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2022 - Relatoria Cerro de Los Valores - Componente Oportunidades - V2
2022 - Relatoria Cerro de Los Valores - Componente Oportunidades - V2
Componente Oportunidades
Proyecto Implementación de estrategias para la Reintegración y
Reincorporación a la vida Social y Económica
Técnicos de Apoyo
Alejandra Martinez Vega
Alvaro Antonio Vargas Henao (Comp. Tejido Social)
Marzo de 2022
18 AÑOS
DE
MEMORIA HISTÓRICA
CERRO DE LOS VALORES
De aquellos días de guerra en las calles de su barrio, Joaquín ya no carga ni con los recuerdos. Los
cambió por retazos de poemas recitados de memoria y aprendidas en libros prestados, mientras con
pala en mano arregla jardines, halla tesoros en las basuras, crea figuras de animales para llenarlas de
luces, y enseña a cuidar la naturaleza en El Cerro de los Valores, en la comuna 8 de Medellín.
Es una colina silenciosa que se traga el fragor de la ciudad en el calor del medio día. Se llega por un
camino diminuto donde solo cabe un carro —el que sube o el que baja—. Las orillas están
sembradas de "guardabosques" y flores, y adentro la espesa vegetación de los mangos y los
guayabos deja filtrar pocos rayos de sol. —Es un oasis de paz—, dice Joaquín, manos entierradas y
sudoroso. Hace 18 años dejó las filas paramilitares y hoy solo habla de reconciliación. "Acá
trabajamos con las uñas quebradas para cambiar este espacio que fue trinchera por un sitio sin
fronteras, donde todos son bienvenidos, donde solo se siembren semillas de paz y no de guerra",
explica Joaquín.
El Cerro de los Valores está ubicado geográficamente en la Comuna 8 Villa Hermosa, Barrio
Caicedo, un lugar clavado en las montañas de esta Comuna, donde existen barrios como La Sierra,
Villa Hermosa, Villatina, que en el pasado era sinónimo de violencia, hay un cerro especial, El
Cerro de los Valores, donde conviven víctimas, responsables y comunidad desarrollando proyectos
productivos relacionados con acciones ambientales: reciclaje, compostaje, servicio de
mantenimiento de jardines, vivero, eco huertas agrícolas y alumbrados navideños con elementos
reciclados y procesos de educación ambiental.
Este espacio fue creado y cuidado por desmovilizados del Bloque Cacique Nutibara que delinquían
en la Comuna 8 y los cuales hace 19 años dejaron las armas en el proceso de desmovilización que
vivió el país y la ciudad. Hoy, le apuestan al cuidado del medio ambiente y desarrollo comunitario.
Según José Joaquín Calle, director de la Corporación Campo Santo, este cerro cuenta con eco
huerta comunitaria que hoy tienen cultivos de zanahoria, lechuga, cebolla, pepino, cilantro.
También hay plántulas ornamentales como margaritas, cebollinas y plantas que atraen mariposas
como capuchinas y tangos.
Jose Joaquín, protagonista de esta historia, cuenta que en este cerro conviven desmovilizados del
paramilitarismo, la guerrilla, sus víctimas, victimarios de combos y bandas delincuenciales que ya
dejaron sus actividades delictivas y “convive todo el mundo y es hermoso, algo que sería más
sencillo en lo rural y se está viviendo aquí en lo urbano".
Este lugar se convirtió también en atractivo turístico en la época de Navidad, pues se ha diseñado un
proyecto de alumbrado navideño en el año 2005 con apoyo de la Secretaría de Gobierno de ese
entonces y que para el 2015 logró la visita de cuatro mil personas.
La Corporación Campo Santo nació en la zona donde hace 29 años ocurrió una de las mayores
tragedias de la ciudad: la avalancha de Villatina, que hoy, es un gran parque de la vida y la
convivencia, como lo es este cerro, un pulmón para el oxígeno que requiere el alma.
Otros siguieron el camino. En este remanso encumbrado, 12 personas siguieron los pasos de
"Juaco". Dejaron las armas y le apostaron, como dicen ellos, a la legalidad. Se cansaron de noches
largas, de esquinas, de motos veloces, de la plata fácil, de las balas. Esas manos que empuñaron
fusiles hoy aprietan machetes para rozar la maleza, enseñan a reciclar a los del barrio, hacen
compostaje, tienen empresa.
Luis es uno de ellos. Hace parte de las 36.462 personas EX - Auc atendidas en Colombia por la
Agencia para la Reincorporación y la Normalización - ARN. Además, es uno de los 19.280
desmovilizados que hicieron parte de los proyectos para la formación en el empleo en el país. Luis
dejó las filas paramilitares y hoy trabaja con la Corporación Campo Santo. A las 4:00 p.m., cuando
termina su jornada, se va a la universidad. Su sueño: ser ingeniero civil. "Tengo otras expectativas
de vida. Quiero salir adelante por mí y por mi familia", dice Luis, palustre en mano, sombrero
ancho y figura delgada.
Han tenido algún apoyo de la Institucionalidad y la empresa pública. El Cerro de los Valores conto
en su mejor momento con el apoyo y la asesoría de la ARN. Se precisa que la ayuda a este proyecto
fue brindada con capital semilla y asesoría empresarial. Sin embargo, dice Joaquín, falta apoyo
actual para hacer más proyectos y vincular más personas que le apuesten a la paz y la
reconciliación. Con un apoyo mancomunado actual más fortalecido y comprometido de la
Institucionalidad y la Empresa Privada, cualquier tipo de apoyo económico abrirían las puertas a
todos esos jóvenes que llevan las madres al Cerro de los Valores para hacer de su vida un camino
distinto. "La lucha del hombre contra el poder, es igual a la lucha de la memoria contra el olvido",
recita Joaquín, y se funde entre las plantas y el compostaje.
Es de recordar que este lugar antes de la intervención y recuperación era un basurero y botadero
escombros, el cual servía de trinchera para el conflicto del momento y que fuese conocido
anteriormente como La Torre. Esta zona, en principio, dada la ocupación de tipo invasión, se
proyectaba ser un barrio subnormal antes de la desmovilización, cuyos cimientos que se venían
construyendo, fueron derrumbados por la administración municipal por el riesgo que estos
representaban para la comunidad que el habitaba.
Como una anécdota de resiliencia, el nombre de este lugar fue la misma comunidad que le dio el
nombre “Morro de los Valores” al ver el trabajo de recuperación, así como las acciones sociales
enmarcadas en valores que se estaba haciendo en este lugar y así que con el proceso que se
adelantaba al momento por los Desmovilizados que trabajan en el para la fecha, se nombra como
CERRO DE LOS VALORES en el año 2004 por ellos.
.
