Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
1
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
2
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
PADRE NUESTRO
Padre Nuestro, que estás en el cielo
santificado sea tu nombre,
venga a nosotros tu Reino,
hágase tu voluntad
así en la tierra como en el cielo.
Danos hoy
Nuestro pan de cada día;
y perdónanos nuestras deudas
así como nosotros perdonamos
a nuestros deudores,
no nos dejes caer en la tentación,
mas líbranos del maligno.
Amén
Padre, que en este día mi rostro sea un reflejo de tu Misericordia y en ella alcance
la santidad del alma.
Misericordia Divina, que brota del seno del Padre, en Ti Confío.
Misericordia Divina, supremo atributo de Dios, en Ti Confío.
3
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
Hoy, yo__________________________________________________________
me postro ante la Majestad de Tú Divinidad, para consagrarte todo mi ser a
vuestra Soberana Voluntad. Te Consagro Oh! Padre Amado y Misericordioso mis
cinco sentidos, con su mente, razón pensamientos e imaginación, mi corazón con
sus sentimientos y deseos; mi voluntad y libre albedrio, mi espíritu y alma; en una
palabra todo mi ser, para amarte desde hoy y para siempre con todo mi corazón.
Que mi único y ardiente anhelo, sea hacer tu Santa y Adorable Voluntad hasta en
sus más mínimos deseos.
¡Padre mío y Padre de Nuestro Señor Jesucristo! Ten compasión de esta pobre
pecadora, que se refugia en tu Divina Misericordia, guárdame, defiéndeme,
dirígeme, y sírvete de mí, como tu única y entera propiedad; te pido me concedas
espíritu de sabiduría y de revelación para conocerte más perfectamente e
ilumines los ojos de mi corazón y así saber lo que en verdad esperas de mi al haber
sido llamada por Ti. Amén
CONSAGRACION A MARIA
4
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
Abre, Señor, mi boca para bendecir tu santo nombre; limpia mi corazón de todos
los pensamientos vanos, perversos y ajenos; ilumina mi entendimiento y
enciende mi sentimiento para que, digna, atenta y devotamente pueda
encontrarme contigo a través de tú Palabra en la presencia de tu divina majestad,
Por Cristo nuestro Señor. Amén
Iniciamos nuestra oración con el credo y reconocemos en este nuevo día que
nuestra identidad es ser Hijas del Padre Misericordioso
* Profesión de fe y disposición
Como Hijas del Padre Misericordioso, elevemos nuestra oración a nuestro Padre
del cielo con la:
Oración al Padre
Padre, en tus manos me pongo, haz de mi lo que tú quieras y por todo lo que
hagas de mi yo te doy gracias. Estoy dispuesto a todo y lo acepto todo con tal que
tu voluntad se cumpla en mí en todas tus creaturas.
No deseo nada más, Dios mío, pongo mi alma entre tus manos, te la doy con todo
el ardor de mi corazón porque es una necesidad de amor, el darme, el entregarme
entre tus manos sin medida, con infinita confianza porque tú eres mi Padre.
Santo Charles de Foucauld
Todos somos pecadores. Examina en que has fallado, en tu relación con Dios, con
tu familia, comunidad, con los demás y contigo mismo. Coloca a los pies de Cristo,
todos tus problemas y distracciones.
* Oración de arrepentimiento
Jesús, mi Señor y Redentor, yo me arrepiento de todos los pecados que he
cometido hasta hoy, y me pesa de todo corazón, porque con ellos he ofendido a
un Dios tan bueno. Propongo firmemente no volver a pecar y confío en que por
6
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
7
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
8
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
Que el Rey de la eterna Gloria nos haga participes del banquete celestial. Amén
ACTO DE OFRECIMIENTO
Antes de la coronilla
Ante el cielo y la tierra, ante todos los coros de los ángeles, ante la Santísima
Virgen María, ante todas las Potencias Celestes declaro a Dios, Uno y Trino, que
hoy en unión con Jesucristo, Redentor de las almas, me ofrezco voluntariamente
como víctima por la conversión de los pecadores y especialmente por las almas
que han perdido la esperanza en la Divina Misericordia. Este ofrecimiento
consiste en que tomo [con] la total sumisión a la voluntad de Dios, todos los
sufrimientos, y los temores, y los miedos que llenan a los pecadores y en cambio
les cedo todas las consolaciones que tengo en el alma, que provienen de mi
comunión con Dios. En una palabra, les ofrezco todo: las Santas Misas, las Santas
Comuniones, las penitencias, las mortificaciones, las plegarias. No temo los
golpes, los golpes de la Justicia de Dios, porque estoy unida a Jesús. Oh Dios mío,
con esto deseo compensarte por las almas que no confían en Tu bondad. Contra
toda [la esperanza] confío en el mar de Tu misericordia. Oh Señor y Dios mío, mi
destino… mi destino para la eternidad, no pronuncio este acto de ofrecimiento
basándome en mis propias fuerzas, sino en el poder que deriva de los méritos de
Jesucristo. (DSF 309)
10
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
Opc 1
Enséñanos José:
Cómo se es “No protagonista”;
cómo se avanza, sin pisotear;
cómo se colabora sin imponerse;
cómo se ama sin reclamar.
Dinos José
cómo se vive siendo “número dos”;
cómo se hace cosas fenomenales,
desde un Segundo puesto.
Explícanos José
cómo se es grande sin exhibirse;
cómo se lucha sin aplauso,
cómo se avanza, sin publicidad;
cómo se persevera y se muere,
sin esperar un homenaje.
Opc 2
Oh Glorioso San José, dirígenos el camino seguro a la santidad, condúcenos en el
fiel cumplimiento de los consejos evangélicos, y danos la gracia de esperar con
alegría en la divina providencia. Nos confiamos en tu intersección por la
perseverancia y la fidelidad en nuestra vocación y por la fecundidad de auténticas
vocacionales, Hijas del Padre Misericordioso. Amén
Opc 3
¡Acuérdate! ¡Oh castísimo esposo de la Virgen María y dulce protector mío, San
José, que jamás se ha oído decir que ninguno de los que han invocado tu
protección e implorado tu auxilio haya quedado sin consuelo!
Animada con esta confianza, vengo a tu presencia y me encomiendo
fervorosamente a tu bondad. No desatiendas mis súplicas, oh padre adoptivo del
Redentor, antes bien acógelas propicio y dígnate socorrerme con piedad. Amén.
REGINA COELI
Se reza en Pascua
Oremos: Oh, Dios, que por la resurrección de tu Hijo, nuestro Señor Jesucristo, te
has dignado dar la alegría al mundo, concédenos que por su Madre, la Virgen
María, alcancemos el gozo de la vida eterna. Por el mismo Jesucristo Nuestro
Señor. Amén.
EL ANGELUS
Se puede rezar a las 6:00 am, al mediodía o a las 6:00 pm en todos los tiempos
excepto en pascua
12
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
Oremos: Infunde Señor tu gracia en nuestros corazones, para que los que por
medio del anuncio del ángel hemos conocido la encarnación de tu Hijo Jesucristo,
por los méritos de su pasión y de su cruz, lleguemos a la gloria de la resurrección.
Por el mismo Cristo nuestro Señor. Amén.
SANTO ROSARIO
Según la costumbre de la comunidad, unidas con Nuestra Santa Madre Iglesia,
rezamos:
MISTERIOS GOZOSOS
(lunes, sábado)
Primer Misterio:
LA ANUNCIACION DEL ANGEL A MARIA SANTISIMA Y LA ENCARNACION DEL
VERBO
Segundo Misterio:
LA VISITA DE LA VIRGEN MARIA A SU PRIMA SANTA ISABEL
Tercer Misterio:
EL NACIMIENTO DEL NIÑO DIOS EN EL PORTAL DE BELEN
Cuarto Misterio:
LA PRESENTACION DE JESÚS EN EL TEMPLO Y LA PURIFICACION DE MARIA
Quinto Misterio:
LA PERDIDA Y HALLAZGO DEL NIÑO JESÚS EN EL TEMPLO
MISTERIOS LUMINOSOS
(jueves)
Primer Misterio:
EL BAUTISMO DE JESÚS EN EL RIO JORDAN
Segundo Misterio:
LA AUTORREVELACION DE JESÚS EN LAS BODAS DE CANÁ
Tercer Misterio:
EL ANUNCIO DEL REINO DE DIOS INVITANDO A LA CONVERSIÓN
Cuarto Misterio:
LA TRANSFIGURACION DEL SEÑOR EN EL MONTE TABOR
Quinto Misterio:
LA INSTITUCIÓN DE LA SANTA EUCARISTÍA Y EL SACERDOCIO
13
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
MISTERIOS DOLOROSOS
(martes, viernes)
Primer Misterio:
LA AGONIA DE JESÚS EN EL HUERTO DE LOS OLIVOS
Segundo Misterio:
LA SANGRIENTA FLAGELACION DE NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO
Tercer Misterio:
LA CORONACION DE ESPINAS DE NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO
Cuarto Misterio:
JESÚS CAMINO AL CALVARIO CON LA CRUZ A CUESTAS
Quinto Misterio:
LA CRUCIFIXIÓN Y MUERTE DE NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO
MISTERIOS GLORIOSOS
(miércoles y domingo)
Primer Misterio:
LA TRIUNFANTE RESURRECCIÓN DE NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO
Segundo Misterio:
LA ASCENCIÓN DEL SEÑOR AL CIELO
Tercer Misterio:
LA VENIDA DEL ESPÍRITU SANTO SOBRE LOS APOSTOLES Y A LA VIRGEN MARIA
Cuarto Misterio:
LA ASUNCIÓN DE LA VIRGEN MARIA AL CIELO
Quinto Misterio:
LA CORONACION DE MARIA COMO REINA UNIVERSAL DE TODO LO CREADO
NOTA
Las Hijas del Padre Misericordioso deben rezar los 4 misterios del Santo Rosario
cada día, contemplando los misterios del día a las 12:00 m después del Angelus.
