LA REGULACIÓN DIVINA DE LA ADORACIÓN: UNA EXPOSICIÓN SOBRE EL SEGUNDO

MANDAMIENTO

INTRODUCCION

Akihiko Kondo, un japonés de 35 años, causó revuelo en 2018 al casarse con un holograma de un
personaje de anime. El hombre gastó casi $ 18,000 ($ 72,000,000 pesos colombianos). en la
ceremonia de bodas y en la construcción de un hogar virtual para vivir con su esposa virtual. Esta
historia generó mucha controversia y debate sobre los límites de la tecnología y el significado de
las relaciones humanas.

1. Una mujer real es una persona con pensamientos, sentimientos y emociones, mientras
que un holograma es simplemente una representación visual en 3D.

2. Una mujer real es capaz de interactuar y comunicarse de manera dinámica, mientras que
un holograma solo puede proporcionar respuestas preprogramadas y limitadas.

3. Una mujer real puede tener hijos y formar una familia, mientras que un holograma no
tiene la capacidad de procrear ni puede establecer relaciones familiares.

Entonces, no es lo mismo una imagen, un dibujo o un modelo en 3d de una mujer que una mujer
real. No es lo mismo una foto de su esposa que su esposa real, es clara la diferencia. Por eso Dios
no enseña en el segundo mandamiento también que no es lo mismo acercarnos a una imagen o
cualquier semejanza de él, sabiendo que podemos estar con el Señor directamente.

El punto aquí aun es mas complicado, porque una imagen muestra alguna característica de una
persona, por ejemplo, sus rasgos particulares. Mientras que una imagen de Dios lo que hace es
distorsionar lo que él es y desvía la atención a aquella imagen como figura de Dios y no al Señor
como el único Dios y verdadero.

Por eso hoy vamos a analizar la regulación divina de la adoración por medio del segundo
mandamiento de la ley de Dios.

Este mandamiento dice: Ex 20:4-6.

▪ De este texto podemos analizar varios asuntos, por ejemplo, como punto de partida
analicemos que enseña el segundo mandamiento.

I. QUE ENSEÑA EL SEGUNDO MANDAMIENTO.

A. Enseña que la adoración a Dios es importante.

● al sonido de la bocina, de las tinieblas y del monte que humeaba de lejos, los Israelitas
escucharon la voz de Dios mientras expresaba el segundo mandamiento.
● Dios mismo les estaba diciendo con santidad y claridad lo que él demanda a su pueblo
para su adoración.
 ● es importante saber esto para poder entender como adorar a Dios. El problema de
los israelitas, luego de estar 400 años en esclavitud, viviendo en una cultura de
idolatra y diferentes formas de acercarse a sus dioses, era confundir ese tipo de
ritos con la adoración que Dios demandaba de ellos. El gran problema de nuestra
época es que cada quien adora a Dios como quiere, conforme a su imaginación, e
ignora lo que Dios ha dicho. Pero noten lo importante de saber como se debe
adorar, al punto que uno de los diez mandamientos que permanecen para siempre
es saber adorar al Señor
B. Enseña que está prohibido adorarlo como nos parezca.

1. Prohíbe hacer imágenes para adorarlas

● El Señor está siendo intolerante con cualquier tipo de imagen que lo pueda representar
y que el hombre pueda diseñar.
● No era una prohibición contra una obra artística, sino contra cualquier cosa que tomara
el lugar de Dios.
● Dios mismo no enseñó de él por medio de una zarza, una peña, una serpiente de
bronce, él menciona imágenes para representar una verdad acerca de él. Sin embargo,
nunca nos dice que le adoremos por medio de estas imágenes. Y mucho menos por
imágenes que vengan por medio de la invención humana.
● Nuestro texto dice “imagen o semejanza” pero las palabras en el hebreo son muy
diferentes a las que Dios usa, por ejemplo, cuando crea al hombre a imagen y
semejanza. La palabra “harás” es adquirir o acumular y la palabra “imagen” aquí
significa esculpir, tallar, imaginar, “semejanza” es forma. Es decir: no esculpas, no
adquieras, no acumules, no hagas ninguna forma que represente a Dios. El mero hecho
de hacerlos no era pecado, sino el hacerlos con la intención de darles culto idolátrico
● Asimismo, se les prohibió hacer ídolos en representación de Dios que se parecieran a
cosas que estaban en el cielo (sol, luna, estrellas) o en la tierra (animales), o en las aguas
debajo de la tierra (peces, cocodrilos o algún otro tipo de vida marítima. Dt. 4:15–19;
Ro. 1:22–23
● La cuestión con los israelitas en el segundo mandamiento no era tener otros dioses, eso
se trató en el primer mandamiento, era tener a Dios y adorarlo de manera indebida.
● En el primer mandamiento está prohibido adorar a un Dios falso; en este mandamiento,
está prohibido adorar al Dios verdadero de manera falsa.

