Del valle a la montaña Enero 01

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Del valle a la montaña Enero 01

“Aunque pase por el valle de sombra de

muerte, no temeré mal alguno, porque tú estás
conmigo; tu vara y tu cayado me infunden
aliento”. (Salmos 23:4. LBLA).

No fue fácil, pero lo lograste. Has hecho los méritos

suficientes para llegar hasta aquí; eres un campeón de
la vida. Si retrocedemos en el tiempo, a comienzos del
año 2020, es evidente que nos adentrábamos en un
panorama totalmente desalentador a nivel global. Los
pronósticos auguraban un oscuro y temeroso valle de
muerte para una gran parte de la población humana.
No obstante, las misericordias de Dios se han renovado
sobre nuestras vidas hasta la fecha.

Cruzar por temporadas difíciles en nuestras vidas es

muy desalentador cuando no tenemos el respaldo de
Dios y la confianza suficiente para creer que Él cuidará
de nosotros. Sin embargo, el verdadero adorador se
mantiene exaltando a Dios aun cuando los tiempos son
tan críticos como para dejar de hacerlo. Si hoy tienes la
oportunidad de comenzar un nuevo año, quiere decir
que, ya atravesaste el valle de sombra de muerte, y
ahora te toca disfrutar de los delicados pastos que están
en la cima de la montaña.

Allí Dios te coronará de bienestar, y su misericordia te

alcanzará no solamente durante los 365 días de este
año, sino a lo largo de toda de tu vida.

Notas :
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Un año sin precedentes Enero 02

“¡Voy a hacer algo nuevo! Ya está sucediendo, ¿no se

dan cuenta? Estoy abriendo un camino en el desierto,
y ríos en lugares desolados. Yo hago brotar agua en
el desierto, ríos en lugares desolados, para dar de
beber a mi pueblo escogido”. (Isaías 43:19-20).

Este próximo año no será mejor simplemente porque

cambien las dos últimas cifras anuales del calendario.
Pensar así, es como entrar a una tienda de ropa con un
corazón resentido y cargado de odio, y pretender que, al
salir de allí con un vestuario completamente nuevo, se
habrán arreglado mis problemas internos. Pues, las
complicaciones profundas no pueden curarse con
remedios superficiales. Un nuevo año por sí solo no
sanará emocionalmente a un corazón afectado. Este
2023 no será un mejor tiempo solo porque dejaste en el
vestidor las prendas del 2022, y saliste del almacén con
ropa a estrenar. Realmente, esta nueva temporada
resultará ser la mejor de tu existencia, en razón a que
Dios entrará contigo a la faena.

Iniciar esta nueva época aferrado a sus promesas

inmutables y a sus palabras dignas de confianza, te
dará la seguridad de poder obtener un maravilloso final.
Y si en el transcurso de las semanas, se asoman las
tempestades, recuerda que a los que amamos a Dios
todas las cosas nos ayudan para bien. Bendiciones que
nunca han sido vistas, escuchadas y pensadas son las
que Dios tiene reservadas para aquellos que le amamos.

Oración : Padre mío, abre mis ojos espirituales para no

perderme ninguna de tus bendiciones y dispón mi
corazón para agradecerte por todas ellas. Amén.