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Hay un intento en Piaget por ubicar la génesis del pensamiento, su origen: es por esto
que su metodología se denomina genética
Focalizado en el individuo entendió que el desarrollo se mueve desde lo individual a lo social;
vemos en esto ya una clara distinción entre el pensamiento piagetano y el de Lev Vygotsky.
Piaget parte del individuo como unidad de análisis
y desde allí va hacia lo social.
Esta posición lo llevó a considerar la actividad de
los niños como una construcción solitaria y
egocéntrica en un comienzo, más que en una
actividad social, y el rendimiento como un logro
individual dependiente de las estructuras
mentales. Podemos notar también como puede
verse la influencia de una política capitalista, es
decir, meritocratica e individualista en el
pensamiento Piagetano y una influencia político
marxista en el pensamiento Vigotskiano pensado
al niño en relación a la profunda influencia que
ejerce lo material y cultural en el mismo.
La visión que tiene Piaget respecto a los esquemas es la invariabilidad de los mismos.
Vygotsky también nos habla de esquemas, entendiendo que lo que hay que ver en el niño
son estos pero sólo aquellos que son susceptibles de potencializarse o cambiar. Partir de
los esquemas futuros, o áreas futuras. De aquí surge su famoso concepto de la zona de
desarrollo próximo.
Piaget, no obstante, enfatizó que la vida social es una condición necesaria para el desarrollo de
la lógica (Tudge y Winterhoff, 1993). Pero no parte de un individuo como una tabula rasa.
Parte de un individuo con una carga orgánica, con determinaciones genéticas múltiples.
Incluso llega a poner en paralelo la maduración de lo orgánico con lo psíquico. El alma con el
soma. Veamos la siguiente cita:
Para Piaget, cada organismo posee en forma innata la capacidad de, vía sus estructuras
mentales, cambiar y adaptarse al medio. Esta adaptación del niño al medio Piaget la
denomino con dos términos complementarios, como dijimos: asimilación y acomodación.
Vemos que en la asimilación ocurre lo mismo que trabajamos anteriormente con Vygotsky:
Se produce una crisis, en este caso un “desequilibrio” por entrada de información nueva.
El niño realiza una modificación en su mundo interno y se adapta. Hay un proceso de
requilibración del sistema. La asimilación es entendida como ingreso de estímulos pero sin
cambiar los esquemas previos.
En este caso, la posibilidad de adaptación que puede surgir es la acomodación.
Proceso activo de transformación de los esquemas previos del niño. La acomodación,
podemos notar, produce un estado de desequilibrio o conflicto mayor dado que la
información ingresante discrepa en gran medida con el estado cognitivo actual del
infante.
LA ACOMODACIÓN ES
IMPERATIVA, YA QUE ES LA
FORMA EN LA QUE EL NIÑO
INTERPRETA NUEVOS CONCEPTOS,
ESQUEMAS, MARCOS, Y DEMÁS.
Piaget creía que el cerebro humano ha sido programado a través de la
evolución para brindar equilibrio, que es lo que él cree que en última
instancia, influye en las estructuras de los procesos internos y externos a
través de la asimilación y la acomodación.
De acuerdo con Piaget, los procesos de asimilación y de acomodación
están estrechamente correlacionados y explican los cambios del
conocimiento a lo largo de la vida.
APARTADO II
En Piaget, si bien la biología ejerce una influencia notable, no por eso el sujeto es
pensando en términos de pasividad y puro receptáculo de los estímulos externos. De
hecho, la revolución en el conocimiento del niño que introduce Piaget se basa en no ver
más al niño como un ser pasivo, tal como se lo entendía en la antigua edad media y
comienzo de moderna, sino como un “pequeño científico”.
El niño piagetano es un sujeto que crea; que construye conceptos y que incluso sus
errores poseen una lógica que le es propia. “(…) el desarrollo mental es una
construcción continua, comparable a la edificación de un gran edificio que, con cada
adjunción, sería más sólido. (Piaget, 1964)”. Esta construcción que hace el niño del
conocimiento no es azarosa ni esta desprovista de un orden. Sigue un camino –tiene un
patrón- progresivo de maduración desde formas elementales hasta formas de gran
complejidad. Esta forma de lógica del infante, sobre todo preverbal, lo llamo una
sistemática de los errores.
Esta secuencialidad establecida por Piaget le sirve como ordenador para establecer
fases y/o estadios del conocimiento. Estos descubrimientos le valieron grandes críticas
a Piaget dado que en esa época se creía en ilogicidad del pensamiento del niño.
A pocos años de diferencia caen dos mitos sobre el niño: que es asexuado y que su
pensamiento no sigue patrones lógicos. Un mito derribado por Freud, otro por Piaget.
Las fases por las que transita el niño siguen el mismo orden; allí
radica su carácter invariable. “Ha de quedar claro que la
aparición de cada nuevo estadio no suprime en modo alguno las
conductas de los estadios anteriores y que las nuevas conductas
se superponen simplemente a las antiguas” (Piaget, 1960).
Pese a esto, este camino de desarrollo no es lineal: cada persona avanza a
un ritmo diferente, es decir, se producen fluctuaciones en cuanto a la edad
de aparición de cada fase y no todos los individuos alcanzan las
etapas finales.
Entre una fase y otra hay diferencias cualitativas y cuantitativas.
Por último, los estadios son jerárquicamente inclusivos, esto es, las
estructuras de un estadio inferior se integran en el siguiente. Esto podemos
pensarlo desde la lógica de los procesos de adaptación; asimilación y
acomodación. Por ejemplo, en el estadio de las operaciones concretas se
mantienen todos los progresos del período sensoriomotor, y puede decirse
que las operaciones concretas se construyen sobre los logros del período
preoperacional.