Está en la página 1de 6

IGLESIA EN SALIDA

OBJETIVO de nuestro ENCUENTRO:


Nos proponemos con este subsidio ofrecer herramientas para la reflexión de los desafíos
que se le presentan a la catequesis para poder SER Iglesia en Salida, Misionera,
Sinodal, de puertas abiertas

1er Momento: ORACIÓN LA PALABRA DE DIOS NOS ILUMINA

(Se estima unos 30 minutos en total)

Comenzamos poniéndonos en presencia del Señor, cantando una canción al ESPIRITU SANTO
(puede ser ESPIRITU DE DIOS VEN A MI VIDA u otra)

Leemos la palabra de DIOS. Evangelio de Lucas 1, 39-45

Proponemos hacer por lo menos dos lecturas en voz alta, (con la idea que sean de diferentes
traducciones de la Palabra de DIOS para enriquecer la reflexión) dejar un tiempo para lectura en
silencio y solicitar que cada uno pueda compartir en voz alta las resonancias del texto, desde la
invitación a SALIR hacia el otro.

1
Luego, invitamos a que cada catequista, vuelque en un papel una palabra que sintetice lo que
pudo interpelarle el texto, los pegaremos en un afiche: será el reflejo de las reflexiones de todos
los catequistas

Se puede poner música de fondo que anime a hacer la dinámica.

2do Momento: NOS FORMAMOS Y REFLEXIONAMOS EN COMUNIDAD

(entre armado de grupos y trabajo se estima una hora de trabajo, podría servirse un refrigerio en cada grupo
mientras están trabajando)

Se conforman grupos de tres o cuatro catequistas, para leer y compartir. HABRÁ TEXTOS COMUNES PARA
TODOS LOS GRUPOS Y UN TEXTO ANEXO DIFERENTE POR GRUPO

a) ILUMINACIÓN:

Vamos a alimentar nuestra reflexión a partir de documentos del Papa Francisco y del Directorio
para la Catequesis. Una vez conformados los grupos, quien coordina puede entregar también un
texto complementario diferente para cada uno de los grupos. (ver el ANEXO)

DEL DIRECTORIO PARA LA CATEQUESIS:

131 La formación es un proceso permanente que, bajo la guía del Espíritu en el seno vivo de la comunidad
cristiana, ayuda al bautizado a tomar forma, es decir, desvelar su identidad más profunda que es la de hijo de
Dios en una relación de profunda comunión con los demás. (…)

132. La formación tiene como finalidad, en primer lugar, concientizar a los catequistas de ser, como
bautizados, verdaderos discípulos misioneros, es decir, sujetos activos de la evangelización y, sobre este
fundamento, capacitados por la Iglesia para comunicar el Evangelio, acompañar y educar en la fe. Por lo
tanto la formación de los catequistas ayuda a desarrollar las habilidades necesarias para la comunicación de
la fe y para acompañar el crecimiento de los hermanos. La finalidad cristocentrica de la catequesis plasma
toda la formación de los catequistas y les pide que sepan animar el camino catequístico que resalte la
centralidad de Jesucristo en la historia de la salvación.

135.a. (…) para evitar el riesgo de caer en un afán pastoral estéril, el catequista debe ser entrenado como
discípulo misionero, capaz de comenzar siempre desde su propia experiencia de Dios, quien lo envía a
caminar al lado de los hermanos. Esta espiritualidad misionera, entendida como un encuentro con los
demás, un compromiso en el mundo y una pasión por la evangelización, alimenta la vida del catequista y
salva del individualismo, del intimismo, de la crisis de identidad y de la debilidad en la fe.

