escritas en tiempo pasado fueron escritas para nuestra instrucción”. Entonces ¿Qué lecciones nos enseña Ittai con su ejemplo? Para empezar, vamos a leer (2 Sam 15:19-21) 19 Entonces el rey le dijo a Ittái el guitita: “¿Por qué vas a venir tú también? Vuelve y quédate con el nuevo rey, porque eres extranjero y estás desterrado de tu lugar de origen. 20 Apenas llegaste ayer, ¿cómo voy a obligarte ahora a andar de un lado para otro con nosotros y acompañarme cada vez que yo me vaya? ¡Vuelve y llévate a tus hermanos, y que Jehová te muestre amor leal y fidelidad!”. .21 Pero Ittái le contestó al rey: “¡Tan cierto como que viven Jehová y mi señor el rey, dondequiera que esté mi señor el rey, allí estará tu siervo, sea para vivir o para morir!”.
Aunque Ittái era un filisteo exiliado, reconoció que
Jehová era el Dios vivo y que David era su ungido. Entonces Ittai vio más allá de la rivalidad que existía entre israelitas y filisteos. Él no veía a David como el hombre que había matado al gran guerrero Goliat y a muchos otros compatriotas suyos . Lo veía como un hombre de admirables cualidades que amaba a Jehová. Con Esta actitud se ganó el respeto de David pues segunda de Samuel 18:2 menciona que quedó al mando de la tercera parte de las tropas del rey.
Vueno que nos enseña este relato? Hoy día, nosotros
también tenemos que esforzarnos por ver más allá de las diferencias culturales, raciales y étnicas. Debemos fijarnos en las buenas cualidades de los demás. El vínculo que se formó entre David e Ittai demuestra claramente que si llegamos a conocer y amar a Jehová, es posible superar esas barreras.
Los cabezas de familia también pueden meditar en
el ejemplo de Ittai y aprender de él. El juramento que este guitita le hizo al rey ungido de Jehová y su decisión de acompañarlo repercutieron en los hombres que lo seguían, pues si recordamos el iva con su familia. Del mismo modo, las decisiones que toman hoy día los cabezas de familia para apoyar la adoración verdadera repercuten directamente en sus familias.
Tambien Al meditar en el ejemplo de Ittai, conviene
preguntarnos: “¿Soy yo leal al David Mayor, Jesucristo? ¿Demuestro mi lealtad predicando con entusiasmo y haciendo discípulos? ¿Hasta dónde estoy dispuesto a llegar para probar mi lealtad?”
Hermanos, todos podemos aprender del ejemplo de Ittai
siguiendo la direccion que nos esta dando Jehova y Jesus medianto el esclavo fiel y prudente, y apoyando a los que llevan la delantera en su congregacion.
Para concluir quiero que leamos (Salm. 18:25)
Al que es leal tú le demuestras lealtad; al hombre intachable lo tratas de forma intachable; “Con alguien leal [Jehová actuará] en lealtad”