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Obligaciones 5-3
Obligaciones 5-3
Obligaciones de dar sumas de dinero: aquellas en las cuales el deudor, desde el mismo
nacimiento de la obligación, está obligado a entregar cierta cantidad, determinada o
determinable, de moneda.
Dinero: moneda autorizada por el Estado con la finalidad primordial de servir como unidad de
medida del valor de todos los bienes, como instrumento de cambio y como medio de pago de
relaciones patrimoniales.
“Moneda”: es el género constituido por todas aquellas cosas que el hombre acepta como
instrumento de cambio. Dinero es la especie (moneda aceptada por un país determinado)
Económicas: es una unidad de medida del valor de los bienes susceptibles de apreciación
económica y, además, sirve como instrumento objetivo de cambio de bienes y servicios.
Jurídicas: instrumento de pago o cancelatorio para todas las obligaciones que lo tengan por
objeto originario o final, es decir, las obligaciones patrimoniales.
Clases de moneda:
- Moneda metálica: acuñada en metales preciosos y nobles (oro, plata, níquel o cobre).
Su valor está íntimamente ligado al metal del que está hecha.
- Moneda de papel: billete que emite el Estado, al que le otorga un valor determinado,
garantizando a su portador una cierta cantidad de oro, plata o divisas. Cada billete es
susceptible de conversión por una cantidad de moneda metálica.
- Moneda fiduciaria: puente entre la moneda de papel y el papel moneda. Cuando las
entidades bancarias (antes emitían ellas el dinero) comenzaron a emitir billetes sin
respaldo, estos pasaron a ser moneda fiduciaria porque los ciudadanos confiaban en
que podían ser convertidos en metales.
- Papel moneda: billete que emite el Estado, pero sin respaldo en metal o divisas, es
inconvertible. Posee el valor que el Estado le otorga. El estado le otorga poder
cancelatorio y poder para adquirir bienes y servicios o monedas extranjeras.
De dinero: son aquellas que tienen por objeto la entrega de una suma de dinero. Desde el
mismo momento de nacimiento de la obligación se adeuda un monto dinerario determinado.
Régimen del CCyC: adopta el principio nominalista al disponer que: “el deudor debe entregar
la cantidad correspondiente de la especie designada” (ART 766)
El derecho monetario argentino se estructura sobre diversas disposiciones del CCyC y distintas
leyes como la ley 23.928 de “Convertibilidad y Desindexacion”, la cual fue ratificada en lo
esencial por la ley 25.561, que regulan la creación y circulación de la moneda de curso legal en
nuestro territorio.
Históricamente se han admitido diversas clausulas para corregir los efectos de la inflación en
las obligaciones de dar dinero dentro del sistema nominalista. Así, la obligación era pactada
considerando el valor oro (clausula valor oro) o el valor de una moneda extranjera (clausula
dólar), entre otras.
Sin embargo, hoy en da encontramos el ART 7 y el ART 10 de la ley 23.928 (el primero
modificado por el ART 4 de la ley 25.561) que asientan el principio nominal, prohibiendo toda
actualización monetaria, indexación por precios, etc., no pudiéndose aplicar ninguna cláusula.
Obligaciones en moneda extranjera: es posible que las partes de una obligación pacten como
moneda de pago una que no sea de curso legal y que sea la de una nación extranjera.
Antes de la ley 23.928 la deuda contraída en moneda extranjera era considerada como
obligación de “dar cantidades de cosas”.
La ley 23.9128 modifico el ART 617 del Código Civil. Desde entonces, la obligación de dar
moneda extranjera se consideró como una “obligación de dar suma de dinero”. El deudor solo
podía liberarse entregando la moneda extranjera, no pudiendo hacerlo por equivalente.
El nuevo Código Civil y Comercial cambio el concepto del derogado código civil:
A diferencia del código anterior, el deudor si está facultado a cancela la obligación en moneda
nacional, sin que incurra en mora (ART 765). Esto contraria lo dispuesto por el ART 766 (…en la
especie designada.)
La jurisprudencia resolvió tal situación indicando que las partes deben dejar en claro al
constituir la obligación, que eligen.
ART 11 LEY 25.561: en cuanto a las obligaciones surgidas de contratos entre particulares,
pactados en dólares u otras monedas extranjeras:
Intereses: son aumentos paulatinos (graduales) que devengan (adquieren) las deudas
dinerarias durante tiempo determinado, ya sea como contraprestación por el uso de dinero
ajeno o como indemnización por el retardo en el cumplimiento.