Datos históricos que apoyan la relatoría al momento más relevante de la Desmovilización en Medellín
A 2022, Xxx
desmovilizados culminaron
la ruta de reintegración
exitosamente en Medellín y
xxx en el Antioquia
ASPECTOS DEMOGRÁFICOS
Población en Medellín 2021 4.055.269 millones de Habitantes
Población Comuna 8 2021 139.493 mil habitantes
La comuna 8 de Medellín, representa el 6% de la población total de la ciudad
El 52% de los habitantes de la comuna 8 son mujeres
El 48% de los habitantes de la comuna 8 son hombres
MEMORIA HISTÓRICA
Una tragedia en la 8 que transformó la Urbe.
“Un hombre que con la fuerza de su voluntad transforma el devenir
catastrófico de su entorno y en medio de la muerte enaltece la vida”
Históricamente se ha dicho que el cerro Pan de Azúcar es un volcán sin boca. Su pico redondeado
sobresale de la cadena montañosa del centro oriente de Medellín y se alza como un tótem antiguo.
A esa ladera de tierra amarilla llegaron campesinos desplazados por la violencia bipartidista (y en
adelante de las otras violencias), subieron las mangas empinadas y arañaron la tierra para construir
sus nuevas casas. Ya pasaron más de sesenta años y en ese morro han levantado 35 barrios (18
reconocidos legalmente como la Comuna 8) en el que hoy viven más de ciento treinta y nueve mil
personas.
El setenta por ciento de uno de esos barrios, Villatina, está construido sobre terrenos inestables que
el gobierno ha declarado en alto riesgo. Mide ocho calles y siete carreras que hacen un ovillo de
casas de ladrillo, ranchos de madera, calles empinadas, escalitas entre pasadizos estrechos y, en la
parte alta, el primer camposanto de Medellín –el segundo en Colombia después de Armero –.
Se destacan los lugares de una historia que hace rato no se cuenta: la antigua acequia, que ya es una
calle; la cancha de los pomales, que ahora es una Unidad de Vida Articulada (UVA); la Mano de
Dios, que ardió en 2003; la capilla de una virgen donde hubo cerca una masacre en 1992; las letras
blancas en el cerro que dicen “Jardín” –tan grandes como una vez se vieron las letras de
“Coltejer”–, y en el centro de todo, el lugar donde dejó de sentir miedo de la muerte.
José Joaquín Calle Ramírez, quien tiene hoy 50 años y una de las frases que dice con más
frecuencia es: ”Un hombre que con la fuerza de su voluntad transforma el devenir catastrófico
de su entorno y en medio de la muerte enaltece la vida”. Es la misma que aparece inscrita sobre
la placa del monumento que construyó con sus amigos en 2007, cuatro años después de la
desmovilización de las Autodefensas Unidas de Colombia.
Las frases las va soltando con cada paso, así, una después de la otra, mientras recibe las visitas que
quieren oír la historia que tiene por contar, luchando para que la memoria de este lugar no
desaparezca.–Porque el camino recorrido lleno de dificultades y dolor engrandecen aún más los
buenos momentos y abonan con mayor vigor la semilla que hoy sembramos –dice.
Son frases que memorizó en las tardes de encierro, de solar con árboles y cigarros de marihuana,
cuando su amigo misterioso, el juez, el sabio loco, le contaba las historias de Calila y Dimna, el
primer y único libro que ha leído desde que dejó la escuela San Francisco de Asís, en cuarto de
primaria. –Ese loco vive en Envigado, pero es buen loco, es un abogado teso. Él me decía “lea
hermano, que tin, que vea”, y como yo no sabía leer casi, él mismo me leía a Calila y Dimna.
También me decía que ni los libros, ni la música, ni las herramientas se prestan, pero me dejó ese
libro. Y cuando yo lo abro, me meto como si fueran cosas que me hubieran pasado. “Bueeenas
Joaco”, le gritan cuando pasan por los escalones de concreto que atraviesan el cerro y le levantan la
mano. Va lento, con el entrecejo fruncido, y los ojos fijos en el suelo, como si escarbara recuerdos
En los periódicos de años recientes siempre aparece junto a la palabra “reconciliador”. En el 2014
fue personaje del año de la revista Semana y desde hace ocho aparece en las páginas de El Tiempo,
El Mundo y El Colombiano como un líder social que recupera espacios verdes en la Comuna 8.
Reconocimientos que no esperaba años atrás, cuando hacía parte de la lista de los 868
desmovilizados del Bloque Cacique Nutibara; y menos hace veinte, cuando le decían ‘Calvo’, no
tenía miedo y cuidaba el barrio.
–Yo era aburrido de la vida y no soportaba que me mencionaran nada que tuviera que ver con mi
mamá porque iba encendiendo a puñaladas al que fuera. Yo le pedía a mi diosito que me llevara, y
nada. Él me tenía pa otras cosas.
A los dieciséis años Joaquín ya tenía un
balazo en la espalda y una pistola 7.75. Una
llegó después de la otra. Allá arriba dicen
que, si Bienestar Familiar no amparó a los
huérfanos después de la tragedia, si lo hizo la
delincuencia.
Todos los días madrugaba a trabajar con Óscar y Edwin –ya muertos—. Robaban un carro por la
mañana, otro por la tarde y por la noche viajaban a Tuluá o Montería o a donde tuvieran que
llevarlos.
Cuando robaba, dice, lo hacía con diplomacia. Dependía de la moda del momento. Cuando estaban
los Pepes (Perseguidos por Pablo Escobar) decía: “Vea, nosotros somos de los Pepes, nos
demoramos sino media horita, no se ponga celoso que tin…”, y la gente le entregaba las llaves.
En el fondo pensaba que la plata de los carros de alta gama que se robaba solo la perdían las
aseguradoras. Y en parte tenía razón. Los que más estaban perdiendo dinero con los robos a mano
armada crearon a Majaca (Muerte a Jaladores de Carros), un grupo de autodefensas que mataba a la
gente que hacía cosas como él.
Cada semana empezó a encontrar amigos desaparecidos cerca de la variante a Caldas, con un letrero
pintado que decía eso: “Majaca”. Ahora piensa que ese diosito al que le habla con tanta insistencia
desde hace 15 años, siempre lo protegió. –Cierto día llegué a La 44, una oficina cerca de la
Minorista donde nos manteníamos los jaladores de carros y los piratas terrestres. Llegué en un
renolcito lo más de bonito y me encontré con unos parceros que me advirtieron: “Sabes qué calvito,
movete de por aquí”, y yo: “Ah, todo bien mi viejo”, y arranqué otra vez. A la hora volví y me
dijeron que se habían llevado a tres.
Su cara redonda y morena, con una sombra de barba plateada, está oscura por el humo de los carros
que acumuló en los viajes de hoy. Hoy trabaja con más de diecisiete personas, cuando la Alcaldía
le encargó la administración de la nueva aula ambiental del Cerro de los Valores, una escombrera
que recuperó la Corporación y ahora es un laberinto de árboles y huertas que hacen parte del
proyecto del Jardín Circunvalar que en la administración anterior se creó para preservar la gran
reserva natural que estas zonas representan para la ciudad.