DE EVANGELII GAUDIUM
24. La Iglesia en salida es la comunidad de discípulos misioneros que primerean, que se involucran, que
acompañan, que frutifican y festejan. “Primerear”:sepan disculpar este neologismo. La comunidad
evangelizadora experimenta que el Señor tomó la iniciativa, la ha primereado en el amor; y por eso, ella
sabe adelantarse, tomar la iniciativa sin miedo, salir al encuentro, buscar a los lejanos y llegar a los cruces de
2
los caminos para invitar a los excluídos. Vive un deseo inagotable de brindar misericordia fruto de haber
experimentado la infinita misericordia del Padre y su fuerza difusiva. ¡Atrevámonos un poco a primerear!
Como consecuencia la Iglesia sabe “involucrarse”. Jesús lavó los pies de los discípulos. El Señor se involucra e
involucra a los suyos, poniéndose de rodillas ante los demás para lavarlos. Pero luego dice a los discípulos:
“seréis felices si hacéis esto”. La comunidad evangelizadora se mete con obras y gestos en la vida cotidiana
de los demás, achica distancias, se abaja hasta la humillación si es necesario, y asume la vida humana,
tocando la carne sufriente de Cristo en el pueblo. Los evangelizadores tiene así OLOR A OVEJA, y éstas
escuchan su voz. Luego, la comunidad evangelizadora se dispone a “acompañar”. Acompaña a la humanidad
en todos sus procesos, por más duros y prolongados que sean. Sabe de esperas largas y de aguante
apostólico. La evangelización tiene mucho de paciencia, y evita maltratar límites. Fiel al don del Señor,
también sabe “fructificar”. La comunidad evangelizadora siempre está atenta a los frutos, porque el Señor la
quiere fecunda. Cuida el trigo y no pierde la paz por la cizaña. El sembrador, cuando ve despuntar la cizaña
en medio del trigo, no tiene reacciones quejosas ni alarmistas. Encuentra la mera de que una Palabra se
encarne en una situación concreta y dé frutos de vida nueva, aunque en apariencia sean imperfectos o
inacabados. El discípulo sabe dar la vida entera y jugarla hasta el martirio como testimonio de Jesucristo,
pero su sueño no es llenarse de enemigos, sino que la Palabra acogida y manifieste su potencia liberadora y
renovadora. Por último la comunidad evangelizadora gozosa siempre sabe “festejar”. Celebra y festeja cada
pequeña victoria, cada paso adelante en la evangelización. La evangelización gozosa se vuelve belleza en la
liturgia en medio de la exigencia diaria de extender el bien. La Iglesia evangeliza y se evangeliza a sí misa con
la belleza de la liturgia, la cual también es celebración de la actividad evangelizadora y fuente de un
renovado impulso donativo.

DE GAUDATE ET EXSULTATE

130. El beato Pablo VI mencionaba, entre los obstáculos de la evangelización, precisamente la


carencia de parresía: “la falta de fervor, tanto más grave cuanto que viene de dentro” ¡cuántas
veces nos sentimos tironeados a quedarnos en la comunidad de la orilla! Pero el Señor nos llama
para navegar mar adentro y arrojar las redes en aguas más profundas (Lc 5,4) Nos invita a gastar
nuestra vida en su servicio. Aferrados a él nos animamos a poner todos nuestros carismas al
servicio de los otros. Ojalá nos sintamos apremiados por su amor (2da Co 5,14) y podamos decir con
san Pablo: “ay de mi si no anuncio el Evangelio”(1ra. Co9,16)

Parresía: testimonio cierto de la buena noticia del evangelio

b) PARA COMPARTIR

Consigna para cada grupo

Una vez leídos los textos, les proponemos vincularlos con nuestra realidad de
catequistas de este tiempo. Reflexionamos. Compartimos. Respondemos: ¿a que acciones
nos invitan los textos? Nos ayudamos proponiendo ejemplos concretos de nuestra experiencia
y explicamos cómo la reflexión nos ayuda a cambiarlos/mejorarlos/hacerlos IGLESIA EN
SALIDA

3
3er. Momento: EL COMPROMISO

(para este momento se estima un tiempo total de 30 minutos)

