Averigua qué texto de los siguientes contiene argumentos antiorientados, un argumento hipotético, y

argumentos concatenados

1. ¿Beatus ille?
Aunque pueda parecer algo idílico, vivir en el campo tiene sus ventajas y desventajas. Si bien es
verdad que, desde la pandemia, con el teletrabajo y otros condicionantes, el número de personas que
han abandonado la ciudad ha aumentado, muchos otros prefieren tener todos los servicios cerca de
casa.Desde el inicio de la pandemia, más de 100.000 españoles han abandonado las ciudades para
irse al medio rural. Muchas de las personas que han optado por vivir en el campo lo hacen en busca
de una vida más relajada y con nuevas oportunidades laborales.

En este medio, las viviendas suelen ser más económicas, tanto en su compra como si se optar por su
forma en alquiler. De hecho, algunas poblaciones con pocos habitantes están haciendo un
llamamiento para que vengan nuevos vecinos y ofrecen las casas sin coste a cambio de que trabajen
en los establecimientos existentes. Con este pago inferior en vivienda, la calidad de vida es mayor,
porque permite ahorrar y los gastos diarios son realmente básicos y muy pocos. Además, en los
pueblos las casas suelen ser más grandes y tienen mayor superficie para jardines, piscinas, huertos,
bodegas, etc. Unido a la vivienda, el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) que debe pagarse es
inferior en las poblaciones con menos habitantes que en una gran ciudad.

El teletrabajo se posiciona como una de las herencias que ha dejado la pandemia en las empresas. Si
bien muchas de las personas que se van a vivir al campo, son autónomos y buscan sus negocios en
sus nuevos pueblos, también permite trabajar a distancia si la organización así lo establece. Con lo
que podemos trabajar rodeados de naturaleza a diario y sin el agobio del ruido de las urbes. Como
consecuencia de ello, la tranquilidad que se respira es máxima. Por esto es una elección factible
para reducir el estrés, tener calma, bienestar y estar en contacto con la naturaleza. Ganar en
tranquilidad es invertir en salud.

El ahorro en el pago de la casa no es la única ventaja para gastar menos en un pueblo. También
permite ahorrar en alimentación. Si tienes una casa con un jardín pequeño, conseguirás plantar ahí
tus verduras, hortalizas y frutas que sirven para comer a diario.

En una casa de campo es mucho más factible adoptar energías alternativas. Como la solar, gastando
también mucho menos en consumo de energía, algo a tener en cuenta ahora y en los meses
venideros, donde se te teme que el gasto en luz y gas sea superior.

Pero no todo son beneficios. También hay ciertas desventajas que tienen que ver especialmente con
la movilidad y los servicios.
La más destacada es que muchos pueblos no disponen de la cantidad de servicios que sí ofrecen las
ciudades. Son comercios, colegios, institutos, universidades, centros médicos, supermercados, y
zonas de ocio, que normalmente quedan algo retiradas y es complicado acceder a ellas. Para esto, es
indispensable disponer de coche para moverse de un lugar a otro, porque en algunas poblaciones,
tanto el tren como el autobús no llegan o tienen horarios realmente limitados.
Hay más desventajas. Cuando los niños son pequeños es algo factible, de hecho es bueno que estén
en contacto con la naturaleza y/o los animales, pero a medida que se hacen mayores quieren estar
con personas de su edad y muchas se han desplazado a las ciudades. Esto reduce las posibilidades
de socialización y por esto abandonan el pueblo.
La ciudad te ofrece una cantidad de espacios destinados a la cultura, los eventos y el ocio que no
tienen las zonas rurales. Así que si eres de museos, restaurantes, hoteles y cada día descubrir un
evento distinto, vivir en un pueblo va a ser algo más aburrido y lo que frena a muchas personas
mudarse de la gran ciudad.
Las posibilidades de encontrar un trabajo a tu medida son limitadas. En un pueblo, uno puede
teletrabajar si está permitido por su empresa, si no, hay que dedicarse al campo, a llevar una casa
rural o a regentar los establecimientos que ya hay disponibles (o a crear nuevos) y aunque se puede,
ascender dentro de un puesto de trabajo está fuera de nuestro alcance.
Las nuevas tecnologías también pueden ser limitadas en el medio rural. Las conexiones no llegan y
el wifi puede generar problemas. De manera que si debes teletrabajar o bien usar el ordenador e
internet a diario (algo necesario actualmente) puede ser toda una odisea conseguir una buena
conexión.
2. Sobre el derecho del más fuerte. De El contrato social, J.J. Rousseau
«Supongamos por un momento este pretendido derecho [del más fuerte]. Tendremos que solo
resultará de él un galimatías inexplicable; pues admitiendo que la fuerza es la que constituye el
derecho, el efecto cambiará cuando cambie su causa: cualquier fuerza que supere a la anterior
modificará el derecho de esta. Si se puede desobedecer impunemente, es legítimo hacerlo: y
teniendo siempre razón el más fuerte, solo se trata de procurar llegar a serlo. Según esto, ¿en qué
consiste un derecho que se acaba cuando la fuerza cesa? Si se ha de obedecer por fuerza, no hay
necesidad de obedecer por deber; y cuando a uno no le pueden forzar a obedecer, ya no está
obligado a hacerlo. Se ve pues que esta palabra derecho [del más fuerte] nada añade a la fuerza, ni
tiene aquí significación alguna».

3. Sobre la crisis bancaria del 2008, de "Los bancos son culpables y deben hacer frente a sus
responsabilidades" de Torres López y Garzón Espinosa.
«La banca también tiene una gran responsabilidad en lo que se refiere a la expansión de la burbuja
financiera. Y eso es así porque la gran mayoría de los fondos de inversión, de pensiones y otras
fórmulas similares para la especulación son gestionados directa o indirectamente por los bancos. De
hecho, tras la reconfiguración económica neoliberal los bancos perdieron cuota de mercado en la
financiación de las grandes empresas (que pasaron a financiarse directamente vía emisión de
acciones o bonos y no mediante pŕestamos) y tuvieron que cambiar su fórmula de negocio.
Desplazaron entonces su actividad hacia las comisiones a las personas (retrayendo aún más riqueza
de las cuentas corrientes y otros métodos de ahorro personal) y hacia la gestión de los fondos de
inversión».

4. La polémica de los humedales de Doñana

enlace web:
https://elpais.com/clima-y-medio-ambiente/2023-04-12/pp-y-vox-hacen-oidos-sordos-a-los-
cientificos-a-la-ue-y-al-gobierno-y-dan-luz-verde-a-ampliar-regadios-en-donana.html