Con los ojos serenos, mira el paisaje de la ciudad, conformada por las laderas que tejen tantas
historias de vida, recuerda: –Antes todo eran milicias. Yo era muy pelado pero me acuerdo mucho
de cuando andaban esos grupos de diez o quince muchachos pa arriba y pa abajo. Recuerda muchas
banderas ondeando en las montañas. Al frente, en el Ocho de Marzo, tenían las del ELN; en La
Sierra las de las milicias del 6 y 7 de Noviembre –afines al ELN, a los Comandos Armados del
Pueblo y a las Farc–, y en el Pan de Azúcar las del M19. También a la gente de Pablo Escobar
entrando al barrio en Kalimas y Carevacas y a muchos pelados de Villatina yéndose a trabajar con
ellos. Las peleas dejaron de ser con machetes y cuchillos porque los cambiaron por fierros hechizos
–changones– que se conseguían muy baratos, y luego, con la plata que movían en los noventa,
cambiaron por Mini-Uzis y metralletas. Entre 1990 y 1995, hubo 32.170 asesinatos en toda la
ciudad.–La zozobra eran las balaceras. Recuerda con gran emotividad pasajes de esta época, un
cuchito que vivía solo estaba desayunando y una bala perdida traspasó los adobes de su casa. Como
a los tres días lo encontraron con la cabeza sobre el comedor.
Las balas pasaban de morro a morro. Las madres de los muchachos que cuidaban el barrio les
guardaban las armas, les ayudaban a hacer petardos, y cuando se trasnochaban haciendo guardia, les
llevaban aguapanela, pan y chocolate. –En esa época no había organizaciones que le mandaran a
uno armamento, municiones, plata, entonces nos tocaba financiarnos a nosotros. En 1997 comenzó
a manejar el carro de uno de los duros de La Terraza que movía plata del narcotráfico. Se llamaba
Henry, estudiaba en la Universidad de Medellín y antes de convertirse en el contador de un mafioso
vendía libros puerta a puerta. –El man un día apareció con una mata de plata la hijuemadre y como
sabía que yo tenía dos fierros amparados me comenzó a llamar y me daba una ligota no más por
andar con él.
Durante tres años, Joaquín se fue a vivir a Sabaneta a un edificio de nueve pisos, con un millón de
pesos mensuales. –Uno anhelaba conseguir plata como esa gente, pero a punta de sueldo y de
trasnoche era una terapia. Había pasado un mes desde que decidió retirarse y volver a cuidar el
barrio, cuando supo la noticia de que a Henry lo habían matado con sus escoltas. –Donde yo hubiera
estado ahí, me hubieran pegao por nada.
En el barrio, los que siempre combatieron a las milicias por su cuenta terminaron colaborando con
el Bloque Metro de las autodefensas, comandado por Doble Cero. En el 2000, al poco tiempo de
que La Terraza se revelara contra su jefe, Don Berna negoció una “franquicia” de las autodefensas
para crear el Bloque Caique Nutibara. –Cuando menos pensamos nosotros hacíamos parte de una
organización. Éramos civiles, pero todos sabíamos que el patrón era Don Berna.
En total eran nueve comandantes, desde La Sierra hasta Villa Hermosa. A las órdenes que
recibieron de combatir a las milicias y a La Terraza, se sumaría otra que no esperaban: matar a los
que se negaran a abandonar el Bloque Metro, sus antiguos compañeros.
Hoy como todas las mañanas cuando se levanta, Joaquín habla con Dios. Le reza con pedacitos de
notas que saca de El man está vivo, una cartilla del ex sacerdote Alberto Lineros que compraba
cada mes. Hace cinco años le decía en una conversación: –¿Sabe qué diosito? Si este va a ser mi
último día perdóneme todo, pero bueno, yo voy es pa allá, la única arma que quiero es usted.
Esas conversaciones reemplazaron las que aprendió en los meses que pasó en Santa Fe de Ralito y
en Tierra Alta (Córdoba), cuando rezaba cinco oraciones durante los entrenamientos. La primera
que le enseñaron decía: “Por las almas retornamos los derechos vulnerados, enfrentando al enemigo
por la falta del Estado. Empuñando fusil y equipo campesino defenderé, de la subversión a mi país.
Yo defenderé, ¡oh autodefensa gloriosa!, y en el pecho llevaré el Estado de Derecho, libertad,
familia y fe”.
Otra decía: “No te sientas vencido aún vencido, no te sientas esclavo aun siendo esclavo; trémulo de
pavor siéntete bravo, y a combate feroz llama un herido. Ten la tensión de un clavo humedecido,
que aun viejo y ruin vuelve a ser clavo, no como la cobarde intrepidez del pavo, que maja su
plumaje ante el primer ruido. Posee cómo Dios que nunca llora, como Lucifer que nunca reza, como
robledal cuya grandeza necesita del agua y no la implora. Grita lucífera vengadora, ya rodando
sobre el polvo su cabeza”.
Fue durante el proceso de desmovilización cuando conoció a su patrón. Después de una reunión de
Don Berna en Tierra Alta, Joaquín iba detrás en una camioneta y se bajaba para abrirle todos los
portones. Cuando llegaron a la finca se lo presentaron, se sentaron en la misma mesa y conversaron.
El tema era la importancia que tenía hacer algo diferente para recuperar la confianza de sus
comunidades. –El día que supe de la desmovilización me fui hacia el camposanto conversando con
Dios y le decía: “ah, vamos a ser buenos, vamos a hacer que la gente nos vea diferente”.
Para la época de 2005, un año después, eran 78 los líderes desmovilizados que la gente llamaba
“señores” y hacían labores sociales en Medellín. En esa época Don Berna estuvo financiando
granjas, comedores infantiles, la recuperación del Cerro Pan de Azúcar como destino turístico,
brigadas de salud, reinados populares, escuelas deportivas y hasta campeonatos de videojuegos de
fútbol. –En navidad nosotros hacíamos pesebres por todos lados y Don Berna nos mandaba un
carrado lleno de regalos que repartíamos a dos mil, tres mil niños. Él sabía cuáles eran los líderes
que hacían labor social y no nos faltaba absolutamente nada. Ahora ya no, ahora ya todo se acabó.
Cuenta que un día, después de la desmovilización, recibió de puño y letra de Don Berna una carta
donde le decía que era el designado para seguir las banderas de Alberto Cañada, su antiguo líder, y
combatir a Juan Camilo Naranjo Martínez, alias ‘El Gomelo’. La policía lo señalaba como el
principal agente desestabilizador del orden público tras haber entrado en guerra con la organización
‘Caicedo’, que vigilaba los intereses de La Oficina de Envigado. –En una reunión a la que me
citaron me dijeron “¿qué armas necesita?”; y yo les dije: “¿Saben qué? para lo que nosotros
tenemos que hacer en nuestras comunidades no necesitamos las armas”, y se rieron.
