1.

Romanos 12:2 Y no os adaptéis a este mundo, sino transformaos mediante la renovación de

vuestra mente, para que verifiquéis cuál es la voluntad de Dios: lo que es bueno, aceptable y
perfecto.

El texto bíblico es claro, el apóstol Pablo invita a todo aquel que ha creído a no adaptarse a una
vida como la que todos viven sino tener una transformación total y profunda. La persona que
toma para si cada uno de estos detalles conocerá, verificará y comprobará la voluntad de Dios
que es buena agradable y perfecta.

2. Efesios 5.17 Así pues no seáis necios, sino entended cuál es la voluntad del Señor. Quien ha
creído puede conocer el precepto de Dios puede entender la voluntad de Dios lo que a otros
les parece locura, a los que han creído tendrá sentido. Quien entiende y no lo hace cae en la
categoría de necio. Esta palabra en la Biblia es muy fuerte, caer en la categoría de necio es un
aspecto despreciable para el Señor.

3. Efesios 1.9 Nos dio a conocer el misterio de su voluntad, según el beneplácito que se
propuso en El. Quien ha creído, conoce el misterio de Su voluntad, está expresión se refiere al
pleno entendimiento de lo que Dios desea que se haga. Lo que para otros es un misterio lo que
para otros es locura para quien lo entiende es bendición. El favor de Dios está para quien lo
conoce y entiende cómo vivir la vida de modo que le agrade.

4. Romanos 8.28 Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto
es, a los que conforme a su propósito son llamados. A los que aman a Dios, a los que han
creído, a los que han sido llamados para que se le conozca, todas las cosas ayudaran para bien.
Para mucho no tiene sentido que la adversidad ayude para bien, pero para quien cree podrá
entenderlo. Todo lo que le pase a la persona que ha creído ayudará para bien, esto es el pleno
entendimiento de que Dios tiene el control de todo.

5. Efesios 2.10 Porque somos hechura suya creados en Cristo Jesús para buenas obras, las
cuales Dios preparó de antemano para que anduviésemos en ellas. Para quien ha creído, el
término “para” debe ser una realidad. Esto significa propósito, conocer a Dios creer en Cristo
tiene el propósito de adorarle, de glorificarle esto significa que esta vida rebosará de buenas
obras porque han sido creados de antemano para todos quienes logren comprender el
misterio revelado y eso es posible al que cree.