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Jiménez Rosas, Eric Orlando; Verduzco Chirino, Gemma Luz Sylvia

La sintaxis espacial de la vida doméstica. Una comparación urbano-rural


Palapa, vol. IV, núm. II, julio-diciembre, 2009, pp. 45-52
Universidad de Colima
México

Disponible en: http://redalyc.uaemex.mx/src/inicio/ArtPdfRed.jsp?iCve=94814775005

Palapa
ISSN (Versión impresa): 1870-7483
palapa@ucol.mx
Universidad de Colima
México

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Palapa | issn: 1870-7483 | Vol. iv | Núm. ii [09] | pp. 45-52 | Julio-diciembre de 2009

INVESTIGACIÓN || RESEARCH

La sintaxis espacial de la vida doméstica.


Una comparación urbano-rural

Spatial syntax of domestic life. An urban-rural comparision

Eric Orlando Jiménez Rosas1 y Gemma Luz Sylvia Verduzco Chirino2

Recibido: 27/01/10 || Dictaminado: 18/02/10; 15/03/10 || Aceptado: 14/04/10

Resumen12 Abstract

Diversas aproximaciones, tanto antropológicas, como ar- Anthropological, architectural and sociological approaches,
quitectónicas y sociológicas, han argumentado que la vida have argued that urban life is oriented toward the interior of
urbana se orienta hacia el interior de la vivienda, mientras the housing, while rural outwards. Space Syntax approach
que la rural lo hace hacia el exterior. La sintaxis espacial se is based on the idea that the spatial configuration of the dif-
basa en la premisa de que la configuración espacial de los ferents settings reveals the lifestyle of their´s occupants. In
escenarios revela el estilo de vida de los ocupantes. En este this study, the spatial configuration of 60 urban and 60 rural
estudio se obtuvo, por medio de las técnicas de la sintaxis houses were obtained through the Space Syntax techniques.
espacial, la configuración espacial de 60 casas urbanas y 60 The inhabitants recorded in a diary the activities conducted
rurales. Sus moradores registraron en un diario las activida- in their homes for two days as well their´s duration, the spac-
des que realizaron en sus casas durante dos días, así como es in which they occurred, the number of individuals present
la duración de las mismas, el espacio donde ocurrieron, el and the degree of satisfaction with the places where they oc-
número de personas presentes y el grado de satisfacción con curred. The analysis explored how domestic activities were
los espacios donde esto ocurrió. Se analizó de qué forma distributed through the depth of the spatial configuration
las actividades domésticas se distribuyeron a través de la (the number of spaces that must be crossed, from outside
profundidad de la configuración espacial (el número de es- the house, to get the various spaces within it). The findings
pacios por los que deben pasar, a partir del exterior de la showed that rural domestic life is oriented towards the shal-
casa, para llegar a los diversos espacios dentro de la misma). lows (as close to the outside), while the urban to the deepest
Mediante este análisis se encontró que la vida doméstica (most distant from abroad). We discuss the importance of
rural se orienta hacia lo menos profundo (lo más próximo Space Syntax as an approach to reveal the social aspects of
al exterior), mientras que la urbana hacia lo más profundo the built environments.
(lo más distante del exterior). Se discute la importancia de la
sintaxis espacial como aproximación para revelar los aspec- PALABRAS CLAVE | vivienda, rural, sintaxis espacial.
tos sociales de los ambientes construidos. KEY WORDS | housing, rural, space syntax.

1
eric.jimenez@gmail.com
Universidad Nacional Autónoma de México (unam), Facultad de Ar-
quitectura.
2
verduzco@avantel.net
unam, Facultad de Arquitectura. Programa de Maestría y Doctorado
en Arquitectura. Unidad de Posgrado, Circuito Exterior s/n, Ciudad
Revista de Investigación Científica en Arquitectura
Universitaria. Journal of Scientific Research in Architecture

 45 
Jiménez Rosas, E. O. y Verduzco Chirino, G. L. S. || La sintaxis espacial de la vida doméstica. Una comparación urbano-rural

