Una lección para mi

Erase una vez una niña llamada Antonella tenía

7 años era muy caprichosa e impaciente su
familia estaba muy contenta por que se
acercaba la navidad ya que era muy importante
para ellos sobre todo por que toda la familia se
reunía para celebrar el nacimiento de dios.
Antonella desde varias semanas no paraba de
pedir regalos y juguetes muchos y muchos
regalos que pedía sus papas cada día trataban
de explicarle que en el saco de santa Claus no
cabía todo lo que ella pedía porque también
debía llevar para todo el resto de los niños que
había en chile.
Varios meses después de pedir tantos regalos
llego el día más esperado viajaron a la casa de
su abuela para pasar allá la navidad bueno ya
era tradición pasarlo allí. Se reunieron todos,
pero Antonella, pero apenas tuvo el tiempo de
saludar a todos por que se paso toda la mañana
abriendo regalos normalmente todos los
abrimos después de la cena, pero Antonella
como se apuro tanto en abrirlos estaba muy
confundida por que siempre le salía carbón
cada vez que abría uno, ustedes se preguntaran
¿Por siempre sale carbón si ella pidió otras
cosas? Bueno hubo unos poquitos cambios en la
carta que escribió la niña decía “Querido papa
Noel ¿como estas? Espero que estes bien mi
nombre es Antonella Tengo 7 años este año me
eh portado muy bien por eso me encantaría que
me trajeras
-una muñeca con vestido
-Un perrito de juguete que camine
-una caja registradora
-y también una barbie y muchas cosas más,
pero te las pediré en otra carta por que la hoja
no me alcanza Adiós papa Noel ojalá me traigas
todo lo que te pedí”.