas de repaso, incrementar la concentración del estudiante,
facilitar la retención de información, desarrollar la motivación y mucho más, todo a través de las técnicas de
aprendizaje.
El subrayado: Consiste en resaltar las ideas más significativas del texto con distintos colores de acuerdo
con la importancia del punto que representan.
El Resumen: Este tipo se basa en extraer las ideas de mayor
relevancia del texto sin necesidad de realzarlas. Es una muy buena
alternativa para realizar repasos del contenido, afianzando el
conocimiento general.
El Esquema: Reúnen las ideas y las organizan de manera lógica.
Es una excelente opción cuando se tiene un buen dominio del tema,
pero se desea contar con una herramienta de apoyo para repasar. Los
mapas mentales y conceptuales con un buen ejemplo de este tipo de
estrategia.
Los cuadros sinópticos: Exponen un conjunto de ideas
interrelacionadas entre sí de forma organizada y fácil de entender.
Son ideales tanto para el estudio como para el repaso.
Si logras establecer y posteriormente mantener estos hábitos de estudio, en definitiva, lograrás aprender de forma
mucho más eficiente e incrementarás tu rendimiento académico de manera notoria.
Por otra parte, los hábitos de estudio facilitan el establecimiento y la consecución de objetivos, tanto a corto como
a largo plazo. Por otra parte, aumentan la confianza y la autoestima, ya que, al seguirlos, resulta más sencillo
cumplir con las distintas exigencias escolares.
Gracias a estos puntos, los hábitos de estudio se convierten en elementos muy importantes y recomendables en el
ámbito académico.
Ábitos de estudio para aprender mejor
Los hábitos de estudio pueden presentarse de muchas formas diferentes de acuerdo con las necesidades
particulares de cada estudiante.
1. Organización del tiempo
La organización del tiempo es uno de los hábitos de estudio más recomendables. Es importante que distribuyas
apropiadamente el tiempo que dedicas a estudiar diariamente, tomando en cuenta los períodos de descanso, las
pausas para comer y el resto de tus compromisos diarios.
Por ejemplo, si luego de cumplir con todos tus deberes cotidianos notas que dispones de unas cuatro horas libres,
puedes destinar dos de ellas a tu aprendizaje.
Si estudias de manera desordenada, tus niveles de estrés aumentarán y tu productividad disminuirá. Por ello, una
organización apropiada es muy importante.
Estos se encontrarán separados por intervalos de descanso que también tendrán una duración establecida, la cual
se irá incrementando luego de cada Pomodoro.
Una vez que finalices el primer lapso de estudio, podrás descansar durante cinco minutos. Luego de ello, debes
continuar estudiando hasta que completar el segundo Pomodoro, cuyo descanso será de 10 minutos.
De esta forma, la tercera pausa tendrá una duración de 15 minutos. Por otra parte,
para el cuarto descanso es recomendable alejarse y dedicarse a cualquier actividad
breve para despejar la mente. Luego de ello, se vuelve a comenzar.
Como puedes ver, el método Pomodoro resulta bastante sencillo, ya que todo lo que
se necesita para llevarlo a cabo es contar con un reloj con alarma y la voluntad de
respetar los intervalos, tanto de estudio, como de descanso.
2. Mapa mental
3. Resúmenes
Los resúmenes consisten en un escrito, generalmente breve, en el que se sintetizan los puntos de mayor relevancia
de un texto de mayor complejidad.
De esta forma, se descarta todo el contenido que no sea vital para la comprensión de la idea principal. Los
resumenes son una técnica bastante recomendable al momento de repasar o memorizar algún tema en particular.
Finalmente, es importante leerlo para asegurarse de que la información pueda entenderse y no se haya omitido
ningún punto importante.
De esta forma, tu resumen estará listo. Una vez que empieces a utilizarlo, notarás que se trata de una fabulosa
forma de estudiar.