El estudio de la vivienda rural, así como el de la arquitectu- y protegida de ese dominio de la existencia; en el otro, la vi-
ra vernácula, ha sido menospreciado. El enfoque histórico y vienda es considerada como el escenario total para la vida, y
academicista de la arquitectura la ha etiquetado de primitiva el asentamiento, ya sea rural o urbano, tiene una relevancia
y carente de valor e interés, en oposición a la arquitectura secundaria, es sólo un espacio para ser atravesado.
monumental y vistosa, la cual sí se considera digna de tras- De acuerdo con Rapoport, el primer tipo es consistente
cender e investigar (Aguilar, 2001). En general, existe una con los asentamientos rurales latinoamericanos, donde gran
tendencia de los profesionistas, así como del común de la parte de la vida sucede fuera de casa y ésta se utiliza bási-
población, a prestar más atención a los problemas de la ciu- camente como un lugar para dormir, almacenar y encerrar
dad que a los de los asentamientos rurales (Benson, 2003). animales. El segundo tipo corresponde a los asentamien-
La psicología ha seguido esta tendencia (Baptista, 2001; Mu- tos urbanos, donde la vivienda es el escenario principal para
rray, 1991); aunque la psicología ambiental posee una gran la vida. Existen algunos antecedentes que refuerzan la idea
tradición en la investigación sobre vivienda, no ha mostrado acerca de que la vida rural transcurre, sobre todo, en el exte-
interés por el ambiente rural. rior, mientras que la urbana en el interior.
En los asentamientos rurales existen importantes dispari- Considerando a la vivienda rural como unidad económi-
dades económicas y sociales. Algunos reportes han mostra- ca, la actividad agrícola y otras actividades comerciales son
do que en estas zonas se presentan más problemas de salud factores que la orientan hacia el exterior (Pezeu-Massabuau,
física y mental, incluso suicidios, que en las zonas urbanas 1988). Desde la arquitectura se concibe al espacio exterior de
(Benson, 2003; Helbok, 2003). la vivienda rural como un lugar donde se desarrolla una gran
La desatención a los asentamientos rurales en general, y a diversidad de actividades e interacciones sociales, por lo que
la vivienda rural en particular, lleva a subestimar sus necesi- se le ha nombrado el «corazón del estar diurno» (Hurtado,
dades y problemáticas apremiantes. Mientras que la vivien- 2001: 15). Desde el punto de vista de la sociología, a diferen-
da urbana está asociada a «recursos económicos y materia- cia de los asentamientos urbanos, en las zonas rurales exis-
les, tecnologías de avanzada y técnicos capacitados, la rural te una confusa fusión de las áreas destinadas a la vivienda,
es en la mayoría de los países iberoamericanos, la solución lo que inyecta mayor agilidad y dinamismo a las relaciones
elaborada en el contexto de la miseria: es la utilización de los sociales (González-Anleo, 1992) fuera de la casa. Estas re-
recursos naturales, la autoconstrucción, la perduración de laciones sociales son también promovidas por una menor
las inhumanas condiciones de vida definidas por las preca- distancia social entre las clases sociales, lo que refuerza la
rias condiciones ambientales» (Pascual, 2003: 29). construcción de relaciones primarias sólidas.
En México, las viviendas rurales de los pobres tienen las En contraste, desde una perspectiva antropológica, en
estructuras más frágiles: 35.6% tiene pisos de tierra, 47.1% los asentamientos urbanos el espacio exterior es concebido
muros frágiles y sólo 24.4% cuenta con agua (Flores, 2009: como abierto y desconocido, en contraste con el espacio in-
19). De esta forma, la incorporación del medio rural a la in- terior, concebido como personal, seguro, cerrado y estable
vestigación debe ser entendida en términos del desarrollo (Delgado, 2007). Desde este enfoque, la casa representa un
nacional. Únicamente estudiando este ambiente se podrán lugar donde no sólo se satisfacen las necesidades básicas,
instrumentar políticas públicas justas y adecuadas a la reali- sino que también se desarrollan relaciones personales, afec-
dad de sus habitantes. tivas y sexuales, así como códigos íntimos a puerta cerrada
(Soto, 2009). Mientras la casa tiene una importante influen-
cia sobre los moradores, la calle, el espacio público abierto,
La vida doméstica en los asentamientos urbanos y rurales el exterior, es un espacio de discontinuidad, de transición,
de interrupción de nuestras actividades planeadas, donde
La tendencia analítica de la investigación sobre vivienda ha habita lo fortuito e impredecible. Además, en la ciudad pre-
optado por aislarla para su estudio. Sin embargo ha sido dominan las relaciones secundarias, caracterizadas por el
evidente que la vivienda no puede estudiarse desvinculada anonimato en los contactos interpersonales. Estas caracte-
del asentamiento donde se ubica. La vivienda, como objeto rísticas se resaltan con la segregación e inseguridad urbana
de estudio, debe apreciarse como parte de un sistema socio- (González-Anleo, 1992).
espacial, compuesto por la casa, el asentamiento geográfico La vida doméstica en los asentamientos urbanos y rurales
y los estilos de vida de los habitantes. se refleja en los patrones espaciales de la vivienda. La confi-
Las relaciones entre los asentamientos humanos y la vi- guración espacial de la casa manifiesta los estilos de vida de
vienda pueden agruparse, desde un punto de vista antropo- los habitantes. A través de las técnicas analíticas de la sin-
lógico, en dos tipos (Rapoport, 1969): en el primero, todo el taxis espacial (space syntax) es posible estudiar la asociación
asentamiento es considerado como el escenario para la vida, entre la configuración espacial de las viviendas y la actividad
y la vivienda es meramente una parte más privada, encerrada cotidiana de sus moradores.

