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¿Los historiadores y discurso sobre las formaciones estales?

Para responder este interrogante de la mano de James C Scott. Y o antes que nada, me asentaría
en la definición clásica que diferencia a la historia de la prehistoria, en la que la escritura marca
esta ruptura. Y tomando que este punto es uno de los diez que sostiene Gordon Childe permiten
caracterizar la ciudad antigua. Y desde la idea que esta ciudades son la génesis de los Estados,
desde donde se como bien dice nuestro autor nace “ una historia del “ascenso del hombre”. La
agricultura, se decía, reemplazó al salvaje, primitivo, violento mundo sin ley de los cazadores recolectores y
los nómades. Los cultivos en un campo fijo, por otra parte, eran el origen de la vida sedentaria, la religión
formal, la sociedad y el gobierno por leyes…”1

Más allá de que los hechos mismos demuestren que la mayoría de los pueblos se “resistieron a
esta mejora”, de la el discurso oficial, generalmente se olvida de enumerar que con las ciudades y
el hacinamiento trajo una serie de enfermedades que muchas veces desembocaron en terribles
plagas y que el sedentarismo no es mejor para vida cotidiana como lo vemos hoy en la vida diaria
donde vemos que tiene toda una serie consecuencias para vida moderna como el sobrepeso. Sin
contar que al vivir del cultivo muchas veces se está propenso a sufrir el azote la langosta y otras
plagas “…– no solo la gente sino el ganado, los cultivos, y los parásitos que los siguieron a la casa o se
desarrollaron allí. Enfermedades con las cuales ahora somos familiares – sarampión, paperas, difteria, y
otras infecciones adquiridas en comunidad – aparecieron por primera vez en los Estados tempranos. Parece
casi cierto que muchos de los Estados tempranos colapsaron como resultado de epidemias…” 2 Esto sin
olvidarnos de las sequias o inundaciones pueden traer gravísimas consecuencias, todo esto sin
contar que vivir bajo la tutela del Estado, “no es gratis pues se está obligado a producir por
encima de sus necesidades de subsistencia, en otras palabras debe dedicar más horas de su vida al
trabajo.

Situaciones que a mi pobre entender no atravesarían en iguales condiciones y no sufrirá de igual


manera un pueblo nómade que bien podría moverse hasta encontrar lugares más amigables
donde asentarse ante estas situaciones extremas. Es más podríamos decir que en búsquedas de
mejores lugares es como el hombre sale de su nicho en áfrica y conquisto el resto del globo.

Pero volviendo al tena central de estas líneas no tenemos que olvidar que el Estado es una
construcción bastante nueva en con respecto a la historia de la humanidad solo unos 60.000 años
de los 200.000 y que estos Estados tenían un dominio “real” del espacio muy limitado con
respecto al resto del planeta y que su casi hegemonía lo logra a lo largo de la última centuria,
nosotros la vemos claramente en nuestra historia local cuando se dan las conquista del “Desierto”
y del Chaco cuando a sangre y fuego el Estado Nacional, logra imponerse sobre todos los rincones
del país.

Y volviendo al punto que se puede decir que la Historia y por ende los historiadores nacen a la
sombra del estado siempre o en la mayoría de los casos han sido herramientas del mismo que han
servido para mantener vivo y legitimado al Aparato Estatal, instalando el discurso imperante del
Progreso encarnado en el Estado por sobre los pueblos barbaros, discurso que durante muchos
años también sostenidos sobre las teorías evolucionistas sirvieron para “llevar el progreso a esos
pobres pueblos atrasados” sustentando el más cruel imperialismo y los peores genocidios de la
humanidad entre los cuales podemos citar entre muchos otros la conquista de América o del
Congo Belga. Pero a esta idea creo que nuestro autor lo deja mucho más claro cuando sostiene
que “…, a las narraciones de la evolución social desde la perspectiva del darwinismo social en general, la
secuencia del progreso de caza y recolección al nomadismo y a la agricultura (y de banda a aldea y a pueblo
y a ciudad) fue una doctrina establecida. Estas visiones casi que imitaban el esquema evolucionario de Julio
Cesar, de casas a parentelas, a tribus, a poblaciones y al Estado (una población viviendo bajo leyes), con
Roma en la cúspide y los celtas y germanos detrás. Aunque varían en algunos detalles, este tipo de
narraciones registran la marcha de la civilización que se encuentran en la mayoría de los programas
pedagógicos y se imprime en los cerebros de los estudiantes de todo el mundo…” 3

En base a los sostenido en estas líneas creo que es de vital importancia el poder hacer siempre
que se pueda un análisis crítico del rol de la historia y del discurso de la misma pues no débenos
de olvidar que esta siempre es un discurso y estos siempre tienen una intencionalidad.

Cef. Roque Moreira


1
James C. Scott “Introducción: Una narración hecha pedazos. Lo que yo no sabía”. Traducción de Adrián Viale, realizada
para uso interno exclusivo de los alumnos de la Universidad Pedagógica Nacional. PP3

2
James C. Scott “Introducción: Una narración hecha pedazos. Lo que yo no sabía”. Traducción de Adrián Viale, realizada
para uso interno exclusivo de los alumnos de la Universidad Pedagógica Nacional. PP9

3
James C. Scott “Introducción: Una narración hecha pedazos. Lo que yo no sabía”. Traducción de Adrián Viale, realizada
para uso interno exclusivo de los alumnos de la Universidad Pedagógica Nacional. PP3-4

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