C. Enseña que debemos adorarlo como a él le parece.

● Si Dios prohíbe la adoración falsa. Que permite? Que lo adoremos solo de forma
verdadera.

P. 50. ¿Qué se exige en el segundo mandamiento?

R. El segundo mandamiento exige recibir, observar y guardar puras y completas, todas las
ordenanzas y adoración religiosa tal como Dios las ha establecido en su Palabra.

Dt. 12:32: «Cuidarás de hacer todo lo que yo te mandó; no añadirás a ello, ni de ello
quitarás».
▪ Además de esto, el texto nos enseña las razones detrás del segundo mandamiento. Por eso
veamos ahora cuales son.

II. QUE RAZONES HAY PARA EL SEGUNDO MANDAMIENTO.

A. La primera razón que el Señor nos da es por causa de su poder.

v. 5.
● Es el único Dios verdadero
● Es el Dios del pacto
● Es el Dios del pueblo
● Es el Dios todo poderoso
B. La segunda razón que el señor nos da es por causa de su celo.
● No hay honra para otro
● No hay dignidad en nadie mas
● No van a dar a otro lo que solamente es de el
● Pero hay una relación particular con el pueblo (como el de un matrimonio).

Decía un pastor: “No demos a Dios una razón justa para estar celoso. Una buena esposa será
tan discreta y casta, que no le dé a su marido una ocasión justa de celos. Evitemos todo
pecado, especialmente el de la idolatría o la adoración de imágenes”.
● y el celo que Dios tiene por la adoración que le rendimos.
● Ex 34:14 uno de los nombres del Señor es: celoso. en el sentido de tomarse un interés
muy fuerte.
C. La tercera razón que el Señor nos da es por causa de su juicio y misericordia.
v.5
1. Para los que le odian

Este es un texto que se usa para hablar de las maldiciones generacionales.

si una persona tiene problemas persistentes en áreas como la salud, las relaciones o las
finanzas, es posible que estén siendo afectados por una maldición generacional. Para
romper esta maldición, se enseña que la persona debe confesar los pecados y errores de sus
antepasados y renunciar a cualquier vínculo con ellos, mientras se arrepienten y piden el
perdón de Dios.

Esto es como una superstición de que todo lo que nos parece en nuestra vida proviene de
nuestros antepasados y se debe cortar, todo lo malo, todo su pecado es culpa de su familia y
no de el mismo. Eso no es lo que dice la Palabra.

Para considerar esto brevemente mire Jeremías 31:29. Ellos se excusaban de sus pecados
echando la culpa a sus padres. Pero Dios los va a juzgar diciéndoles que ello son los
culpables de sus consecuencias. Es los mismo de Ez 18 20
Sin embargo, en Éxodo si notamos algo particular. No quiere decir que serán juzgados por los
pecados de sus padres. Pero que si habrá consecuencias por los actos de ellos.
Lamentablemente el pecado de idolatría es un pecado grave contra Dios que lleva a grandes
consecuencias.

2 Reyes 5:27 es un versículo bíblico que se encuentra dentro de la historia de Naamán el sirio. En
este capítulo, Naamán, un comandante militar sirio, sufre de lepra y busca la ayuda del profeta
Eliseo en Israel para curarse. Eliseo le dice a Naamán que se sumerja siete veces en el río Jordán
para que se cure de su enfermedad. El siervo quiso aprovecharse de esto por su codicia.

Otro ejemplo está en 1 Reyes 14:10 Jeroboam pensó que había establecido el reino mediante
la adoración idólatra, pero le trajo la ruina a él ya toda su posteridad
El hambre, la enfermedad y las consecuencias en estos casos son dados por Dios como
castigo por no obedecerle y es que es cosa seria decir como dijo Israel, vamos a obedecerte
en todo y luego apartarse en pos de la idolatría.