Primer Rosario:
Se contempla y reza en comunidad y se ofrece por las intenciones de nuestra
familia espiritual Casa de la Misericordia y sus necesidades:
Por nuestro Fundador Juan Carlos Saucedo
Por la labor misionera de nuestros hermanos de la CDLM
14
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
¡Dios mío, yo creo, adoro, espero y te amo! ¡Te pido perdón por los que no creen,
no adoran, no esperan, no te aman!
Culminamos el Rosario con la oración más antigua dirigida a la Virgen María y con
la oración a Nuestra Señora del Amparo
15
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
Tener en cuenta:
En todos los rosarios rogar por las intenciones del Santo Padre, por nuestra
Iglesia, por el eterno descanso de las almas del purgatorio y la conversión de los
pecadores.
Segundo Rosario:
Tercer Rosario:
Al finalizar todos los misterios del Rosario, se hace la jaculatoria Oh! Jesús mí
perdona…y la de reparación Dios mío yo creo, adoro…
16
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
Cuarto Rosario:
Se contempla y reza de manera individual, por las intenciones personales
Se culmina todo como en el primer Rosario
+ Letanías de La Virgen
17
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
18
Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo,
perdónanos, Señor.
ORACIÓN.
19
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
+ Ave María
+ Credo de los Apóstoles
V. Padre Eterno,
R. Te ofrezco el Cuerpo, la Sangre, el Alma y la Divinidad de Tu amadísimo Hijo,
Nuestro Señor Jesucristo, como propiciación de nuestros pecados
y los del mundo entero. X 5
Oh! Sangre y agua que brotaste del Corazón de Jesús como una Fuente de
misericordia. En ti Confío x 3 (DSF # 187)
20
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
¡Oh Jesús!
Te ruego por tus fieles y fervorosos sacerdotes,
por tus sacerdotes tibios e infieles,
por tus sacerdotes que trabajan cerca o en lejanas misiones,
por tus sacerdotes que sufren tentación,
por tus sacerdotes que sufren soledad y desolación,
por tus jóvenes sacerdotes,
22
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
23
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
Cuantas veces respira mi pecho, cuantas veces late mi corazón, cuantas veces
pulsa la sangre en mi cuerpo, esa cantidad por mil, es el número de veces que
deseo glorificar Tu misericordia, oh Santísima Trinidad. Deseo transformarme
toda en Tu misericordia y ser un vivo reflejo de Ti, oh Señor.
Que este más grande atributo de Dios, es decir Su insondable misericordia, pase
a través de mi corazón al prójimo.
Oh Jesús mío, transfórmame en Ti, porque Tú puedes hacer todo. (DSF 163)
Se toma cada jueves una hora del libro “Las horas de la Pasión de Nuestro Señor
Jesucristo” de la Sierva de Dios Luisa Piccarreta.
24
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
25
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
Oración preparatoria:
Señor misericordioso, Maestro mío, deseo seguirte con fidelidad, deseo imitarte
en mi vida cada vez más perfectamente, por eso te ruego que a través de la
meditación de tu Pasión me concedas la gracia de compren-der cada vez mejor
los misterios de la vida espiritual. María, Madre de la Misericordia, siempre fiel a
Cristo, guíame por las huellas de la dolorosa Pasión de tu Hijo y alcánzame las
gracias necesarias para que este vía crucis sea fecundo en mi corazón.
26
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
Jesús a Santa Faustina: Las culpas involuntarias de las almas no retienen mi amor
hacia ellas ni me impiden unirme a ellas; sin embargo las culpas, aunque sean las
más pequeñas pero voluntarias frenan mis gracias y a tales almas no las puedo
colmar de mis dones (DSF 1641).
Santa Faustina: Oh Jesús mío, soy tan propensa al mal y eso me obliga a vigilarme
continuamente, pero nada me desalienta, confío en la gracia de Dios, que abunda
donde la miseria es la más grande (DSF 606).
Señor misericordioso. Guárdame de cualquier infidelidad, aunque sea la más
pequeña. Pero voluntaria y consciente.
Jesús a Santa Faustina: Aunque todas las obras que surgen por mi voluntad están
expuestas a grandes sufrimientos, sin embargo considera si alguna de ellas estuvo
expuesta a mayores dificultades que la obra directamente mía- la obra de la
Redención. No debes preocuparte demasiado por las contrariedades (DSF 1643).
Santa Faustina: Vi a la Santísima Virgen (…), que se acercó mí (…) y me dijo estas
palabras: Sé valiente, no tengas miedo de los obstáculos engañosos, sino
contempla atentamente la Pasión de mi Hijo y de este modo vencerás. (DSF 449).
María, Madre de la Misericordia, está conmigo siempre, sobre todo en el
sufrimiento, así como estabas en la vía dolorosa de tu Hijo.
27
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
Jesús a Santa Faustina: Has de saber que cualquier cosa buena que hagas a
cualquier alma, la acojo como si la hubieras hecho a mí mismo (DSF 1768).
Santa Faustina: Aprendo a ser buena de Jesús de Aquel que es lo bondad misma,
para que pueda ser llamada hija del Padre Celestial (DSF 669). Un gran amor sabe
transformar las cosas pequeñas en cosas grandes y solamente el amor da valor a
nuestras acciones (DSF 303).
Señor Jesús. Maestro mío, haz que mis ojos, mis manos, mi boca, mi corazón...
sean misericordiosos. Transfórmame en misericordia.
Jesús a Santa Faustina: La causa de sus caídas está en que cuentas demasiado
contigo misma y te apoyas muy poco en mí (DSF 1488). Debes saber que por ti
misma no puedes nada (DSF 639). No eres capaz de recibir ni siquiera mis gracias
sin mi ayuda (DSF 738).
Santa Faustina: Jesús no me dejes sola (..). Tú sabes, Señor, lo débil que soy. Soy
un abismo de miseria, soy la nada misma. Por eso ¿qué habría de extraño si me
dejaras sola y yo cayera si me dejaras sola? (DSF 1489). Por eso Tú, oh Jesús,
tienes que estar continuamente conmigo como la madre cerca de su niño débil,
y aún más (DSF 264).
Que me apoye tu gracia, Señor, para que no caiga continuamente en los mismos
errores: y si caigo, ayuda que me levante y glorifique tu misericordia.
Jesús a Santa Faustina: Oh, cuánto me agrada la fe viva (DSF 1420). Deseo que
haya en ustedes más fe en el momento actual (DSF 352).
Santa Faustina: Te ruego ardientemente, Señor, que dejes reforzar mi fe para que
en mi gris vida cotidiana no me guíe según las consideraciones humanas, sino
según el espíritu. Oh, como todo atrae al hombre hacia la tierra, pero una fe viva
mantiene el alma en una esfera más alta y al amor propio le asigna el lugar que le
corresponde, es decir, el último (DSF 210).
Señor misericordioso, gracias por el santo Bautismo y la gracia de la fe. Vuelvo a
llamar continuamente: ¡Señor, creo, aumenta mi fe!
Jesús a Santa Faustina: Has de saber que el mayor obstáculo para la santidad es el
desaliento y la inquietud injustificada que te quitan la posibilidad de ejercitarte
28
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
en las virtudes ( ...)Yo estoy siempre dispuesto a perdonarte. Cada vez que me lo
pidas, glorificas mi misericordia (DSF 1488).
Santa Faustina: Oh Jesús mío, a pesar de tus gracias, siento y veo toda mi miseria.
Comienzo el día luchando y lo termino luchando; en cuanto aparto una dificultad,
en su lugar surgen diez por superar, pero no me aflijo por ello, porque sé muy
bien que éste es tiempo de la lucha y no de la paz. (DSF 606).
Santa Faustina: Entendí estas palabras en profundidad. Aquí no hay lugar para
ninguna duda. Mi semejanza a Jesús debe realizarse a través del sufrimiento y de
la humildad (DSF 268).
Jesús, manso y humilde de corazón, haz mi corazón según tu Corazón.
Santa Faustina: Oh Jesús mío, tú sabes qué esfuerzos son necesarios para tratar
sinceramente y con senci-llez, con aquellos de los cuales nuestra naturaleza huye,
o con los que nos hicieron sufrir consciente o inconscientemente, esto es
imposible humana-mente. En tales momentos más que en otras oca-siones, trato
de descubrirte a ti, Jesús, en aque-llas personas y por ti hago el bien para ellas
(comparar 766).
Oh Amor purísimo, reina totalmente en mi corazón y deja amar lo que supera la
medida humana (comparar 328).
29
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
Santa Faustina: A cada alma que me has confiado, oh Jesús, procuraré ayudarla
con la oración y el sacrificio, para que tu gracia pueda obrar en ella. Oh gran
Amante de las almas, oh Jesús mío, te agradezco por esta gran confianza, ya que
te has dignado confiar estas almas a nuestro cuidado (DSF 245).
Haz Señor misericordioso, que no perezca ni una sola alma de las que me has
confiado.
