Cuando se habla de comunicación social o comunicación colectiva se hace referencia básicamente al empleo por parte del hombre de una serie de canales artificiales creados para llevar mensajes dirigidos a grandes auditorios. Su proceso es el mismo de la comunicación en general, pero con algunas diferencias entre sus elementos, el emisor es un órgano de comunicación o una persona que lo representa y que envía sus mensajes por medio de signos y códigos a través de eficientes canales de gran complejidad técnica y elevados costos, identificados como medios de masas (mass media), que comprenden principalmente la prensa, la radio y la televisión, los cuales con la evolución de la sociedad han adquirido formas cada vez más sofisticadas, como las transmisiones vía satélite, por computadora, por cable, entre otros. El destinatario o receptor de la comunicación colectiva representa el individuo ubicado al otro extremo de los canales, es decir, la persona que lee el periódico y sintoniza emisoras de radio y canales de televisión. En este mismo orden de ideas, De Sola Pool, citado por Roda (1989), define la comunicación colectiva como "un patrón de conexión entre un pequeño número de emisores y un extenso número de receptores" (p. 4). Asimismo, Roda destaca la definición de Janowitz y Schulze, quienes se refieren a la comunicación de masas en términos de "procedimientos utilizados por especialistas que se sirven de dispositivos tecnológicos para difundir un contenido simbólico homogéneo entre un público extenso, heterogéneo y disperso". (p. 6). Más allá de las definiciones, todos estos investigadores han contribuido a establecer una serie de características de la comunicación colectiva algunas de los cuales se mencionan a continuación: Se desarrolla a través de organizaciones formales complejas y medios técnicos (mass media), cada uno de los cuales posee características particulares que determinan la estructura y forma del mensaje, sus símbolos y signos. Se dirige a un público amplio y heterogéneo. Su contenido es público, está abierto a todos. Los mensajes llegan simultáneamente a una gran cantidad de personas que se encuentran distantes del emisor y entre sí mismas. Cada receptor selecciona unos mensajes y rechaza otros según factores como: Personalidad, experiencia previa, intereses, actitudes, opiniones, posición social, entre otros. Generalmente se efectúa en una sola dirección, el emisor tiene acceso, a través de los mass media, a unos receptores que sólo excepcionalmente producen mensajes de retorno.
2. Características de los Medios
Desde sus inicios, el periodismo ha sido parte fundamental de la sociedad y de todo lo que ocurre en ella. Gracias a él es posible saber algo de lo que sucedió en el pasado, a la vez que registra el presente y esboza el futuro. Sin embargo, es en las últimas décadas donde el periodismo y los medios de comunicación han cobrado una importancia jamás pensada, convirtiéndose en un poder de magnitud similar al de la política y la economía. Tanto el periodismo como los medios de comunicación cumplen un papel fundamental, pues es por intermedio de ellos que conocemos los hechos; lo que ellos digan, expresen o informen es lo que, al final, conocemos, es evidente que de su veracidad, transparencia y honestidad depende que el mundo que nos muestran sea el verdadero.
3. ¿Qué son los Medios de Comunicación?
