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UNIVERSIDAD CATÓLICA DE SANTA

MARIA

FACULTAD DE ODONTOLOGÍA

SELLANTES

ODONTOLOGÍA PREVENTIVA Y SOCIAL


PRÁCTICA 09

Docente: Dr. Edward Salas Fuentes

Grupo: 09
● Quispe Huaracha, Emma
● Zapana Chino, Maryori

AREQUIPA – PERÚ
SELLANTES

A. HISTORIA DE LOS SELLANTES


El interés por conservar la integridad de las superficies oclusales se remonta a 1923.
En esa época Hyalt recomendaba preparar cavidades oclusales y obturarlas con
amalgamas antes que sufriesen el incremento de la enfermedad. Posteriormente,
Badecker en 1929 sugirió la odontotomía profiláctica que consistía en ampliar la
anatomía de las fisuras para facilitar su limpieza.

En 1955 Bounocore propuso el tratamiento previo de las fisuras con ácido fosfórico
al 50 % con el fin de grabar el esmalte y posteriormente sellarlo con resinas
diseñadas para tal fin. El desarrollo de los selladores de fosas y fisuras se basó en el
descubrimiento de que, al grabar el esmalte con ácido fosfórico, se aumenta la
retención de los materiales restaurativos de resina y se mejora en grado
considerable la integridad marginal.
A mediados de 1960, se presento el primer compuesto que empleaba la técnica de
grabado ácido y fue en un material de cianoacrilato. Los cianoacrilatos no son
adecuados como selladores por su degradación bacteriana en la boca con el
transcurso del tiempo. A finales de 1960, se probaron varios compuestos diferentes
de resina y se encontró que un material viscoso resistía la pérdida y producía una
unión tenaz con el esmalte grabado. Dicha resina se forma haciendo reaccionar el
diestenol A con un glicidilmetacrilato y es la que se conoce como Bis-GMA.

Hoy en día ha ocurrido un resurgimiento en la investigación sobre la efectividad de


los sellantes de fosas y fisuras. Los sellantes de fosas y fisuras han demostrado ser
eficaces no sólo en prevenir la caries antes de que se inicie, sino también
deteniendo el progreso de la lesión de caries en sus fases más tempranas.

Simonsen en 1991 concluyó que cuando los sellantes de fosas y fisuras eran
aplicados tempranamente, el odontólogo podría acercarse a un 100% de protección
del diente contra la caries. Actualmente hay dos tipos de sellantes comercialmente
disponibles, los curados químicamente y los fotocurados. No obstante el efecto del
flúor sobre caries de superficies lisas combinado con el uso rutinario y agresivo de
los sellantes contra la caries de fosas y fisuras, teniendo el potencial de erradicar la
caries en niños, adolescentes y adultos, los mismos siguen siendo subutilizados.

Una de las objeciones a los sellantes es la posibilidad que ellos podrían ser
colocados inadvertidamente sobre caries incipientes, las cuales podrían luego
progresar sin ser detectada debajo de los sellantes y poner en peligro la pulpa. La
reducción de caries, un año después de la aplicación de sellante, es en torno de
80% y de 70% después de dos años. Una aplicación de sellante debe permanecer
intacta por un largo período de tiempo.

Cuando los sellantes son utilizados como alternativa terapéutica se realizan


procedimientos restauradores microconservadores los cuales fomentan la
preservación de la estructura dental y no su remoción innecesaria. Esta
restauraciones con instrumentación mínima poseen una finalidad terapéutica y una
preventiva, simultáneamente.

B. PROPIEDADES DE LOS SELLANTES


Leve expansión al polimerizar, Además de enlace cohesión resistente
Alta cohesión a fuerzas masticatorias
Resistencia a la abrasión

Humedecimiento alto
Baja viscosidad
Dispersión rápida
Coeficiente de penetración alto

Requerimientos clínicos.

Toxicidad baja
Fácil manejo
Duración en boca > 3 años
Larga vida
No retener bacterias ni alimentos

Factores que afectan el enlace.

Aplicación tópica de flúor previa


Edad del diente
Contaminación del diente
Profilaxis con pastas con glicerina y flúor
Grabado insuficiente
Polimerización previa a la aplicación

C. TIPOS DE SELLANTES
Los selladores dentales que existen en la actualidad odontológica se pueden clasificar
de las siguientes formas.

Según la composición de los selladores, estos pueden estar formados de resinas


compuestas, como los composites o resina BIS-GMA, o de ionómeros, como el
ionómero de vidrio.

Según el tipo de polimerización, los selladores pueden ser autocurables (que se


polimerizan por ellos mismos) o fotocurables (que necesitan luz para polimerizarse). Los
selladores autocurables se pueden manipular durante más tiempo, la fuerza de
compresión es mayor y la superficie final es más lisa. En cambio, los selladores
autocurados tiene un tiempo de manipulación menor.

Los selladores pueden contener o no flúor y pueden ser de color blanco, transparente o
que cambien de color una vez aplicados. Los selladores que liberan flúor son
antibacterianos, incrementan la resistencia del esmalte, son anticariogénicos y mejoran
la fijación al esmalte.