30
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
PRIMER DIA
Jesús dijo a Santa Faustina:
“Hoy, tráeme a toda la humanidad y especialmente a todos los pecadores, y
sumérgelos en el mar de mi misericordia. De esta forma, me consolarás de la
amarga tristeza en que me sume la perdida de las almas”. (DSF 1210)
Oración a Jesús
Jesús tan Misericordioso, cuya naturaleza es la de tener compasión de nosotros y
de perdonarnos, no mires nuestros pecados, sino la confianza que depositamos
en tu bondad infinita. Acógenos en la morada de tu compasivo Corazón y nunca
nos dejes salir de Él. Te lo suplicamos por tu amor que te une al Padre y al Espíritu
Santo. (DSF 1211a)
Contemplación
Oh omnipotencia de la Divina Misericordia salvación del hombre pecador, Tú eres
la misericordia y un mar de compasión ayudas a quien te ruega con humildad.
(DSF 1211b)
Oración al Padre
Padre eterno, mira con misericordia a toda la humanidad, y especialmente a los
pobres pecadores que están encerrados en el Corazón de Jesús lleno de
compasión, y por su dolorosa Pasión muéstranos Tu misericordia para que
alabemos su omnipotencia por los siglos de los siglos. Amen. (DSF 1211c)
SEGUNDO DÍA
Jesús dijo a Santa Faustina:
“Hoy, tráeme a las almas de los sacerdotes y las almas de los religiosos, y
sumérgelas en Mi misericordia insondable. Fueron ellas las que Me dieron
fortaleza para soportar Mi amarga Pasión. A través de ellas, como a través de
canales, Mi misericordia fluye hacia la humanidad.” (DSF 1212)
31
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
Oración a Jesús
Jesús misericordiosísimo, de quien procede todo bien, aumenta Tu gracia en
nosotros para que realicemos dignas obras de misericordia, de manera que todos
aquellos que nos vean, glorifiquen al Padre de misericordia que está en el cielo.
(DSF 1213a)
Contemplación
La fuente del amor de Dios, vive en los corazones limpios, purificados en el mar
de misericordia, resplandecientes como las estrellas, claros como la aurora. (DSF
1213b)
Oración al Padre
Padre eterno, mira con misericordia (59) al grupo elegido de Tu viña, a las almas
de los sacerdotes y a las almas de los religiosos; otórgales el poder de Tu
bendición. Por el amor del Corazón de Tu Hijo, en el cual están encerradas,
concédeles el poder de Tu luz para que puedan guiar a otros en el camino de la
salvación, y a una sola voz canten alabanzas a Tu misericordia sin límite por los
siglos de los siglos. Amen.
TERCER DÍA
Jesús dijo a Santa Faustina:
” “Hoy, tráeme a todas las almas devotas y fieles, y sumérgelas en el mar de Mi
misericordia. Estas almas Me consolaron a lo largo del Vía Crucis. Fueron una
gota de consuelo en medio de un mar de amargura.” (DSF 1214)
Oración a Jesús
Jesús infinitamente compasivo, que desde el tesoro de Tu misericordia les
concedes a todos Tus gracias en gran abundancia, acógenos en la morada de Tu
clementísimo Corazón y nunca nos dejes escapar de Él. Te lo suplicamos por el
inconcebible amor Tuyo con que Tu Corazón arde por el Padre celestial. (DSF
1215a)
Contemplación
Son impenetrables las maravillas de la misericordia, no alcanza sondearlas ni el
pecador ni el justo, miras a todos con compasión, y atraes a todos a tu amor. (DSF
1215b)
Oración al Padre
Padre eterno, mira con misericordia a las almas fieles como herencia de Tu Hijo y
por su dolorosa Pasión, concédeles Tu bendición y rodéalas con Tu protección
constante para que no pierdan el amor y el tesoro de la santa fe, sino que con
toda la legión de los ángeles y los santos, glorifiquen Tu infinita misericordia por
los siglos de los siglos. Amén. (DSF 1215c)
32
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
CUARTO DÍA
Jesús dijo a Santa Faustina:
“Hoy, tráeme a los paganos* y aquellos que todavía no Me conocen. También
pensaba en ellos durante Mi amarga Pasión y su futuro celo consoló Mi Corazón.
Sumérgelos en el mar de Mi misericordia.” (DSF 1216)
Oración a Jesús
Jesús compasivísimo, que eres la luz del mundo entero. Acoge en la morada de
Tu piadosísimo Corazón a las almas de los paganos que todavía no Te conocen.
Que los rayos de Tu gracia las iluminen para que también ellas unidas a nosotros,
ensalcen Tu misericordia admirable y no las dejes salir de la morada de Tu
compasivísimo Corazón. (DSF 1217a)
Contemplación La luz de Tu amor ilumine las tinieblas de las almas haz que estas
almas Te conozcan, y junto con nosotros glorifiquen Tú misericordia.
Oración al Padre
Padre eterno, mira con misericordia a las almas de los paganos y de los que
todavía no Te conocen, pero que están encerrados en el muy compasivo Corazón
de Jesús. Atráelas hacia la luz del Evangelio. Estas almas desconocen la gran
felicidad que es amarte. Concédeles que también ellas ensalcen la generosidad
de Tu misericordia por los siglos de los siglos. Amén. (DSF 1217c)
QUINTO DÍA
Jesús dijo a Santa Faustina:
“Hoy, atráeme a las almas de los herejes y de los cismáticos**, y sumérgelas en
el mar de Mi misericordia. Durante Mi amarga Pasión, desgarraron Mi cuerpo y
Mi Corazón, es decir, Mi Iglesia. Según regresan a la Iglesia, Mis llagas cicatrizan
y de este modo alivian Mi Pasión.” (DSF 1218)
Oración a Jesús
También para aquellos que rasgaron la vestidura de Tú unidad Brota de tu
Corazón la fuente de piedad. La omnipotencia de Tu misericordia, oh Dios,
Puede sacar del error también a estas almas. (DSF 1219a)
Contemplación
Jesús sumamente misericordioso, que eres la bondad misma, Tú no niegas la luz
a quienes Te la piden. Acoge en la morada de Tu muy compasivo Corazón a las
almas de los herejes y las almas de los cismáticos y llévalas con Tu luz a la unidad
con la Iglesia; no la dejes alejarse de la morada de Tu compasivísimo Corazón, sino
haz que también ellas glorifiquen la generosidad de Tu misericordia. (DSF 1219b)
Oración al Padre
Padre eterno, mira con misericordia a las almas de los herejes y de los cismáticos
que han malgastado Tus bendiciones y han abusado de Tus gracias por persistir
obstinadamente en sus errores. No mires sus errores, sino el amor de Tu Hijo y
33
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
su amarga Pasión que sufrió por ellos ya que también ellos están acogidos en el
sumamente compasivo Corazón de Jesús. Haz que también ellos glorifiquen Tu
gran misericordia por los siglos de los siglos. Amén. (DSF 1219c)
SEXTO DÍA
Jesús dijo a Santa Faustina:
“Hoy, tráeme a las almas mansas y humildes y a las almas de los niños pequeños,
y sumérgelas en Mi misericordia. Éstas son las almas más semejantes a Mi
Corazón. Ellas Me fortalecieron durante Mi amarga agonía. Las veía como
ángeles terrestres que velarían al pie de Mis altares. Sobre ellas derramo
torrentes enteros de gracias. Solamente el alma humilde es capaz de recibir Mi
gracia; concedo Mi confianza a las almas humildes.” (DSF 1220)
Oración a Jesús
Jesús, tan misericordioso, Tu Mismo has dicho: Aprendan de Mí que soy manso y
humilde de corazón. Acoge en la morada de Tu compasivísimo Corazón a las
almas mansas y humildes y a las almas de los niños pequeños. Estas almas llevan
a todo el cielo al éxtasis y son las preferidas del Padre celestial. Son un ramillete
perfumado ante el trono de Dios, de cuyo perfume se deleita Dios Mismo. Estas
almas tienen una morada permanente en Tu compasivísimo Corazón y cantan sin
cesar un himno de amor y misericordia por la eternidad. (DSF 1221)
Contemplación
De verdad el alma humilde y mansa ya aquí en la tierra respira el paraíso, y del
perfume de su humilde corazón se deleita el Creador Mismo. (DSF 1222)
Oración al Padre
Padre eterno, mira con misericordia a las almas mansas y humildes y a las almas
de los niños pequeños que están encerradas en el muy compasivo Corazón de
Jesús. Estas almas son las más semejantes a Tu Hijo. Su fragancia asciende desde
la tierra y alcanza Tu trono. Padre de misericordia y de toda bondad, Te suplico
por el amor que tienes por estas almas y el gozo que Te proporcionan, bendice al
mundo entero para que todas las almas canten juntas las alabanzas de Tu
misericordia por los siglos de los siglos. Amén. (DSF 1223)
SÉPTIMO DÍA
Jesús dijo a Santa Faustina:
“Hoy, tráeme a las almas que veneran y glorifican Mi misericordia de modo
especial y sumérgelas en Mi misericordia. Estas almas son las que más
lamentaron Mi Pasión y penetraron más profundamente en Mi espíritu. Ellas son
un reflejo viviente de Mi Corazón compasivo. Estas almas resplandecerán con un
resplandor especial en la vida futura. Ninguna de ellas irá al fuego del infierno.