Diez de sus amigos si aceptaron y hoy están pagando entre treinta y cuarenta años de cárcel. –Han
pasado miles de tormentas y yo sigo aquí, tomando aguapanelita con la comunidad. Me he
encontrado con manes de otros combos y me dicen: “El jefe nos reúne y lo ponen de ejemplo es a
usted hermano”. Dios nos abrió un camino diferente y nosotros supimos aprovechar este proceso,
así fuera a lo Chapulín Colorado. Sin querer queriendo, recuperamos un patrimonio histórico
de una ciudad sin memoria
Hoy, Juaco es un líder social reconocido en su comuna, quien, a punta de palustres, barras, siembra
de hortalizas y jardín, es un vivo ejemplo de reconciliación para la Ciudad y el Mundo y entre sus
frases más icónicas, finaliza su historia con esta frase que confirma su transformación: –A mí ya me
da miedo hacer las cosas de las que era capaz antes. Ahora le tengo miedo a la muerte.
El día que el nombre de Villatina apareció por primera vez en los titulares de los periódicos junto a
la palabra tragedia, nadie sospechó que no sería la primera.
Sucedió un domingo a las dos y cuarenta de la tarde del 27 de septiembre de 1987. Antes, en la
transmisión del partido del clásico paisa en el Atanasio Girardot, el locutor diría que era un día
hermoso, con brisa. En la Cancha de los Pomales, el equipito de los Once Amigos –así los
llamaban– había dejado a un lado la pelota para ir a almorzar. Bajaban por el morro aledaño cuando
veinte mil metros cúbicos de tierra rodaron por el cerro Pan de Azúcar dejando a su paso más de
quinientas personas muertas y sin hogar a otras mil setecientas (dicen, porque de ese día no hay
cuentas oficiales).
El estruendo que escucharon les pareció el choque de un avión. Joaquín, trece años, corrió asustado
a buscar a su hermano, a quien minutos antes había visto irse con la camiseta sudada, los guayos
viejos y una pantaloneta que él ya había usado muchas veces. Dijo que tenía mucha hambre y quería
llegar primero a la casa, la misma a la que después de muchos años de meterle material a punta de
fiados en el depósito, le faltaban pocos adobes para dejar de ser un rancho de madera.
Era normal que los domingos a las nueve de la mañana el padre saliera con los hijos a misa en la
capilla de la Virgen de Torcoroma, luego bajaran en un bus de Caicedo a Junín o a Bolívar a ver en
cine a Bruce Lee o a Jackie Chan. Era normal que después su padre jugara billar y tomara cerveza
hasta las cinco de la tarde y su madre no estuviera porque trabajaba en Balalaika. Pero ese domingo
nada normal ocurrió.
Joaquín paró de correr donde esa mañana todavía estaban las casas de la familia de los Jiménez, que
ocupaban casi toda la cuadra. En el lugar donde antes había un solar, un patio, una sala y tres
piezas, el niño trató de encontrar debajo de la tierra a su madre Lidia, a su padre José de Jesús, a sus
hermanas Janeth y Lina, y a sus hermanos Hugo y Giovanny. Lo hizo el resto de la noche. Lo hizo
la mañana y la tarde y la noche siguientes.
Ese domingo, más tarde, vería cómo los cuerpos de rescate y los vecinos equipados con picos y
palas desenterraban con vida a Mery, la hermana, con su niña entre los brazos, y, más abajo, a su
hermano Hugo.
Los cuerpos de Janeth y Lina quedaron sepultados en el terreno que fue declarado
camposanto cinco días después por el cardenal Alfonso López Trujillo. Ese día, dice, la cal que caía
de un helicóptero sobrevolando el pico del volcán cubrió de un manto blanco la tierra amarilla. Era
el manto que cubría el olor a muerte.
De la familia de nueve solo quedaron los hermanos Duber, Mery, Hugo y él. Quedaron solos,
huérfanos, como quedaron centenares de niños de Villatina en 1987, después de la tragedia, una de
las diez catástrofes por deslizamiento más grandes que han ocurrido en el mundo, según los datos
del Centro de Epidemiología de Desastres de la Universidad Católica de Lovaina.
Mi hermana Mery sobrevivió con su hija, pero la mayoría de gente que murió aquí estaba
destrozada. Con ella la hicimos y la idea era dejar un mensaje de esperanza, de que no todo murió
con la tragedia.
La historia de la tragedia siempre empieza con las banderas del M19 en el cerro Pan de Azúcar, a
principios de los ochenta. Muchos recuerdan las reuniones con la gente en el colegio San Francisco
de Asís, los robos a los carros de la leche y cuando repartían mercados como Robin Hood. –Quien
iba a saber que iban a haber más de quinientos muertos por causa de sus explosivos –dice.
En veintiocho años, ningún técnico ni geólogo ha podido convencerlos a ellos, los que vieron con
sus ojos la tierra amarilla rodando por las laderas, de que la causa de todo fue el agua represada de
la acequia. Los textos de expertos dicen: “La masa físicamente se elevó –por el agua represada– y al
caer atrapó el aire y descendió por la pendiente sobre un colchón de aire. Al caer, la masa
comprimió el aire, por lo cual el sonido fue de un golpe seco”. –Donde hubiera sido agua estancada
como dicen, hubiéramos encontrado a los cuerpos empantanados como Omaira y no descuartizados.
CORPORACIÓN CAMPO SANTO
El eslabón que mantiene viva la
Reconciliación en el Cerro de los
Valores
CORPORACIÓN CAMPO SANTO
El eslabón que mantiene viva la Reconciliación en el Cerro de los
Valores
Los 8 desmovilizados que hacen parte de los proyectos desarrollados en el Cerro de los Valores con
la Corporación Campo Santo, y con diferentes entidades comunitarias, Institucionalidad y privadas,
llegaron a conformar este grupo por su necesidad de aportar a la comunidad desde un enfoque de
convivencia y reconciliación, además de haber servido como un apalancamiento para su proceso de
reintegración.
A través de este proceso, que se ha convertido en su proyecto de vida, han logrado acercarse a su
comunidad y ganar un reconocimiento positivo en ella y en la ciudad, por su importante labor, en la
que han recuperado espacios que en la historia de su comuna, la 8, eran identificados como espacios
de temor y muerte. A partir de esas connotaciones negativas, han transformado el referente de estos
lugares, así como de las ideas que la comunidad concebía acerca de ellos por su historia; han
aportado vida, instaurando una cultura de recuperación y protección del medio ambiente,
introduciendo una cultura del reciclaje, del compostaje, de la recuperación de espacios críticos de su
barrio y generando una cultura de convivencia pacífica en la época navideña con la generación de
un espacio de vida, de paz, de reconciliación, por medio de figuras a gran escala para engalanar el
cerro los valores e invitar con ello a la comunidad, a integrarse en estos valores y a vivir la época de
una manera diferente a lo que dictaba la historia hasta el momento.
