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El grito de los que no pueden hablar

Isabella Plaza Diaz

Ingeniería Electrónica y Telecomunicaciones, Universidad del Cauca

Lectura y escritura Grupo M

Lic. Ana María Plaza Rosero

04 de octubre de 2021
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El grito de los que no pueden hablar

La crueldad hacia los animales incluye comportamientos que causan dolor o estrés

innecesario hacia ellos. Van desde el descuido de la atención básica, hasta el asesinato

doloso. Hay dos tipos de crueldad animal, crueldad directa, es decir, falta deliberada en brindar

atención básica, tortura, crueldad o asesinato de animales, y crueldad indirecta, es decir,

cuando se presencia, apoya la crueldad o tortura de animales y no se hace nada para

impedirlo.

Para muchos de los seres humanos, la crueldad con los animales siempre ha sido un

pasatiempo muy popular, y es el lado anormal de los seres humanos el hecho de emocionarse

al ver sangre fluyendo de animales desarmados. Desde la época romana (lucha entre

gladiadores y bestias) hasta la actualidad (corrida de toros, peleas de perros, peleas de gallos,

etc.), ha habido muchos deportes que implican crueldad y muerte de animales;

lamentablemente, la mayoría de estos animales son desaparecidos y han sido abandonados

por sus propios dueños.

Estos hechos generan indignación y dejan muchas preguntas, ¿Por qué existe el

maltrato animal? ¿Qué se puede hacer al respecto? ¿Qué no se debe hacer?

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Hoy en día el tema del abuso animal es muy urgente; nuestro mundo está lleno de

crueldad y violencia. Mientras que la gente puede protegerse, pedir ayuda y conocer sus

derechos, los animales no tienen las posibilidades. Todos los días oímos historias sobre el

abuso animal en los medios de comunicación como la web, la tv y los periódicos.

Definitivamente ellos tienen derecho a que se les proteja de los abusos y el trato inadecuado

que sufren; los animales no son objetos de experimentos ni mercancías; son seres vivos que

merecen nuestro respeto y consideración, según lo cita Immanuel Kant (1780) “En lo que

respecta a los animales, no tenemos deberes directos para con ellos. No son conscientes de sí

mismos, y están ahí meramente como un medio para un fin. Ese fin es el hombre”.

Infortunadamente no todas las personas que tienen mascotas en sus casas se dan

cuenta de que no son un entretenimiento, sino que son una gran responsabilidad. Ellos, al igual

que las personas sienten dolor y sufrimiento.

Las mascotas más comunes como los gatos y los perros, son abandonados porque sus

dueños, al ver que ya están grandes o por un mal comportamiento, los echan a las calles.

Estos propietarios no saben lo que significa tener una mascota, olvidan que los animales no

son juguetes y necesitan cuidados. Como resultado, los animales que perdieron sus hogares,

mueren porque no pueden vivir en las calles o porque son sacrificados.

No importa el tipo de maltrato, ya sea por casa, ahorcamiento, peleas, abandono o

diversión, con la finalidad lúdica o científica no se debe hacer o practicar estos actos de

violencia. Estas acciones de abuso animal están provocando a una gran velocidad que muchas

especies mueran en un gran número y que muchas de estas estén en peligro de extinción, o en

unos casos ya están extintos.

Vivimos en una sociedad civilizada y el abuso animal es incompatible con la definición

de la moralidad, la protección de los animales debería ser una prioridad para toda persona, es

muy triste ver a un animal en la calle desnutrido comiendo de la basura. ¿qué pasaría si los

animales hablaran? Si fuese así, no habría tanto maltrato hacia ellos, el hombre muchas veces
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abusa de ellos porque son animales indefensos. Las mascotas o animales como ser vivo

requiere unas atenciones, son seres vivos que también sienten y si existe este tipo de abuso es

por inmoralidad, falta de conciencia y el egoísmo humano de pensar que solo él tiene derechos,

sentimientos y que tiene poder sobre cualquiera, tratando a estos indefensos como objetos y

utilizarlos como un bien propio. 1Tal y como lo dice Herman E. Daly y John B. (1989) todo ser

vivo merece respeto y no debe ser tratado como a un objeto o ser utilizado de forma cruel para

cualquier propósito humano.

