Antonio Angeles Roque

Artilugios de usos variados

El chayote es uno de los alimentos más consumidos en la sociedad mexicana. Cuando se

piensa acerca del chayote, se puede inferir que es mexicano, de origen mexicano. Este vegetal

está fuertemente arraigado a la cultura mexicana. Es posible que cualquier mexicano al ser

cuestionado acerca del origen botánico de esta planta diga que es de origen mexicano, pues no

hay forma de pensar que este alimento proviene de otra parte del mundo. En la lectura de los

mitos del chayote, se hacen explicaciones acerca de la morfología de este vegetal que son

difíciles de descifrar si es que no se conoce la forma de la planta. Es un elemento ancestral en

México, se le conoce tan bien que se sabe de qué manera su consumo beneficia a las personas.

Los mitos del chayote son creados en cuanto a lo que nuestros antepasados han observado.

Algunos de estos mitos están asociados con la divinidad de la naturaleza, con el matrimonio o

con la ocurrencia.

Desde mi punto de vista, para la época, era muy común que se explicara un suceso difícil

de comprender a través del misticismo o del destino. Era una manera de evitar cuestionamientos

o de simplificar situaciones complejas. Hoy en día se sabe de qué manera funciona el mundo

gracias a la ciencia, y muchos de estos mitos podrían ser desmentidos; sin embargo, existe una

esencia de verdad dentro de ellos. Tienen sentido porque las analogías que se hacen son acerca

de la vida, porque el chayote funciona como un elemento vital que se reproduce y cura al mismo

tiempo. En aquellos tiempos, las pocas cosas que una persona podía poseer podían ser

consideradas riquezas. Como se explica en la lectura “El petate: de la cuna a la tumba”, a la

persona con una poca abundancia de granos de maíz se le consideraba acomodada. Actualmente

el petate no tiene demasiado uso en las sociedades modernas más que en ciertas comunidades de

México. El petate ha sido reemplazado por la alfombra, que tiene imagen de lujo o calidad.
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El petate pudo haber dado una gran pelea en términos de lo que ofrece al mercado

mexicano, de los varios usos para los que era utilizado. En esas épocas, muchas cosas no

existían; debido a eso, el petate era multiusos. Se usaba como ataúd, como bolsa, como mesa,

para preparar tamales, para prácticas religiosas, etc. Muchos artilugios ancestrales mexicanos son

remplazados con el tiempo debido a la modernidad, y a la comodidad y eficiencia que representa

el usar productos avanzados. Estos objetos nunca vuelven a ser introducidos al mercado

mexicano ya que representan lo antiguo, lo anticuado, la precariedad. Precariedad es en lo que

han caído. No obstante, actualmente, se ha visto una tendencia por voltear atrás en el tiempo y

rescatar viejas costumbres para propósitos estéticos o progresistas. Es inevitable pensar que el

rescate del uso del petate en las sociedades modernas tenga fines artísticos que hagan sentir a las

personas como si fueran cultas o socialmente responsables.