Gracias a toda su labor que han desarrollado durante 18 años con un alto compromiso, hoy son uno
de los referentes más importantes en su comunidad y ahora en la Ciudad por su proceso firme y con
determinación, su evidente transformación de vida y sus grandes logros en el cuidado y protección
del medio ambiente; trabajando de la mano con reconocidas entidades públicas y privadas de la
Ciudad de Medellín.
La Corporación se creó en el año 2004, con 60 socios desmovilizados, que han pasado, y hoy hacen
parte de ella 8 personas en proceso de Reintegración. Fue creada en el año 2004, cuyo representante
legal es el Desmovilizado Jose Joaquín Calle, y sus líneas de negocios, están enfocadas básicamente
en: Mantenimiento de zonas verdes, Reciclaje, Compostaje, Figuras navideñas, Vivero, entre otros;
las cuales de describen a continuación con mayores detalles.
Producción
Socio -
Ambiental
(Actividad
Principal)
Educación Ecohuerta
Ambiental Ambiental
Educación Ambiental
• Aula ambiental Itinerante: Unidades didácticas encaminadas a la preservación ambiental
• Recolección de aguas lluvias
• Lombricultivo
• Mariposario abierto
• Huerta y Vivero
• Sembrados Verticales
• Estructuras y material para las figuras elaboradas con material aprovechable
• Pacas biodigestoras: proceso de compostaje anaeróbico para transformación del
material orgánico
• Recorridos ambientales con estudiantes, con enfoque de preservación ambiental
• Asesoría corporativa a los procesos comunitarios de educación ambiental: PROCEDAS
• Talleres empresariales para manejo ambiental corporativo
• Asesoría y Capacitaciones en servicio de aseo general y jardinería a empresas, así como
unidades residenciales
• Huertas Caseras Comunitarias
Se identifica una zona de las Comunas 8 y 9 donde hay deficiencia de manejo de residuos sólidos o
un potencial de generación de reciclables como por ejemplo una zona comercial de esta. Con las
personas representantes de la Corporación Joaquín Calle y Luis Arias, se hace proceso de
sensibilización puerta a puerta, acompañado con el recuperador que se va empoderar de esa micro
ruta.
Salen a las 10 am los recuperadores a recorrer las micro rutas ya establecidas y previamente
sensibilizadas en las Comunas 8 y 9, las cuales están asignadas a 12 personas que prestan
sus servicios a la Corporación, y que se vienen operando desde el año 2017. Cuando el
recuperador pasa por las zonas dispuestas, se identifican las bolsas de reciclaje y residuos
orgánicos los cuales deben estar separados en lo posible y se realizan puntos de acopio en
las zonas de intervención para luego ser recogidas por el vehículo de la Corporación. Esta
operación se hace todos los días a excepción del día domingo.
Los recuperadores regresan a la 1 pm al Cerro, donde realizan el acopio general del material
a la ECA: Estación de Clasificación y Aprovechamiento.
Con respecto a los materiales aprovechables: Con 5 personas se adelanta la clasificación del
reciclaje, el cual se hace de forma manual, donde se separa el plástico, el vidrio y el metal,
empacándose en costales y tulas y se almacena en otra zona de la ECA. Su
comercialización es en los 25 primeros días del mes diariamente a la ASOCIACIÓN DE
RECICLADORES ANTIOQUIA.
Con el material Orgánico: se almacena en un espacio dispuesto para ello en la ECA y cada
8 días se dispone en la compostera, a través de las pacas biogestoras, para que pasados 2
meses del proceso anaeróbico puede disponerse de abono.
En el año 2015: “Un elefante encima de una barca, un hipopótamo, una cebolla, un tomate y una
luna tocando violín son algunas de las figuras que por estos días se exhiben en el Cerro de los
Valores, en la comuna 8, con motivo de la Navidad y de las obras del Jardín Circunvalar”.
Con una exposición denominada «biodiversidad», más de 20 habitantes de la zona, algunos de los
cuales son personas Reintegradas a la sociedad civil, elaboraron 50 figuras con material reciclable y
bombillas ahorradoras para construir el alumbrado navideño que ilumina y le da vida a este Cerro
ubicado en el barrio Las Estancias, donde también funciona un aula ambiental.
“Hace algunos años que esta zona era un territorio de guerra y un botadero de basura. Hoy, con el
aula ambiental y el alumbrado navideño es un mundo de fantasía”, nos cuenta Joaquín, quien le
agradece en su momento al alcalde de Medellín, Aníbal Gaviria Correa y a la Empresa de
Desarrollo Urbano, EDU, por el apoyo para recuperar el Cerro.
Esta propuesta social y comunitaria, no sólo contempla un resultado final dispuesto en las figuras
navideñas a gran escala, incluye también un proceso previo que va gestando esas relaciones
comunitarias sólidas; durante la etapa inicial de su elaboración en la que se construyen dichas
figuras, se vinculan a diferentes grupos poblacionales de la comunidad, en donde los
Desmovilizados transmiten los conocimientos que han adquirido y de esta manera, juntos realizan la
elaboración de las figuras, que en suma son la muestra de una construcción conjunta del tejido
social y aún más, el fortalecimiento de las relaciones basadas en la reconciliación.
Además del desarrollo de las figuras, los Desmovilizados, en conjunto con otras instituciones que
ellos han logrado articular, enseñan a las personas que participan de la comunidad acciones
enfocadas a la promoción y cuidado del medio ambiente; como plantar, abonar la tierra, recolectar
plantas y diseñarlas en jardines dentro de las mismas figuras navideñas a gran escala.
Es relevante anotar que la cultura paisa se ha caracterizado por asumir ciertas conductas que se han
asociado a lo largo de la historia con épocas particulares como la navidad. Dichas costumbres han
sido mal interpretadas como alegría y goce, para traspolarse en actitudes que en diversas
circunstancias atentan contra la vida e integridad de las personas y por ende, de las comunidades.
Esta problemática no fue ajena, en su momento, para el grupo de Desmovilizados que desarrollando
actividades e iniciativas con su comunidad pudieron evidenciar la necesidad de transformar esas
actividades decembrinas por otras que velaran por la integración comunitaria y preservación de la
vida, desde enfoques que fuesen sensibilizando a la comunidad en espacios relacionadas con el arte,
la cultura, el deporte y demás actividades que promovieran la convivencia pacífica.
En vista que el alumbrado navideño en el Cerro los Valores esta enfocado a la convivencia y la
cultura de paz, ya cuenta con un amplio reconocimiento en la Comuna 8 y en general, en toda la
Ciudad de Medellín, la visibilización por sí misma está dada, pues han logrado generar en la
comunidad un hábito de visitar el lugar durante el mes de Diciembre y reunirse allí para actividades
relacionadas con la convivencia pacífica, el desarrollo de actividades culturales, todo lo cual
promueve la integración comunitaria y el fortalecimiento del tejido social.