Las causas de todo esto se debe a la educación que se ha tenido desde niños. Los

adultos son responsables de enseñar a sus niños el valor de respetar a cualquier ser vivo, tener

muy en claro que dar una mascota a un niño no es ningún juego y que no es solo un tipo de

diversión, es una responsabilidad. Existen familias que compran o adoptan animales por simple

capricho o por moda, pero no lo hacen porque realmente tienen tiempo para brindarle amor,

respeto, y protección. Hay que estar seguros antes de comprar o adoptar un animal, solo se

debe hacer si se está seguro de que va a tener unas condiciones adecuadas para vivir, que se

adapte también al tipo de vida de la persona, vivienda y disponibilidad de tiempo.

Pero el abuso animal no solo se da desde un hogar, existen varios, uno de ellos es el

que se da en los circos, donde detrás de las presentaciones con malabares, se presentan

abusos contra ellos como golpes físicos cuando no obedecen y en ocasiones no le dan de

comer. El zoológico también hace parte de esto, al tener animales en lugares que no son su

habitad natural, estos animales se sienten limitados y claramente no es su ambiente. Las

corridas de toros por supuesto hacen parte de este abuso, las personas pagan por ver un

animal sufrir, que su defensa es decir que el animal es peligroso, cuando varias pruebas han

demostrado que el toro no hace absolutamente nada si se le deja tranquilo, los matan al

terminar la presentación, y eso les causa gracia. La pelea de gallos y pelea de perros, apostar

por eso y saber que ellos no pueden decidir, claramente es el peor tipo de abuso.

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“Hay salvajes que se apoderan de este perro, que tan sobradamente supera al hombre

en fidelidad y amistad, lo clavan a una mesa y lo despedazan vivo para mostrar sus venas

mesentéricas. Se descubren en él los mismos órganos sensoriales que en uno mismo.

Contéstame, mecanicista, ¿es que la naturaleza ha dispuesto todos los resortes sensoriales en

este animal con el fin de que no sienta?” (Voltaire, 1764).

conclusión el maltrato animal es una acción a la que hay que ponerle una alto

inmediato es nuestro deber y responsabilidad enseñar a los niños y a las demás personas que

el maltrato hacia los animales es incorrecto y que se debe respetar todo lo que tiene vida

porque es importante también que los padres dejen claro que las mascotas no son un juguete,

cuando los niños no son educados en la protección de sus mascotas los agreden los lanzan por

el aire cabalgan sobre ello, esto es maltrato animal y provoca serias lesiones , los perros o

gatos no deben ser entregados a los niños para divertirlos sino como compañía y para

enseñarles a respetarlos cada vez que no tomamos en consideración el maltrato somos

participes de una moral injusta y perdemos una oportunidad de identificar un comportamiento

que podría ser un indicador de violencia contra los humanos.

Para concluir, se puede decir que la educación de los niños es la base de los valores sin

importar los modelos que los rodean en el exterior, se les debe enseñar a respetar y cuidar un

animal, enseñarles que no es un juego; desde ese principio se pueden cambiar las cosas a

futuro.

si se quiere tener una mascota, primero se debe ver si se le puede brindar la atención

que necesita, o cuando se va a regalar o adoptar un animal, también hay que mirar si esa

persona de verdad le va a dar el amor y el respeto necesario, si es solo un capricho de la

persona, en ocasiones, un sentimiento de vanidad.

Un animal no es un objeto, es un ser vivo más y se debe tratar como tal. El egoísmo

humano es muy grande, al pensar que es el único que tiene derechos, que siente. El hecho de
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que se emocione al ver a alguien indefenso sufrir, es prueba de una gran inmoralidad e

ignorancia. No solo es el buen cuidado de animales, también es el buen cuidado del medio

ambiente, pues este también es un factor importante que no afecta directamente, ya que, por el

mal cuidado de la naturaleza muchas especies de animales están en peligro de extinción.

Una mascota deber ser una siempre, no solo cuando se está cachorra, si crece y se

convierte en una peligrosa, no es culpa de ella, si no del mismo dueño, todo depende de la

educación que le hayan dado y no se debe valorar a un animal solo porque es lindo de

pequeño, ellos también necesitan amor, el abandono no es una opción.

Referencias
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Herman E. Daly y John B. (1989). Para el bien común. Reorientando la economía hacia la
comunidad, el medio ambiente y un futuro sostenible. Editorial FCE.

Kant, Immanuel. (1780). Lecciones de ética. Austral.

Voltaire (1764). Diccionario filosófico. Edición de René Pomeau.