4. Listas
Al momento de aprender, es sumamente importante mantener la organización. Las listas
consisten en ordenar los contenidos a repasar de acuerdo a las prioridades del estudiante.
De esta forma, se puede definir el orden en el que se desea estudiar los temas y seguir una
secuencia mucho más ordenada y menos estresante.
5. Hacer esquemas
Los esquemas son representaciones gráficas de distintos conceptos o ideas que guardan relación entre sí.
Habitualmente, estas herramientas se elaboran a partir de una idea principal, la cual se une a otros puntos
secundarios que son cruciales para comprender el tema que se estudia.
Son una muy buena herramienta cuando se necesita aprender temas
complejos, pues permiten sintetizarlos para entenderlos más
fácilmente.
6. Cuadro comparativo
Los cuadros comparativos son herramientas que permiten realizar
una comparación entre dos o más elementos de manera gráfica y
organizada. De esta manera, es posible vincular ambos conceptos y
definir sus principales similitudes, diferencias y características.
Ventajas:
Ofrecen una lectura muy ordenada en la que se exponen con claridad
los puntos que se desea comparar.
Al clasificar la información de esta manera, resulta mucho más
sencillo retenerla y llegar a una conclusión con respecto a la misma.
En general, los cuadros comparativos se utilizan como una técnica de estudio o de análisis, especialmente al tratar
con temas complejos, pues facilitan mucho su comprensión.
7. Realizar ejercicios
Al momento de realizar ejercicios, se pasa de la teoría a la práctica. Esta técnica de estudio es muy útil para
habituarte a los desafíos que pueden presentarse al momento de realizar test o exámenes, disminuyendo de esta
forma los efectos del estrés y favoreciendo el desarrollo de la memoria activa.
Se trata de un método muy recomendable que brinda a los estudiantes experiencia previa que les permite
desempeñarse de manera satisfactoria durante las pruebas y los exámenes.
8. Explicar el tema
Explicar el tema que se estudia, tanto a uno mismo como a otra persona, es una de las mejores formas de
aprender. El estudiante debe haber alcanzado una conclusión con respecto al tema y contar con un elevado nivel
de entendimiento sobre el mismo.
De esta forma, no solo podrá reafirmar sus conocimientos, también tendrá la oportunidad de obtener un punto de
vista diferente del tema, o de generar incógnitas que quizás no hubiera podido alcanzar por medio de otras
técnicas.
11. Autoevaluación
La autoevaluación es una de las técnicas de aprendizaje prácticas más recomendables. Como su nombre lo
indica, consiste en plantearse un test o un examen a uno mismo para determinar qué tanto conocimiento se tiene
sobre el tema que se aprende.
La autoevaluación debe contener preguntas desafiantes que estimulen a la
mente.
Es preferible no conocer una respuesta en una autoevaluación y continuar
estudiando que fallar en el examen real.
Otra alternativa muy recomendable es pedir a un familiar o amigo que prepare
la evaluación para nosotros. De esta manera, podremos conocer qué puntos
dominamos y en cuáles debemos esforzarnos un poco más.
Estudiar con amigos es una de las técnicas de aprendizaje más eficaces que existen. Al hacerlo, es posible
intercambiar ideas, conocer distintas opiniones, reforzar conocimientos, plantear preguntas y mucho más.
Los grupos de estudio permiten que sus integrantes se apoyen mutuamente para lograr comprender el tema de
forma más completa, al generar interrogantes, compartir puntos de vista y mucho más.
No obstante, es importante que los grupos de aprendizaje mantengan la disciplina y dejen a un lado las
distracciones para enfocarse en aprender. Si se logra será una de las técnicas de estudio más completas.
18. Mnemotecnia
Es especialmente útil al momento de recordar conceptos complejos, listas, palabras en otros idiomas, o distintos
temas que requieran razonamiento por parte del estudiante.
Una para apuntes y otra para preguntas o palabras clave relacionadas con el tema.
Al mismo tiempo, se dejarán unas cinco o siete líneas en blanco al final de la hoja.