• Figuras elaboradas con aprovechamiento de materiales reciclados
Para la elaboración de figuras, se usa la misma técnica que se desarrolla para el alumbrado
navideño, incluyendo diseños y materiales requeridos por el cliente, tal como la experiencia con la
Empresa Ecopetrol y la EDU, estas últimas terminadas en fibra de vidrio
• Vivero
Periódicamente se realiza la siembra de 300 a 500 plántulas, las cuales, en su mayoría son planta
que se usan en el exterior para adecuación de jardines tales como: Durantas, toscanas, carey,
verbena, entre otras, las cuales se comercializan con el Jardín Botánico o con las unidades
residenciales, también con los visitantes al cerro. Actualmente mucha de ellas se usa en el Cerro
para adecuación paisajística y la comercialización se hace hacia otros clientes. Por el proyecto con
la EDU, se están sembrando para las obras de intervención ambiental que se desarrollaran en la
zona.
Corte de Césped
Poda de setos
Podas preventivas de árboles
Tratamiento de zonas blandas
Recolección de residuos orgánicos
Control biológico de maleza
Nuestros Servicios Ambientales están orientados a prevenir, controlar y mitigar los impactos
ambientales generados en el desarrollo de las actividades económicas de nuestros potenciales
clientes, guiándolos hacia el cuidado del medio ambiente y cumplimiento de los
requerimientos de las Normas Ambientales.
Este servicio lo prestamos con apoyo de un Ingeniero Ambiental y la Tecnóloga Control Ambiental
Como experiencia de esta acción, en el año 2017, creamos, con uno de los compañeros
Desmovilizados, se crearon las bolsas en geotextil para la siembra de los jardines verticales,
los cuales se instalaron en el Jardín Botánico y se han creado muestras para un arquitecto
que ha conocido de la Corporación para sus proyectos civiles.
• Jardineras EcoJeans
Con este proceso, se recuperan los jeans que van al relleno sanitario, ya que estos son de difícil
descomposición y se le da un componente viable en paisajismo, de jardines verticales y que se
pueden realizar en ellos siembras de hortalizas, aromáticas o plantas ornamentales
Educación Ambiental
El aula ambiental se identifica por tener una gran variedad de fauna silvestre
Se evidencia una apropiación del sitio y un sentido de pertenencia
Existe una articulación positiva con otros proyectos de ciudad que benefician el aula e
integralmente el sector donde se sitúa.
Hay un sin número de organizaciones de base aledañas al aula que permite su articulación,
reconocimiento y visibilidad.
El aula está inmersa en un sector residencial, actualmente intervenido de obras de
infraestructura de tipo deportivo y recreativo, lo cual posibilita el tráfico de personas y la
integración de las mismas.
El trabajo agroecológico que sea realizado en el aula ahora contempla un centro de acopio de
residuos sólidos y orgánicos. En el aula se ha mantenido un trabajo por el aprovechamiento del
material reciclable y su transformación artesanal.
Las diferentes unidades didácticas se han convertido en un espacio para la integración y
valoración del trabajo campesino población vulnerable.
La trasformación del espacio ha sido reconocido por la misma comunidad, pues fue un terreno
baldío desperdiciado que actualmente se enriquece por sus paisajes y actividades sociales y
agroecológicas.
Cuenta con un aula con capacidad para 40 personas.
Como Corporación, en el aula ambiental aprovechamos las unidades didácticas y atendemos todo
tipo de públicos. A través de las jornadas integrales, cursos, talleres y recorridos, incentivamos una
cultura ambiental, las cuales se describen a continuación:
• Recolección de aguas lluvias
Los elementos que conforman estos sistemas requieren de los siguientes elementos:
Área de captación
Normalmente se ubica en las cubiertas de las edificaciones o una zona impermeable que se
ha adaptado para la función de captar el agua de la lluvia. El material con el que esté
realizado debe contar con características higiénicas que impidan la contaminación del agua,
tales pueden ser tejas de cerámica o cubiertas de piedra. Evitar los impermeabilizantes
elaborados con materiales que puedan contaminar el agua, se deben evitar a toda costa.
Conductos de agua
Es el sistema que se elige para que el agua se dirija al depósito, pueden ser tuberías,
escalones o la misma inclinación del tejado. Es importante garantizar las dimensiones y
diseño adecuados para evitar el desvío del agua o el desperdicio.
Filtrado
Esta parte es indispensable para los sistemas de captación de aguas lluvias ya que es
donde será purificada, se eliminarán impurezas y microorganismos, haciendo que el agua
sea potable y pueda ser usada con seguridad. Si desea mayor pureza en el agua puede optar
por filtros que utilizan los primeros litros de agua recolectada para limpiar el sistema de
captación, así que se desechan, proporcionando un lugar limpio para el agua que
seguidamente sea recolectada.
Depósito
Es el lugar donde el agua se almacena una vez ha sido filtrada. El tamaño debe ser según
sus necesidades y capacidad de recolección; y el material de las paredes debe ser apto para
el almacenamiento del agua y que no la contamine durante su almacenamiento.
Tradicionalmente, los depósitos se ubicaban en lugares subterráneos y era delimitado por
muros de contención que evitarán filtraciones. Actualmente, se manejan tanques exteriores,
y el material que se maneja es un plástico especial para esta función.
Sistemas de control
Si desea optimizar el uso del agua recolectada con el agua de la red pública puede
implementar un sistema de control. Su función consiste en alternar el uso del agua
recolectada con la de la red, suministrando la que está disponible en el depósito, y cuando
se acaba suministra la de la red. Es una forma inteligente de ahorrar este recurso
Contribuirá al ahorro del agua mientras evita el desperdicio de una de las fuentes de
más fácil acceso de este recurso.
No solo ahorra agua, también lo hace con la energía ya que es un sistema que no
requiere de ningún tipo de fuente ni corriente eléctrica. Además, el bombeo de agua
para las grandes urbes requiere de enormes cantidades de energía, así que también
contribuye a su reducción en este sentido.
• Lombricultivo
La lombricultura se puede definir como: “la crianza y manejo de lombrices de tierra en condiciones
de cautiverio”; con la finalidad básica de obtener con ella dos productos de mucha importancia para
el hombre: el lombricompost como fertilizante de uso agrícola y la proteína (carne fresca o harina),
como suplemento para raciones de animales.
El lombricompost es utilizado para la fertilización de especies vegetales de interés alimenticio. La
técnica consiste en utilizar todo residuo orgánico generado en el hogar y sus alrededores el cual se
debe compostar la cual la lombriz coqueta roja o lombriz californiana lo transforma mediante su
aparato digestivo en una extraordinaria fuente fertilizadora.
El cultivo de lombrices es una alternativa que tiene varias finalidades, entre las que se pueden
mencionar la producción de materia orgánica, rica en nutrientes y en microorganismos que mejoran
la fertilidad del suelo y por lo tanto mejora la productividad de las plantas.