Defenderé de modo especial a cada una en la hora de la muerte.” (DSF 1224)
34
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
Oración a Jesús
Jesús misericordiosísimo, cuyo Corazón es el amor mismo, acoge en la morada de
Tu compasivísimo Corazón a las almas que veneran y ensalzan de modo particular
la grandeza de Tu misericordia. Estas almas son fuertes con el poder de Dios
Mismo. En medio de toda clase de aflicciones y adversidades siguen adelante
confiadas en Tu misericordia, y unidas a Ti, cargan sobre sus hombros a toda la
humanidad. Estas almas no serán juzgadas severamente, sino que Tu
misericordia las protegerá en la hora de la muerte. (DSF 1225a)
Contemplación
El alma que ensalza la bondad de su Señor es por Él particularmente amada. Está
siempre al lado de la fuente viva y saca gracias de la Divina Misericordia. (DSF
1225b)
Oración al Padre
Padre eterno, mira con misericordia a aquellas almas que glorifican y veneran Tu
mayor atributo, es decir, Tu misericordia insondable y que están encerradas en el
compasivísimo Corazón de Jesús. Estas almas son un Evangelio viviente, sus
manos están llenas de obras de misericordia y sus corazones, desbordantes de
gozo, Te cantan, oh Altísimo, un cántico de misericordia. Te suplico, oh Dios,
muéstrales Tu misericordia según la esperanza y la confianza que han puesto en
Ti. Que se cumpla en ellas la promesa de Jesús quien les dijo: A las almas que
veneren esta infinita misericordia Mía, Yo Mismo las defenderé como Mi gloria
durante sus vidas y especialmente en la hora de la muerte. (DSF 1225c)
OCTAVO DÍA
Oración a Jesús
Jesús misericordiosísimo, Tu Mismo has dicho que deseas la misericordia; heme
aquí que llevo a la morada de Tu muy compasivo Corazón a las almas del
purgatorio, almas que Te son muy queridas, pero que deben pagar su culpa
adeudada a Tu justicia. Que los torrentes de Sangre y Agua que brotaron de Tu
Corazón, apaguen el fuego del purgatorio para que también allí sea glorificado el
poder de Tu misericordia. (DSF 1227a)
35
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
Contemplación
Del tremendo ardor del fuego del purgatorio se levanta un lamento a Tu
misericordia. Y reciben consuelo, alivio y refrigerio en el torrente de Sangre y
Agua derramado. (DSF 1227b)
Oración al Padre
Padre eterno, mira con misericordia a las almas que sufren en el purgatorio y que
están encerradas en el muy compasivo Corazón de Jesús. Te suplico por la
dolorosa Pasión de Jesús, Tu Hijo, y por toda la amargura con la cual su sacratísima
alma fue inundada, muestra Tu misericordia a las almas que están bajo Tu justo
escrutinio. No las mires sino a través de las heridas de Jesús, Tu amadísimo Hijo,
ya que creemos que Tu bondad y Tu compasión no tienen límites. (DSF 1227c)
NOVENO DÍA
Oración a Jesús
Jesús piadosísimo, que eres la compasión misma, Te traigo a las almas tibias a la
morada de Tu piadosísimo Corazón. Que estas almas heladas que se parecen a
cadáveres y Te llenan de gran repugnancia se calienten con el fuego de Tu amor
puro. Oh Jesús tan compasivo, ejercita la omnipotencia de Tu misericordia y
atráelas al mismo ardor de Tu amor y concédeles el amor santo, porque Tú lo
puedes todo. (DSF 1229a)
Contemplación
El fuego y el hielo no pueden estar juntos, ya que se apaga el fuego o se derrite
el hielo. Pero Tu misericordia, oh Dios, puede socorrer las miserias aún mayores.
(DSF 1229b)
Oración al Padre: Padre eterno, mira con misericordia a las almas tibias que, sin
embargo, están acogidas en el piadosísimo Corazón de Jesús. Padre de la
misericordia, Te suplico por la amarga Pasión de Tu Hijo y por su agonía de tres
horas en la cruz, permite que también ellas glorifiquen el abismo de Tu
misericordia. Amén (DSF 1229c)
36
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
DÍA PRIMERO
(Septiembre 26)
1. Oración inicial: Cada día rezamos el Credo y las letanías de la Divina Misericordia
(cfr. DSF 949-950)
37
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
Tiempo de meditación
- A la Virgen María:
Oh Virgen Inmaculada. Madre y maestra de Misericordia. Tu que dijiste a Santa
Faustina: "Su vida debe ser similar a la mía, silenciosa y escondida; deben unirse
continuamente a Dios, rogar por la humanidad y preparar al mundo para la
segunda venida de Dios" (Diario 625).
Tú, que has proclamado que “su misericordia llega de generación en generación”
(Lucas 1, 50). En esta etapa de la historia, ayúdanos a discernir los signos de los
tiempos, descubriendo la Voz y acción de Dios y responder obedientes, como tú,
a su acción salvífica, acogiendo la Redención
Te ruego, fervorosamente, dígnate incendiar mi corazón con el fuego del ardor
divino con que ardía tu inmaculado corazón en el momento de la Encarnación
(cfr. Diario 1114) para que sea, como Tú, y como Santa Faustina, tu hija amada,
un apóstol de la Misericordia en este "Tiempo de Misericordia", para atraer Su
misericordia a esta generación.
Avemaría...
38
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
Oh Jesús que hiciste de santa Faustina una gran devota de tu infinita misericordia,
concédeme por su intercesión, si fuere esto conforme a tu santísima voluntad, la
gracia de.................., que te pido. Yo, pecador, no soy digno de tu misericordia,
pero dígnate mirar el espíritu de entrega y sacrificio de santa Faustina y
recompensa sus virtudes atendiendo las súplicas que a través de ella te presento
confiando en ti.
Padrenuestro... Gloria...
Oh Sangre y Agua que brotaste del Corazón de Jesús como una Fuente de
Misericordia para nosotros, en Ti confío (3 veces)
(Puede rezarse la Coronilla)
- Propósito para este día. Qué sientes te pide el Señor en este día?
DÍA SEGUNDO
(Septiembre 27)
1. Oración inicial: Cada día rezamos el Credo y las letanías de la Divina Misericordia
(cfr. DSF 949-950)
3. La Palabra ilumina:
Porque yo recibí del Señor lo que también os transmití: que el Señor Jesús, la
noche en que fue entregado, tomó pan, 24 y dando gracias, lo partió y dijo: «Esto
es mi cuerpo, que se da por vosotros; haced esto en conmemoración mía». 25 Y
de la misma manera, después de cenar, tomó el cáliz, diciendo: «Este cáliz es la
nueva alianza en mi sangre; cuantas veces lo bebáis, hacedlo en conmemoración
39
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
mía». 26 Porque cada vez que coméis este pan y bebéis este cáliz, anunciáis la
muerte del Señor, hasta que venga. (1 Cor 11,23-27)
Tiempo de meditación
40
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
Y con la frente alta como un caballero, a pesar de que soy una joven débil. (Diario
1427)
- Oración para alcanzar gracias por medio de santa Faustina. (Como el día 1)
Intención especial: Por los gobernantes del mundo, por nuestra patria.
Padrenuestro... Gloria...
Oh Sangre y Agua que brotaste del Corazón de Jesús como una Fuente de
Misericordia para nosotros, en Ti confío (3 veces)
DÍA TERCERO
(septiembre 28)
1. Oración inicial: Cada día rezamos el Credo y las letanías de la Divina Misericordia
(cfr. DSF 949-950)
41
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
3. La Palabra ilumina:
Cristo se presenta como Sumo Sacerdote de los bienes futuros, a través de una
Tienda mayor y más perfecta, no fabricada por mano de hombre, es decir, no de
este mundo. Y penetró en el santuario una vez para siempre, no con sangre de
machos cabríos ni de novillos, sino con su propia sangre, consiguiendo una
redención eterna. Pues si la sangre de machos cabríos y de toros y la ceniza de
vaca santifica con su aspersión a los contaminados, en orden a la purificación de
la carne, ¡cuánto más la sangre de Cristo! (Hb 9,11-14).
Tiempo de meditación
42
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
Mi corazón es Tu morada
Oh Rey de eterna gloria,
Gobierna en mi corazón y reina en él
Como en un magnífico palacio.
- Oración para alcanzar gracias por medio de santa Faustina. (Como el día 1)
Intención especial: Por tu familia.
Padrenuestro... Gloria...
Oh Sangre y Agua que brotaste del Corazón de Jesús como una Fuente de
Misericordia para nosotros, en Ti confío (3 veces)
La Eucaristía es realmente «el misterio que resume todas las maravillas que Dios
realizó por nuestra salvación» (cf. santo Tomás de Aquino, De sacr. Euch., 1)
1. Oración inicial: Cada día rezamos el Credo y las letanías de la Divina Misericordia
(cfr. DSF 949-950)
43
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
3. La Palabra ilumina:
"El cáliz de bendición que bendecimos ¿no es acaso comunión con la sangre de
Cristo? Y el pan que partimos ¿no es comunión con el cuerpo de Cristo? (...) Todos
participamos de un solo pan" (1 Co 10, 16-17)
Tiempo de meditación
- Oración para alcanzar gracias por medio de santa Faustina. (Como el día 1)
44
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
Padrenuestro... Gloria...
Oh Sangre y Agua que brotaste del Corazón de Jesús como una Fuente de
Misericordia para nosotros, en Ti confío (3 veces)
(Puede rezarse la Coronilla)
DÍA QUINTO
(septiembre 30)
3. La Palabra ilumina:
"Quien come mi Carne y bebe mi Sangre habita en mí y yo en él. Lo mismo que
me ha enviado el Padre, que vive, y yo vivo por el Padre, también el que me coma
vivirá por mí" (Jn 6,56-57)
4. Del tesoro de la Iglesia: La comunión acrecienta nuestra unión con Cristo. (CEC
1391)
La Eucaristía es don infinito de amor; bajo los signos del pan y del vino
reconocemos y adoramos el sacrifico único y perfecto de Cristo, ofrecido por
nuestra salvación y por la de toda la humanidad. (San Juan Pablo II,
25 de junio del 2000)
45
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
ser lo que recibimos y para vivir en comunión con la Iglesia (Benedicto XVI, 22 de
junio).