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Sintaxis espacial

Puede ser definida como un conjunto de técnicas analíticas


asociadas a un marco teórico presentado por primera vez en
The Social Logic of Space (Hillier, 1984) y a partir del cual se ha
formado un programa de investigación a nivel internacional
(Hanson, 1998; Hillier, 1996; Bafna, 2003; Peponis, 2002).
En dicha obra primigenia, los autores presentan una teoría
acerca de la organización del espacio y su significado social.
Argumentan que los diversos escenarios (edificios, pueblos y
ciudades) tienen ciertas propiedades espaciales que influyen Figura 1 | cálculo de profundidad.

en las formas de interacción entre sus habitantes. La hipóte-


sis fundamental es que la actividad humana y las relaciones La profundidad proporciona descripciones cuantitativas
sociales se expresan y reflejan en la configuración espacial o de las relaciones entre los espacios de un escenario. Estas
estructura topológica de los escenarios construidos. descripciones numéricas pueden asociarse a eventos socia-
La construcción y disposición de barreras (por ejemplo, les. Es posible explorar el tipo de eventos, personas y activi-
muros) en un edificio, genera distinciones espaciales, en dades que ocurren en los distintos niveles de profundidad y
principio entre el interior y el exterior. Al interior del edificio comparar los resultados entre distintos ambientes.
las barreras generan distinciones entre los espacios internos,
las cuales son también diferencias sociológicas y conductua-
les; por ejemplo, pueden distinguir entre el dominio de los Planteamiento
hombres y el de las mujeres, o entre la actividad recreativa y
la privada. Así, a cada espacio diferenciado se le puede aso- El presente estudio tuvo como objetivo principal comparar
ciar una connotación social o conductual. La finalidad de la las propiedades espaciales de la vida doméstica entre habi-
sintaxis espacial es el desarrollo de técnicas analíticas que tantes urbanos y rurales. Las propiedades espaciales fueron
describan la configuración de los espacios, de tal forma que abordadas por medio de la configuración espacial a través
su lógica social pueda ser revelada (Bafna, 2003). Una de de la medida de profundidad. La vida doméstica fue anali-
estas técnicas es el cálculo de la profundidad. zada por medio de episodios de actividad, los cuales están
compuestos por cinco factores: la actividad, su duración, el
lugar donde se presentó, el número de personas presentes
Profundidad y el grado de satisfacción con el espacio donde ocurrió. Esta
información se obtuvo por medio de un diario de actividad
Las técnicas analíticas para describir la configuración espa- (Michelson, 1975; Michelson, 1994; Michelson, 1990; Robin-
cial se llevan a cabo mediante planos de los edificios o ciu- son, 1988; Pentland, 2002). La información de los episodios
dades. Para realizar el análisis, los planos se transforman en de actividad fue asociada a la profundidad del espacio donde
un formato abstracto centrado en la topología del escenario. acontecieron las actividades.
Las descripciones de la configuración espacial consisten en El estudio se basó en tres premisas:
la llamada gráfica justificada, la cual contiene líneas y círculos
que representan la accesibilidad de cada espacio hacia todos • El escenario primordial para la vida rural es el exterior y
los demás dentro del edificio o escenario. A partir de las gráfi- para la urbana el interior de la vivienda.
cas justificadas se puede obtener la medida de profundidad, • Las diferencias entre los estilos de vida urbano y rural
que cuantifica el número de espacios que deben ser cruza- pueden ser capturadas por la configuración espacial de la
dos para llegar desde el exterior a cada uno de los interiores casa a través de la medida de profundidad de la sintaxis
del edificio o escenario. espacial.
En la figura 1, la profundidad del cuarto principal, empe- • La vida doméstica rural tenderá a desarrollarse en los
zando por el espacio exterior (el cual se toma como un solo espacios menos profundos de la vivienda (y, por consi-
espacio e involucra todo lo que está fuera del escenario) es guiente, más próximos al exterior), más que la urbana.
de dos, ya que se deben cruzar dos espacios para llegar a él:
el pasillo y el mismo acceso al cuarto principal. Por otro lado, Con ellas, se desarrollaron las siguientes hipótesis:
el baño adyacente tiene una profundidad de tres, ya que son
tres los espacios que deben ser atravesados para llegar a él • La profundidad promedio de las casas rurales será menor
(el pasillo, el cuarto principal y el acceso al baño). a la de las casas urbanas.

