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-Un murmullo de engaño es escuchado por los guerreros del baldo contrario.

- El orgullo impide que las personas se separen de sus partencias. No se puede dejar atrás a lo que llamamos
hogar por tanto tiempo, al menos yo no puedo, a este lugar no se le puede llamar casa. Por ahora, déjame
perderme en la nostalgia.
-Lo siento por mi egoísmo. Vive por mí, esa será nuestra venganza contra este mundo cruel en que tuvimos
que nacer.
- “Véngate de quienes acabaron con tu esperanza de una vida mejor, acaba con ellos como lo hicieron
contigo” Las lágrimas cesaron, la tristeza fue cambiada por el resentimiento.
-Palabras para mi querido amigo desconocido pero presente:
Los adultos nos culparan por comprometernos en nuestro papel de niños rebeldes, pero, es que, ¿Cómo
niego quién soy?
¿Cómo desvanezco lo que siento?
De sus labios siempre salen palabras tan sofisticadas, no soy tan culta como para comprenderlas.
No seré el próximo Valdelomar, no seré tan trágica como Vallejo, rechazo la idea de que mi estilo de vida es
tan desdichado como la de Arguedas.
Estoy segura que seré la próxima que espere subir al ascensor y que se emocione por cada detalle
extraordinario que rompa la monotonía.
Por ahora, estaré atrapada entre estos cuatros paredes cuyo alimento son mis pensamientos.
Confesiones desde un asiento que no aguanta el peso de mis acciones:
Tan cansado, apartar la mirada cuando el enemigo posa su mirada en mi figura tan presente, tan ausente al
mismo tiempo.
¿Estas confundido?, mi buen amigo.
Y tú nunca comprenderás todo, pero lo prefiero así, porque nunca entraras al mundo de fantasía que
construí.
Y tú nunca, nunca, alcanzaras mi mano, porque mi querido amigo, soy un buen farsante.
Y espero no romper con tu esperanza.
Comentarios de un desliz de amor:
Si supiera el significado de cada palabra, te hubiera dedicado un poema, una poesía, una canción, pero
lamento mi talento inepto, todo lo que tengo para ofrecerte son palabras tan vulgares que espero en un
momento puedan reflejar cada emoción, espero que llegues escuchar cada melodía que soy capaz de oír
cuando estoy junto a ti.
Esperando:
Ansiando tus palabras bajo la sombra del árbol que estuvo antes que mi existencia, antes que la nuestra.
Las hojas caen al igual que la lluvia baña todo el campo.
Aguantando el frio, esperando el calor de tus brazos.
Como no tienes nada que confesar, tallare en el tronco nuestra historia, mi historia esperando tu presencia.
Disfrutar y recordar primavera será aún más difícil, ahora que esta ausente.
Estoy en medio del campo, siendo abrazado por las corrientes del aire, disfrutando de la compañía de los
cultivos y siendo escuchado por el rio.

-Mi error, mi pecado, mi culpa


El invierno se está aburriendo de mí, todo se ha vuelto tan cansado que elijo morir en pleno verano antes de
sufrir de su indiferencia. Soy cobarde e ignorante de la traición, del pecado que he cometido. Tal vez mi
pecado fue entregar todo, tal vez mi pecado fue no tener nada que ofrecerte, mi primer amor, tan pronto
como llego, huyo.
Si te rezo de rodillas, perdonarías tal acto atroz que cometí, amor. Lamento, haber confundido tu cariño con
lastima.

Susurras a mi lado tan pronto eres capaz de dejar de sentir amor por reemplazarlo por pena, no puedo
culparte por ser humano. El humano, un ser de ingenuidad y crueldad que llena un corazón de semillas que
florecerán tan pronto como el primer amor llegue a regarlo con dulces palabras que humedezcan las raíces.
Ere cruel, soy culpable, eres ingenuo, soy cobarde, eres paciente, soy un error.
Si he de confesar, te susurrare que he sido cobarde desde el primer llanto que solté. Si soy capaz de ignorar
quien soy, será capaz de gustarme el amarillo. Brillante amor que oculta un tesoro de dolor, arrepentimiento
bañado de azul. Si se trata de susurrar un lo siento, lamento, que jamás tendré el viento para liberar tan
inoportunas palabras.
-Bebo el viento para juntarme al lado de Virgilio, en este camino no soy tan devota como para ofrecer mi
alma a una religión. Mi vida se compone por recuerdos, es por ello que mi sacrificio serán las historias que
he recopilare al final de mi camino.
-No se trata de él y yo.
No se trata de ella y yo.
Es sobre mí y ningún protagonista más.
No se trata de tu y yo.
Todo es sobre mí y la culpa que cargo.
-Eres libre de abrirme y liberarme, has lo que mejor sabes hacer. Desnúdame, haz que refleje la verdad que
he vestido por tanto tiempo, soy exagerada al incrementar mi culpa a través de las palabras.

-Diciembre llegara sin ti a mi lado, y no comprendo que es lo que más duele. Si es tu ausencia o tus
recuerdos que me acompañan. Las lágrimas cuentan más en una historia de amor que una sonrisa. Los
abrazos pueden reemplazar el viento que fluye entre los dos. Si ríes, tendré que acompañarte. Si lloras, te
amare. Mi corazón no sincroniza con mis sentimientos, con mis anhelos que contarte la verdad. Tal vez, fue
mi culpa tu ausencia.