Clasificación:
Intereses compensatorios: intereses que las partes pactan como contraprestación por la
utilización de un capital ajeno. Son frutos civiles de ese capital.
Las partes pueden convenir libremente el interés que devengara el capital adeudado salvo que
ello incurra en “usura”. Si no fue acordada la tasa de interés por las partes, ni por la ley, ni
resulta de los usos, esta puede ser fijada por los jueces.
Intereses moratorios: aquellos que el deudor debe pagar en caso de incurrir en “mora”
(retardo en el cumplimiento de la prestación). Al retardar el cumplimiento, el deudor priva al
acreedor de percibir el capital en el tiempo pactado, por lo que los intereses moratorios
constituyen una indemnización de dicho perjuicio.
La tasa se determina por lo que acuerden las partes, por lo que disponen las leyes especiales o,
por tasa que se fijen según la reglamentación del Banco Central.
Intereses punitorios: las partes pueden pactarlos para el caso de retardo en el cumplimiento
de la obligacion. La mayoría de los autores los definen como “intereses moratorios
convencionales”. Pueden ser reclamados sin que sea necesario probar el perjuicio al acreedor,
aunque los jueces podrán atenuarlos si son desproporcionados.
Los intereses pueden acumularse, siempre que no se genere “usura”: cuando los intereses son
pactados de modo tal que generen montos exorbitantes, desproporcionados, injustificados.
Anatocismo: capitalización de intereses que se acumulan al capital de modo tal que los que ya
se han percibido se suman al capital produciendo nuevos intereses. Los intereses vienen a
constituir una unidad productiva de nuevos intereses.
Por ejemplo: si se debe aplicar a la suma de $100.000 una tasa del 5% mensual, la suma que
producirá como resultado la tasa será de $5.000 mensuales. Estaremos frente a anatocismo si
al segundo mes que debemos aplicar la tasa pactada, en lugar de hacerlo de nuevo sobre los
$100.000, lo hacemos sobre la suma de $105.00 y así sucesivamente.
El código civil y comercial prohíbe el anatocismo (al igual que el derogado código y la ley
23.928), pero con ciertas excepciones, como por ejemplo que haya una convención expresa
que lo autorice, o si la obligación se demanda judicialmente.
Extinción de los intereses: la deuda de los intereses puede extinguirse por dos vías:
- Por cualquiera de las vías previstas por el ordenamiento jurídico, como el pago (si la
obligación es de dar suma de dinero con intereses, el pago solo es integro si incluye el
capital con los intereses)
- Si se trata de intereses futuros, aun no percibidos, se extinguen si se extingue la
obligación principal (capital) respecto de la cual son accesorios.
Derecho del acreedor ante el incumplimiento: se mantiene el esquema general del ART 730. El
incumplimiento imputable de la prestación da derecho al acreedor a:
Ejecución del hecho por un tercero: ante la falta de cumplimiento espontaneo de la prestación,
el acreedor tiene la facultad de hacerla cumplir por un tercero a costa del deudor, si se reúnen
las siguientes condiciones:
División de las obligaciones de hacer: el código civil y comercial las divide en:
- De medios: la responsabilidad es subjetiva (hay que alegar dolo o culpa del deudor)
- De resultado: la responsabilidad es objetiva (no es necesario probar dolo o culpa, solo
se libera el deudor acreditando la “interrupción del nexo causal”: que haya culpa de la
víctima, de un tercero o un caso fortuito)
Para otro sector de la doctrina al cual adherimos, no hay porque ligar la antijuridicidad con el
factor de atribución. Puede haber responsabilidad subjetiva en las obligaciones de resultado y
objetiva en la de medios.
Obligaciones de no hacer: aquella que tiene por objeto una abstención del deudor o tolerar
una actividad ajena. El deudor está obligado a no realizar una conducta.
En cuanto a su ejecución forzada: se rigen por las mismas reglas que las de hacer y con los
mismos límites.
En cuanto a la ejecución por un tercero: encontramos que, según Calvo Costa, no hay lugar
para ella en las obligaciones de no hacer, debido a que es una imposibilidad fáctica (quien
debe abstenerse es el deudor, no un 3ro)
Los instrumentos particulares pueden estar firmados o no. Si lo están se llaman instrumentos
privados.