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ESTUDIANTE
PEDRO DUARTE MONTES
PROFESOR
ARTURO SERRANO
17/ABRIL/2023
ADMINISTRACIÓN DE EMPRESAS
UNIVERSIDAD DE CUNDINAMARCA
GIRARDOT
En los dos capítulos anteriores vimos cómo puede un país utilizar políticas
monetarias, fiscales y del tipo de cambio para modificar los niveles de empleo y
producción dentro de sus fronteras. La interdependencia inherente a las economías
abiertas ha hecho más difícil, en ocasiones, que los países consigan objetivos como el
pleno empleo y la estabilidad de precios. Las relaciones de interdependencia dependen a
su vez de los sistemas monetarios y de tipos de cambio adoptados. En una economía
abierta, la política macroeconómica tiene dos objetivos básicos, el equilibrio interno y el
equilibrio externo.
Puesto que un país no puede alterar su situación de pagos internacionales sin provocar
automáticamente un cambio de igual magnitud y sentido contrario en la situación de los
pagos del resto del mundo, la persecución de los objetivos macroeconómicos por parte de
un país influye, inevitablemente, en cómo alcanzan los suyos los demás países. El
objetivo del equilibrio externo ofrece, por tanto, una clara ilustración de cómo pueden las
medidas de política económica tomadas en el exterior cambiar la situación de un país
respecto de la deseada por su Gobierno. Las respuestas a estas preguntas dependen del
sistema monetario internacional en vigor en aquel momento.
En las economías abiertas, los que toman las decisiones de política económica están
motivados por los objetivos de equilibrio interno y externo. Definidos de forma sencilla, el
equilibrio interno requiere el pleno empleo de los recursos de un país y la estabilidad
interna de los precios. El equilibrio externo se alcanza cuando la balanza por cuenta
corriente de un país no presenta ni un déficit tan elevado que el país no sea capaz de
hacer frente a sus deudas exteriores futuras, ni un superávit tan abultado que coloque a
los extranjeros en esa misma situación. además del pleno empleo con estabilidad de
precios, por ejemplo, puede existir un objetivo interno adicional sobre la distribución de la
renta.
Los costes de la inflación han sido muy visibles durante el periodo de posguerra en países
como
Al igual que los países que tienen diferentes capacidades de producción en un cierto
momento obtienen ventajas al especializarse en lo que saben hacer mejor e intercambian
estos productos por otros, los países, en su conjunto, pueden salir ganando si concentran
la inversión mundial en aquellas economías que sean más capaces de transformar
producción actual por producción futura. Dicho de otra manera, los países donde la
inversión es relativamente menos productiva deberían ser exportadores netos de
producción actual, mientras que los países donde la inversión es relativamente más
productiva deberían ser importadores netos de producción actual. Para saldar sus deudas
con el exterior, cuando venzan las inversiones, estos países exportarán producción a los
primeros completando de este modo el intercambio de producción actual por producción
futura. Un país donde la producción caiga temporalmente puede desear tomar prestado
del extranjero para evitar el fuerte descenso del consumo, que se produciría si no lo
hiciera.
Un déficit por cuenta corriente elevado puede minar la confianza de los inversores
extranjeros y contribuir a una crisis de deuda.
Los problemas derivados de los superávits excesivos de la cuenta corriente son distintos
de los ocasionados por los déficits. Un superávit por cuenta corriente implica que un país
está acumulando activos localizados en el exterior. ¿Por qué una creciente acumulación
de derechos frente al exterior puede plantear problemas? Una razón potencial se deriva
del hecho de que, para un nivel determinado de ahorro nacional, un mayor superávit por
cuenta corriente implica una menor inversión en instalaciones y equipo en el propio
país. Diversos factores podrían llevar a los responsables de la política económica a
preferir que el ahorro nacional se dedicara más a inversiones en el país y menos a
inversiones en el exterior.
Finalmente, la inversión realizada por una empresa en el país puede tener repercusiones
tecnológicas favorables sobre otros productores nacionales, más allá de la propia
empresa inversora.
Si un elevado superávit por cuenta corriente refleja un préstamo excesivo a los
extranjeros, el país podría encontrarse en el futuro ante la imposibilidad de recuperar
estos préstamos. Los países con grandes superávits pueden convertirse en el objetivo de
las medidas proteccionistas discriminatorias de sus socios comerciales que tengan déficits
exteriores. Japón, por ejemplo, se ha encontrado a veces en esta situación. Para evitar
estas restricciones perjudiciales, los países pueden intentar evitar que sus superávits se
hagan demasiado grandes.
El periodo del patrón oro, entre 1870 y 1914, se basó en ideas muy diferentes sobre la
política macroeconómica internacional que aquéllas que han formado la base de los
sistemas monetarios internacionales en la segunda mitad del siglo XX.
Suponga que las cuatro quintas partes de todo el dinero de Gran Bretaña se destruyeran
de la noche a la mañana, y que la nación tuviera la cantidad de especie que tenía en los
reinos de los Harry y los Edward. Una vez que hubiéramos llegado, perderíamos
inmediatamente las ventajas de mano de obra y materiales más baratos, y el flujo de
entrada de dinero cesaría a causa de nuestra abundancia y saciedad.
Pero las reacciones de los bancos centrales a los flujos de oro a través de sus fronteras
proporcionaron otro mecanismo potencial para ayudar a restaurar el equilibrio de las
balanzas de pagos. Por tanto, tenían motivaciones para vender sus tenencias de activos
nacionales a medida que perdían oro, empujando los tipos de interés al alza y atrayendo
capitales de otros países. El más importante de estos incentivos era la mayor rentabilidad
de los activos nacionales, que producían interés en comparación con la del oro «en
barras». Un banco central que estuviera acumulando oro podía verse tentado a adquirir
activos nacionales elevando así los flujos de salida de capital y sacando oro al exterior.