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• Las actividades domésticas rurales se presentarán en los El diario constaba de varias hojas con una matriz en cada
espacios menos profundos de la casa en comparación una de ellas. La matriz del diario incluyó en las columnas los
con los urbanos. siguientes factores: la actividad que se realizó, el inicio y tér-
• Los espacios domésticos serán menos profundos en las mino de la misma; si hubo personas presentes, en qué lugar
casas rurales que en las urbanas. de la casa estaban ubicados (sala, recámara) y el grado de
• Habrá mayor ocupación de los espacios menos profun- satisfacción con dicho lugar. Cada renglón correspondía a un
dos por parte de los moradores rurales que de los urba- episodio de actividad, el cual incorporaba la información de
nos. las columnas descritas. En la tabla 1 se presenta un ejemplo
• Los habitantes rurales pasarán más tiempo en los espa- del registro del diario.
cios menos profundos de la casa que los urbanos. Para obtener la profundidad de los diversos espacios, se
• Habrá mayor concentración de personas en los espacios elaboraron planos arquitectónicos de las casas. En ellos se
menos profundos de la vivienda rural que de la urbana. identificó qué valor de profundidad correspondía al lugar
• Los habitantes rurales expresarán mayor satisfacción con donde se presentó la actividad. Este mismo valor fue asocia-
los espacios menos profundos de la vivienda que los ur- do a la actividad, la duración, el número de personas presen-
banos. tes y el grado de satisfacción con los espacios.

Tabla 1

Ejemplo del registro de un episodio de actividades.

Hora de inicio Actividad Hora de término Lugar Núm. de personas Satisfacción con el espacio