Meditemos: Tiempo de meditación
- Oración para alcanzar gracias por medio de santa Faustina. (Como el día 1)
Intención especial: Por los misioneros
Padrenuestro... Gloria...
Oh Sangre y Agua que brotaste del Corazón de Jesús como una Fuente de
Misericordia para nosotros, en Ti confío (3 veces)
DÍA SEXTO
(octubre 1)
1. Oración inicial: Credo y las letanías de la Divina Misericordia (cfr. DSF 949-950)
46
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
trono de los cielos para unirme a ti. Lo que estás viendo es apenas una pequeña
muestra y tu alma se desmaya de amor. ¡Cuánto se asombrará tu corazón cuando
Me veas en toda la plenitud de la gloria! Quiero decirte, sin embargo, que la vida
eterna debe iniciarse ya aquí en la tierra a través de la Santa Comunión. Cada
Santa Comunión te hace más capaz para la comunión con Dios por toda la
eternidad. (Diario 1810)
3. La Palabra ilumina:
Salió del trono una voz que decía: Alabad a nuestro Dios todos sus siervos, y los
que le teméis, así pequeños como grandes.
Y oí como la voz de una gran multitud que decía: ¡Aleluya, porque el Señor nuestro
Dios Todopoderoso reina! Gocémonos y alegrémonos y démosle gloria; porque
han llegado las bodas del Cordero, y su esposa se ha preparado. Y a ella se le ha
concedido que se vista de lino fino, limpio y resplandeciente; porque el lino fino
es las acciones justas de los santos."
Y el ángel me dijo: Escribe: Bienaventurados los que son llamados a la cena de las
bodas del Cordero. (Apocalipsis 19,5.7-9)
Tiempo de meditación
47
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
- Oración para alcanzar gracias por medio de santa Faustina. (Como el día 1)
Intención especial: Por las personas necesitadas de ayuda material
Padrenuestro... Gloria...
Oh Sangre y Agua que brotaste del Corazón de Jesús como una Fuente de
Misericordia para nosotros, en Ti confío (3 veces)
-Propósito. Cada vez que adoramos nos unimos al cielo y traemos nuestro
pequeño cielo a la tierra.
¿Qué sientes el Señor espera de ti hoy?
DÍA SEPTIMO
(octubre 2)
48
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
“Me veo tan débil que, si no tuviera la Santa Comunión, caería continuamente;
una sola cosa me sostiene y es la Santa Comunión. De ella tomo fuerza, en ella
está mi fortaleza. Temo la vida si algún día no recibo la Santa Comunión. Tengo
miedo de mí misma. Jesús oculto en la Hostia es todo para mí. Del tabernáculo
tomo fuerza, poder, valor y luz; es aquí donde busco alivio en los momentos de
tormento. No sabría cómo glorificar a Dios si no tuviera la Eucaristía en mi
corazón”. (Diario, 1037).
3. La Palabra ilumina:
Yo confío en tu gran amor; mi corazón se alegra en tu salvación.
Canto salmos al Señor. ¡El Señor ha sido bueno conmigo!
(Salmo 13,5-6)
Tiempo de meditación
49
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
Oh Santa Hostia, Confiaré en Ti cuando mis obligaciones estén por encima de mis
fuerzas y el fracaso sea mi destino habitual.
Oh Santa Hostia, Confiaré en Ti cuando los golpes de los enemigos sean dirigidos
contra mí.
- Oración para alcanzar gracias por medio de santa Faustina. (Como el día 1)
Intención especial: Por los damnificados por las tragedias naturales.
Padrenuestro... Gloria...
Oh Sangre y Agua que brotaste del Corazón de Jesús como una Fuente de
Misericordia para nosotros, en Ti confío (3 veces)
(Puede rezarse la Coronilla)
- Propósito. ¿Qué puedes hacer para el Señor en este día?
50
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
DÍA OCTAVO
(octubre 3)
Reparar: compensar.
1. Oración inicial: Credo y las letanías de la Divina Misericordia (cfr. DSF 949-950)
3. La Palabra ilumina:
Ahora me alegro por los padecimientos que soporto por vosotros, y completo en
mi carne lo que falta a las tribulaciones de Cristo, en favor de su Cuerpo, que es
la Iglesia, (Colosenses 1,24)
51
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
Tiempo de meditación
- Oración para alcanzar gracias por medio de santa Faustina. (Como el día 1)
- Intención especial: Por las comunidades religiosas femeninas.
Padrenuestro... Gloria...
Oh Sangre y Agua que brotaste del Corazón de Jesús como una Fuente de
Misericordia para nosotros, en Ti confío (3 veces)
- Propósito para este día. Santa Faustina fue reparadora pues asumió las cruces
de cada día y las ofreció a Jesús Es bueno que te preguntes: ¿Qué le estoy
ofreciendo a Jesús? Tienes que ofrecerle lo que más te cuesta.
DÍA NOVENO
(octubre 4)
Interceder.
52
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
todo. En primer lugar, le digo lo que no diría jamás a ninguna criatura. Y luego
hablo de las necesidades de la Iglesia, de las almas de los pobres pecadores, de
cuánto necesitan su misericordia. Pero el tiempo pasa rápidamente. Jesús, tengo
que salir de aquí a los deberes que me esperan. Jesús me dice que queda todavía
un momento para despedirse. Una profunda mirada recíproca y por un rato nos
separamos aparentemente, pero nunca realmente. Nuestros corazones están
unidos continuamente; aunque por fuera estoy ocupada por distintos deberes,
pero la presencia de Jesús me sumerge constantemente en un profundo
recogimiento. (Diario 1806)
3. La Palabra ilumina:
Jesús elevó los ojos al cielo y exclamó: «Padre, ha llegado la hora; ¡glorifica a tu
Hijo para que tu Hijo te dé gloria a ti! Tú le diste poder sobre todos los mortales
y quieres que comunique la vida eterna a todos aquellos que le encomendaste.
Yo ruego por ellos. No ruego por el mundo, sino por los que son tuyos y que tú
me diste, pues todo lo mío es tuyo y todo lo tuyo es mío—; yo ya he sido
glorificado a través de ellos. Yo ya no estoy más en el mundo, pero ellos se quedan
en el mundo, mientras yo vuelvo a ti. Padre Santo, guárdalos en ese Nombre tuyo
que a mí me diste, para que sean uno como nosotros.
Por ellos ofrezco el sacrificio, para que también ellos sean consagrados en la
verdad. (Juan 17, 1-2. 9-11. 19).
Tiempo de meditación
Oh Cristo, dame las almas. Envía sobre mi todo lo que quieras, pero a cambio,
dame las almas. Deseo la salvación de las almas, deseo que las almas conozcan
Tu misericordia. No tengo nada para mí, porque he distribuido todo entre las
almas, así que en el día de juicio me presentaré delante de Ti sin nada, porque he
distribuido todo entre las almas y por eso no tendrás de qué juzgarme y ese día
nos encontraremos: el amor con la misericordia…… (Diario, 1426).
53
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
- Oración para alcanzar gracias por medio de santa Faustina. (Como el día 1)
- Intención especial: Por los enfermos, agonizantes y difuntos de la CDLM
Padrenuestro... Gloria...
Oh Sangre y Agua que brotaste del Corazón de Jesús como una Fuente de
Misericordia para nosotros
54
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
Tu sacratísimo costado,
Y de Tu Corazón brotaron torrentes de Sangre y Agua
Aquí está la Fuente viva de Tu Misericordia,
Aquí las almas encuentran consuelo y alivio.
55
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
Oh Santa Hostia, en la que está oculto el Cuerpo y la Sangre del Señor Jesús como
testimonio de la infinita misericordia hacia nosotros y, especialmente, hacia los
pobres pecadores...
Oh Santa Hostia, en la que está la misericordia del Padre, del Hijo y la del Espíritu
Santo hacia nosotros y, especialmente, a los pobres pecadores...
Oh Santa Hostia, en la que encierra la fuente de agua viva que brota de la infinita
misericordia hacia nosotros y, especialmente, para los pecadores...
Oh Santa Hostia, en la que está encerrado el fuego del amor purísimo que arde
del Seno del Padre Eterno, como del abismo de la infinita misericordia para
nosotros y, especialmente, para los pobres pecadores...
Oh Santa Hostia, en la que está guardado el remedio para todas nuestras
debilidades, remedio que mana de la infinita misericordia para nosotros y,
especialmente para los pobres pecadores...
Oh Santa Hostia en la que están encerrados todos los sentimientos del dulcísimo
Corazón de Jesús hacia nosotros y, especialmente hacia los pobres pecadores...
Oh Santa Hostia, nuestra única esperanza entre las tinieblas y las tormentas
interiores y exteriores...
Oh Santa Hostia, nuestra única esperanza entre las mentiras y las traiciones...
Oh Santa Hostia, nuestra única esperanza entre las tinieblas y la impiedad que
sumergen la tierra...
56
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
Oh Santa Hostia, nuestra única esperanza entre las fatigas y la vida gris de todos
los días...
Oh Santa Hostia, nuestra única esperanza entre los golpes de los enemigos y los
esfuerzos del infierno...
