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R é g im e n y e s t a d o en la te o r ía dem ocrática /

REGIMEN Y ESTADO EN LA
TEORÍA DEMOCRÁTICA ”

O ’Donnell, Guillermo (2001) .*?, P > V 'jS


Dr. Guillermo 0 Donnell
'y*» -

Régimen y Estado en la Teoría Política. En Revista


Temas y Debates, Año 5, N° 4 y 5, julio de 2001. Señor Rector, señoras y señores miem­ gas en el mundo, y efectivamente por lejos,
bros del Consejo Superior de la Universi­ esta Universidad -que hoy me honra con
Facultad de Ciencia Política y Relaciones dad Nacional de Rosario, señor Decano de esta distinción- es la primerísima que tiene
Internacionales. la Facultad de Ciencia Política y Relacio­ una carrera y doctorado en mi disciplina,
nes Internacionales -y generoso padrino de razón por la cual me siento doblemente
este Doctorado que tanto me honra-, que­ honrado.
Universidad Nacional de Rosario.
ridos colegas, queridos estudiantes, autori­ En tercer lugar, esto se conecta con
dades municipales y provinciales, señoras una pequeña historia personal. Com o us­
Páginas 7 a 17 y señores. Muchísimas gracias. Me siento tedes saben, el creador, líder intelectual y
emocionado y profundamente honrado por propulsor de la carrera de Ciencia Política
varias razones que implican una pequeña en la etapa inicial de la Universidad del
historia que quiero contarles. Litoral fue el Dr. Rafael Bielsa. Yo tuve la
Primero, por supuesto este honor en suerte de ser estudiante del Dr. Bielsa en la
sí mismo que tanto les agradezco, segundo Universidad de Buenos Aires. Bielsa cono­
porque como ustedes saben, esta Universi­ cía todos los vericuetos del derecho admi­
dad es la más antigua de la Argentina en nistrativo, pero era un hombre que decidió
términos de Doctorado y carrera de Cien­ no enriquecerse y dedicar toda su vida a la
cia Política y Relaciones Internacionales. docencia y a la investigación. Por lo tanto,
En mi correspondencia con mi buen ya en esa época, si uno quería vivir de eso
amigo y colega Osvaldo Iazzetta y más re­ tenía que ser profesor en varios lados. Por
cientemente, mi gran amigo y colega Hugo lo tanto Bielsa era profesor de Derecho
Quiroga, nos planteamos algunas dudas Administrativo en la Universidad de Bue­
sobre si esta Universidad es la más antigua nos Aires aunque siempre dejaba en claro
de América Latina en cuanto a tener la que su corazón estaba en esta Universidad
carrera y el Doctorado en Ciencia Política. y en esta ciudad. Bielsa dictaba Derecho
Con el propósito de constatar este dato me Administrativo, lo cual puede sonar aburri­
puse en contacto con unos cuantos cole­ do, pero lo que realmente hacia era ense-

Kellogg Institute for International Studies, Universidad de Notre Dam e, USA.


" C la s e Magistral del Dr. Guillerm o O 'D o n n e ll en ocasión de recibir el título de-Doctor Honoris C ausa de la
Universidad Nacional de Rosario. La ceremonia se realizó en la Facultad de Ciencia Fblítica y RRII el 13 de agosto
de 1999. Se agradece la colaboración de los alum nos Diego Di Marco y y Facundo Díaz quienes tuvieron a su
cargo la desgrabación de la misma. El Dr. O ’Donell revisó la versión final.
ñar teoría de! estado, una verdadera teoría do de que nuestra tarea como intelectua­ nuestros países es algo que no puede ser puesto, una elección competitiva, no
del estado con fuerte base jurídica pero muy les, por historia de nuestro país y de nues­ dejada de lado como intrascendente, más coercionada -no hace falta que amplíe este
crítica a la vez de las teorías que tendían a tros países, es ver cómo hacemos una críti­ aún cuando se intenta aislar un objeto que tema-, pero ahí ya se manifiestan aspectos
ca democrática a la democracia. Con esto se define de una forma política, como es el que revelan como en la formulación de un
reducir el estado a lo jurídico.