D. TÉCNICAS DE APLICACIÓN

1. Aislamiento del campo operatorio.


Existen en dos grandes métodos:

● Aislamiento absoluto, con grapa y dique de goma.


● Aislamiento relativo, con rollos de algodón.

En cualquier caso, este primer paso es fundamental para una correcta técnica de
aplicación del sellador ya que el campo deberá permanecer seco.

Es muy IMPORTANTE la colocación de gafas protectoras al paciente.

2. Limpieza de la superficie oclusal.

Para eliminar restos y placa bacteriana de la superficie del molar. Se puede


realizarse con cepillo de profilaxis a baja revolución, o también puede realizarse con
la ayuda de un aparato de bicarbonato-fosfato. Se recomienda NO utilizar pasta de
profilaxis, ya que disminuiría la humectabilidad del esmalte, necesaria para que el
ácido moje bien la superficie que se va a grabar. En ningún caso usar pasta de
profilaxis con flúor.

3. Lavado y secado con jeringa de aire seco.

Para dejar la superficie libre de ningún posible resto.

4. Aplicación del ácido.

En caso de estar con aislamiento relativo colocar los rollos de algodón para aislar el
campo antes de colocar el ácido. El ácido utilizado con más frecuencia es el
ortofosfórico a una concentración del 37%. Puede utilizarse en solución o en gel,
siendo el gel más cómodo de manejar. Dejar durante 30 segundos.

5. Lavado del ácido y secado.

Trascurrido el tiempo de grabado retirar con aspiración la cantidad más aparente de


ácido y posteriormente se lava abundantemente con spray de agua aplicado sobre
la superficie oclusal durante 10-15 segundos. Si estamos en aislamiento relativo,
proceder al recambio de los rollos de algodón en este momento, teniendo mucho
cuidado de que no se produzca una contaminación salival en el diente grabado.
Secar durante 30 segundos con aire seco. Comprobar que la zona grabada ha
adquirido un color “blanco tiza” indicando que el procedimiento es correcto.

6. Aplicar el sellador en todos los surcos y fisuras


Teniendo cuidado de que no queden atrapadas burbujas de aire debajo del sellador
para lo cual nos ayudaremos con una sonda para extender el producto, y debemos
asegurarnos que el sellador recorreré todos los surcos que queremos cubrir
(principales, accesorios, vestibulares y palatinos) por lo que es fundamental conocer
esta parte de la anatomía dental. Al extender el sellador evitamos que quede relieve
del mismo, cumpliendo así nuestro objetivo de dejar una superficie plana sin rebasar
los límites superficiales, ya que de lo contrario quedaría un reservorio.

7. Polimerización con la lámpara de luz halógena

Durante 30 segundos y siempre usando gafas protectoras.

8. Evaluación del sellador.

Con una sonda de exploración se comprobará que el sellador ha quedado bien


retenido y que no existen zonas con déficit de material o burbujas ni
sobre-elevaciones superficiales, circunstancias todas que pueden hacer fracasar el
sellador.
9. Retirar el aislamiento (dique de goma o rollos de algodón) y comprobar la
oclusión.

Con papel de articular y pinza miller. En caso de interferencia retirar el material


sobrante con fresa redonda o llama tipo arkansas, pequeña y a baja revolución
(contaangulo).

TÉCNICA DE APLICACIÓN EN SELLADORES DE FOSAS Y


FISURAS FOTOPOLIMERIZABLES DE RESINA
Los selladores de fosas y fisuras tienen tres efectos preventivos fundamentalmente:

● Obturar mecánicamente las fosas y fisuras con una resina resistente a los
ácidos.
● Al obturar las fosas se suprime el habitad de los streptococcus mutans y
otros microrganismos.
● Facilitan la limpieza con el cepillado dental, por lo que siempre es un método
preventivo complementario del cepillado diario.