57
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
Oración Final
Culminemos nuestro homenaje con esta bella oración del Papa San Juan Pablo II
durante la ceremonia de canonización de Sor Faustina en la Plaza de San Pedro,
en Roma, el 30 de abril de 2000:
Y tú, Faustina, don de Dios a nuestro tiempo, don de la tierra de Polonia a toda la
Iglesia, concédenos percibir la profundidad de la misericordia divina, ayúdanos a
experimentarla en nuestra vida y a testimoniarla a nuestros hermanos.
Que tu mensaje de luz y esperanza se difunda por todo el mundo, mueva a los
pecadores a la conversión, elimine las rivalidades y los odios, y abra a los hombres
y las naciones a la práctica de la fraternidad. Hoy, nosotros, fijando, juntamente
contigo, nuestra mirada en el rostro de Cristo resucitado, hacemos nuestra tu
oración de abandono confiado y decimos con firme esperanza: “Cristo, Jesús, en
ti confío”.
Oración de San Juan Pablo II por la familia (Oración para todos los días)
Oh Dios, de quien procede toda paternidad en el cielo y en la tierra, Padre, que
eres Amor y Vida, haz que en cada familia humana sobre la tierra se convierta,
por medio de tu Hijo, Jesucristo, "nacido de Mujer", y del Espíritu Santo, fuente
de caridad divina, en verdadero santuario de la vida y del amor para las
generaciones porque siempre se renuevan. Haz que tu gracia guíe a los
pensamientos y las obras de los esposos hacia el bien de sus familias y de todas
las familias del mundo. Haz que las jóvenes generaciones encuentren en la familia
un fuerte apoyo para su humanidad y su crecimiento en la verdad y en el amor.
Haz que el amor, corroborado por la gracia del sacramento del matrimonio, se
demuestre más fuerte que cualquier debilidad y cualquier crisis, por las que a
veces pasan nuestras familias. Haz finalmente, te lo pedimos por intercesión de
la Sagrada Familia de Nazaret, que la Iglesia en todas las naciones de la tierra
pueda cumplir fructíferamente su misión en la familia y por medio de la familia.
Tú, que eres la Vida, la Verdad y El Amor, en la unidad del Hijo y del Espíritu santo.
Amén.
PRIMER DÍA:
Luces y sombras de la familia en la actualidad (Familiaris Consortio 9)
A la injusticia originada por el pecado —que ha penetrado profundamente
también en las estructuras del mundo de hoy— y que con frecuencia pone
obstáculos a la familia en la plena realización de sí misma y de sus derechos
fundamentales, debemos oponernos todos con una conversión de la mente y del
58
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
59
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
SEGUNDO DÍA:
Matrimonio y comunión entre Dios y los hombres (Familiaris Consortio 12)
La comunión de amor entre Dios y los hombres, contenido fundamental de la
Revelación y de la experiencia de fe de Israel, encuentra una significativa
expresión en la alianza esponsal que se establece entre el hombre y la mujer. Por
esta razón, la palabra central de la Revelación, «Dios ama a su pueblo», es
pronunciada a través de las palabras vivas y concretas con que el hombre y la
mujer se declaran su amor conyugal. “Su vínculo de amor se convierte en imagen
y símbolo de la Alianza que une a Dios con su pueblo. El mismo pecado que puede
atentar contra el pacto conyugal se convierte en imagen de la infidelidad del
pueblo a su Dios: la idolatría es prostitución, la infidelidad es adulterio, la
desobediencia a la ley es abandono del amor esponsal del Señor. Pero la
infidelidad de Israel no destruye la fidelidad eterna del Señor y por tanto el amor
siempre fiel de Dios se pone como ejemplo de las relaciones de amor fiel que
deben existir entre los esposos.
TERCER DÍA
Los hijos, don preciosísimo del matrimonio (Familiaris Consortio 14)
Según el designio de Dios, el matrimonio es el fundamento de la comunidad más
amplia de la familia, ya que la institución misma del matrimonio y el amor
conyugal están ordenados a la procreación y educación de la prole, en la que
encuentran su coronación. En su realidad más profunda, el amor es
esencialmente don y el amor conyugal, a la vez que conduce a los esposos al
recíproco «conocimiento» que les hace «una sola carne», no se agota dentro de
la pareja, ya que los hace capaces de la máxima donación posible, por la cual se
convierten en cooperadores de Dios en el don de la vida a una nueva persona
humana. De este modo los cónyuges, a la vez que se dan entre sí, dan más allá de
sí mismos la realidad del hijo, reflejo viviente de su amor, signo permanente de la
unidad conyugal y síntesis viva e inseparable del padre y de la madre. Al hacerse
padres, los esposos reciben de Dios el don de una nueva responsabilidad. Su amor
paterno está llamado a ser para los hijos el signo visible del mismo amor de Dios,
«del que proviene toda paternidad en el cielo y en la tierra». Sin embargo, no se
debe olvidar que incluso cuando la procreación no es posible, no por esto pierde
su valor la vida conyugal. La esterilidad física, en efecto, puede dar ocasión a los
esposos para otros servicios importantes a la vida de la persona humana, como
por ejemplo la adopción, las diversas formas de obras educativas, la ayuda a otras
familias, a los niños pobres o minusválidos.
CUARTO DÍA
¡Familia, sé lo que eres! (Familiaris Consortio 17).
En el designio de Dios Creador y Redentor la familia descubre no sólo su
«identidad», lo que «es», sino también su «misión», lo que puede y debe «hacer».
El cometido, que ella por vocación de Dios está llamada a desempeñar en la
historia, brota de su mismo ser y representa su desarrollo dinámico y existencial.
Toda familia descubre y encuentra en sí misma la llamada imborrable, que define
60
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
QUINTO DÍA:
La familia, célula primera y vital de la sociedad (Familiaris Consortio 42).
«El Creador del mundo estableció la sociedad conyugal como origen y
fundamento de la sociedad humana»; la familia es por ello la «célula primera y
vital de la sociedad». La familia posee vínculos vitales y orgánicos con la sociedad,
porque constituye su fundamento y alimento continuo mediante su función de
servicio a la vida. En efecto, de la familia nacen los ciudadanos, y éstos encuentran
en ella la primera escuela de esas virtudes sociales, que son el alma de la vida y
del desarrollo de la sociedad misma. Así la familia, en virtud de su naturaleza y
vocación, lejos de encerrarse en sí misma, se abre a las demás familias y a la
sociedad, asumiendo su función social.
SEXTO DÍA
Matrimonio y Eucaristía (Familiaris Consortio 57)
El deber de santificación de la familia cristiana tiene su primera raíz en el bautismo
y su expresión máxima en la Eucaristía, a la que está íntimamente unido el
matrimonio cristiano. El Concilio Vaticano II ha querido poner de relieve la
especial relación existente entre la Eucaristía y el matrimonio, pidiendo que
habitualmente éste se celebre «dentro de la Misa» [144]. Volver a encontrar y
profundizar tal relación es del todo necesario, si se quiere comprender y vivir con
mayor intensidad la gracia y las responsabilidades del matrimonio y de la familia
cristiana. La Eucaristía es la fuente misma del matrimonio cristiano. En efecto, el
sacrificio eucarístico representa la alianza de amor de Cristo con la Iglesia, en
cuanto sellada con la sangre de la cruz [145]. Y en este sacrificio de la Nueva y
Eterna Alianza los cónyuges cristianos encuentran la raíz de la que brota, que
configura interiormente y vivifica desde dentro, su alianza conyugal. En cuanto
representación del sacrificio de amor de Cristo por su Iglesia, la Eucaristía es
manantial de caridad. Y en el don eucarístico de la caridad la familia cristiana halla
el fundamento y el alma de su «comunión» y de su «misión», ya que el Pan
61
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
SÉPTIMO DÍA
El Sacramento de la conversión y reconciliación (Familiaris Consortio 58)
Parte esencial y permanente del cometido de santificación de la familia cristiana
es la acogida de la llamada evangélica a la conversión, dirigida a todos los
cristianos que no siempre permanecen fieles a la «novedad» del bautismo que
los ha hecho «santos». Tampoco la familia es siempre coherente con la ley de la
gracia y de la santidad bautismal, proclamada nuevamente en el sacramento del
matrimonio. El arrepentimiento y perdón mutuo dentro de la familia cristiana que
tanta parte tienen en la vida cotidiana, hallan su momento sacramental específico
en la Penitencia cristiana. Respecto de los cónyuges cristianos, así escribía Pablo
VI en la encíclica Humanae vitae: «Y si el pecado les sorprendiese todavía, no se
desanimen, sino que recurran con humilde perseverancia a la misericordia de
Dios, que se concede en el Sacramento de la Penitencia». La celebración de este
sacramento adquiere un significado particular para la vida familiar. En efecto,
mientras mediante la fe descubren cómo el pecado contradice no sólo la alianza
con Dios, sino también la alianza de los cónyuges y la comunión de la familia, los
esposos y todos los miembros de la familia son alentados al encuentro con Dios
«rico en misericordia», el cual, infundiendo su amor más fuerte que el pecado,
reconstruye y perfecciona la alianza conyugal y la comunión familiar.