Bielsa era también un profesor al que quiero señalar, por un lado, que pese a sus caso de la democracia. proceso no tan simple se presuponen algu­
respetábamos y admirábamos; un hombre fallas, las libertades, la sucesión de autori­ Esa es una pelea, un desafío que nos nas cosas. Por tal motivo, en un trabajo
de una vida austera, un gran republicano dades públicas que hoy tenemos represen­ incumbe a todos, es una tarea muy com­ reciente señalo que las elecciones también
que insistía en que el lugar del estado en la tan un inmenso progreso respecto de la bru­ plicada, de largo plazo, y será el fruto -eso tienen que ser decisivas, cosa que no es­
sociedad presuponía a la ciudadanía y en talidad y arbitrariedad del pasado autori­ espero- de una tarea colectiva. taba planteada. ¿Qué quiero decir por de­
el que, además, la conducta adecuada del tario del cual hemos felizmente salido. Pero, Hoy les puedo ofrecer a ustedes algu­ cisivas? Simplemente, que una persona que
funcionario estatal partía de un respeto re­ por otro lado, nuestra condición de intelec­ nas consideraciones de lo que es parte de fue electa en una elección limpia pueda
publicano riguroso entre interés público y tuales nos exige formular una crítica de­ mi esfuerzo actual, por cierto no redondea­ asumir el cargo y ejercerlo por el período
personal. Era por tanto una lección que no mocrática dura e intransigente a la demo­ do, para encarar esta cuestión. constitucionalmente marcado.
implicaba sólo memorizar artículos de có­ cracia que nos permita marcar con fuerza Básicamente creo que la ciencia polí­ A nadie en el Norte se le ocurrió que,
digos administrativos sino que también ex­ y precisión sus defectos y, al mismo tiem­ tica contemporánea hace dos cosas: en por ejemplo, haya un golpe de estado por­
presaba una dimensión intelectual y moral po, identificar caminos y frentes de com­ primer lugar, olvida explicitar una serie de que ganó el candidato o la candidata que
de una teoría del estado. bate para avanzar en la democratización premisas tácitas que subyacen a la teoría no debía, o que una vez que están en sus
Esta distinción que hoy me otorgan de nuestras sociedades. tal como ésta fue elaborada en el Norte. cargos, el Congreso y los jueces, un Fujimori
tiene algo casi de mágico porque después Con relación a este punto -y eso es En otras palabras, esta teoría recibe condi­ o un Yeltsin, decidan suprimirlos. Se trata
de haber trabajado mucho tiempo como parte de la trayectoria intelectual que han ciones históricas propias de ese hemisferio de episodios que al no formar parte de la
politòlogo, en el sentido más tradicional que descripto acertadamente quienes me pre­ que no se problematizan, no se incorporan experiencia histórica más o menos civiliza­
aquí se ha expuesto, en los últimos años he cedieron en el uso de la palabra-, estoy a la investigación y a la reflexión teórica, lo da de otros países, no se incorporan luego
vuelto -en una especie de viaje a mi juven­ convencido de que esta tarea no puede cual genera serios problemas epistemoló­ a la definición de régimen democrático. De
tud-, a mi primer reencarnación como abo­ encararse importando llave en mano con­ gicos y metodológicos cuando viaja a otras modo que las elecciones tienen que ser de­
gado, redescubriendo y tratando de incor­ ceptos y teorías elaborados en el Norte, ni latitudes y pretende resultar válida bajo cisivas: primero, poder tomar posesión del
porar a mis trabajos una teoría del estado confiar en que bastan unos simples y pe­ condiciones históricas muy diferentes. En cargo, segundo hay que poder concluir el
con fuerte fundamento jurídico. queños ajustes para que esos conceptos segundo lugar, estas concepciones en gene­ período constitucional, y tercero, no debe
De manera que estaba retornando a funcionen adecuadamente en otros contex­ ral definen a la democracia como un pro­ haber restricciones formales e informales
mi curso de teoría del estado del Dr. Bielsa, tos como los que son propios de Argenti­ blema situado exclusivamente al nivel del como las vigentes en Chile, donde poderes
cuando me sorprendieron con la linda y na, Brasil o el resto de Latinoamérica. régimen político, de ahí el título de la clase que no son responsables frente al proceso
halagadora novedad de que estaban por Esta ha sido la premisa dominante en de hoy, destinada a discutir esta restricción político, ejercen atribuciones normalmente
acordarme este honor. Ese lado casi mági­ muy buena parte de los estudios de políti­ del concepto de democracia. constitucionales para otros países. De ma­
co que acaba de ocurrir en mi vida, le agre­ ca comparada, en los estudios de demo­ Empecemos por el régimen político. nera que elecciones limpias sí, pero por fa­
ga a este momento un significado adicio­ cratización realizados por una parte de los Cuando hablamos de la democracia como vor también incluyamos decisivas, pues de
nal. cientistas sociales y politólogos del hemis­ régimen político hablamos básicamente de lo contrario la teoría ya empieza a partirse.
