Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Interiores Romper La Casa China Made
Interiores Romper La Casa China Made
ISBN 978-987-3972-70-6
Título
Romper la casa
Autora
China Made
Editorial
malisiaeditorial@gmail.com
Diagonal 78 #506 | La Plata
9
vomitar en medio de la noche
me ayudó a seguir tomando,
y a no tener resaca el primero de enero.
por eso me desperté temprano
y corrimos a la terminal.
un taxista joven y buena onda
pasó los semáforos en rojo,
mientras nos contaba que no había dormido nada
y que tendría que trabajar hasta las 4 am del día siguiente.
estábamos sin tiempo y sin pasajes.
al despedirnos el joven taxista nos predijo:
“este año sí que tendrá acción”.
10
la espera
c.93. una malla verde agua con bocas rojas que muerden un
hielo. pienso en tu disco, pero el de la pepa. qué gran obra.
somos siete dice el de seguridad. ¿qué cuenta? los números se
atascan por momentos. el teléfono empieza a sonar de nuevo.
11
c112. él ahora duerme, o se hace. se despierta, se mueve.
“vamos caminando, derechito a casa”. espero que no vean lo
que escribo. tal vez no entiendan la letra.
12
Relato 9
13
todos, y también un par de veces fuimos a los motines, que en
mi ciudad natal, azul, fueron reiterados en una época.
conservo en mi memoria esas imágenes como partes de una
película, presos gritando números de teléfono para que los
que estábamos del otro lado del alambre llamemos a sus fa-
miliares y les avisemos que todo estaba bien. una calle reple-
ta de gente que prendían fogatas para pasar la noche espe-
rando. esas caras muertas de frío iluminadas por el reflejo
naranja del fuego, son retratos de algo que para mí, son los
mejores recuerdos.
nosotros bajábamos del renault 12 decrépito que teníamos,
con comida para esa gente que tenía hijos, nietos o amigos
en peligro entre las rejas. para una nena de ocho años eso
era fascinante, supongo que por eso fui la única militante de
mi familia. mi papá como no había podido convencer a mis
hermanos del activismo político, utilizó la dureza de la vida
conmigo para que entienda que los problemas de los otros,
también son mis problemas.
14
siento olor a quemado
soy yo misma pegada al calefactor
tratando de meterme en el artefacto
hace frío en esta casa
pero la vamos a dejar
y
tal vez
sean los días más tristes
de nuestras vidas
pienso mucho
en eso
que dice alicia
sobre los pensamientos mágicos
yo creo
que arruina
la palabra
mágico
alicia quiere que dejes de imaginar
15
no soy yo
todo lo que me parece que está buenísimo
para un poema
no lo escribo
por suerte vos te lo acordás
por suerte
hoy
puedo contar
que ese auto
que me chocó
me regaló una vuelta 180º por la autopista
y una tarde
en la comisaría.
***
16
durante el almuerzo nos preguntamos
por qué las mujeres en las películas
tienen armas pequeñas
por qué natalie portman usa una especie de secador de pelo
en vez de un misil
quiero pelear, pero no tengo armas mortales
aunque si lo pienso bien
podría destruirte con solo mirarte
una especie de superpoder
una conexión supraterrenal
una fuerza divina
pero ahora, la verdad es que te extraño
prefiero verte
y chapar toda la noche
y volver a hacerlo al
día siguiente
17
si vas a seguir queriendo develar
ese
mal llamado
misterio
y
si la intriga nos llevará
a
todo.
18
Relato 10
19
que yo. cómo fue, por qué estuvieron juntos, ¿nosotras te-
nemos algo en común?, la verdad es que yo siempre intento
pensar que soy mejor que vos.
a veces me da miedo que alguien vea en mi buscador tu nom-
bre, ¿qué le diría?, esto es un secreto, como nuestra relación,
esa que ni siquiera vos conocés. igual yo sé que sabés quién
soy, ay dale, no te hagas la otra, las dos sabemos y en silencio
nos espiamos.
me acuerdo el día en el que me enteré de todo, ¿vos salías con
eme?, y él con sus ojos chiquitos, riéndose como siempre, no
me negó absolutamente nada, nada, bueno al menos podrías
haberme mentido un poco, si yo no te pedí que me dijeras la
verdad. y ahora cada tanto te espío en silencio para sentir
esas cosquillas en la panza, odiarte abiertamente y sentir
que todo me gusta un poco cada vez más.
pero qué es este sentimiento raro… ¿antes le pasaba a la
gente de sentir esta contradicción por alguien que jamás vie-
ron?, ay dale, ¿vos no me conoces a mí?
