VERSÍCULOS PARA INICIAR UN CULTO

Bendiciones, queremos presentarte un listado lleno de versículos especiales e indicados para poder
iniciar un culto o servicio en tu iglesia o en algún hogar, seguramente serán de bendición para
quienes lo escuchen.
Salmos para iniciar un culto
Salmo 100
«Aclamad con júbilo al Señor, toda la tierra. Servid al Señor con alegría; venid ante su presencia con
regocijo.»
Salmo 95
«Venid, aclamemos al Señor; cantemos con júbilo a la roca de nuestra salvación. Acerquémonos ante
su presencia con acción de gracias; aclamémosle con cánticos.»
Salmo 105
«Dad gracias al Señor, invocad su nombre; dad a conocer entre los pueblos sus obras. Cantadle,
entonad himnos a él; hablad de todas sus maravillas.»
Salmo 67
«Tengan los pueblos alabanza para ti, oh Dios; ¡alégrense todos los pueblos! Que los pueblos te den
gracias, oh Dios; que todos los pueblos te den gracias.»
Salmo 121
«Alzaré mis ojos a los montes; ¿de dónde vendrá mi socorro? Mi socorro viene del Señor, que hizo los
cielos y la tierra.»
Salmo 23
«El Señor es mi pastor, nada me falta. En verdes pastos me hace descansar; junto a tranquilas aguas
me conduce.»
Salmo 27
«El Señor es mi luz y mi salvación, ¿a quién temeré? El Señor es la fortaleza de mi vida, ¿de quién
tendré temor?»
Salmo 51
«Ten piedad de mí, oh Dios, conforme a tu gran amor; conforme a tu inmensa bondad, borra mis
transgresiones. Lávame de toda mi maldad y límpiame de mi pecado.»
Salmo 121
«Yo alzaré mis ojos a los montes; ¿de dónde vendrá mi socorro? Mi socorro viene del Señor, que hizo
los cielos y la tierra.»
Versículos bíblicos para empezar un culto dominical
Salmo 118:24
«Este es el día que hizo el Señor; nos gozaremos y alegraremos en él»
Mateo 18:20
«Porque donde están dos o tres congregados en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos»
Salmo 30:4
«Canten alabanzas al Señor, ustedes, sus fieles; alaben su santo nombre»
Mateo 11:28
«Vengan a mí todos los que están cansados y agobiados, y yo les daré descanso»
Salmo 90:12
«Enséñanos a contar bien nuestros días, para que nuestro corazón adquiera sabiduría»
Juan 15:12
«Este es mi mandamiento: que se amen los unos a los otros como yo los he amado»
Salmo 103:2
«Bendice, alma mía, al Señor, y no olvides ninguno de sus beneficios»
Colosenses 3:15
«Que la paz de Cristo, a la cual ustedes fueron llamados en un solo cuerpo, gobierne en sus
corazones. Y sean agradecidos»
2 Timoteo 1:7
«Porque Dios no nos ha dado un espíritu de timidez, sino de poder, de amor y de autodisciplina»
Versículos para dar la bienvenida a un servicio
Salmo 118:24
«Este es el día que hizo el Señor; nos gozaremos y alegraremos en él»
Salmo 84:4
«Bienaventurados los que habitan en tu casa; Perpetuamente te alabarán»
Salmo 51:15
«Oh Señor, abre mis labios, y publicará mi boca tu alabanza»
Salmo 134:1 
«Bendecid al Señor, vosotros todos los siervos del Señor, que estáis en la casa del Señor por las
noches»
Salmo 136:1
«Alabad al Señor, porque él es bueno; porque para siempre es su misericordia»
Proverbios 3:9
«Honrad al Señor con vuestros bienes, y con las primicias de todos vuestros frutos»
Hebreos 3:1
«Por tanto, hermanos santos, participantes del llamamiento celestial, considerad al apóstol y sumo
sacerdote de nuestra profesión, Cristo Jesús»
 Reflexión para Iniciar un Culto
Queridos hermanos y hermanas en Cristo,
Hoy nos reunimos una vez más en este lugar sagrado para adorar y glorificar el nombre de nuestro
Señor y Salvador Jesucristo. Es un privilegio y una bendición poder estar aquí juntos, para renovar
nuestra fe, buscar su gracia y recibir su amor incondicional.
En esta oportunidad, quiero reflexionar sobre la importancia de la adoración en nuestras vidas. La
adoración no es simplemente una actividad religiosa que realizamos los domingos por la mañana,
sino que debe ser una actitud que permea todos los aspectos de nuestra vida.
La adoración es una respuesta a la grandeza de Dios, a su amor y a su misericordia. Es reconocer su
soberanía y su autoridad sobre nuestras vidas, la adoración nos acerca a él, nos permite experimentar
su presencia y su poder transformador.
Adorar a Dios es un acto de humildad y de rendición. Es reconocer nuestra necesidad de él y nuestra
dependencia de su gracia. La adoración nos lleva a la confesión de nuestros pecados y a la
renovación de nuestra comunión con Dios.
La adoración también es una forma de testificar nuestra fe y de compartir nuestro amor por Dios con
los demás. Es una oportunidad para animarnos mutuamente en la fe y para fortalecernos como
comunidad de creyentes.
Por tanto, en este culto, invitamos a cada uno de ustedes a adorar a Dios con todo su corazón, con
toda su mente y con toda su alma. Que nuestra adoración sea un reflejo de la grandeza de nuestro
Dios y una expresión de nuestra gratitud por su amor y su gracia, que Dios nos bendiga en este culto
y nos permita experimentar su presencia de una manera especial.
Esperamos que esta serie de versículos sea de mucha bendición y de mucha ayuda para tu vida,
creemos que estos versículos serán perfectos para iniciar un culto o servicio en tu iglesia o en tu
hogar, Dios te bendiga.