• Mariposario abierto
En el Cerro de los Valores, se han sembrado un sin número de especies ornamentales que sirven
como plantas hospederas alimenticias y donde las mariposas realizan su proceso de metamorfosis
y al estar en a su alrededor, permite que se tenga observación de diferentes especies en el lugar y
se cambia el concepto de que este sea cerrado, generando una atractivo más dentro del recorrido
del cerro
• Huerta y Vivero
Espacio didáctico para la siembra y cosecha de elementos de pan coger, y se convierte en unidad
didáctica cuando se enseña los diferentes nombres de las plantas en español e ingles, temas
alelopatía, control de plantas para que repelen las plantas, rotación de tierra para no agotamiento
de la misma y que permiten oxigenación de la tierra, fertilizaciones orgánicas a través del
compostaje
• Pacas biodigestoras:
El proceso inicia con la definición del espacio en el que se realizará la paca, se verifica que haya
un correcto separamiento y la construyen con un molde donde depositan los desechos de
jardinería y cocina.
Paso a paso
• Fabricación del molde: Cuatro láminas de madera de un metro de largo por un metro de ancho,
sin tapa ni base. También se puede hacer un molde de menor altura (alrededor de 40 cm), el cual a
medida que se va llenando, la paca va subiendo.
• Armado de la base de la paca: Una vez armado el molde, este debe ser colocado en un lugar
abierto con buen espacio, preferiblemente en una zona verde, un parque o un jardín urbano, que
permita la entrada y salida de agua.
• En la base se agrega ramas de jardín cruzadas como una rejilla aislándola de la humedad del
suelo, actuando como sistema de drenaje.
• Antes de incorporar los residuos al interior del molde, se deben sacar las proporciones tanto de
los residuos orgánicos como los de jardín para que sean equivalentes (50% de cada uno).
• Incorporación de los residuos de jardín: La segunda capa de la paca digestora está compuesta
por los residuos de jardín recolectados. Se coloca una buena cantidad distribuida de manera
uniforme en la paca. (Hojas secas y verdes, hierba, ramas).
• EL material debe ser muy bien prensado, de forma que quede atrapado la menor cantidad de
oxígeno entre los materiales que se han dispuesto. Se puede utilizar un palo e incluso los pies bien
sea saltando o marchando dentro de la paca para prensar los residuos.
• Incorporación de los residuos orgánicos: Una vez prensados los residuos de jardín se agrega un
poco más de estos mismos residuos (hojas secas y verdes, hierba, ramas) solo en los bordes de la
paca, como si fuera una especie nido, dejando el centro libre para colocar los residuos orgánicos.
• Se incorpora pasto y hojas a medida que los vayas generando. Los restos orgánicos de la
cocina tendrán su lugar en el centro de la paca, en un espacio (tipo nido) que vas a ir tapando con
el pasto y hojas de los costados.
• Una vez llena, se prensa bien todo el contenido y se saca todo el aire.
• Cuando la paca este llena a un metro de altura es importante finalizarla con una capa compacta
de residuos de jardín o flores. Si se desea una apariencia de jardín, en esa capa final también se
pueden sembrar plantas, de modo que crezcan absorbiendo nutrientes de la paca.
• Se desmolda la paca sacándolo por arriba o desarmándolo por el lado y se puede comenzar el
proceso en otro sitio del jardín. El cubo que quedó tardará entre 5 y 6 meses en convertirse en
tierra.
Mediante esta técnica se contribuye a la protección del medioambiente, efectuando este reciclaje
orgánico saludable que permite procesar alrededor de media tonelada de residuos orgánicos, que
anteriormente hubieran ido a parar al botadero de basura.
,
Tour por la Reconciliación y la Vida
Visitas guiadas a grupos de personas locales y extranjeras, en las cuales se da a conocer la memoria histórica
de nuestra Corporación y el Cerro de los valores
NIT: 811.026.799-0
MISIÓN
Diseñar y mantener espacios que sean visualmente agradables, que propicien el desarrollo de
actividades de esparcimiento, den tranquilidad y seguridad a los usuarios y la comunidad. Y al
mismo tiempo contribuyan a crear ambientes que motiven la productividad, la eficiencia y el
paisajismo de la comunidad o empresas que requieran de nuestros servicios, ya que el mejoramiento
de estos espacios ambientales le da presentación a la empresa o la comunidad y genera sentido de
pertenencia y cultura en los empleados, usuarios o habitantes de estos espacios.
VISIÓN
Para el 2025 la Corporación Campo Santo será un líder de ciudad como referente para la comunidad
y empresas que gestionen el mejoramiento ambiental, por su innovación, su servicio integral, el
respeto por el medio ambiente, la recuperación de espacios y manejo de residuos sólidos. Con un
crecimiento acorde a las demandas de desarrollo de la sociedad, y siendo pilares en la contratación
con entidades privadas y públicas y demás empresas u organizaciones que requieren nuestros
servicios en la ciudad de Medellín, su Área Metropolitana y el departamento de Antioquia.
VALORES CORPORATIVOS
Nuestra cultura organizacional está orientada con valores corporativos que enmarcan el
direccionamiento del negocio. Todos interiorizamos estos valores y los practicamos porque hacen
parte de nuestras vidas e interactúan en los contextos en que nos desenvolvemos. Invitamos a
nuestros colaboradores a practicar estos valores.
Responsabilidad
Cumplimos a cabalidad con los compromisos adquiridos tanto internamente dentro del
grupo como externamente con los diferentes trabajos y contratos que adquirimos. Vemos en
la responsabilidad un valor fundamental del cual se desprenden los demás.
Solidaridad
Entendemos la solidaridad como la manera de reconocer, respetar y apoyar al otro desde la
diferencia. Vemos a los miembros de la corporación como personas capaces y valiosas que
pueden aportar al crecimiento y mejoramiento de la corporación. En este sentido
reconocemos y valoramos a nuestros clientes como seres humanos que merecen respecto y
cumplimiento por parte de nosotros.
Liderazgo
Asumimos el liderazgo como un valor grupal, el cual se ejerce por diferentes miembros de
la corporación de acuerdo a los momentos en que se encuentre el grupo, buscando
fortalecer el equipo y motivar la labor con el fin de continuar construyendo la cohesión
grupal. Además, permitimos que nuestros colaboradores se sientan seguros en el negocio.
Somos líderes en el sector y soportamos a nuestros clientes en maximizar su potencial.
Espíritu de Equipo
Contamos con un recurso humano exitoso, interesado en crecer a nivel personal y laboral
con el fin de aportar al cumplimiento de objetivos comunes para poder alcanzar un mejor
rendimiento en el ámbito laboral. Valoramos el aporte brindado por cada miembro de
equipo. Trabajamos de forma global y comprometida para alcanzar metas en común
basados en la comunicación.
Asociación
Entendemos a nuestro interlocutor, compañeros, clientes o proveedores para sincronizar
nuestros intereses y necesidades con ellos. Desarrollamos una relación basada en confianza,
respeto e integridad con el fin de mejorar como grupo.