OCTAVO DÍA
Plegaria y vida (Familiaris Consortio 62)
No hay que olvidar nunca que la oración es parte constitutiva y esencial de la vida
cristiana considerada en su integridad y profundidad. Más aún, pertenece a
nuestra misma «humanidad» y es «la primera expresión de la verdad interior del
hombre, la primera condición de la auténtica libertad del espíritu». Por ello la
plegaria no es una evasión que desvía del compromiso cotidiano, sino que
constituye el empuje más fuerte para que la familia cristiana asuma y ponga en
práctica plenamente sus responsabilidades como célula primera y fundamental
de la sociedad humana. En ese sentido, la efectiva participación en la vida y misión
de la Iglesia en el mundo es proporcional a la fidelidad e intensidad de la oración
con la que la familia cristiana se una a la Vid fecunda, que es Cristo. De la unión
vital con Cristo, alimentada por la liturgia, de la ofrenda de sí mismo y de la
oración deriva también la fecundidad de la familia cristiana en su servicio
específico de promoción humana, que no puede menos de llevar a la
transformación del mundo.
62
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
Acto de Fe
Credo de los Apóstoles
DÍA PRIMERO
Dios nos promete a la Santísima Virgen María como Amparo contra satanás.
Génesis 3
“Dijo Dios a la serpiente: por haber engañado a Adán y a Eva, ¡maldita eres entre
todos los animales del campo! Te arrastrarás sobre el vientre y comerás tierra.
Pondré a una mujer como enemiga tuya, y el hijo de ella será enemigo de tu raza,
y a ti te aplastará la cabeza.
Dichosa eres Virgen María, que llevaste en tus entrañas a nuestro Salvador.
Bendice alma mía al Señor, porque es eterna su misericordia.
63
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
Oración: Padre Misericordiosos que nos diste a María como Amparo de los
cristianos, por ella te suplicamos nos defiendas de satanás, de la enfermedad, de
la calumnia y de la envidia; y de todo peligro, por Cristo Nuestro Señor. Amén
Oración final para todos los días
Virgencita Santa, la eterna elegida por Dios
para ser Madre de los huérfanos,
salud de los enfermos,
Amparo de los afligidos
Y abogada de los pecadores arrepentidos:
Acuérdate que también eres ¡Madre Nuestra!
Míranos con ojos de misericordia,
danos paciencia en los sufrimientos,
remedio en nuestras necesidades
especialmente lo que hoy te pedimos
(Hacer petición de las gracias que se necesiten).
DIA SEGUNDO
Para hoy la Santísima Virgen nos enseña a tener fe en la Oración que nos alcanza
lo que pedimos.
Mateo 18: “Dijo Jesús: Si dos o más se juntan para pedir algo en la Oración, mi
Padre que está en el Cielo se lo concederá. Pidan y Dios les dará, busquen y
encontraran, llamen a la puerta y se les abrirá: porque el que pide, recibe; el que
busca, encuentra y al que llame, se le abre. Los discípulos se reunían para orar
acompañados de María, la Madre de Jesús”.
Dichosa eres Virgen María: El Poderoso ha hecho obras grandes por Ti.
(Se hace la petición) Padre Nuestro, Ave María, Gloria, Ave María Purísima…
DIA TERCERO
Saludemos hoy a María con el Ángel; y que ella nos dé a Jesús con las gracias que
le pedimos.
64
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
Lucas 1: “El Ángel llegó a donde Ella estaba y le dijo: te saludo, María, llena de
gracia, el Señor está contigo, María, llena de gracia, el Señor está contigo: Dios te
ha bendecido más que a todas las mujeres: han encontrado favor delante de Dios,
tendrás un hijo y le pondrás por nombre: Jesús, María dijo: soy la Esclava del
Señor: que se cumpla en mi lo que Dios quiere, según Tú Palabra”.
Dichosa eres Oh María, has recibido la bendición del Señor, Dichosos lo que
escuchan la Palabra de Dios y la cumplen.
(Se hace la petición) Padre Nuestro, Ave María, Gloria, Ave María Purísima…
DIA CUARTO
En este día busquemos con la Virgen a Cristo, dador de las gracias que pedimos.
Lucas 2: “Cuando Jesús cumplió doce años fue a Jerusalén con sus padres a la
fiesta de Pascua. Jesús se quedó en el templo con los doctores de la ley sin que
sus padres se dieran cuenta, después de tres días de buscarlo lo encontraron.
María y José escuchando y haciendo preguntas a los doctores: todos se
admiraban de su inteligencia. Su Madre guardaba en su corazón las Palabras de
Jesús”.
Bendita eres Virgen María, porque llevaste al Creador del universo.
(Se hace la petición) Padre Nuestro, Ave María, Gloria, Ave María Purísima…
DIA QUINTO
Confiemos hoy en la Virgen que aboga por nosotros ante su hijo, y nos alcanza lo
que pedimos.
Juan 2: “Hubo una boda en Caná. La Madre de Jesús fue invitada con Jesús y sus
discípulos. Se acabó el vino y la Madre de Jesús le dijo: ya no tienen vino. Jesús le
contesta: ¿Mujer porque me dices a mí? Todavía no ha llegado mi hora. Pero ella
ordenó a los meseros: hagan lo que Él les diga. Después que Jesús cambio el agua
en vino, sus discípulos creyeron en Él”.
Madre dichosa, Virgen María, ruega por nosotros al Señor.
(Se hace la petición) Padre Nuestro, Ave María, Gloria, Ave María Purísima…
Oración: Señor Jesucristo, por la Virgen del Amparo, Madre tuya y Madre nuestra,
perdónanos, escúchanos, y concédenos nuestras humildes peticiones. Amén
65
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
DIA SEXTO
Unidos a María confiemos en Dios que no abandona a las flores ni a las aves,
menos a nosotros, sus hijos.
Mateo 6: “No se afanen ustedes por la comida, la bebida o el vestido. Miren las
aves que no siembran ni cosechan; y las flores que no hilan ni tejen: y con todo,
el Padre Celestial las alimenta y cuida. El Padre del cielo sabe que ustedes
necesitan todo eso. Pidan el reino de Dios, y recibirán también todas esas cosas”.
Feliz tú Virgen María, que has creído; en ti se cumplirá lo que Dios ha dicho.
(Se hace la petición) Padre Nuestro, Ave María, Gloria Ave María Purísima…
DIA SEPTIMO
Con María nuestra Madre estemos firmes junto a la cruz, fuente de misericordia
y bondad.
Juan 19: “Junto a la Cruz de Jesús estaban su Madre y otras mujeres. Cuando Jesús
vio a su Madre con el discípulo a quien tanto amaba, dijo a su Madre: Mujer, ahí
tienes a tu hijo. Luego dijo al discípulo: Ahí tienes a tu Madre”
Junto a la Cruz del Señor estaba María Reina del Cielo; con su alma atravesada por
la espada del dolor.
(Se hace la petición) Padre Nuestro, Ave María, Gloria, Ave María Purísima…
DIA OCTAVO
Hoy la Virgen nos llena de esperanza de alcanzar con Ella la corona del cielo
Apocalipsis 12: “Apareció en el cielo una gran señal: una mujer revestida del sol;
la luna debajo de sus pies; y en la cabeza una corona de doce estrellas. Esta mujer
iba a dar a luz y gritaba con dolores de parto. Apareció otra señal: un gran dragón
rojo de siete cabezas; se detuvo delante de la mujer, para devorar su criatura tan
pronto naciera. La mujer tuvo un hijo varón. Luego a su hijo le fue quitado y
llevado a Dios, su trono; y la mujer subió donde Dios le había preparado su lugar”.
Venid benditos de mi Padre a poseer el Reino. Dichosa eres Virgen María porque
has creído.
(Se hace la petición) Padre Nuestro, Ave María, Gloria, Ave María Purísima…
66
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
Oración: Señor Dios Nuestro, por tu Madre Santísima concédenos el bien que te
pedimos para esta vida, y luego, la vida eterna. Amén
DIA NOVENO
María coronada en el cielo, desde allá mira, bendice y ampara a sus hijos.
Lucas 1, 46: “Entonces dijo María: mi alma alaba al Señor, y mi Espíritu se alegra
en Dios mi Salvador, porque ha tenido en cuenta a su pobre esclava y todos me
llamarán feliz. El Señor hijo en mí, grandes cosas: su nombre es Santo. Tendrá
siempre misericordia de los que le temen, a los humildes los engrandece, colma
de bienes a los que tienen hambre”.
Dios mío, ven en nuestro auxilio - Señor, date prisa en socorrerme. Por María
nuestra Madre, escucha nuestro clamor.
Oración: Padre Celestial, concede a nosotros tus hijos, la gracia de gozar la salud
de alma y cuerpo; y por amor a la Virgen María del Amparo, líbranos de las
tristezas presentes y llévanos a las eternas alegrías del cielo. Por Cristo Nuestro
Señor. Amén
DIA PRIMERO
¡Oh benignísimo Jesús, así como consolaste a tu padre amado en las perplejidades
e incertidumbres que tuvo, dudando si abandonar a tu Santísima Madre su
esposa, así te suplicamos humildemente por intercesión de San José nos
concedas mucha prudencia y acierto en todos los casos dudosos y angustias de
nuestra vida, para que siempre acertemos con tu santísima voluntad!
67
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
Antífona
Tenía el mismo Jesús, al empezar su vida pública, cerca de treinta años, hijo,
según se pensaba de José. San José, ruega por nosotros. Para que seamos dignos
de alcanzar las promesas de Jesucristo.