Los medios de comunicación son la manera más eficaz y rápida de transmitir un mensaje, para otros, son un vehículo de manipulación social mediante el cual se hacen sentir los diferentes poderes de la sociedad, así como también hay quienes piensan en los medios de comunicación como si se tratase de un reflejo de la sociedad, como en un medio gracias al cual es posible manifestar lo positivo y lo negativo de una situación o de un contexto determinado. Sin embargo, es preciso definir a los medios de comunicación desde su condición más esencial; es decir, desde el origen de su naturaleza, pues es por intermedio de esta delimitación que es posible comprender el significado y la manera en que entendemos a los medios de comunicación. Los medios de comunicación son los instrumentos mediante los cuales se informa y se comunica de forma masiva; son la manera como las personas, los miembros de una sociedad o de una comunidad se enteran de lo que sucede a su alrededor a nivel económico, político, social, entre otros. Son la representación física de la comunicación en nuestro mundo; es decir, son el canal mediante el cual la información se obtiene, procesa, expresa y comunica. Prensa periódicos y revistas), radio y televisión son los medios en que se desarrolla el ejercicio del periodismo. La radio y la televisión pueden o no incluir información periodística en su programación (musical, deportiva, entre otros) mientras que la prensa tiene como única oferta y razón de ser la información periodística. Por otra parte, el receptor de los medios electrónicos no tiene arbitrio sobre los mensajes que recibe: es un destinatario relativamente pasivo del mensaje y siempre está sujeto a escuchar información que no escoge y que frecuentemente se le dosifica con intercalación de anuncios comerciales que no busca. Por el contrario, el lector de periódicos y revistas es un receptor activo: elige y compra la publicación que quiere, selecciona los textos que juzga de interés (incluidos los anuncios publicitarios) y determina el momento de la lectura. La prensa es el medio periodístico tradicional y puede permanecer en poder del público indefinidamente. Las publicaciones impresas pueden conservarse en una casa, en una biblioteca, en un archivo, en un hemeroteca para su consulta posterior, sin que se requiera la tecnología audiovisual que exigen los medios electrónicos. Los periódicos y revistas están definidos por su fisonomía editorial y física. La fisonomía editorial está signada por la naturaleza de los asuntos que se abordan y la política editorial de cada empresa periodística: su posición ideológica y política frente a los hechos de interés colectivo. La fisonomía física está dada por la presentación, tamaño, tipografía, distribución de materiales gráficos y escritos, distribución de secciones, clase de papel, entre otros. La radio ejerce su función periodística cuando transmite noticieros, entrevistas y acontecimientos noticiosos que el público puede conocer en el momento en que se están produciendo. Entre sus características singulares se encuentra la rapidez y la oportunidad, pero al penetrar sólo por los oídos obliga al auditorio a realizar un esfuerzo de retención prácticamente imposible. Su mensaje informativo no puede conservarse con fijeza; el radioescucha está imposibilitado para buscar una ampliación del mensaje, abarcar los datos de manera global, repetir la “lectura”, escoger lo que le parece más importante. La televisión tiene las ventajas de la radio en cuanto a rapidez y oportunidad y les añade imágenes que permiten al espectador situarse en el lugar del acontecimiento, comprobar la veracidad de la narración y hasta cierto punto “vivir” el hecho. En muchos casos, la radio y la televisión provocan curiosidad e interés por determinados sucesos. Al día siguiente de sus transmisiones no es extraño que un sector del auditorio busque en los periódicos la información correspondiente para confirmar y comparar sus impresiones iniciales; para recordar, completar, analizar y obtener una idea de conjunto respecto a lo que pasó. Por último, en muchos países mientras la prensa es manejada por empresas susceptibles de propiedad, la radio y la televisión están sujetas a concesiones debido a que el espacio aéreo en que transmiten es propiedad de la nación. El gobierno determina el juego económico y político de los medios electrónicos y de ello depende significativamente la amplitud que alcanza la libertad de expresión.
4. Los Medios de Difusión en Venezuela
(Extractos de un trabajo titulado “El sistema de la difusión masiva en Venezuela y la política estatal frente a los medios”, de Oswaldo Capriles, 1976). Durante la dictadura de Juan Vicente Gómez la prensa se encuentra maniatada y el país experimenta un atraso cultural casi absoluto. Los intelectuales están exiliados o en la cárcel cubiertos de grilletes, la prensa totalmente controlada, sólo informa lo que conviene a la dictadura; los demás medios de difusión apenas comienzan a penetrar, aunque en algunos casos a través de desarrollos sorpresivos, como el de una primera industria de cine antes de los años veinte. El relativo desarrollo de los transportes y las innovaciones llegadas del extranjero irán sentando las bases para un cambio comunicacional a la muerte del dictador. Con la muerte de Gómez se produce una explosiva tendencia a la liberación cultural que es frenada por sus sucesores hasta la llegada de Isaías Medina Angarita, quien al tomar el poder en la década del 40 liberaliza las estructuras de información y opinión