La batalla Final

Había una vez, en una tierra lejana, una gran batalla entre un ángel y un demonio. El ángel fue
enviado para proteger a la gente de la tierra de las formas malvadas del demonio. El demonio
había estado causando caos y destrucción dondequiera que iba, y la gente tenía miedo.

El ángel era fuerte y valiente, pero el demonio era astuto y poderoso. Lucharon durante días y
noches, sin que ninguno ganara la ventaja. La gente miraba desde lejos, esperando que el
ángel fuera victorioso.

Finalmente, después de muchas horas de lucha, el ángel logró dar un golpe al corazón del
demonio. El demonio cayó al suelo, derrotado. La gente vitoreó mientras el ángel se mantenía
victorioso.

Pero cuando el ángel miró hacia abajo al cuerpo sin vida del demonio, sintió una sensación de
tristeza. Sabía que aunque había ganado esta batalla, siempre habría más demonios para
luchar. Sabía que tendría que seguir protegiendo a la gente de la tierra del mal.

Y así extendió sus alas y voló hacia el cielo, listo para cualquier desafío que se presentara.