Creo que es preciso encarar esta re­ ferio Norte. dos cosas: una que llamaríamos eleccio­ Hay otro punto que vale la pena des­
cuperación de la teoría del estado, básica­ Ocurre que la teoría democrática ac­ nes limpias, y otra, que este proceso elec­ tacar. Una elección limpia implica que cada
mente por dos razones. En primer lugar, tual refleja la trayectoria histórica de los toral está rodeado de algunas libertades - ciudadano o ciudadana tiene seis opciones:
cuando hablamos de democracia no pode­ países del Norte, y en cuanto intentamos libertad de expresión, libertad de asocia­ votar por el partido A, por el partido B,
mos no hablar de ciudadanía y ésta con­ hacer ciencia social empezamos por dibu­ ción, de información-, que condicionan y votar en blanco, no votar, emitir un voto
tiene, a su vez , un componente jurídico jar el objeto del cual nos vamos a ocupar, hacen probable o posible que las eleccio­ nulo o bien, por último, decidir por un pro­
sustancial que la define y protege. En se­ pero ese objeto está cargado de historia, y nes sean limpias. cedimiento al azar cual de estas cinco op­
gundo lugar, estoy cada vez más convenci­ la especificidad histórica y estructural de ¿Qué es una elección limpia? Por su­ ciones escoge (por ejemplo, poner un som­
Régim en V estsd o . exi /a te o r ía d e m a c rá tlc u ; 11

brero y sacar al azar una de las cinco op­ juicio subjetivo o de un contrato social, es dades -como vimos en el ejemplo de San facultad de actuar y de comprometerse a
ciones). un dato de la estructura social atravesada Pablo-, sino que es una apuesta colectiva e través de su voluntad -ya estamos hablan­
Otra cuestión es que todos tenemos por una normatividad legal que me impo­ institucionalizada que no depende de nues­ do de un agente- y que esa capacidad de
el derecho potencial -que podemos ejercer ne esa necesidad de aceptar que ustedes tras preferencias sino que está comprometerse lo torna un sujeto social
o no-, de ser electos, es decir, el derecho de también voten. institucionalizada por un sistema legal que portador de derechos subjetivos.
participar en la autoridad del estado y even­ Hace unos años, en una encuesta que nos fuerza en principio a aceptarla. En se­ La primera vez que oí hablar de dere­
tualmente participar nada menos que en hicimos sobre una muestra representativa gundo término, la democracia contempo­ chos subjetivos fue como alumno en un par
la aplicación de la coerción estatal sobre del Gran San Pablo -como se sabe la par­ ránea es una apuesta institucionalizada in­ de clases magistrales del Dr. Rafael Bielsa.
nuestros ciudadanos. te más moderna y avanzada de Brasil- pre­ cluyente, de modo que todos los adultos, El tenía una teoría muy elaborada, rica e
Cuando pensamos en este sujeto, que guntamos: “¿Usted cree que los brasileños salvo muy pocas excepciones, tenemos re- . histórica de la emergencia de derechos sub­
tiene seis opciones y que además pueda ser saben votar?” -no en el sentido mecánico conocidos legalmente por lo menos agen­ jetivos, que presentaba como un gran es­
electo y participar de la autoridad estatal, sino en cuanto a la aptitud de ios brasile­ cia, en tanto opciones de voto y en tanto pacio de poder y de fuerza de la ciudada­
estamos definiendo lo que llamo un agen­ ños para elegir-, y el 70 % respondió que potencial de ser electos. nía frente al poder del estado. Bielsa insis­
te, es decir, alguien a quien el sistema le- no. De modo que una mayoría significati­ Una característica adicional es que tía mucho en la categoría del derecho sub­
gal-constitucional de un régimen democrá­ va puso en duda la idoneidad de los ciuda­ esta atribución de agencia es universalista, jetivo como una portación de ciudadanía.