1. Aislamiento del campo operatorio. Existen varias posibilidades para el


aislamiento del campo, aunque pueden resumirse en dos grandes métodos:
aislamiento absoluto con grapa y dique de goma, o aislamiento relativo con
rollos de algodón. En cualquier caso, este primer paso es fundamental para
una correcta técnica de aplicación del SF ya que el campo deberá
permanecer seco (figuras 1 y 2).
Dado que el aislamiento absoluto puede requerir anestesia, se utiliza
normalmente aislamiento relativo.
2. Limpieza de la superficie oclusal. La finalidad es eliminar restos y placa
bacteriana de la superficie del molar. La limpieza puede realizarse con
cepillo de profilaxis a baja revolución. Opcionalmente se podrá añadir polvo
de piedra pómez. Esta remoción también puede realizarse con la ayuda de
un aparato de bicarbonato-fosfato (figura 3). En ningún caso se utilizará
pasta de profilaxis, ya que disminuiría la humectabilidad del esmalte,
necesaria para que el ácido moje bien la superficie que se va a grabar.
3. Lavado y secado con jeringa de aire seco. Es muy importante que la
jeringa funcione bien por lo que se recomienda un chequeo periódico del
equipo dental para comprobarlo (figura 4). Antes de secar se deben de
cambiar los rollos de algodón.
4. Aplicación del ácido. El ácido utilizado es el ortofosfórico a una
concentración del 37%. Puede utilizarse en solución o en gel. Se aplicará
con un pincel. Dejar durante 30 segundos. En caso de recurrir al aislamiento
relativo, antes de la aplicación del ácido se procederá a la colocación de los
rollos de algodón (vestibular en caso de diente superior o vestibular más
lingual en caso de inferiores) (figura 5).
5. Lavado del ácido y secado. Pasado el tiempo de grabado, se procederá
al lavado abundante con spray de agua aplicado sobre la superficie oclusal.
Para evitar que el contacto del ácido con la mucosa favorezca la salivación,
se debe de aspirar la mayor parte del ácido antes de lavar. La duración
del lavado se suele estimar en 15 segundos, aunque puede ser menos si
eliminamos adecuadamente el ácido. Si el sistema de aspiración no es lo
suficientemente potente para evitar el acúmulo de líquidos en la boca, se
puede interrumpir el lavado las veces que se considere oportuno, para
continuar lavando una vez sea aspirado el exceso de líquido. Si estamos en
aislamiento relativo, proceder al recambio de los rollos de algodón en este
momento, teniendo mucho cuidado de que no se produzca una
contaminación salival en el diente grabado. Secar durante 30 segundos con
aire seco o bien menos tiempo, si se alcanza un adecuado patrón de
grabado.
Comprobar que la zona grabada ha adquirido un color "blanco tiza" (figura 6).
6. Aplicar el sellador en todos los surcos y fisuras teniendo cuidado de
que no queden atrapadas burbujas de aire debajo del SF. Ayudarse para ello
de una sonda (figuras 7, 8 y 9).
7. Polimerización con la lámpara de luz halógena durante 30 segundos.
Proteger la visión del paciente (que cierre los ojos) y la del operador (gafas
de protección o pantalla filtro) (figura 10).
8. Evaluación del sellador. Con una sonda de exploración se comprobará
que el sellador ha quedado bien retenido y que no existen zonas con déficit
de material o burbujas (figura 11). Esto se realizará intentando "despegar" el
sellador.
9. Retirar el aislamiento (dique de goma o rollos de algodón) y comprobar
la oclusión con papel de articular. En caso de interferencia retirar el material
sobrante con fresa redonda, pequeña y a baja revolución (figura 12).
TÉCNICA DE APLICACIÓN DE SELLANTES DE FOSAS Y FISURAS
AUTOPOLIMERIZABLES
1. Aislamiento: en caso de absoluto.
2. Profilaxis: figura 1.
3. Lavado, aislamiento (en caso de ser con rollos de algodón) y secado
con aire (figura 2).
4. Grabado ácido 30 segundos. Lavado con spray de agua, cambio de
rollos de algodón y secado con aire seco. ¡Ojo con la contaminación salival!.
Comprobar el patrón de grabado (blanco tiza) (figuras 3 y 4).
5. Preparación del sellador. Verter una gota de Universal y una gota de
catalizador y mezclar con un palillo durante 10-15 segundos (figuras 5 y 6).
6. Aplicar el sellador. Pasar el extremo del aplicador por la superficie
oclusal y aplicar el sellador. Comprobar que se introduce en todas las fosas y
fisuras (figura 8).
7. Polimerización. Dejar que el sellador vaya polimerizando
(aproximadamente 2 minutos desde el inicio de la mezcla). Comprobar con una
sonda al cabo de ese tiempo que el sellador esté duro y que no existen zonas sin
material (figura 9).
8. Control de la oclusión (figura 10).
En la figura 11 se esquematiza el tiempo de trabajo del que se dispone con
los SF autopolimerizables: 15 segundos para la mezcla del Universal con el
catalizador, 45 segundos para la aplicación del sellador y 60 segundos para la
polimerización. El ciclo total hasta finalizar la operación es por lo tanto de dos
minutos desde que se mezclan Universal y catalizador.

E. INDICACIONES (En qué dientes se aplica)


F. RECOMENDACIONES POST APLICACIÓN DE SELLANTES
Evaluación periódica
En cada revisión del paciente (generalmente cada 6 meses o cada año)
habrá que comprobar si existe una pérdida parcial o total del material aplicado. En
caso de pérdida parcial proceder como sigue:
1. Remover el sellador restante con fresa redonda, pequeña y a baja
velocidad hasta llegar a un límite aceptable entre sellador y esmalte.
2. Aislamiento, profilaxis, grabado, lavado+secado.
3. Colocación del sellador y polimerización.
4. Control de retención y oclusión.
G. BIBLIOGRAFÍA
● https://colegiohigienistasmadrid.org/blog/?p=96
● http://saludoralessc.blogspot.com/2009/10/propiedades-de-los-sellantes-leve.
html
● http://saludoralessc.blogspot.com/2009/09/historia.html

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