1- Cada grupo mediante una dramatización/canción/cuento/etc, comparte lo reflexionado y


expresan a qué nos compromete todo lo de hoy para ser CATEQUISTAS DE LA IGLESIA EN SALIDA.
(Se puede tener en cuenta: el afiche con las palabras que escribimos luego de la oración inicial. El
objetivo de nuestro encuentro de hoy. Lo pudieron charlar y compartir en las
reflexiones/dramatizaciones, etc.)
2- Como cierre del encuentro luego de la actividad anterior: cada grupo recibe un trozo de papel
donde escribirán el compromiso que asumen a partir de lo reflexionado, este papel se unirá a todos
los trozos de los diferentes grupos y formará un dibujo (puede ser el corazón con la biblia de
nuestro logo)
El coordinador podrá decidir hacer ambas propuestas de cierre o conclusión, o solo una.
ORACION FINAL
A la luz de todo lo trabajado en la jornada: cartel con las palabras luego de la oración inicial; el
objetivo del encuentro; y el collage o rompecabezas que expresa el COMPROMISO, nos disponemos a
seguir encontrándonos EN y DESDE el CORAZON DE JESUS cuyo mes estamos celebrando, en la certeza de
que nuestra VIDA ESTA EN EL, rezamos juntos un padre nuestro, y la jaculatoria SAGRADO CORAZON DE
JESUS, EN VOS CONFIO.

ANEXO PARA EL TRABAJO GRUPAL

Opción 1: fratelli tutti 16

En esta pugna de intereses que nos enfrenta a todos contra todos, donde vencer pasa a ser
sinónimo de destruir, ¿cómo es posible levantar la cabeza para reconocer al vecino o para ponerse
al lado del que está caído en el camino? Un proyecto con grandes objetivos para el desarrollo de
toda la humanidad hoy suena a delirio. Aumentan las distancias entre nosotros, y la marcha dura y
lenta hacia un mundo unido y más justo sufre un nuevo y drástico retroceso.

Opción 2: fratelli tutti 70

Es notable cómo las diferencias de los personajes del relato (Lc 10,25-33) quedan totalmente
transformadas al confrontarse con la dolorosa manifestación del caído, del humillado. Ya no hay
distinción entre habitante de Judea y habitante de Samaría, no hay sacerdote ni comerciante,
simplemente hay dos tipos de personas: las que se hacen cargo del dolor y las que pasan de largo;
las que se inclinan reconociendo al caído y las que distraen su mirada y aceleran el paso…. En
efecto nuestras múltiples máscaras, nuestras etiquetas, nuestros disfraces se caen es la hora de la

4
verdad. ¿Nos inclinaremos para tocar y curar las heridas de los otros? Este es el desafío presente, al
que no hemos de tenerle miedo. En los momentos de crisis la opción se vuelve acuciante:
podríamos decir que, en este momento, todo el que no es salteador o todo el que no pasa de largo
o bien está herido o está poniendo sobre sus hombros a algún herido.

Opción 3: Christus Vivit 44

Siempre llama la atención la fuerza del “si” de María joven. La fuerza de ese “hágase” que le dijo el
angel. Fue una cosa distinta a aun aceptación pasiva o resignada. Fue algo distinto a un “si” como
diciendo: bueno, vamos a probar a ver que pasa. María no conocía esa expresión: vamos a ve qué
pasa. Era decidida, supo de qué trataba y dijo “si”, sin vueltas. Fue algo más, fue algo distinto. Fue el
“si” de quien quiere comprometerse y el que quiere arriesgar, de quien quiere apostarlo todo, sin
más seguridad que la certeza de saber que era portadora de una promesa. Y yo pregunto a cada
uno de ustedes: ¿se sienten portadores de una promesa? ¿qué promesa tengo en el corazón para
llevar adelante? María tendría, sin dudas, una misión difícil, pero las dificultades no eran una razón
para decir “no”. Seguro que tendría complicaciones, pero no serían las mismas complicaciones que
se producen cuando la cobardía nos paraliza por no tener todo claro o asegurado de antemano.
¡María se la jugó y por eso es fuerte, por eso e un influencer, es la influencer de Dios. El sí y las
ganas de servir fueron más fuertes que las dudas y las dificultades.

Opción 4: Christus Vivit 46

María era la chica de alma grande que se estremecía de alegría (Lc 1,47), era la jovencita con los
ojos iluminados por el Espíritu Santo que contemplaba la vida con fe y guardaba todo en su corazón
de muchacha (Lc 2,19.51) era la inquieta, la que se pone continuamente en camino, que cuando
supo que su prima la necesitaba no pensó en sus propios proyectos, sino que salió hacia la montaña
“sin demora” (Lc 1,39)

5
6

También podría gustarte