tico le atribuye, por lo menos en este plano danos brasileños para votar. Sin embargo, es decir, no depende de sexo o clase social Esta idea de derecho subjetivo se
del proceso político, cualidades de respon­ en la medida en que existe un sistema que, y es atribuida legalmente en los mismos entronca, antes de la democracia y del li­
sabilidad, de autodeliberación como para pese a todos sus defectos, opera como una términos a toda persona que cumpla los beralismo, con dos hechos históricos fun­
asignarle esos derechos. apuesta institucionalizada legalmente reco­ requisitos legales de ciudadanía. Es una atri­ damentales en el Norte: uno, con la tarea
Fbr tal razón, creo que el régimen de­ nocida, es preciso aceptar que la otra gen­ bución por lo tanto i n c l u y e n t e y de construcción del estado, es decir los re­
mocrático no es, como se ha sugerido, fru­ te vote. universalista. yes constructores del estado encontraron en
to del consenso, de la deliberación, o de un Esta es una concepción de agencia, Esta atribución reconoce una larga estas teorías anti-estamentales fundadas en
mítico contrato social, es el resultado de y este es un logro histórico. Debemos recor­ historia, pues la construcción de esta idea el individuo el instrumento jurídico perfec­
una apuesta colectiva instituciona­ dar que en la historia de la evolución de las del ser humano como agencia, proviene de to para arrasar con el feudalismo, los gre­
lizada. ¿Por qué? Porque en una situación democracias oligárquicas, por muy largo mucho antes del liberalismo y de la demo­ mios y ciudades, con el derecho eclesiásti­
democrática puedo estar convencido que tiempo, se les negó a los campesinos, obre­ cracia y se remonta a las concepciones fi­ co, es decir, en su contenido universalista
un sujeto no tiene que votar, pues va a vo­ ros, a los analfabetos, a los que no tenían losóficas y jurídicas de los sofistas, de igualaba, ayudaba a construir una jurisdic­
tar tan mal que es mejor que no vote, o propiedad -ni que decir las mujeres- el de­ Cicerón, y continúa con un trabajo muy ción nacional y estatal homogénea, gran
que realmente deberían votar cinco o seis recho a votar alegando que no reunían las largo de las universidades medievales, pa­ forma histórica de construir exitosamente
personas solamente. Pero el sistema legal condiciones de responsabilidad, autonomía, sando por los escolásticos españoles, luego estados.
de un régimen democrático me obliga -me razonabilidad, como las que tenían esa otra por las escuelas del derecho natural de El otro proceso simultáneo es, por
guste o no-, a aceptar que usted también gente. Pufendorf y Grocio en el siglo XVII, bási­ supuesto, la emergencia del capitalismo, en
puede votar y que su voto va a pesar lo Una forma de leer la historia de la camente en Holanda, y es incorporada y la cual la figura del trabajador que vende
mismo que el mío. democratización de los regímenes políticos adaptada a la teoría política liberal por libremente su fuerza de trabajo correspon­
Por eso señalo que es una apuesta es considerando las luchas políticas a tra­ Hobbes, mucho más tarde. de exactamente a esta definición. Para que
colectiva institucionalizada, pues no de­ vés de las cuales la condición de agencia, Es una teoría originariamente jurídica el trabajador en la relación social capitalis­
pende de mi voluntad subjetiva, sino que esto es, la reivindicación de compartir un en la cual en las relaciones personales poco ta pueda legitimarse en el funcionamiento
se trata de un atributo y una consecuencia grado de razonabilidad y de capacidad de a poco se va describiendo una idea que va de la economía y del capitalismo tiene que
legalmente definida, y que en principio la autodeliberación, se fue traduciendo en a contrapelo de las visiones de justicia de ser convencido, como agente portador del
violación de ese derecho, que esas otras normas legales que ampliaron la atribución Aristóteles y Santo Tomás -que son visio­ derecho subjetivo, de vender su fuerza de
personas tienen me costaría serias conse­ de agencia racional. nes arquitectónicas-, y como son muy trabajo.
cuencias. Por tal motivo insisto que un régimen individualistas definen al individuo como Estas dos fuerzas históricas impulsan
Fbr eso es algo que no depende de un democrático no depende de estas subjetivi­ poseedores de una potestad, un poder, una la construcción de esta idea de agencia legal­
Régimen y estado en la teoría dem ocrática , 13

mente definida con todo lo que tienen cho tiempo antes un tejido social, legalmen­ desacertada esta visión, ella debería mar­ específico de la democracia.
ambas de ambivalente: la construcción del te definido y practicado, que contenía mu­ camos los frentes de lucha en los que, como Un punto sobre el cual insistía mucho
estado genera muchos horrores y la cons­ cha ciudadanía civil. La idea de protección parte de nuestra tarea intelectual, política el Dr. Bielsa, y con el cual concuerdo, es
trucción del capitalismo legitima, por un de derechos, la consagración jurídica de la o moral, debería centrarse nuestra crítica que una vez que uno habla de estos dere­
tiempo, una relación extremadamente des­ idea de agencia, de portadores de derechos democrática de la democracia. En otras chos típicos, incluso en la definición de
igual porque el mito de la libertad en el ya está muy configurada; está tan hecha palabras, ello nos permitiría identificar las «poliarquía» de Dahl, de libre información,
contrato escondía la trampa de una enor­ que ese tránsito a lo político está facilitado grandes fronteras problemáticas de las lu­ de reunión, etc..., uno también esta ha­
me relación de desigualdad. incluso en términos ideológicos, por la ta­ chas democráticas en la sociedad civil. blando del estado. Es decir, estos derechos
Sin embargo, la construcción de esta rea de construcción previa que describimos.
