El poder Musical

La #consciencia de vivir en un #universo musical nos permite saber que

estamos conectados y somos parte del todo que nos rodea, cuando eso
ocurre, todo se vuelve #música, las #emociones adquieren forma musical,
nuestras #vivencias se expresan en latidos, nuestra vida describe
tonalidades de #ritmos internos y externos ante las vivencias.
Escuchando dentro de nosotros mismos, vivimos todas las formas musicales,
la #furia, la #pasión, la #dulzura, todas las emociones, las #alegrías, los
miedos, la estridencia y la melodía.
La Música constituye uno de los elementos metodológicos y el primero de
los 7 Poderes de Biodanza que a través de sus 5 líneas de vivencia, evoca
los distintos ritmos del hombre.
Con la música de la línea de #vitalidad, el ritmo se acelera y se entra en una
conexión dinámica con la propia existencia. En la línea de #sexualidad la
melodía nos lleva a expresamos de forma sinuosa, atractiva y generamos
otro tipo de conexión que nos dispone a la sexualidad y nos conecta con la
propia energía sexual. En la línea de #trascendencia nos lleva al
recogimiento, al retorno a la armonía interna, se logra sentir el amor
indiferenciado La música utilizada en la línea de #afectividad, produce
efectos que conectan a sentimientos que parecen irrelevantes y ocultos en
el seno de la especie humana, sensibilizando las funciones expresivas de la
comunicación.
La música tiene junto a la danza, un rol principal en #Biodanza, se escucha
con todo el cuerpo, se conecta con el ritmo interno que se torna
imperceptible en cada vivencia, un ritmo colectivo cuando nos
conectamos con el grupo produciendo la sensación de que no se és
separado del otro.
Sus efectos influyen en los umbrales de respuestas hipotalámicas, en el
equilibrio neurovegetativo, y en la homeostasis, ya que los órganos, tienen
distintas resonancias frente a los varios pasajes de una obra musical, esa
resonancia tiene una dimensión física, como estímulo táctil cenestésico y
una dimensión neuroendocrina.
La música es entonces la expresión de una resonancia vibratoria con todo
lo que nos rodea, nuestro cuerpo y nuestras células experimentan estados
de bienestar o malestar y ello es en función de la conexión y armonía que
tenemos con nuestra danza interna y con la danza del todo
(ontocosmológica).
La música en Biodanza permite lo que Rolando Toro denomina “La poética
del encuentro”
Jaineth Méndez