20
decime que tenés un ibuprofeno por favor.
acabo de leer los chats de gmail
y
no puedo creer lo grasa que éramos
¿en qué momento me emborraché así?
pero bailamos toda la noche,
volvimos de día.
la comunión no podría haber salido mejor.
te dije que se había abierto un portal cuando nos abrazamos,
te lo volví a decir una vez más.
tengo miedo, pero me gusta.
alguien habla de animales exóticos
y yo
pienso en excéntricos,
como vos.
el deseo no sirve de nada,
lo que valen son los hechos.
hagámoslo todo,
pero juntos.
***
21
nunca aprendí a armar bien un porro,
porque me gusta más fumarlo, es más cómodo
hay cosas que no aprendo, porque prefiero que las hagan por mí
por favor no me pongas a prueba
porque me olvido de todo al toque
me pone nerviosa que me mires así
jurame que te vas a olvidar el título de cada película que
miremos juntos
y que nunca te vas a acordar del nombre de los actores
que la luz de la pantalla del celular no iluminará nuestras caras
en una cena romántica
que el olor a jazmín sea nuestro perfume
y que nunca pero nunca
hagamos ruido al besarnos en público
pacto de amor.
***
22
listo, tengo sida de gatos, lo siento
también tengo muchos pelos de gato en la garganta
tantos, que no puedo respirar,
se me va a hacer una bola
y después, en una especie de arcada, los voy a largar
aunque creo que eso les pasa sólo a ellos
sigo sin poder respirar bien,
acostada en mi cama, con la luz apagada
siento el sida en todo el cuerpo, pero especialmente en las manos
pero del lado de afuera,
recubriéndolas
como si cada dedo fuese una estrellita,
de esas que prenden ls niñs en navidad,
pero en vez de chispas, irradian el virus
mientras tanto escucho de fondo una canción,
creo que es música francesa
no logro descifrarla bien,
porque se escucha lejos
y pienso que
que
al final de cuentas
si hoy muero,
será
con buena música.
***
23
la mamá de mi mamá se suicidó
ella prefirió mentirme
y cree que yo no lo sé
+++
24
que te parta un rayo, que te parta un rayo, que te parta un rayo
repito cual mantra
que te parta un rayo, que te parta un rayo, que te parta un rayo
pienso
mientras
te escribo
suerte
en
todo .
25
flan
***
26
acabo de limpiar las fotos de mi facebook
para que cuando me stalkees,
veas lo mejor que tengo
no quisiera que veas
cuando me hice la permanente
y
otras en las que no salí tan bien,
donde tengo cara de tonta.
quiero que me veas genial,
genial
como cuando te veo
y
siento en mi mente la música
de carpenters
que me eleva
al infinito
y
me hace pensar cosas
tan estúpidas
como la letra de
close to you.
quiero que sepas
que soy fanática
de carpenters,
y
de vos.
27
bach
****
28
Relato 1
29
Relato 3
++++
30
Relato 4
julio
31
mi otro yo
++++
32
Relato 2
33
genio
++++
34
quiero llenarme de humo hasta marearme,
me siento tan mal que empiezo a estar mejor.
+++
35
obsesión efímera
++++
36
quequén
++++
37
Relato 7
38
a veces me pregunto por qué mi recuerdo la conserva, y
pienso sa ra, ese doble suspiro que mi cuerpo hace para pro-
nunciar su nombre. o ese pelo arreglado que me cuenta que
jamás seré así, o la libertad que me genera no estar en su
pollera, siendo ella y cumpliendo las expectativas de una se-
ñora de su edad.
