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ANÉCDOTA DE LAS LÁGRIMAS ARTIFICIALES

Una de las tantas lecciones de Resiliencia y su aplicación práctica en estos tiempos


difíciles:
Como soy operada de cataratas y tengo colocados lentes intraoculares, necesito tener a
mano un frasquito de lágrimas artificiales, pero hace meses que no las consigo en
ninguna farmacia. Ahora bien, en este sentido voy a compartir una confidencia con
ustedes y es que el fallido regreso a mi vida de un viejo amor -yo lo amo pero él no a mi y
obviamente con eso no se puede- me ha hecho derramar algunas lágrimas, cosa que me
ha beneficiado porque me ha quitado algunas molestias que ocasiona el denominado
síndrome del ojo seco.
¿Ven como de una situación un tanto infeliz y dolorosa se puede obtener un beneficio?
¡Pura resiliencia y nada más! 

De todas maneras, si alguno de mis amables amigos y lectores sabe en donde puedo
coseguir esas benditas lágrimas artificiales, por favor me avisan porque la verdad que
"obtener las naturales" de la manera que les conté, no es muy agradable que digamos... 
¡Ay... snifffffffffffffffffffffffffffffffffffffffffffffffffffffffffffffffff !

Queridos amigos, cuento de nuevo esta anécdota, aunque las circunstancias han
cambiado desde aquel momento en que la compartí con ustedes, porque han ocurrido dos
hechos importantes: Conseguí las lágrimas artificiales y regresó "el viejo amor", bueno,
digo viejo porque "el afortunado" tiene 3 años más de acumulación de juventud que yo y
aunque él está como se dice aquí en Margarita: "Entre Coche y Cubagua", es decir, a
medio camino, solo espero que un día de estos pueda completar la travesía hasta
Margarita…
Es mi deseo que al leerla sonrían y se les haga agradable la tarde:

Una de las tantas lecciones de Resiliencia y su aplicación práctica en estos tiempos


difíciles:
Como soy operada de cataratas y tengo colocados lentes intraoculares, necesito tener a
mano un frasquito de lágrimas artificiales, pero hace meses que no las consigo en
ninguna farmacia. Ahora bien, en este sentido voy a compartir una confidencia con
ustedes y es el regreso a mi vida de un viejo amor, pero la distancia y algunas
circunstancias hacen un poco difícil estar más cerca y como dice un viejo bolero: "La
distancia es el olvido", me ha hecho derramar algunas lágrimas, cosa que me ha
beneficiado porque me ha quitado algunas molestias que ocasiona el denominado
síndrome del ojo seco.
¿Ven como de una situación un tanto infeliz y dolorosa se puede obtener un beneficio?
¡Pura resiliencia y nada más!
De todas maneras, si alguno de mis amables amigos y lectores sabe en donde puedo
conseguir esas benditas lágrimas artificiales, por favor me avisan porque la verdad que
"obtener las naturales" de la manera que les conté, no es muy agradable que digamos...
¡Ay…!

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