Nuevamente, la teoría democrática del son derechos subjetivos que hacen a mi po­
figura jurídica que postula que una buena Hay una sociedad civil ya muy dirigi­
Norte omite esta problemática adoptando testad de asociarme o actuar, porque hay
capa de individuos -que se va extendien­ da jurídicamente por estas concepciones de
una versión sumamente idealizada que al un entramado legal que los sostiene.
do- son agentes responsables, capaces de agencia y agentes portadores de derechos.
dar por sentada la presencia de ciudada­ De nuevo, entiendo que un problema
dar y asumir cuenta de nuestros actos, se Por razones de tiempo estoy dejando
nía civil deja ausente esta cuestión en la serio de la ciencia política contemporánea
registra antes del liberalismo y antes de la de lado muchas particularidades, pero bá­
definición de democracia que formula. -por eso me alegra que en esta Facultad
democracia. Esta construcción, se registró sicamente intento marcar comparativamen­
Como resultado de ello, el régimen político aún se enseñe Weber, Marx, Gramsci- es
en el mismo momento en que los procesos te como diferente que esto no sucedió en
queda convertido en el único nivel, el úni­ que o bien se olvida del estado o se reduce
de construcción de los estados en el Norte nuestros países o bien pasó muy poco. En
co tema del cual una teoría adecuada de a éste a un conjunto de burocracias, igno­
generaban una red de tribunales, de legis­ Argentina, más que en otros, pero en gene­
la democracia debería ocuparse. rando la lección de Bielsa y de otros que
lación, de prácticas controversiales que se ral en América Latina pasó muy poco. En
Desde luego que el régimen es impor­ sugieren que el estado también es un siste­
basaron y reprodujeron esta idea de un ser otras palabras, hemos accedido a estas
tante y que es preciso recordar el progreso ma legal, una juridicidad y que por lo tan­
social como un agente legalmente definido características de la ciudadanía política,
que esto significa comparado con lo que to cuando hacemos referencia a estos de­
y protegido. pero contando con muy poco de ese tejido
padecíamos hace un tiempo. rechos estamos señalando que hay un es­
Lo que me pareció más interesante social, de esa construcción social de agen­
Es importante marcar que la demo­ tado que los sostiene y garantiza.
descubrir es que este proceso fue muy an­ cia que había aportado a los países del
cracia tiene dos características totalmente De manera que hemos pasado del
terior a la emergencia del liberalismo como Norte una especie de trama y sostén de la
específicas que lo distinguen de cualquier régimen a una de las dimensiones posibles
teoría política y también a la emergencia ciudadanía política. De manera que cuan­
otro régimen político. El primer rasgo se del estado, lo cual me permite demostrar
del régimen democrático. De modo que la do en aquéllos países se accede a la plena
refiere al tipo de elecciones pues si bien és­ que no podemos pensar la democracia sin
teoría liberal de Grocio, Hobbes y Locke, y ciudadanía política ya había mucha ciu­
tas pueden estar presentes en ciertos regí­ pensar también en el estado.
mucho después la teoría o la práctica de­ dadanía civil, ya se era ciudadano e inclu­
menes autoritarios -incluso hay elecciones El segundo punto, y ahí vamos a una
mocrática, adoptan estas ideas jurídicas y so ciudadana, al nivel de la sociedad civil.
para escoger al Papa o para conformar las tercera característica específica de la de­
las traducen, pero tomando como base la En nuestra región, con una historia
juntas militares-, el régimen democrático es mocracia es que ésta es la única forma
experiencia de aquellos países. marcada por una expansión económica y
el único en el que las elecciones sonjim- política que sostiene y garantiza ciertos de­
Estamos, por consiguiente, ante un social mucho más desigual y ambigua, con
pias y decisivas. La segunda característi­ rechos universalísticamente definidos que
caso de transposición de una experiencia diversas y más complejas tradiciones en la
ca es que lata democracia es el único régi­ garantizan y rodean el régimen político.