2:15 Comer 2:35 Cocina 2 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10

Método A partir de los 120 diarios, se obtuvieron 2 mil 672 epi-


sodios de actividades, mil 609 correspondientes a registros
Participantes urbanos y mil 63 a los rurales. No se consideró la actividad de
dormir por la noche. Las actividades registradas se organiza-
El estudio se realizó con 120 participantes mayores de 18 ron en cinco categorías representativas de la vida doméstica:
años. El 50 por ciento eran residentes de la ciudad de Méxi- preparación de alimentos; limpieza de la vivienda; limpieza y
co, 40 mujeres y 20 hombres, quienes vivían en casas habita- cuidado de la ropa y calzado; esparcimiento, cultura y entrete-
ción unifamiliares de hasta tres pisos; su edad promedio era nimiento (ver televisión, escuchar radio o música, pasatiem-
de 26 años (desviación estándar de = 5), y con escolaridad pos); y cuidados personales (alimentación, higiene y arreglo
hasta licenciatura. En promedio, estos participantes habían personal). Las categorías se obtuvieron con base en la En-
vivido en sus casas 13 años (de = 7.38), y en éstas habitaban cuesta Nacional sobre Uso del Tiempo del Instituto Nacional
cuatro personas en promedio (de = 1.58). de Geografía, Estadística e Informática (inegi, 2005: 194).
El otro 50 por ciento de los participantes fueron residen-
tes de dos localidades rurales, Santa Catarina del Monte y
Santa María Tecuanulco, ubicadas en el municipio de Tex- Resultados
coco, Estado de México. Estos habitantes vivían en cuartos
pequeños o casas autoconstruidas de un solo piso. Partici- Las viviendas urbanas mostraron mayor profundidad que
paron 49 mujeres y 11 hombres, con edad promedio de 37 las rurales. Esta diferencia se puede apreciar gráficamente
años (de = 10). El promedio de residencia en sus viviendas en la figura 2. Las gráficas justificadas de las viviendas que
fue de 17 años (de = 16) y el de habitantes por casa fue de se muestran en la figura 2 indican que las casas urbanas
cinco (de = 2.03). poseen mayor profundidad que las rurales. El promedio de
profundidad de las casas rurales fue 4.19 (de = 1.25), el cual
Instrumentos y registro de las actividades fue representado por la gráfica E; en contraste, las urbanas
presentaron una media de profundidad de 5.42 (de = 1.84), la
Los participantes registraron en un diario las actividades que cual fue simbolizada por la gráfica B, por lo que su promedio
realizaron en sus casas. El registro constó de las 24 horas fue un nivel mayor que el de las casas rurales.
de dos días (uno entre semana y otro en fin de semana), Los valores de profundidad de las casas urbanas presen-
comenzando a las cero horas y finalizando a las 11:59 pm. taron mayor variabilidad que los de las rurales. Mientras que

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la desviación estándar de las casas urbanas fue de 1.84, la Considerando el total de actividades reportadas, se en-
de las rurales fue de 1.25. Las casas urbanas, por tanto, se contró que la actividad doméstica rural presenta menos
dispersaron cerca de dos valores de profundidad respecto a profundidad que la urbana (figura 3). Exceptuando las acti-
la media. Esta dispersión se muestra en las gráficas A (5.42 + vidades de preparación de alimentos, la actividad domésti-
1.84= 7.26) y C (5.42 - 1.84= 3.6). En cambio, las casas rurales ca urbana presentó mayores niveles de profundidad que la
se dispersaron cerca de un nivel de profundidad en relación rural. No se encontraron diferencias en la profundidad de
con el promedio. Las gráficas D (4.19 + 1.25 = 5.44) y F (4.19 - las actividades de preparación de alimentos entre las casas
1.25 = 2.94) muestran la dispersión de las casas rurales. urbanas y rurales (tabla 2).

rural urbano

Figura 3 | profundidad de las acciones.

Estos resultados muestran la profundidad a la que, en


promedio, ocurrieron las actividades, independientemente
Figura 2 | gráficas justificadas. del lugar donde estas se hayan presentado. Estos resultados
son importantes porque una misma actividad puede presen-
La profundidad, además de expresarse gráficamente, fue tarse en diversos lugares de la casa. Sin embargo, también se
cuantificada, por lo que se pudo constatar que la diferencia analizó la profundidad en la que se ubican seis importantes
entre las casas urbanas y rurales es estadísticamente signi- espacios de la vivienda: patio, sala, comedor, cocina, baño
ficativa (tabla 2). y recámara. A pesar de los múltiples usos que se les puede
dar a cada uno de estos espacios, existen ciertas normas y
Tabla 2 patrones de comportamiento asociados a ellos, los cuales
Profundidad promedio de las casas y las actividades domésticas. pueden variar según el tipo de asentamiento, rural o urbano.
Por tanto, analizar la profundidad en la que se encuentran
Rural Urbana Diferencia estos espacios puede revelarnos aspectos socioculturales de
Profundidad máxima de la casa 4.19 5.42 -1.23* cada asentamiento.
Profundidad del total de las actividades 2.98 3.80 -0.82* Los resultados mostraron que, exceptuando el baño y la
Preparación de alimentos 3.12 3.22 -0.10 recámara, la profundidad del resto de los espacios es seme-
Limpieza de la vivienda 2.59 3.78 -1.18* jante. Lo que es más, entre ambas viviendas se mantiene el
Limpieza y cuidado de la ropa 2.13 3.67 -1.54* aumento progresivo de la profundidad a través de los espa-
Esparcimiento, cultura y entretenimiento 3.00 3.64 -0.64* cios (el patio, la cocina, la sala y el comedor, en ese orden;
Cuidados personales 3.04 3.84 -0.80* figura 4). El baño y la recámara son los únicos espacios con
*t significativa a un nivel p< .00 utilizando la prueba t de igualdad de diferencias en la profundidad. Ambos espacios fueron los
medias para muestras independientes. más profundos de las viviendas, tanto urbanas como rura-

