LECCION DE ESCUELA DOMINICAL IGLESIA BAUTISTATRINIDAD

NOVIEMBRE 21, 2021 ARLINGTON, TEXAS

Dr. Enrique González

ACCION DE GRACIAS CON GRATITUD

Gratitud verdadera es humildad verdadera. Uno no puede ser humilde sin tener gratitud y uno no puede tener
gratitud sin humildad. Muchos años atrás alguien hizo una encuesta sobre los pecados más grandes cometidos
por la humanidad. Para sorpresa de muchos, el pecado escogido como el más grande y el que es cometido más
a menudo, fue el pecado de ingratitud. Pensemos por un rato sobre esta gracia que es necesaria para una vida
cristiana de éxito y felicidad.

I. NO HAY TAL COSA COMO UNA PERSONA HECHA A SI MISMA. A menudo oímos de alguien
que se ha hecho por sí mismo. Nada está más lejos de la verdad. Cada uno de nosotros es un producto de
las influencias de otros. Uno no puede separarse a sí mismo de las contribuciones que otros han hecho en
nuestras vidas. Una persona de vista corta y egocéntrica es la persona que regularmente no reconoce las
contribuciones que otros han hecho en su vida, para su éxito y posición. Pablo dijo, "No podemos dejar de
decir lo que hemos visto y oído." Hechos 4:20.

II. EL FUNDAMENTO DE LA GRATITUD ES EL ESPERAR NADA. Uno debe recordar que

aunque somos deudores a todos los hombres, debemos sentirnos que nadie nos debe nada. No sólo es esto
uno de los secretos de poseer gratitud, pero también es uno de los secretos a la felicidad. Si uno no espera
nada, entonces todo lo demás es bono. Si uno espera más de lo que recibe, entonces queda desilusionado.
Si uno espera menos de lo que recibe, estará satisfecho aún si lo que recibe es lo mismo.

III. DALE PESO A UN REGALO PEQUEÑO. Tenemos siempre la intención de juzgar el tamaño del
regalo por la cantidad que cuesta. Esto es ciertamente una base pésima de medir. El dinero es
simplemente el tiempo envuelto en un bolso de papel. El hombre que gana $1.00 la hora da la misma
cantidad cuando da un $1.00 que el hombre que gana $50.00 la hora y da $50.00. ¿No dijo el Señor
Jesucristo que la mujer que dio las dos dracmas, dio más que todos los demás? El pastor Jack Hyles dice
sobre uno de sus cumpleaños: "Recibí muchos regalos hermosos. ¿Cuál de ellos fue el más grande? No
estoy seguro pero puede haber sido el regalo dado por un niñito. Después que yo terminé de bautizar el
domingo en la noche, me encontró en la puerta un niño de edad intermedia que había hecho una tarjeta de
cumpleaños y había pegado a la tarjeta dos pesetas para mí. Esto probablemente fue el dinero que él se
ganó esa semana. Y sin duda, pasó mediodía dibujando caricaturas en un pedazo de papel para hacerle a
su Pastor una tarjeta de cumpleaños. Por lo tanto, él me dio 7 1/2 días de su vida en cuanto al dinero se
refiere. Algunos tendrían que dar $100.00 para igualar su regalo de 50 centavos. Al ponerle peso al
tamaño de mis regalos de cumpleaños pensé que quizás este niño me dio más que todos los demás. Otro
regalo que recibí fue un pastel echo por una señora quién tiene una cantidad de dinero limitada, pero tiene
amor ilimitado. Si le tomó a ella tres horas para hacer ese pastel, ella me dio a mí tanto como cualquiera
me hubiese dado la cantidad de dinero que le toma ganarse en tres horas. Cuando uno le da peso a un
regalo de esta manera, no es tan pequeño como parece y la gratitud llena el corazón."

IV. NO MIDAS UN REGALO GRANDE. Recuerda que estamos tratando de desarrollar gratitud. Un
regalo grande es más fácil de apreciar y el darle peso a tal regalo a menudo decrece nuestra gratitud. Por
lo tanto, le damos peso a un regalo pequeño para ganar más gratitud, pero no le damos peso a uno grande
para que nos quite nuestra gratitud.

