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Paso 1: Encuentra el demonio en tu cuerpo

Tras generar una motivación genuina de practicar para el beneficio de


ti mismo y de todos los seres, decide con qué demonio quieres trabajar.
Escoge algo que sientas que está drenando tu energía actualmente. Si
es un asunto de alguna relación, trabaja con el sentimiento que está
surgiendo en ti gracias a esta relación como tu demonio, no con la otra
persona. 

Piensa acerca del demonio con el que has elegido trabajar, quizás
recordando un incidente particular en el cual surgió con fuerza.
Escanea tu cuerpo y pregúntate: ¿En dónde, en mi cuerpo, se alberga
con más fuerza? ¿Cuál es su forma? ¿Cuál es su color? ¿Cuál es su
textura? ¿Cuál es su temperatura?

Ahora intensifica esta sensación.

Paso 2: Personifica el demonio


Permite que esta sensación, con su color, textura y temperatura, se
salga de tu cuerpo y se personifique frente a ti como un ser con
extremidades, cara, ojos y demás.

Observa cómo es el demonio: tamaño, color, superficie de su cuerpo,


densidad, género (si tiene uno), su carácter, su estado emocional, su
mirada, algo acerca del demonio que no hayas visto antes.

Ahora haz las siguientes preguntas al demonio: 

-¿Qué quieres?

-¿Qué es lo que realmente necesitas?

- ¿Cómo te vas a sentir cuando tengas lo que realmente necesitas?

Paso 3: Conviértete en el demonio


Cambia de lugar con él, manteniendo tus ojos cerrados en la medida de
lo posible. Toma un momento para establecerte en el cuerpo del
demonio. Siente lo que es ser el demonio. Nota como tu ser normal se
ve desde el punto de vista del demonio. Ahora que eres el demonio
puedes responder a esas preguntas:
- Lo que quiero es…

-Lo que realmente necesito es…

-Cuando obtenga lo que realmente necesito me voy a sentir… (Toma


nota de esta respuesta en particular).

Paso 4: Alimenta el demonio y conoce al aliado


Toma un momento para establecerte de nuevo en tu propio cuerpo.
Observa al demonio enfrente de ti. Luego disuelve tu propio cuerpo en
un néctar. El néctar tiene la calidad del sentimiento que el demonio
tendría cuando obtenga lo que realmente necesita (es decir, la
respuesta a la tercera pregunta). Nota el color del néctar.

Imagina que este néctar se está moviendo hacia el demonio y


nutriéndolo. Nota cómo el demonio lo ingiere. Tú tienes un suministro
infinito de néctar. Alimenta al demonio hasta su satisfacción completa
y nota cómo se transforma durante este proceso. Esto puede tomar algo
de tiempo.

Nota si hay algún ser presente una vez que el demonio está
completamente satisfecho. Si hay algún ser presente, pregúntale:
“¿Eres el aliado?” Si lo es, vas a trabajar con ese ser. Si no lo es, o si no
hay un ser presente tras alimentar al demonio hasta su completa
satisfacción, invita al aliado a aparecer.

Cuando ves al aliado, nota todos los detalles del aliado: tamaño, color,
superficie de su cuerpo, densidad, género (si tiene uno), su carácter,
su estado emocional, su mirada, algo acerca del aliado que no habías
visto antes.

Cuando realmente te sientes conectado con la energía del aliado, hazle


estas preguntas: ¿Cómo me vas a ayudar? ¿Cómo me vas a proteger?
¿Qué promesa me vas a hacer? ¿Cómo puedo acceder a ti?

Cambia de lugar y conviértete en el aliado. Toma un momento para


establecerte en el cuerpo del aliado y nota cómo se siente estar en el
cuerpo del aliado. ¿Cómo se ve tu ser normal desde el punto de vista
del aliado? Cuando estés listo, responde estas preguntas hablando
como el aliado: Te voy a ayudar al… Te voy a proteger al… Prometo
que voy a… Puedes acceder a mí al…
Toma un momento para establecerte de vuelta en tu propio cuerpo y
ver al aliado en frente de ti. Mira sus ojos y siente su energía
vertiéndose en tu cuerpo.

Ahora imagina que el aliado se disuelve en luz. Nota el color de esta luz.
Siéntela disolviéndose en ti e integra esta luminosidad en cada célula
de tu cuerpo. Toma nota de la sensación de la energía integrada del
aliado en tu cuerpo. Ahora tú, con la energía integrada del aliado,
también disuelvete.

Paso 5: Descansa en consciencia


Descansa en cualquier estado que esté presente después de la
disolución. Haz una pausa hasta que los pensamientos discursivos
comiencen de nuevo, entonces, gradualmente vuelve a tu cuerpo.
Cuando abras los ojos, mantén la sensación de la energía del aliado en
tu cuerpo.

Feeding Your Demons™ [Alimentando a tus demonios] es un proceso


creado y desarrollado por Lama Tsultrim Allione. © Tara Mandala.
Para más información y entrenamiento en Feeding Your
Demons, visita taramandala.org.

ACERCA DE LAMA TSULTRIM ALLIONE


Lama Tsultrim Allione es la fundadora del centro de retiros Tara
Mandala en Pagosa Springs, Colorado, y la autora de Women of
Wisdom y Feeding Your Demons. En 1970 se convirtió en una de las
primeras mujeres americanas en ser ordenada en la tradición budista
tibetana.  En el 2009 fue la acreedora del premio Outstanding Women
in Buddhism [Premio a las mujeres excepcionales en el budismo].

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