Cabe recalcar que la renta capitalista es una parte de la plusvalía que sustraen los
capitalistas a los asalariados, a quienes entregan a los terratenientes. la teoría de Marx tiene la tarea de precisar en qué circunstancias el terrateniente puede exigir renta capitalista, en qué modalidades y en qué magnitudes. La tierra no es una mercancía como las demás, en sí misma no tiene valor, no es producto del trabajo social, pero adquiere precio como consecuencia de la existencia de la renta ya que este precio es la renta capitalizada tanto en forma diferencial renta como en absoluto o monopolio; cada uno de ellos constituye una renta obtenida de la plusvalía, pero difieren entre sí tanto en el origen como en los efectos. También es importante aclarar que esta teoría difiere de la que surge de la economía neoclásica, que considera la renta de la tierra como una recompensa recibida de la tierra misma, no del terrateniente, por una contribución conceptualmente comparable a la del trabajo o la tierra. capital; esta teoría considera, por ejemplo, que la renta diferencial es una simple recompensa por la productividad de la tierra. Jaramillo analiza la diferencia que hace Marx entre renta diferencial y renta absoluta, y concluye que estas son expresiones de un mismo fenómeno cuyo núcleo es el papel de la escasez de tierra en la expansión de la producción agrícola, lo que pone en tela de juicio la afirmación de que la renta absoluta existe porque es marginal. la tierra también tiene valor. Esto no parece ser cierto si se tiene en cuenta la experiencia histórica. También cuestiona la afirmación de que la agricultura tiene una baja composición orgánica del capital porque se debe pagar la renta de la tierra.
en el contexto urbano, diferenciándolo del rural, y tiene en cuenta su articulación
con la producción de la trama construida, en particular con la edificación, así como con los diferentes usos de la misma. ese espacio construido y con los agentes implicados. Los precios de la tierra y los precios de las propiedades, distinguiendo entre lo que significa comprar propiedades nuevas y antiguas, y entre comprar y alquilar estas, lo que significa aludir, en mayor o menor medida, a las distintas situaciones que normalmente se dan en las ciudades.