V. NUNCA PIERDAS APRECIO POR UN REGALO. Gratitud obtenida debe ser gratitud
mantenida. Continúa pensando en el regalo. Continúa dándole gracias a Dios por el que te lo dio.
 Simplemente decir "gracias" una vez no es suficiente. Simplemente reciprocar una vez no es suficiente.
Solamente decir "gracias" una vez y dar una expresión de gracias no es suficiente. Debemos continuar
expresando nuestra gratitud.

VI. NO DEJES QUE NADA EXTINGA LA GRATITUD. Hay un hecho extraño pero cierto sobre la raza
humana: Tenemos la tendencia de quejarnos más porque las rosas tienen espinas en vez de regocijarnos
porque las espinas tienen rosas. Alguien dijo que duele más que te corten un brazo que sentirse bien
porque lo tienes. ¡Qué triste es eso! Esta es la razón por la cual una persona puede hacer mil cosas buenas
por alguien y sin embargo, perder su amistad por una aparente injusticia. Un ganador de almas puede
ganar a alguien para Cristo, apuntarlo al cielo, salvarlo de una eternidad sin Dios y sin esperanza, pero
luego hacer algo para desilusionar a ese convertido y trágicamente perder esa amistad. Mantengamos
nuestro balance. No dejes la iglesia porque el pastor quien ha dicho mil cosas para ayudarte, dice una cosa
para ofenderte. No pierdas la gratitud porque alguien quien ha hecho algo por ti aparentemente hace algo
en contra tuya. No dejes que nada haga extinguir tu aprecio y gratitud hacia aquellos que te han dado su
amistad.

VII. SIENTE GRATITUD EN TU CORAZON Y PIENSA SOBRE CADA REGALO QUE SE TE HA

DADO Y CADA GESTO HECHO POR TI. Piensa de todas las posibilidades con respecto a los planes
y esfuerzos que han sido hechos en hacer algo por ti. Al hacer eso, deja que la gratitud hinche tu corazón.

VIII. ASEGURATE DE EXPRESAR GRATITUD. El Señor nos da la historia de 10 leprosos que fueron
limpios. Sólo uno regresó para expresar las gracias. Jesucristo preguntó: ¿Y dónde están los nueve?
Puede ser enteramente posible que los demás sintieron gratitud pero fracasaron en expresarla. Hay tanto
de nuestros sentimientos y expresiones que no se expresan, que nos roban de las bendiciones. Debe ser
una regla en tu hogar de enseñarle a tus hijos a expresar gratitud. Una nota especial de aprecio al final del
año escolar a tu maestro y una expresión verbal o escrita de gratitud a alguien que te ha hecho un favor,
siempre trae bendición. ¡Cuán importante es que le dejemos saber a la gente el sentir de nuestro corazón
en estos asuntos!

IX. TEN GRATITUD POR LO COMUN. ES FACIL TENER GRATITUD POR LOS BONOS.
TOMA CARACTER TENER GRATITUD POR UN SALARIO. La mayoría de nosotros no
apreciamos las cosas comunes de la vida hasta que las perdemos. Una de las mejores maneras de
desarrollar gratitud por las cosas comunes es tener períodos de tiempo apartados para imaginar cómo sería
la vida si perdiéramos esas cosas. Cada día por un momento, piensa en la tristeza de perder un esposo,
una esposa, un hijo, un pastor, una iglesia. Tal pensar nos va a guiar a tener gratitud en nuestro corazón y
nos debe guiar a expresar abiertamente nuestra gratitud.

X. TEN GRATITUD POR LO PEQUEÑO. Mientras más tú aprecias lo pequeño, más podrás gozarte de
lo común. La mayoría de nosotros tenemos más de lo que merecemos; más de lo que otros en otras
generaciones pudieron tener. Que Dios nos de la gratitud a El, a nuestros seres queridos y amigos. Que El
nos del carácter de expresar nuestro sentir a El y hacia aquellos quienes significan mucho y han hecho
mucho por nosotros.