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les. Sin embargo, tanto el baño (t = -2.06, p = .04) como la satisfacción con el espacio donde ocurrió la actividad. Como
recámara (t = -5.37, p = .00) mostraron mayor profundidad se puede apreciar en la figura 5, existe una correlación muy
en las casas urbanas. baja entre la profundidad y las variables analizadas. No se en-
contró relación entre la duración de las actividades urbanas
y la profundidad, pero se obtuvo una muy baja correlación
rural urbano
negativa con la duración de las actividades rurales (r = -0.073,
p = 0.01). En cambio, se encontraron correlaciones muy bajas
respecto al número de personas presentes (r = -0.210, p =
0.00) y a la satisfacción (r = 0.218, p = 0.00) con la profundi-
dad de los episodios urbanos pero no con los rurales. Aunque
las correlaciones encontradas son en extremo bajas, las di-
recciones de las mismas son en el sentido esperado.

Discusión

A través del análisis gráfico y cuantitativo de la configuración


espacial de las casas urbanas y rurales se pudo constatar
que la vida cotidiana de los habitantes rurales transcurre, en
términos de sintaxis espacial, a menor profundidad que en
la vida urbana. Los resultados obtenidos para contrastar las
hipótesis planteadas sugieren esta tendencia.
En principio, se encontró que las casas rurales tienen,
en promedio, menor profundidad que las urbanas. Desde
Figura 4 | profundidad de los espacios domésticos. la antropología (Rapoport, 1969), la arquitectura (Hurtado,
2001), la sociología (González-Anleo, 1992) o el análisis de
Se obtuvo la frecuencia de los episodios de actividad para la actividad económica (Pezeu-Massabuau, 1988), se sugiere
cada espacio doméstico (tabla 3) con la finalidad de conocer que la diferencia en los estilos de vida urbano y rural gene-
si el patio y la cocina (los menos profundos) tuvieron mayor ra diversos sistemas de actividad. Estas discrepancias, de
ocupación en las viviendas rurales en contraste con las ur- acuerdo al planteamiento de la sintaxis espacial, pueden ser
banas. capturadas por la configuración espacial de la vivienda. De
El 43 por ciento de las actividades rurales reportadas ocu- esta forma, la profundidad capturó las diferencias espaciales
rrieron en el patio y la cocina. Estos espacios son de los tres entre los estilos de vida urbana y rural, los primeros orienta-
más utilizados en las casas rurales; en cambio, son de los dos al interior y al fondo y los segundos hacia la superficie y
tres menos usados en las urbanas, pues en ellos se reporta- exterior de las viviendas.
ron 15 por ciento de los episodios. Las diferencias en la profundidad media de las casas ur-
banas y rurales están asociadas a factores socioeconómicos
Tabla 3 de los asentamientos. En los rurales existen importantes ca-
Porcentaje de uso de los espacios domésticos. rencias sociales y económicas (Benson, 2003; Helbok, 2003)
que se reflejan en el diseño y estructura de las viviendas, las
Rural Urbano Total cuales suelen ser precarias (Pascual, 2003; Flores, 2009). Ya
Patio 11.50 2.51 6.48 que la profundidad es definida por el número de espacios
Cocina 31.57 13.17 21.28 que se deben atravesar, la cantidad de lugares dentro de la
Sala 7.05 14.89 11.44 casa es un factor definitivo. El número de cuartos que tienen
Comedor 2.43 11.58 7.55 las viviendas es un buen indicador de las condiciones de vida
Recámara 38.20 35.74 36.82 de los asentamientos marginales (Guillen, 1992), por lo que
Baño 9.24 22.10 16.43 las casas más pobres tendrán menos espacios y, por tanto,
Total 100.00 100.00 100.00 menor profundidad.
Así, la marginalidad de las condiciones rurales, así como
Se analizaron, para cada asentamiento, las correlaciones sus estilos de vida, genera sistemas de actividad diferentes
entre la profundidad y tres dimensiones de la actividad do- a los de los asentamientos urbanos. La profundidad capturó
méstica: la duración, el número de personas presentes y la estos sistemas de actividad ya que, exceptuando la prepara-