++++
39
explotabas los tomates
y te reías
y te manchabas
la ropa,
pero no te importaba
y seguias
explotando
cada tomate
que salpicaba
tu remera
y yo
pensaba
que mi nuevo
signo
favorito
es picis
porque vos
sos de picáis
y seguías riéndote
y yo
mirándote
y así pasaba el tiempo
entre el amor
y el
agua.
40
me preocupa si apagar el celular cada vez,
gasta más batería que si lo dejo prendido
me encantó tu historia sobre el brote psicótico
las historias de las noches con yoshua,
el libro que descansa en la mesita de luz
vos estás lejos ¿qué hacés?
por momentos enloquezco
pero pedí un deseo y lo milito
la luz del micro ya está apagada
pero aun así podemos vernos las caras
cada tanto nos vuelve la señal
y con ella
algunos mensajes que nos informan sobre el lugar que dejamos
mo baja al baño por última vez
y juli prepara su última selfie con el antifaz
todos los días fueron iguales
pero éste es distinto.
41
el alcohol fluyó tanto como la conversación
eso fue un problema
leer rápido, rápido, no hay tiempo.
un desconocido nos invita a valparaíso.
nos negamos
todos están re locos
la cumbia al palo
inés habla de ingerir porro con almendras
te evitás el mambo re violento dice
hablamos bocha
¿lenguaje no verbal o universal?
has juntado miles y miles
por suerte fuiste vos quien recibió
vos
el generoso fanático
de todo
igual que yo.
42
la montaña
me pone intensa
me pongo re intensa
del corte te amo
y me asfixio
si no estoy con vos
no sé pintó el dramatismo
ese que creí odiar
¿por qué no estás cada cinco minutos diciéndome que me amás?
claro, no me querés
claro te enojás
no, yo no me enojo
yo te amo
quedate
conmigo
pero para siempre
***
43
de todas las veces que le pedí el arma,
nunca me dijo que sí,
pero tampoco que no.
sólo larga una carcajada,
acompañada de un brillo
en sus ojos achinados
sé que puede conseguirla,
aunque aún no sé para qué la quiero
un arma pienso
mientras hago con la mano la figura
que se forma al agarrarla
la podría guardar en la mochila
y saber que siempre está ahí,
o esconderla adentro
de mis medias de nylon.
¿vendrán en colores?,
¿tipo rosa y blanco?
¿incrustaciones?
un arma repito, necesito un arma te digo
mientras tirados en el colchón de tu habitación
paso una pierna sobre las tuyas
y
te miro de reojo.
***
44
superhéroe
45
Relato 6
quiero olvidar
46
tomar tereré una tarde de verano
sentadas en el sillón
esperando la tormenta
queriendo destruir todo
pero sin ánimo de hacerlo
el cuaderno de poesías viejas
tu taller de poemas
la revelación, el potencial
el celular, las actualizaciones de facebook
nos demandan
mucho tiempo
tenemos todo
pero no hacemos nada
sólo estar
juntas.
++++
47
igual ya nadie te recuerda
hoy me levanté tan abajo
lo primero que hice,
tal como una empleada de la cia,
fue revisar instagram
no había nada nuevo
pero con lo viejo alcanzaba
esa foto ya la vi mil veces
casi no me hace efecto
sigo revisando un poquito más
y la encuentro a celeste
y me acuerdo
de lo que ya no es
¿cuándo dejamos de ser amigas?
y lo que es peor ¿por qué?
bueno pero eso no es lo peor
pero es como me siento
hoy no me motiva nada, che
en algún punto me gusta
lo transito
¿pero cuánto va a durar?
ya no estoy para estas cosas
menos para tomar cerveza quilmes
ya tengo 30
no puedo tomar eso
que después me recuerda
durante varios días
que me emborraché
48
todo queda justificado
entrega absoluta
nada más importa
solo sentirme mal
vacía
mendigando cariño
me mendigo a mí misma
pero no obtengo nada
voy a volverme loca
¿cómo sería eso?
hoy necesito hacer algo grande,
muy grande,
tal vez,
me tiña el pelo.
