Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
SANSÓN ERA FUERTE FÍSICAMENTE PODÍA MATAR A
UN LEÓN SOLO CON SUS MANOS, PODÍA ARRANCAR LAS PUERTAS
DE UNA CIUDAD, PERO NO PODÍA DECIR QUE NO CUANDO LO
PRESIONABA UNA MUJER.
Muchas veces leemos y predicamos sobre este pasaje y pasamos por alto el error de Sansón,
pero cuál fue el error de Sansón? Tener una relación sentimental con Dalila? Dejarse
engañar por ella? Dejarse cortar el cabello? NO, el error de Sansón fue creer que la razón
de su fuerza estaba en su cabello, en ser nazareo, y no en Dios.
Podemos ver en la vida de Sansón que fue el espíritu de Dios quien vino siempre en su
ayuda, su cabello era señal de obediencia, pero su poder siempre vino de Dios aunque
quizás no lo reconoció (Jueces 14:19 / Jueces 15:13-15)
Pero cuando Sansón dijo que la razón de su fuerza era su cabello y no Dios, el Señor lo
abandono, pues no reconoció que el era la razón de sus victorias y de su poder.
Ahora traslademos el error de Sansón a la vida de nosotros como cristianos, que muchas
veces se nos olvida de donde viene nuestra fuerza, se nos olvida de donde vienen nuestras
victorias.
El error de Sansón es declarar a lo que tenemos o hacemos en nuestra vida las bendiciones,
las victorias, los milagros, el poder y no darle gloria a nuestro Dios.
Los enemigos de Sansón lo acechaban para matarlo, y cerraron la puerta de la ciudad para
poder atraparlo, pero a Sansón no le preocupaba que las puertas estuvieran cerradas, como
vemos en el vs 3 Sansón se levantó de madrugada y arranco las puertas de la ciudad con sus
pilares y se las echo sobre sus hombros las llevo a la cumbre del monte.
Cuando Sansón decidió abrir la puerta de su corazón a Dalila esa decisión al final le costó
la vida, termino humillado, termino siendo un juguete de sus enemigos Jueces (18-19 y 23-
25)
Tenemos que reconocer que la puerta que descuido Sansón es la puerta que este año
muchos de nosotros también hemos descuidado y hemos dado lugar al enemigo para que
llene nuestro corazón de todo aquello que nos ha robado la paz, que nos ha robado el gozo,
que nos ha robado la esperanza de nuestra vida.
Muchos cristianos han terminado como Sansón, siendo objeto de burla, siendo objeto de
menosprecio, sirviendo de diversión para personas que no valoran sus vidas.
Por descuidar la puerta de nuestro corazón satanás ha logrado que muchas hijas de
Dios se conviertan en el pasatiempo, en la diversión de hombres que no las aman
sino que solamente las utilizan.
Por descuidar la puerta del corazón satanás ha hecho que la vida de muchos hijos de
Dios sirvan de burla de los inconversos por los vicios e los tienen.
Por descuidar la puerta del corazón satanás ha logrado que muchas familias
cristianas vivan llenos de pleitos, de palabras hirientes, de violencia los unos contra
los otros.
Es tan importante no descuidar la puerta que descuido Sansón que la palabra de Dios nos
manda algo que muchos no tomamos en cuenta (Proverbios 4:23)
Cada uno de nosotros debemos cuidar la puerta de nuestro corazón porque nuestra vida será
un reflejo de lo que nosotros permitamos entrar a nuestro corazón:
Si algo causa destrozos en la vida de una persona soltera o de una persona casada
es dejar que la fornicación y el adulterio entren a su corazón.
Tenemos que cuidar muy bien la puerta de nuestro corazón porque el adulterio y
la fornicación siempre se presentan de maneras muy sutiles y muy
atrayentes (Proverbios 5:3 / Proverbios 6:24)
La amargura viene a nuestra vida cuando nos sentimos desesperados porque las
cosas no cambian o no se dan en el tiempo que nosotros queríamos que pasaran,
porque se nos olvida que Dios conoce nuestros tiempos y el conoce cuál es el
tiempo perfecto (Salmo 31:15)
Satanás viene para hurtar, matar y destruir, pero nuestro Señor Jesucristo viene a
nuestra vida para darnos vida en abundancia (Juan 10:10) en abundancia de paz,
en abundancia de gozo.