RESUMEN ÁREA ANDINA

La cordillera de los Andes es uno de los cordones montañosos más importantes

del mundo debido a su extensión, altitud y centros urbanos. La región cuenta con una
gran cantidad de centros urbanos en altitudes inusualmente altas, lo que la convierte en
un caso único. La región ofrece atractivos naturales y culturales, como la práctica de
deportes de montaña y la cultura precolombina, que atraen a turistas internacionales.
Aunque la infraestructura turística en algunas zonas es limitada, la región cuenta con
centros termales, embalses, camping y oferta hotelera. Además, el clima templado
favorece la actividad turística durante todo el año. La región comprende áreas
cordilleranas de Venezuela, Colombia, Ecuador, Perú, Chile y Argentina, y aunque en
algunos casos la oferta turística es limitada, la región es conocida por su imponente
paisaje natural, sus sierras y parques nacionales. La dinámica de las precipitaciones
marca estaciones de sequía y de lluvias y determina, en gran medida, la afluencia de
turistas. En resumen, la región andina es un destino turístico interesante y diverso que
ofrece atractivos naturales y culturales únicos.
El altiplano es una región geográfica que se encuentra en los Andes centrales y que
se extiende desde el sur de Perú hasta el norte de Argentina y Chile. Aunque esta
región es homogénea en paisajes y características humanas, el turismo se centra en el
extremo septentrional, donde se encuentran los principales valores arqueológicos y
naturales, como el lago Titicaca, Cuzco y Machu-Picchu.
− En el altiplano boliviano, la presencia del turismo internacional es menor que
en el resto del país, pero el turismo doméstico es importante debido a los
parajes naturales y enclaves monumentales realmente singulares, como las
minas de Potosí, la monumental Sucre o el inmenso Salar de Uyuni de 12.000
km2, un auténtico mar de sal.
− En la vertiente occidental del altiplano, en la zona de Arequipa (Perú) y los
territorios chilenos, se encuentran dos enclaves de gran prestigio y desigual
desarrollo turístico: el inaccesible Parque Nacional Lauca y la región de
Atacama, destino de numerosos operadores internacionales por la singular
presencia de paisajes áridos (El Valle de La Luna), oasis como el de San Pedro
de Atacama y espectaculares géiseres.
El turismo en esta región se basa en el turismo doméstico, aunque en la zona central
cercana a las capitales, como Mendoza y Santiago, y en el resto de la región,
dominada por los viñedos, se ha desarrollado una infraestructura turística importante,
con estaciones de esquí, centros termales, embalses, cámpings y complejos hoteleros
que marcan unos usos turísticos destacados tanto en invierno como en verano.
La costa del Pacífico de Sudamérica; desde la región septentrional de
Colombia y Ecuador, pasando por la costa central y llegando hasta la región de
Atacama en Chile. La región septentrional es poco poblada y mal comunicada,
dominada por el bosque pluvial tropical y con actividades económicas centradas en la
pesca y la agricultura de subsistencia. El turismo está poco desarrollado, y solo algunos
operadores realizan circuitos de aventura. En la costa central, que abarca la mayor
parte del litoral del Pacífico, el clima es seco, y la infraestructura de transporte es
buena debido a la presencia de la Panamericana. La temperatura del agua varía
significativamente debido a la corriente de Humboldt, pero el desarrollo turístico se
centra en el turismo residencial y en los enclaves monumentales, especialmente en
Perú, que tiene recursos arqueológicos únicos. En la costa meridional, la presencia de
estaciones turísticas es más significativa debido al clima templado. También se
menciona la importancia del turismo de negocios en centros urbanos como Lima o
Guayaquil.
Hay una cierta similitud entre los archipiélagos de Galápagos y Juan Fernández en
cuanto a su insularidad y su desarrollo turístico centrado en la naturaleza. Sin embargo,
mientras Galápagos tiene una gran demanda turística debido a su valor natural y el
ecoturismo sostenible, Juan Fernández tiene un turismo menos desarrollado y su
principal atracción es la historia de Robinson Crusoe y el lugar donde vivió Alexander
Selkirk durante cuatro años. Ambos lugares son importantes por su valor natural y su
importancia histórica, pero su atractivo turístico es diferente. En Galápagos, el turismo
se centra principalmente en la observación de la flora y fauna endémicas, así como
en la práctica de deportes acuáticos y el turismo de aventura. Los visitantes pueden
hacer excursiones en barco para ver tortugas gigantes, iguanas marinas, pingüinos,
tiburones martillo, ballenas y delfines, entre otros animales. También pueden hacer
senderismo, buceo y snorkel para explorar la belleza natural de las islas y su rica
biodiversidad. Por otro lado, en Juan Fernández, el turismo se enfoca en la naturaleza
y la historia. Los turistas pueden visitar la isla Robinson Crusoe, donde se encuentra
el museo Juan Fernández, que muestra la historia y la cultura de la isla. También
pueden hacer caminatas para explorar la flora y fauna local, incluyendo especies
endémicas de plantas y aves. Además, pueden disfrutar de la pesca deportiva y el
buceo en las aguas cristalinas de la isla.