49
Relato 8
juntos o nada
50
un norteño recién llegado a buenos aires, que soñaba con ser
chef. un pantalón con bolsillos a los costados, un atado de ciga-
rrillos y el saludo de su tía desde la plataforma de la terminal,
habían sido lo poco que trajo consigo. se conocieron en una
fiesta y no tardaron en terminar garchando en gorriti, frente
a los ojos observadores de la niña, que aún no se definía, pero
no era algo que ella pensara demasiado, hacía algún tiempo
se había entregado al sabor de la cocaína y la contracción en
los dientes, no había mucho más que la motivara. en definitiva
ella no podía quejarse, había dormido infinidad de veces en
la calle y la seguridad de un techo, compañía y “cocó”, como a
ellos les gustaba llamarla, la mantenía tranquila.
de vez en cuando los padres de sebastián, evangelistas,
oriundos de rauch, insistían en visitarlo, por lo que un orden
rápido de la casa era suficiente para montar una escena me-
dianamente creíble. luego volvían a la normal cotidianeidad
de levantarse a las tres de la tarde, comer algo, prender la
tele, juntar plata y llamar al chino.
no se juntaban con mucha gente, a veces caía germán con
julia, pero sólo cuando se ponían de acuerdo, porque después
de una secuencia que vivieron en la casa de él con una ami-
ga de julia, la cosa se puso tensa y dejaron de verse tanto y
de pasar por lo de sebastián, que era lo que hacían cuando
estaban juntos.
se podía decir que todo estaba bien, sebastián estaba becado
por la facultad y recibía un buen sueldo, daba clases de geofí-
sica algunos días a la semana, que le proporcionaban lo nece-
sario para tirar todo el mes y hacerle el aguante a los amigos.
él siempre fue gay, al menos eso era lo que decía, “yo siempre
fui gay mi amor, desde que estaba en la panza”. por eso la
mayor cantidad de relaciones que tuvo fueron con chicos, en
su pueblo para disimular tuvo que sacrificarse y estar con
alguna que otra concha, pero no más que eso. cuando llegó a
buenos aires las fiestas descontroladas y la tranquilidad de
51
no sentirse observado, lo llevaron a estar con gran cantidad
de personas. “cuando uno es gay es probable que tenga sida,
entonces primero se le avisa al otro, por ejemplo, si te acaban
en la boca pero vos escupís al toque, no te contagiás. nosotros
sabemos cómo cuidarnos, pero este hijo de puta nunca me
dijo que era un sidoso de mierda”, contaba indignado cada
vez que podía a sus amigos.
sebastián tenía sida, la niña y víctor también. tríos y drogas
compartidas habían hecho de su sangre, la misma sangre, la
misma enfermedad. Víctor solía pensar en la niña, que sólo
tenía diecisiete años. por lo que tenía que ver con ellos no se
preocupaba mucho, porque en algún punto sabían a qué se
exponían, pero ella era una pendeja, con una enfermedad de
mierda y con una adicción incontrolable, no había hecho nada,
no terminó la escuela, no conoció ningún otro lugar fuera de
capital federal, no se enamoró, pero lo que era peor es que no
creció. ella no tuvo la oportunidad ni siquiera de elegir.
La niña se murió, también sebastián y víctor, sólo queda el
recuerdo del negro fuego que quemó el departamento de la
calle gorriti, una noche de locura con el chino, cuando duros,
sin poder moverse, juan encendió el primer cigarrillo de su
tercer paquete y luego de unas profundas pitadas se lo olvidó
arriba de los dos colchones que usaban como cama y sillón.
52
Este libro se terminó de imprimir
en los talleres gráficos de
D I S T R I B U I D O R A & E S TA N T E R Í A D E LI B R O S Y R E V I S TA S
D I A G O N A L 7 8 E S Q . 6 - L A P L ATA - A R G E N T I N A
MALISIADISTRIBUIDORA@GMAIL.COM