que presupone una esfera civil privada muy historia de conformación del estado, acce­
men político que tiene también una apues­ Un Estado democrático de Derecho
elaborada que tiene diferentes implicancias. demos a una casi plena ciudadanía políti­ ta colectiva, institucionalizada, inclu­ tiene un cuarta característica que es única
Una de éstas es que -pese a las excepcio­ ca, con muy poco sustrato de esa ciudada­ yente y universalista, ningún otro régi­ y exclusiva de la «democraticidad» del es­
nes, en Europa del Oeste más que en la del nía civil.
men la posee. Por definición, un régimen tado, me refiero a que el sistema legal de
Este y que en EE.UU.-, cuando llega el Entiendo muy genéricamente que esta
no democrático es aquél que por diferentes un estado democrático es el único sistema
momento de hacer más incluyente el régi­ es la diferencia central que debemos de­
razones concibe que ciertos individuos es­ legal que cierra. Esto significa que no hay
men político, cuando irrumpen los votan­ fender y explorar, por dos razones: prime­
tán incapacitados o no merecen ser parte ninguna autoridad que sea legibus solutus,
tes y los partidos, los trabajadores, las ro, porque existe una diferencia válida que
de esta apuesta universalista e incluyente, es decir, que no hay ninguna autoridad afue­
mujeres, los vecinos, ya existía desde mu­ es importante; segundo, porque si no es muy
éste es el segundo rasgo a nivel de régimen ra de la ley pues está sujeta a un entrama­
-»Bégimen; y estado en la teo ría dem ocrática . 13.

do de relaciones jurídicas por las cuales las cuales destaco la tentación de salirse ignorar las condiciones reales en las cuales de lo que sería la política. En el fondo, esto
nadie puede declararse o colocarse afuera de la institucionalidad -este es un poco el se ejerce esa agencia en el plano de las re­ nos remite a la eterna discusión -que como
o por encima de la ley. En toda relación de tema de la democracias delegativas- y tam­ laciones privadas. Lo mismo sucedió en el estudiosos de la política ustedes conocen-,
tipo autoritario, por definición siempre hay bién en el fondo, acerca de qué tipo de plano de las relaciones colectivas. La his­ acerca de qué es la política y cuáles son
alguien -un dictador, una junta militar u derechos estamos hablando. En rigor, exis­ toria de las políticas sociales universalistas sus límites. La actual respuesta provenien­
otra figura- que tiene la capacidad, a la te otra historia que prosigue a la evolución y socialmente integradoras que se dieron te de la tendencia neo-conservadora es re­
Schmitt, de declarar la suspensión de la de la politología o de la historia jurídica en el marco del Estado de Bienestar, es ducir excesivamente los límites de la políti­
ley. De modo que la legislación no demo­ que acabo de exponer muy brevemente, por también una historia por la cual se buscó ca y asignarle un espacio muy pequeño, el
crática tiene un «agujero potencial» por el la cual, aquellas concepciones iniciales muy básicamente, equiparar, no ya con medi­ resto es mercado y pasión. Esta postura
cual se puede fugar siempre una autoridad, individualistas -que Marx y Weber critica­ das individuales sino con medidas colecti­ sugiere que la política ocupe un lugar redu­
suspendiendo la ley. La autoridad demo­ ron ferozmente al denunciar la trampa que vas, la capacidad de agencia de grandes cido pues de lo contrario podría resultar
crática es una autoridad que cierra -en el encerraba la igualdad formal del contrato agregados sociales. La implementación de peligroso. El consejo metodológico que de­
sentido que acabo de exponer- no existien­ de venta del trabajo- derivaron rápidamen­ convenios colectivos, y de otras medidas riva de esta posición -y esto es motivo de
do la posibilidad de salir del circuito de las te hacia nuevos enfoques que comenzaron similares, tendían a equilibrar las relacio­ algunas discusiones infinitas que vengo sos­