pública, abre las cárceles y hace desaparecer la censura. En la década que va de 1930 a 1940 comienza a desarrollarse rápidamente la radiodifusión comercial. El Estado no ha adoptado ninguna regulación en lo referente a la difusión radioeléctrica. Pero en 1941 surgen la Ley de Telecomunicaciones, simple ley cuadro sin contenido de carácter normativo, y su reglamento. Dicho reglamento fue durante muchos años, con leves modificaciones, la estructura legal normativa de la radiodifusión en Venezuela. La historia de los medios en Venezuela se hace “moderna” a partir de la década del 30 y, más concretamente a partir de la muerte del tirano Gómez; pero la modernización y tecnificación, además de la gran expansión propiamente dicha, se alargan hasta los años 50, en que Venezuela será uno de los primeros ocho países del mundo en tener servicios diarios de televisión. Paralelamente a dicho cambio se produce un proceso de concentración progresiva en algunos de los medios. En la radio se produce el fenómeno de las cadenas o redes. La distribución regional estuvo en función de los núcleos urbanos más o menos importantes. El capital acumulado por ciertos grupos dedicados a la radio encontró la salida ideal de tipo capitalista dependiente, que consistía en mantener el carácter local de las radios de provincia, con baja inversión y poca potencia, pero incorporándolas paulatinamente en circuitos a través de la participación financiera y la transmisión de programas desde la capital. Esos circuitos llamados frecuentemente “cadenas”, constituyen una forma sui generis de concentración, que siendo financiera, no implica concentración territorial o geográfica, sino que, por el contrario, explota el carácter local desde una perspectiva nacional. En cuanto al medio impreso su evolución muestra un fenómeno desde las años 40; y especialmente a partir de 1958, con la proliferación de revistas semanales de todo tipo, que fueron evolucionando de un periodismo de opinión a un tipo de revista de variedades. La evolución televisiva puede ser calificada de meteórica durante los primeros diez años, sobre todo tomando en cuenta la reducida capacidad adquisitiva de la gran mayoría de la población. A partir de la puesta en funcionamiento de la estatal Televisora Nacional, TVN 5, en 1952 (dos años después de la implantación de la televisión comercial del medio a nivel nacional en Estados Unidos), van a surgir varias empresas privadas en el campo de la teledifusión, las cuales asumen rápidamente la totalidad de la audiencia. Para mediados de los años 70 la situación del país presenta un cuadro de concentración capitalista bastante acentuada; en los cuatro medios masivos principales (prensa, radio, televisión y cine) se aprecia el mismo fenómeno, alimentado por una inversión publicitaria en ascenso. El enorme aumento de los recursos petroleros, así como las posibilidades de consumo y el auge financiero y comercial resultante, se reflejan en el sector comunicacional. El sector privado de los medios constituye un conjunto vasto, bastante sistemático y coherente, conformado por el complejo de empresas privadas que se relacionan habitualmente con la actividad publicitaria y los medios de difusión masiva más importantes. El estrato básico del sector privado es el de los anunciantes, que constituyen el punto de inserción del sistema de difusión dentro del sistema económico general. En este mismo estrato se encuentra inserto el sector público. Sin embargo, este sector ejerce muy poca influencia directa, fuera de su papel de anunciante, sobre la programación y contenidos de los medios privados, de manera que no llega a romper, sino que por el contrario acentúa, la articulación fundamental entre anunciantes, publicidad y medios. El segundo estrato del sistema de difusión está constituido por las empresas publicitarias y de relaciones públicas. Los propietarios de los diferentes medios integran el tercer estrato del sistema privado de difusión. Cuatro grandes asociaciones representan a dichos propietarios: Bloque Venezolano de Prensa, que agrupa a las publicaciones más importantes del país y constituye el grupo de presión de los grandes diarios y grupos de editores frente a cualquier iniciativa gubernamental destinada a modificar la estructura del sistema de difusión. Cámara Venezolana de la Industria de la Radiodifusión, que agrupa a los radiodifusores del país. Cámara Venezolana de la Televisión, que agrupa a las empresas televisivas. Cámara de la Industria Cinematográfica Nacional, integrada por los laboratorios y productoras. Todas estas asociaciones de propietarios de medios, a pesar de las contradicciones existentes entre ellos y de la concurrencia comercial al interior de cada uno de sus sectores y de los sectores entre sí, presentan un frente único de tipo político e ideológico.
5. Medios Impresos. Clasificación
Son todas las publicaciones impresas en papel que tengan como objetivo informar, por ejemplo los periódicos, las revistas, folletos, trípticos, volantes entre otros. Requieren de un sistema complejo de distribución, que hace que no todo el mundo pueda acceder a ellos. Sin embargo, su efecto es más duradero, pues se puede volver a la publicación una y otra vez para analizarla, para citarla, para compararla. Hay medios impresos para todo tipo de público, no sólo para el que se quiere informar acerca de la realidad, sino que también los hay para los jóvenes, para los aficionados a la moda, a la música, a los deportes, entre otros; es decir, hay tantos medios impresos como grupos en la sociedad.
