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La llanura chaqueña:
la llanura Chaqueña, donde de Este a Oeste se
diferencian el Chaco bajo, Chaco deprimido, Chaco alto
y al sur de los mismos la diagonal fluvial de Santiago
del Estero:
El Chaco bajo se extiende en la margen de los ríos
Paraguay y Paraná con un ancho aproximado de
200 kilómetros.
El Chaco deprimido coincide con el máximo
hundimiento del basamento cristalino. Su relleno
sedimentario continúa y son frecuentes los esteros
y bañados. Los desbordes de los ríos inundan
enormes extensiones.
El Chaco alto o seco se encuentra al occidente de la
región, en contacto con los sistemas montañosos.
Llanura Mesopotámica:
Su territorio abarca 196 781 km², presentando
fisonomías diversas que han sido agrupadas a los
fines turísticos en dos corredores: el Corredor del
río Paraná (al oeste) y el Corredor del río Uruguay
(al este).
Está asentada sobre las rocas antiguas del macizo
de Brasilia y cubierta por un espeso manto de
sedimentos de origen volcánico en el norte, y
marinos y continentales en el centro y sur. Gran
parte de su territorio integra la cuenca del acuífero
guaraní.
Llanura Pampeana:
la llanura pampeana en la cual se encuentran la Pampa
ondulada, Pampa deprimida y Pampa alta:
En la Pampa ondulada y las lomadas
entrerrianas la suave ondulación del terreno se
debe a la reactivación de la erosión fluvial
durante la elevación del basamento cristalino.
La Pampa deprimida coincide en gran parte
con la cuenca del no Salado de la provincia de
Buenos Aires. Carece casi totalmente de
pendiente por lo que las aguas se estancan
formando lagunas y bañados.
La Pampa alta, también denominada Pampa
occidental o seca, se caracteriza por un
progresivo aumento de la altitud hacia el oeste
y la presencia de lagunas salitrosas, salinas y
formaciones medanosas.
Sistema de tandilia:
Meseta Patagónica:
Las mesetas patagónicas se encuentran en el este de
la Patagonia y están formadas por distintas
estructuras geológicas.
mesetas que descienden en altura escalonadamente
desde el pie de la cordillera hasta el océano
Atlántico en que terminan en forma de acantilados.
La altura de estos en algunos sectores llega a
superar los 200 metros y en las oquedades de los
mismos anida gran número de aves marinas.