normas jurídicas. Esta es otra característi­ a tomar en cuenta las condiciones rea­ nes, de manera que las condiciones de teniendo con mis colegas en el Norte- es
ca única y específica de la democracia, no les de opción que habilitan o no habili­ agencia presupuestas resultaran más o que si no nos mantenemos dentro de esa
existiendo otro régimen que la contemple. tan a la agencia. Si alguien es obligado a menos satisfechas. Lo que subyace tanto pequeñez prolija, su abordaje se complica
De acuerdo a lo expuesto, tenemos firmar un contrato con un revólver en el en el desarrollo del derecho privado como mucho teórica y metodológicamente, lo
dos clases de características: en primer lu­ pecho o si una persona sin instrucción es del derecho social, es concretizar el univer­ cual es cierto, y ese es el gran desafío. Si
gar, al nivel del régimen, mencionamos un engañada, ello genera una sensación de salismo inicial, buscando atenuar el des­ nos limitamos a hacer un estudio muy for­
tipo de elecciones y un tipo de libertades; injusticia. Ello revela que la simple expre­ equilibrio en las relaciones de fuerza para mal de alguna institución o régimen, o si
en segundo término destacamos dos ras­ sión de la voluntad no es suficiente y por lo no convertir la condición de agencia en pura nos limitamos a analizar cómo digieren los
gos sin los cuales el régimen no podría exis­ tanto le cabe al juez examinar si las condi­ fachada. Esto refleja un sentido de justi­ trabajadores políticas públicas bien conser­
tir -pues estaría constantemente amenaza­ ciones básicas que presuponen el ejercicio cia, de equidad, que está sostenido por la vadoras, si nos mantenemos en ese espa­
do y precarizado como sucede en la actua­ de agencia, que a su vez presupone la vali­ búsqueda de condiciones no puramente cio, lograremos una buena empiria, salvo
lidad-, esto es, un estado que sostenga dez de mi voluntad, han sido satisfechas. míticas o hipócritas de la presuposición de que asumamos el costo de preguntarnos
aquellas libertades y un sistema legal que Si éste adviertiera que por algunas de aque­ agencia. cuál es el lugar que ocupa esa empiria en
cierra. Los dos primeros atributos forman llas, u otras razones, los individuos no han Esto es relevante, pues toda una rama términos de la problemática de la demo­
parte del régimen y los dos siguientes del podido poner en ejercicio la capacidad de de la ciencia política contemporánea no se cracia. Se trata pues, de una lucha en va­
estado. De ahí proviene el título de esta clase agencia que presupone el contrato, éste interroga si ciertas libertades que dispone­ rios niveles: por un lado, remite a un infini­
de hoy. puede ser anulado o dejado de lado e in­ mos a nivel del régimen (votar o eventual­ to debate intelectual y, finalmente moral,
Es notable como buena parte de la cluso alguna otra persona puede sufrir un mente ser electos) están rodeadas de con­ acerca de qué es y para qué es la política,
ciencia política contemporánea de hecho castigo. diciones sociales que permitan ser ejerci­ cuáles son sus límites y qué podemos espe­
pretende circunscribir el estudio de la de­ Hay toda una larga historia en la que das efectivamente o sólo constituyen una rar de ella, y, debajo de eso también
mocracia solamente al nivel del régimen, contra este derecho racional formal, pura fachada. subyacen concepciones filosóficas y mora­
poniendo entre paréntesis estos últimos universalista y abstracto -como el que ca­ Si la ciencia política concibe reducir les respecto a cuál es el ideal de ser huma­
componentes sin los cuales, y entiendo que racterizó Weber-, se gesta lo que los alema­ el problema de la democracia solamente a no por el cual debemos movilizarnos e in­
ello es demostrable, no se puede pensar nes llaman un proceso de «juridificación» un problema de régimen político, puede teresamos como ciudadanos e intelectua­
realmente la democracia. muy intenso por el cual el derecho se hace tomar como dado el hecho de que los vo­ les.