6. Medios Audiovisuales. Cine. Televisión. Radio.
Son aquellos que se basan en imágenes y/o sonidos para expresar la información. Forman parte de este grupo: la radio, la televisión y el cine, aunque a éste último se lo considera más como un medio de entretenimiento cultural. La televisión, es en la actualidad el medio más masivo por su rapidez, por la cantidad de recursos que utiliza (imágenes, sonido, personas) y, sobre todo, por la posibilidad que le ofrece al público de ver los hechos y a sus protagonistas sin necesidad de estar presente. En cuanto a la radio, su importancia radica en que quizás es el medio que con más prontitud consigue la información, pues, además de los pocos requerimientos que implica su producción, no necesita de imágenes para comunicar, tan sólo estar en el lugar de los hechos, o en una cabina de sonido, y emitir. También vale decir que, por la gran cantidad de emisoras que existen, la radio, como medio masivo, tiene más posibilidades que la televisión, ya que su público es amplio y heterogéneo. 7. Medios Externos Medios Exteriores Conjunto de soportes de uso exclusivamente publicitario que pueden observarse en la calle. Entre los más importantes están la valla publicitaria, el cartel, el pendón y la pancarta. Cartel Muchos definen el cartel publicitario es un común medio de comunicación masivo que por lo general anuncia productos y servicios. Mediante un cartel publicitario se pueden transmitir muchas cosas: la buena imagen de una empresa, servicios existentes o la imagen de un producto, sus ventajas, por qué es mejor que otros productos de su clase. El cartel fue quizás el más importante medio de comunicación publicitario. (fue soporte indispensable en las manifestaciones en las fiestas de toros, vendimias, circos, entre otras). Pierde importancia tras la aparición de la televisión y el auge de las vallas publicitarias. Valla publicitaria La valla publicitaria tradicional consiste en una superficie plana sobre la que se pegan diferentes láminas cuya combinación conforma una imagen. También se llaman vallas a los soportes publicitarios que se colocan en los laterales de los terrenos de juego en estadios o polideportivos. Las vallas se ubican en zonas abiertas, grandes centros comerciales, carreteras. Intenta llegar a las personas, cuando éstas se encuentran fuera de sus hogares. Es una publicidad de grandes tamaños, y han ser vistas a grandes distancias y alturas. Este medio se ha convertido en parte habitual del paisaje urbano e interurbano presentando anuncios o mensajes publicitarios; y por esta razón es objeto de críticas paisajísticas y medioambientales . Pendón Para el mundo de la publicidad, el pendón es una impresión en lona vinílica que se caracteriza por ser más larga que ancha y que además pende o cuelga para ser expuesto o exhibido. Por lo general posee tubos de soporte en las partes superior e inferior, con acabados de plástico y cordón de nylon. Los pendones son un medio muy efectivo para la publicidad, porque permite que los peatones tengan una excelente visibilidad sobre lo que se anuncia . Pancarta Es un cartelón de tela o lona vinílica que, sostenido adecuadamente en dos varas, se exhibe en reuniones públicas, y contiene letreros de grandes caracteres, con lemas, expresiones de deseos colectivos, peticiones. Los tamaños varían según lo requiera el cliente. Características del medio exterior como medio publicitario 1 Selectividad geográfica. 2 Alcance y repetición. 3 Versatilidad. 4 Fugacidad del mensaje. 5 Escasa selectividad demográfica. 6 Dificultad para evaluar la audiencia Medio en exteriores Son un medio, por lo general, visual que se encuentra en exteriores o al aire libre. Según Lamb, Hair y McDaniel, es un medio flexible, de bajo costo, capaz de asumir una gran variedad de formas. Los ejemplos incluyen: espectaculares escrituras en el cielo, globos gigantes, minicarteles en centros comerciales y en paradas de autobuses y aeropuertos, anuncios en los costados de los autos, camiones y autobuses, e incluso en los enormes depósitos o tanques de agua. Sus ventajas son: Flexibilidad alta; exposición repetida; bajo costo; baja competencia de mensajes; buena selectividad por localización. Algunas de sus desventajas son: No selectivo en cuanto a edad, sexo y nivel socioeconómico, no tiene profundos efectos en los lectores, se le critica por constituir un peligro para el tránsito y porque arruina el paisaje natural