-Mis lágrimas se resbalan a tus pies, hacia al creador del inicio y el verdugo del final. Dulces ríos que di
origen, ¿En cuál debo arriesgarme para ahogarme? Señor, eres sabio, dueño del todo.
Nada es igual, ¿Cómo puedo distinguir mis lágrimas de la lluvia? Tus lamentos se convierten en alimento
para los caídos, pero juro convertirme en el verdugo de ellos. Tu protección es mi motivación para seguir en
busca del cielo estrellado. Añoro gritarle al creador del inicio, lamento no ser tan fuerte como el, si lo
hubiera sido en aquella vez, ellos estarían luchando a mi lado, hablo de los caídos, que anhelan convertirme
en uno de ellos, en uno, en el todo.
-Señor, déjame que sea uno de ellos. Aquellos que juran promesas vacías sin remordimiento.
-
Cuando el débil susurrar de agonía es captaba por el ignorante, lo primero que hará es gritar su dolor.
Cuando el primero cae, el siguiente reirá de su debilidad.
Cuando el valiente sucumbe ante la incertidumbre, los cobardes alagaran lo débil que es.
Vive lo suficiente, y conocerás que la vida es lo suficiente egoísta y fuerte para derribar a quien desee.
He sido indigno de ser humano, desde el inicio.
Ignoro los sentimientos que conmemoran los recueros, anhelo el dolor efímero que sostenga mi vida egoísta.
Nacido de un deseo egoísta, condenado a ser egoísta.
En la penumbra, penetra la duda, que acecha mi desdicha.
Ciclo sempiterno
Epilogo
Lo que puede hacer la mente humana es desconocida, incluso ahora no somos capaces de imaginar lo que
significaría exponer toda su capacidad. En el pasado, se solía pensar que los sentimientos se originaban en el
corazón, en el presente, somos consciente que el cerebro es quien lo hace.
Y en un futuro, ¿Que más seremos capaces de descubrir?, tal vez, todo lo que creemos ahora es erróneo.
Tal vez, es nuestra alma lo que nos hace sentir vivos, una fuerza interior que nos empuja a seguir aun cuando
no queremos. Creo que el ser humano es capaz de todo, la mente es consciencia y el alma es fuerza, y con
ellos combinados, ¿Pueden convertir un anhelo en una realidad? El deseo puede ser energía, poder, un don o
una maldición…
Eso es lo que nos lleva al origen del don, hace años, existió un hombre que perdió todo a causa de una
guerra. Del pobre hombre no quedo ni siquiera alguien que recordara su nombre, estaba condenado caer en
el olvido. Se sumergió en la desesperación y esperanza, en los años siguientes de su vida no hubo un
segundo en que dejara de pensar en lo que sería si podría cambiar algo del pasado, si podría volver atrás y
salvar al menos una persona que le recordara quien es.
En uno de sus intentos de dejar atrás su condena, salto de la silla y en sus últimos momentos pudo sentir la
soga asfixiando su cuello, después todo fue oscuridad, silencio y tranquilidad que fue interrumpida por el
sonido de una risa familiar.
Al abrir sus ojos, se encontró con la persona cuya última imagen fue de su cuerpo incinerado. Era su
hermana menor antes de la tragedia que acontecería su pueblo, para ese entonces él se había ido a cumplir
con su servicio, pero ahora tenía la opción de quedarse y cambiar el destino.
Tal vez es un cruel sueño, pensó. Pero, no perdía nada intentando hacer que su ilusión tuviera un final feliz.
Así que, cargo a su hermana en brazos y corrió advirtiendo a todo aquel que se le cruzara de la catástrofe
que se avecinaba, lo que recibió fueron miradas de desconciertos y un par de comentarios que lo acusaban
de loco.
Lo intento, jura que lo hizo. Al final, solo le quedo ser testigo de cómo la bomba acabada con todo lo que
conocía, al menos esta vez tenía a su hermana a su lado sujetando fuertemente su mano.
Y cuando la tristeza parecía volver dominarlo, otra vez, se hayo en su pueblo. Repitió lo que había intentado
anteriormente, con su hermana en brazos gritaba que todos salieran, y el escenario acababa igual que el
principio, con todos muertos y el sujetando la mano de su familiar y…otra vez, se hallaba en el inicio,
parecía estar en ciclo sin fin, siendo el único consciente de todo, aunque pronto descubrió por las lágrimas
de su hermana, que ella también recordaba todo y el dolor iba aumentando en cada ciclo.
Al final, el tiempo transcurrió y tuvieron que aceptar, que al destino le gusta cortejar a la muerte.
El hombre aprendió aceptar su nueva realidad, y cuando fue su momento de partir del mundo terrena, con
una sonrisa miro a los de su alrededor, a su querida hermana mayor y a sus sobrinos. Con voz baja susurro
que el menor de estos se le acercara cuando su petición fue cumplida, apretó de la mano de este y le regalo
su apreciado tesoro: “Un anhelo puede convertirse en tu realidad, solo depende de tu fuerza de voluntad”
Y a la vez, le entrego una maldición, que condenaría a otras generaciones. Esa es la historia del origen de
este don, el poder de desafiar al tiempo y sus caprichos. Un poder regalado capaz de revivirnos o ahogarnos.
En la actualidad, en nuestro presente, justo ahora, ¿A quién piensas salvar?

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