Está en la página 1de 2

EL ESPÍRITU SANTO EN NUESTRO MATRIMONIO

SU OMNISCIENCIA
Una vez más recordamos que el Señor prometió estar con nosotros y su promesa se
cumplió con la llegada del Espíritu Santo y su poder transformador obra no solo en medio de los
servicios, no es solo para la predicación, el Señor obra en su iglesia obrando en cada uno de sus
miembros en todos los aspectos de su vida. Y el matrimonio y la familia es un área fundamental
de cada uno.
Hablamos anteriormente de la omnipresencia del Espíritu Santo y cómo nos bendice en
nuestro matrimonio y familia, vimos que Él está en todo momento, que está para ayudarnos
donde sea que estemos y que si no le percibimos es porque no le damos lugar. La verdad central
es esta: El Espíritu Santo está con nosotros en todo momento y en todo lugar.
Veamos ahora que el Espíritu Santo es omnisciente “Que todo lo sabe”, pero cuando
hablamos del conocimiento de Dios debemos entender que todo el conocimiento que la
humanidad ha alcanzado a lo largo de los siglos no es ni siquiera cercano a todo el conocimiento
de Dios.
Isaías 40:28 28 No podemos ni siguiera imaginar cómo es el conocimiento de Dios.
Juan 14:26
Cuando dice el Señor que pondría en nosotros a su Espíritu Santo, podemos pensar que todo el
conocimiento de Dios está en Él y por eso es capaz de guiarnos. Veamos tres aspectos del
conocimiento del Espíritu Santo y cómo nos puede ayudar.

1. Conoce todas las cosas. Salmo 147:5. Podemos entender que no hay área de
conocimiento en el que Dios no tenga dominio, por eso entendemos que el Espíritu Santo
nos puede ayudar en todas las áreas de nuestra vida.
a. Conoce acerca de matrimonio. No hay nada que no le podamos consultar a Él con
respecto a nuestra vida matrimonial.
 Cómo afrontar las diferencias. Comprender, perdonar, comunicarnos.
 Cómo crecer en intimidad.
 Sólo el Espíritu Santo conoce el corazón de nuestra pareja. Hay cosas de
nuestro cónyuge que nunca llegaremos a saber. Su trasfondo, sus
pensamientos, el porqué de sus reacciones.
b. Nos puede enseñar en nuestro rol de padres. El Espíritu Santo nos da a conocer al
Padre y nos recuerda que somos sus hijos. Romanos 8:16.
 Nos muestra al Padre para que le imitemos. Es por el Espíritu que podemos
saber cómo es el amor del Padre, y podamos imitar en alguna medida ese
amor y el cuidado para con nuestros hijos.
c. Nos puede guiar en todas las demás áreas de nuestra vida.
 Acerca de nuestro trabajo. Es nuestra bendición.
 Acerca de nuestras amistades. Para tener un balance correcto y relaciones
sanas.
2. Nos conoce a nosotros. Salmo 139:1 – 4.

a. Sólo el Espíritu puede conocer lo que realmente hay en nuestro corazón. El


Espíritu nos revelará lo que necesitamos por encima de lo que deseamos.
b. Romanos 8:26 dice que no sabemos pedir como conviene, es ahí donde el Espíritu
Santo intercede por nosotros.
3. Conoce el futuro. Isaías 46:9 – 10 
a. Dios tiene planes para sus hijos y quiere guiarnos a esos planes. Dios siempre ha
dejado en nuestras manos la decisión: seguirle a Él o seguir a otros
b. Saber que Él conoce el futuro nos debe dar paz, si nos dejamos guiar por Él.

CONCLUSIÓN: El Señor quiere guiarnos con su conocimiento y para que no fuéramos engañados
puso en nosotros a su Espíritu, el mundo va a querer que sigamos sus malos consejos, pero el
consejo del mundo solo nos llevará al destino que tiene el mundo.
 El mundo va de mal en peor.
 El mundo está bajo el dominio del diablo.
 El mundo sufrirá el castigo final.
Es mejor seguir el consejo de omnisciente Espíritu Santo de Dios.

También podría gustarte