2. Para los que le aman

“Que visito la maldad de los padres sobre los hijos hasta la tercera y cuarta generación
de los que me aborrecen; y hago misericordia a millares [mejor, quizá ‘hasta mil
generaciones’ como en Dt. 7:9]

Dios tiene misericordia de su posteridad. "El justo camina en su integridad, sus hijos son
bendecidos después de él". Proverbios 20: 7

● Él nos muestra misericordia al SUMINISTRARNOS diariamente

● Él muestra misericordia al EVITAR que muchos MALOS nos invadan.
● Él muestra misericordia al LIBRARNOS. "Y fui librado de la boca del león"
● Él muestra misericordia al RESTRINGIRNOS del pecado
● Dios muestra misericordia al Guiarlos y dirigirnos.
● Dios muestra misericordia al PERDONARLOS
● Dios muestra misericordia al escuchar nuestras ORACIONES
● Dios muestra misericordia al SALVARLOS.

▪ Por último, consideremos Las repercusiones prácticas del segundo mandamiento.

III. LAS REPERCUSIONES PRÁCTICAS DEL SEGUNDO MANDAMIENTO

A. Repercusión para el cristiano. (Cristo)

● Dios no quería que nos hiciéramos imagen o semejanza alguna porque tenia una imagen
preparada que nos iba a dar a su tiempo, y será la que veremos en la eternidad. Es la
imagen del Dios hombre, su unigénito quien es la imagen perfecta. Y no por su
apariencia sino por todo lo que implica una naturaleza divina y una humana de manera
perfecta en una persona. La segunda persona de la trinidad.
 ● Pero, ¿cómo concebiremos correctamente a Dios, si no podemos hacer ninguna imagen
o semejanza de él? Debemos concebir a Dios espiritualmente: (1) En sus atributos —su
santidad, justicia, bondad— que son los rayos por los que resplandece su naturaleza
divina. (2) Debemos concebirlo como es en Cristo. Colosenses 1.15 “El es la imagen del
Dios invisible, el primogénito de toda creación”.Hebreos 1.3 “el cual, siendo el
resplandor de su gloria, y la imagen misma de su sustancia, y quien sustenta todas las
cosas con la palabra de su poder, habiendo efectuado la purificación de nuestros
pecados por medio de sí mismo, se sentó a la diestra de la Majestad en las alturas”.

B. Repercusión para la iglesia. (Cristo)

Ahora la adoración es espiritual, ya no hay tabernáculo o templo al cual acudir de manera
física, esto deja una dificultad para el alma del hombre. Para nosotros no es tan difícil no
hacer imágenes talladas o esculturas, pero si es difícil no dejar que nuestros gustos e
imaginación interfieran con la adoración del Nuevo Pacto.

P.108. ¿Cuáles son los deberes que se exigen en el segundo mandamiento?

R. Los deberes que se exigen en el segundo mandamiento son: el recibir, observar y
conservar pura y completa toda adoración y ordenanza religiosa que Dios ha instituido en su
Palabra; particularmente la oración y la acción de gracias en el nombre de Cristo; la lectura,
la predicación y el escuchar la Palabra; la administración y recepción de los sacramentos; el
gobierno y la disciplina eclesiástica; el ministerio y el mantenimiento del mismo; el ayuno
religioso; el jurar por el nombre de Dios y los votos hechos a él: como también la
desaprobación, el detestar y oponerse a toda adoración falsa; y según el llamado y el puesto
de cada uno, eliminarla, así como a todos los monumentos de idolatría.

Por eso no vemos show de luces, solos, conciertos, obras de teatro en el culto. Porque la
adoración no es para nosotros, no importa cuanto nos guste la adoración es para el Señor, y
se hace como a él le gusta.

C. Repercusión para el mundo. (Cristo)

El mundo está en una constante idolatría. El dinero, las posesiones, personas particulares,
imágenes y diversas cosas son sus dioses. Pero la ira de Dios caerá sobre todos los que lo
aborrecen. Pero hay esperanza para aquel que cree en Jesús. Pues la ira que merece el
pecador caerá sobre Cristo en vez de caerle directamente en él. Como cristianos si hemos
pecado tenemos a Cristo como nuestro abogado y confesando nos limpiaremos del mal. Pero
el que no cree ya ha sido condenado y en el día final recibirá la peor maldición de todas que
es estar alejado de Dios por toda la eternidad en el infierno. Aún hay tiempo.

CONCLUSION

A. Recapitulación
B. Llamado a adorar. Dt. 5:29: «¡Quién diera que tuviesen tal corazón, pues me temiesen y
guardasen todos los días todos mis mandamientos, para que a ellos y a sus hijos les
fuese bien para siempre!»