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Figura 5 | correlaciones entre la profundidad y el tiempo, el número de personas y la satisfacción.

ción de alimentos, todas las actividades rurales se presenta- satisfacción de los espacios, debe ser investigada con mayor
ron a menor profundidad que las urbanas. amplitud. Los hallazgos indican que la dirección de las corre-
Si bien la profundidad de las casas rurales fue menor que laciones es en el sentido esperado: a menor profundidad ma-
la de las urbanas, el análisis de la configuración espacial yor duración, número de personas presentes y satisfacción
mostró que los diversos espacios domésticos se distribuyen en los asentamientos rurales. Sin embargo, los coeficientes
de igual forma en las viviendas urbanas y rurales a través de de correlación tan bajos deben tomarse con precaución.
la profundidad. La naturaleza del instrumento empleado debe conside-
En ambos asentamientos, el patio, la sala y el comedor rarse al observar estos resultados. Muchos de los episodios
son los espacios menos profundos, y el baño y la recámara reportados tuvieron breve duración, intervenciones fugaces
los de mayor profundidad. Esta semejanza revelada por la de otras personas y transiciones apresuradas entre los espa-
configuración espacial muestra la idea de un gradiente de cios de la vivienda. En estas condiciones puede ser difícil es-
lo público a lo privado en relación con la penetración de los timar valores para las actividades domésticas. Sin embargo,
extraños, lo cual se ha observado en América Latina (Rapo- la dirección de las correlaciones indica una propensión de
port, 1969). Este gradiente separa lo público de lo privado, los factores sociales, temporales y evaluativos de la vivienda
tanto en los asentamientos urbanos como en los rurales. En hacia lo profundo, en el caso urbano, y hacia lo superficial,
éstos últimos, a pesar del estilo de vida orientado al exterior en el caso rural.
y de las precarias condiciones de las casas, al interior existen
adecuaciones como cortinas o roperos cuyas disposiciones
tienen la intención de lograr un control sobre las interaccio- Conclusión
nes sociales.
Aunque el gradiente de separación es semejante en am- Los resultados en este estudio sostienen la idea de que los
bos asentamientos, la configuración espacial mostró una estilos de vida urbano y rural poseen diferente orientación
diferencia dentro del mismo. En las casas urbanas, la recá- socio-espacial. La vida urbana se orienta hacia lo privado,
mara y el baño son significativamente más profundos que interno, cerrado, y la rural hacia lo público, externo y abierto.
en las rurales. Por tanto, la profundidad refleja la acentuada La configuración espacial puede capturar estas orientacio-
orientación hacia la seguridad e intimidad del interior, y el nes en forma gráfica y numérica, lo que permite compara-
distanciamiento de lo fortuito e inseguro del exterior (Del- ciones precisas entre diferentes tipos de asentamientos. La
gado, 2007; Soto, 2009) de la vida doméstica urbana, en profundidad, como medida de la configuración espacial,
contraste con la rural. Esta idea se refuerza por el hecho de reveló, en términos de sintaxis espacial, las diferencias espa-
que los espacios menos profundos fueron ocupados por los ciales subyacentes en la actividad doméstica cotidiana entre
habitantes rurales, y los más profundos por los urbanos. las casas urbanas y rurales. Si bien se sugieren ampliar las
Las muy bajas correlaciones encontradas entre la profun- investigaciones en este campo, los hallazgos son consisten-
didad y la duración, el número de personas presentes y la tes con los antecedentes antropológicos, arquitectónicos y

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sociológicos. El análisis de la configuración espacial se suma Michelson, W. (1990). «Measuring macroenvironment and
a las anteriores posturas como una aproximación teórica y behavior: The time budget and time geography». En R. B.
metodológica para comprender las implicaciones sociales Bechtel et al. (eds.). Methods in environmental and beha-
del ambiente residencial. La incorporación del estudio de la vior research. Nueva York: Van Nostrand Reinhold.
vivienda rural es necesaria para la comprensión e interven- Michelson, W. (1994). «Everyday life in contextual perspecti-
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