Excelencia
Desarrollamos soluciones innovadoras "de primera mano", servicios que garanticen la
satisfacción de nuestros clientes. Luchamos continuamente en el mejoramiento de nuestro
rendimiento para cumplir nuestros compromisos.
Oportunidad
Entregamos a satisfacción el trabajo en el momento esperado, siempre conscientes de la
importancia del trabajo para nuestros clientes.
Experiencia empresarial de la Corporación Campo Santo
Año 2005: Se da inicio a la Unidad Productiva con el aporte del Capital Semilla que como
Desmovilizados tiene derecho y con las donaciones que se gestionaron con empresa privada
para adquirir herramientas e insumos e iniciar actividades de paisajismo: mantenimiento de
zonas verdes. En este año a través de la Oficina de Paz Reconciliación se apoya la
Corporación en su Proyecto con 15 guadañas.
Año 2007: se logra con Plaza Mayor, un contrato para el aprovechamiento de los residuos
reciclables que genera la entidad en los eventos ejecutados por esta. Contrato que dura un
año.
Años 2005 al 2012: Se realiza la elaboración y puesta en marcha del proyecto alumbrado
navideño con aprovechamiento de material reciclable, con él en apoyo económico publico
de la Secretaría de Gobierno del momento
Año 2012: con la EDU se hace una intervención relacionada con obras de bioingeniería en
la quebrada La Loquita, Barrio Villatina. Este contrato se logra a través de recursos de
Cooperación Internacional.
Año 2013: Se contrata en obras de paisajismo con el constructor que realiza las
adecuaciones de lote donde está el Campo Santo.
Años 2012 al 2016: La Corporación participó del proyecto dinamización de las Aulas
Ambientales de Campo Santo y Cerro de los valores, al igual que la intervención de
Jardines de las Aulas Ambientales de la ciudad, a través del contratista ITM y la
Universidad Santo Tomas y Universidad de Antioquia.
Año 2015: Se elabora el alumbrado navideño a través de la contratación con Plaza Mayor
como proyecto social para la Comuna 8.
Año 2015: Se realiza obras de paisajismo del Jardín Circunvalar con la EDU, construyendo
también figuras alusivas a la naturaleza que servían como jardineras o silletas
Hoy, esta en pausa con ENVARIAS, el proyecto de prestar el servicio de aseo en las comunas 8 y 9,
el cual ya se había realizado la formulación de la propuesta y por cambio de Gerente se quedó en
pausa para análisis de la nueva Gerencia.
Actualmente, se adelanta con la EDU, un acuerdo sobre los derechos que la CORPORACIÓN tiene
en el espacio que esta va intervenir, para la conectividad que se tiene entre la estación del metro
cable las torres y el cerro de los valores. Para tal fin, se tiene diseñado una obra de urbanismo y
recuperación del espacio público que se ejecutara en el sector Las Torres, impactando al proyecto
de manera física y social, toda vez que esta intervención se hará en donde se tiene hoy dispuesta la
ECA.
Con esta obra, se realizarán unos puntos de encuentro comunitarios como parques y zonas verdes y
La Corporación Campo Santo, como una organización importante de la zona por el trabajo social
que se ha adelantado durante casi 18 años de compromiso y resignificación con la comunidad
objeto de intervención, se realizan convocatorias de socialización como actores y fuerzas vivas, a
fin de darles a conocer el proyecto y su alcance, cuales son los beneficios sociales que traen para
esta población que se generan con su vinculación y se destaca que los moradores circundantes van
ser reubicados. Otros beneficios que traerá este proyecto de intervención ambiental para la
Corporación, será la canalización de todas las propuestas de las entidades públicas (secretarias) y
entidades descentralizadas que van a acompañar el proyecto, con el fin de llevarlos a la comunidad
y lograr puntos de acuerdo en beneficio de las partes, realizando la intermediación social entre la
comunidad intervenida por el proyecto y la institucionalidad a fin de ejecutar las obras.
Desde el aspecto técnico, la Corporación Campo Santo, ejecutara algunas actividades de obra
ambiental como la creación de jardineras que ya tiene diseñadas el proyecto, suministrar el material
vegetal y realizar las obras de siembra. Así mismo la Corporación participará en el piloto de
GAVIONES SOSTENIBLES con material reciclable con botellas PET.
En el Sector Público:
JARDÍN BOTÁNICO
EDU
SECRETARIA MEDIO AMBIENTE
PLAZA MAYOR
ITM - PRESUPUESTO PARTICIPATIVO DE LA COMUNA 08
U SANTO TOMAS - PRESUPUESTO PARTICIPATIVO DE LA COMUNA 08
UDEA - PRESUPUESTO PARTICIPATIVO DE LA COMUNA 08
JARDÍN BOTÁNICO -PP COMUNA 8
SECRETARIA DE GOBIERNO
En el Sector Privado:
El Jardín Circunvalar de Medellín como parte del Cinturón Verde pone en marcha obras y acciones
en el territorio que acompañan el desarrollo ordenado, a la vez que se prepara a la comunidad por
medio del Urbanismo Pedagógico para que participe en la construcción y asuma la importancia de
controlar el crecimiento urbanístico en los barrios de alta ladera donde se presentan condiciones de
riesgos que es necesario superar.
En cuanto al Cerro Pan de Azúcar, se ha realizado la reforestación del cerro Pan de Azúcar, que se
adelanta en desarrollo del Jardín Circunvalar de Medellín en la comuna 8, Villa Hermosa, obra que
fue ejecutada por la Empresa de Desarrollo Urbano, EDU. Esta iniciativa, que se implementó con el
programa “Más bosques para Medellín”, fue ejecutada gracias a un convenio entre la Secretaría de
Medio Ambiente y la Reforestadora Integral de Antioquia, RIA.
En las dos fases se sembraron 21.000 árboles, entre los que se encuentran alcaparro gigante,
aguacatillo, cedro, laurel, roble, yarumo, entre otras especies. Para estas labores de reforestación se
vincularon 26 personas de la comunidad aledaña al cerro Pan de Azúcar, de las cuales la mitad son
mujeres, en su mayoría cabeza de familia.
“Con las obras del Jardín Circunvalar el cerro fue dotado de un aula ambiental con huertas
agroecológicas, mariposario y vivero, además del tradicional alumbrado que desde 2005 se viene
construyendo con la gente”, destaca Joaco.
Con la recuperación social de este lugar que proyectos, procesos e iniciativas se pueden
implementar:
Ria
Parque Arvi
Jardín Botánico
EDU
Secretaria de Medio Ambiente – Alcaldía de Medellín
Secretaría de Cultura - – Alcaldía de Medellín
Secretaria de Desarrollo Económico - – Alcaldía de Medellín
Secretaria De Educación Iniciando Con Nodo De La 8 Para Taller Infantiles Ambientales -
– Alcaldía de Medellín
Empresas Publicas de Medellín
Empresas Varias de Medellín.
Área Metropolitana
Gobernación de Antioquia
Agencia OAT TRAVELS
Metroparques
Corantioquia
Proantioquia