Esto no es solamente un problema menos universalista, más concreto, pues tantes Juan Pérez y Juana Pérez no sean Quiero remarcar, para ir finalizando,
intelectual interesante, sino que también nos atendiendo aun sentido de justicia y equi­ candidatos vaya a saber uno por qué, y primero, que tenemos que tomar cuidado­
permite identificar y pensar las fronteras dad se advierte que para convivir con un cerrar el panorama teórico y empírico en sa cuenta de nuestra especificidad históri­
más problemáticas de la democracia entre mínimo de equilibrio social no se pueden ese retrato de un segmento muy recortado ca, pues la historia estructurada, las con­
- « ; 4 j;5 .J u l i o 2 0 0 1 j .Régimen y estado en la teoría dem ocrática . 17

formaciones de fuerzas, es algo a lo cual ma del régimen político. de la sociedad con el estado, en la cual vegando», y también me gustaría que lo
no podemos renunciar e-incorporar como Insisto que esto plantea un programa éste nos re-conozca como ciudadanos agen­ sintieran como una invitación a pensar es­
parte de nuestras preocupaciones discipli­ de investigación enorme, implica mucho tes portadores de derechos. Está claro que tos problemas, a seguirlos explorando. Me
narias. Lo contrario implica seguir compran­ trabajo y reflexión colectiva, mucha discu­ se trata de una lucha casi molecular, con gustaría poder creer que es posible hacer
do llave en mano, teorías elaboradas en sión, pero en definitiva, es parte de nuestro muchos frentes, y por ende muy difícil de una ampliación teóricamente disciplinada
función de una especificidad histórica muy trabajo y es un problema que nos preocu­ imaginar como una estrategia. Finalmente del tema de la democracia en nuestros paí­
diferente, corriendo serios riesgos de arri­ pa en nuestra vida personal diaria. diría esto último por dos razones: una por­ ses, y que eso, como intelectuales que so­
bar a resultados espurios. Para terminar, quiero señalar que una que la dignidad humana exige una exten­ mos, sirva para hacer una contribución de
En segundo lugar, creo que esta con­ crítica democrática a la democracia inclu­ sión efectiva de derechos civiles y un trato nuestro lado a estas largas y complicadas
cepción moral del ser humano como agen­ ye primero, reconocer que este régimen es respetuoso de ios ciudadanos; y segundo, luchas democráticas que sobre todo uste­
te, en su expresión y en su concreción jurí­ mucho mejor que lo que teníamos antes. porque creo que la medida del éxito de di­ des jóvenes, tienen por delante.
dica, presupone homologar ciertos derechos Segundo creo que también hay una tarea chos avances implica crear lugares sociales Nuevamente, muchísimas gracias. Me
en el plano civil como en el plano político. de profundización de la democracia políti­ de protección y de respeto, en los cuales siento muy honrado por esta distinción.
Después de todo, el derecho a asociarnos o ca propiamente dicha. A nivel del régimen, las actuales víctimas de desciudada- Creo haber explicado las razones combi­
el derecho de información, si bien constitu­ necesitamos mejores mecanismos públicos nización podrán definir sus luchas e inte­ nadas de esta coincidencia milagrosa y per­
yen libertades políticas clásicas, también y de financiamiento de los partidos políti­ reses. mítanme evocar e invocar, otra vez, a ese
son libertades civiles. De modo que el dere­ cos, mayor democracia interna en los par­ Les he contado por donde ando «na­ gran maestro que fue el Dr. Bielsa.
cho a asociamos no se limita a integrar un tidos políticos, más transparencia en los pro­
partido político, sino también a asociarnos cesos decisorios, y un largo etcétera que
a un club de ajedrez; o el cjerecho de emitir ustedes conocen igual o mejor que yo. Hay
opinión lo ejercemos tanto en la universi­ a nivel del régimen también mucho por
dad, en la calle, como en el club. Aunque hacer, no se trata de que ya tenemos esas
hay un aspecto de esas libertades que se libertades y nos despreocupamos del régi­
asocian con las libertades políticas, pues men. Al régimen le falta mucho pero por lo
no podemos desconocer su relevancia para menos tenemos eso.
un régimen democrático, no constituyen Ahora en términos de la conexión de
solamente libertades políticas, son una es­ lo democrático con el estado y de su forma
pecie de punta de iceberg que se conecta de relación con la sociedad, creo que esta­
profundamente con el conjunto de la so­ mos en «palotes». Es decir, aún nos falta
ciedad. muchísimo en cuanto a la extensión de la
La separación entre la libertad de aso­ sociedad civil, a la institucionalización del
ciación, de información y ciertas ideas bá­ estado al nivel jurídico, e invocando y evo­
sicas de equidad, es puramente analítica. cando nuevamente al Dr. Rafael Bielsa, en
Dado que en el Norte no dejaron de plan­ lo referente a un sistema republicano que
tearse las condiciones reales del ejercicio cierre y donde cada uno es, como en el
de agencia, resulta totalmente inconsisten­ viejo ideal, el sujeto.
te mantenernos en una definición dema­ Finalmente creo si bien por un lado
siado estrecha del régimen político que es preciso luchar para profundizar la
prohíbe interrogamos sobre tales condicio­ «democraticidad» del régimen, también hay
nes en el plano político. Esto, de acuerdo a una lucha muy importante, mucho más
lo expuesto, no es posible dentro de las compleja, en muchos más frentes, que es
actuales concepciones predominantes que la lucha democrática por la extensión de
sugieren concentramos sólo en el proble­ derechos civiles y por generar una relación

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