Oración Final
¡Oh Dios que con inefable providencia te dignaste escoger al bienaventurado José
por Esposo de tu Madre Santísima; concédenos que, pues le veneramos como
protector en la tierra, merezcamos tenerle como protector en los cielos. Oh Dios
que vives y reinas por los siglos de los siglos! Amén. Novena a San José
DÍA SEGUNDO
¡Oh benignísimo Jesús, así como consolaste a tu padre amado en la pobreza y
desamparo de Belén, con tu nacimiento, y con los cánticos de los Ángeles y visitas
de los pastores, así también te suplicamos humildemente por intercesión de San
José, que nos concedas llevar con paciencia nuestra pobreza y desamparo en esta
vida, y que alegres nuestro espíritu con tu presencia y tu gracia, y la esperanza de
la gloria!
DIA TERCERO
¡Oh benignísimo Jesús, así como consolaste a tu amado padre en el doloroso
misterio de la Circuncisión, recibiendo de él el dulce nombre de Jesús, así te
suplicamos humildemente, por intercesión de San José, nos concedas pronunciar
siempre con amor y respeto tu santísimo nombre, llevarlo en el corazón, honrarlo
en la vida, y profesar con obras y palabras que tú fuiste nuestro Salvador y Jesús!
DIA CUARTO
¡Oh benignísimo Jesús, así como consolaste a tu padre amado de la pena que le
causó la profecía de Simeón, mostrándole el innumerable coro de los Santos, así
te suplicamos humildemente, por intercesión de San José que nos concedas la
gracia de ser de aquellos para quienes tu sirves, no de ruina, sino de resurrección,
y que correspondamos fielmente a tu gracia para que vayamos a tu gloria!
68
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
DIA QUINTO
¡Oh benignísimo Jesús, así como tu amado padre te condujo de Belén a Egipto
para librarte del tirano Herodes, así te suplicamos humildemente, por intercesión
de San José, que nos libres de los que quieren dañar nuestras almas o nuestros
cuerpos, nos des fortaleza y salvación en nuestras persecuciones, y en medio del
destierro de esta vida nos protejas hasta que volemos a la patria!
DIA SEXTO
¡Oh benignísimo Jesús, así como tu padre amado te sustentó en Nazaret, y en
cambio tú le premiaste en tu santísima compañía tantos años, con tu doctrina y
tu dulce conversación, así te rogamos humildemente, por intercesión de San José
nos concedas el sustento espiritual de tu gracia, y de tu santa comunión, y que
vivamos santa y modestamente, como tú en Nazaret!
DIA SEPTIMO
¡Oh benignísimo Jesús, así como por seguir la voluntad de tu padre celestial
permitiste que tu amado padre en la tierra padeciese el vehementísimo dolor de
perderte por tres días, así te suplicamos humildemente, por intercesión de San
José, que antes queramos perder todas las cosas y disgustar a cualquier amigo,
que dejar de hacer tu voluntad; que jamás te perdamos a ti por el pecado mortal,
¡o que si por desgracia te perdiésemos te hallemos mediante una buena
confesión!
DIA OCTAVO
!Oh benignísimo Jesús, que en la hora de su muerte consolaste a tu glorioso
padre, asistiendo juntamente con tu Madre su esposa a su última agonía, te
suplicamos humildemente, por intercesión de San José, que nos concedas una
muerte semejante a la suya asistido de tu bondad, de tu Santísima Madre y del
mismo glorioso Patriarca protector de los moribundos, pronunciando al morir
vuestros santísimos nombres, Jesús, María y José!
DIA NOVENO
¡Oh benignísimo Jesús, así como has elegido por medio de tu Vicario en la tierra
a tu amado padre para protector de tu Santa Iglesia Católica, así te suplicamos
humildemente por intercesión de San José, nos concedas el que seamos
verdaderos y sinceros católicos, que profesemos sin error la fe católica, que
vivamos sin miedo una vida digna de la fe que profesamos, y que jamás puedan
los enemigos ni aterrarnos con persecuciones, ni con engaños seducirnos y
apartamos de la única y verdadera religión que es la Católica!.
69
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
NOVENA DE NAVIDAD
Pasajes Bíblicos que nos dan la verdadera historia de la primera NAVIDAD
1. Mateo 1,18-25
2. Lucas 1,26-38
3. Lucas 1, 39-56
4. Lucas 1, 67-80
5. Lucas 2, 1-7
6. Lucas 2, 8-20
7. Mateo 2, 1-12
8. Mateo 2, 13-23
9. Lucas 2, 51-52
70
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
I VISPERAS
HIMNO
Dichosa tú, que, entre todas,
fuiste por Dios sorprendida
con tu lámpara encendida
para el banquete de bodas.
Enséñanos a vivir,
ayúdenos tu oración,
danos en la tentación
la gracia de resistir.
Honor a la Trinidad
por esta limpia victoria,
y gloria por esta gloria
que alegra a la humanidad. Amén.
SALMODIA
Salmo 112
ALABADO SEA EL NOMBRE DEL SEÑOR
71
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
Salmo 147
RESTAURACIÓN DE JERUSALÉN
72
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
Éste es el plan
que había proyectado realizar por Cristo
cuando llegase el momento culminante:
hacer que todas las cosas
tuviesen a Cristo por cabeza,
las del cielo y las de la tierra.
RESPONSORIO BREVE
V. Mi porción es el Señor, dice mi alma.
R. Mi porción es el Señor, dice mi alma.
73
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
R. Dice mi alma.
CÁNTICO EVANGÉLICO
Antífona
Al llegar el Esposo la virgen prudente entró con la lámpara encendida al
banquete de bodas de su Señor.
PRECES
Alabemos con gozo a Cristo, que elogió a los que permanecen vírgenes, a causa
del reino de Dios, y supliquémosle diciendo:
Jesús, rey de las vírgenes, escúchanos.
Señor Jesucristo, tú que como esposo amante colocaste junto a ti a la Iglesia sin
mancha ni arruga,
haz que sea siempre santa e inmaculada.
Señor Jesucristo, a cuyo encuentro salieron las vírgenes santas con sus lámparas
encendidas,
no permitas que falte nunca el óleo de la fidelidad en las lámparas de las
vírgenes que se han consagrado a ti.
Tú que concedes hoy a tu pueblo alegrarse por la fiesta de Santa Faustina, virgen,
concédele también gozar siempre de su valiosa intercesión.
Oración
Tú, Señor, que te complaces en habitar en los limpios y sinceros de corazón, por
intercesión de Santa Faustina., virgen, concédenos vivir de tal manera que
merezcamos tenerte siempre entre nosotros. Por nuestro Señor Jesucristo, tu
Hijo.
74
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
OFICIO DE LECTURA
HIMNO
Esta mujer no quiso
tomar varón ni darle su ternura,
selló su compromiso
con otro amor que dura
sobre el amor de toda criatura.
Y tanto se apresura
a zaga de la huella del Amado,
que en él se transfigura,
y el cuerpo anonadado
ya está por el amor resucitado.
SALMODIA
Ant. 1: Virgen ilustre, sensata, prudente en tu decisión, tienes como esposo del
alma al Verbo inmaculado. (T. P. Aleluya.)
Salmo 18 A
El cielo proclama la gloria de Dios,
el firmamento pregona la obra de sus manos:
el día al día le pasa el mensaje,
la noche a la noche se lo murmura.
75
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
Ant. 1: Virgen ilustre, sensata, prudente en tu decisión, tienes como esposo del
alma al Verbo inmaculado. (T. P. Aleluya.)
Ant. 2: Por amor a mi Señor Jesucristo, tuve en nada los bienes de este mundo y
del tiempo presente. (T. P. Aleluya.)
Salmo 44
I
Me brota del corazón un poema bello,
recito mis versos a un rey;
mi lengua es ágil pluma de escribano.
Ant. 2: Por amor a mi Señor Jesucristo, tuve en nada los bienes de este mundo y
del tiempo presente. (T. P. Aleluya.)
76
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
II
Escucha, hija, mira: inclina el oído,
olvida tu pueblo y la casa paterna:
prendado está el rey de tu belleza,
póstrate ante él, que él es tu señor.
La ciudad de Tiro viene con regalos,
los pueblos más ricos buscan tu favor.
PRIMERA LECTURA
De la primera carta del apóstol san Pablo a los Corintios 7, 25-40
LA VIRGINIDAD CRISTIANA
Hermanos: Respecto al celibato no tengo órdenes del Señor, sino que doy mi
parecer como hombre de fiar que soy, por la misericordia del Señor. Estimo que
es un bien, por la necesidad actual: quiero decir que es un bien vivir así. ¿Estás
unido a una mujer? No busques la separación. ¿Estás libre? No busques mujer;
aunque si te casas, no haces mal; y si una soltera se casa, tampoco hace mal.
Pero estos tales sufrirán la tribulación de la carne. Yo respeto vuestras razones.
Os digo esto, hermanos: el momento es apremiante. Queda como solución:
que los que tienen mujer vivan como si no la tuvieran; los que lloran, como si no
lloraran; los que están alegres, como si no lo estuvieran; los que compran, como
si no poseyeran; los que negocian en el mundo, como si no disfrutaran de él:
porque la presentación de este mundo se termina.
Quiero que os ahorréis preocupaciones: el célibe se preocupa de los asuntos
del Señor, buscando contentar al Señor; en cambio, el casado se preocupa de los
77
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
RESPONSORIO
SEGUNDA LECTURA
Del diario de SANTA FAUSTINA
Oh Dios, como deseo que las almas lleguen a conocerte y ver que la has creado
por tu amor insondable. Oh mi creador y Señor, siento que voy a quitar el velo
del cielo para que la tierra no dude de tu bondad.
78
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
Haz de mí, Jesús, una ofrenda pura y agradable ante el rostro de tu Padre. Jesús,
transfórmame, miserable y pecador como soy, en ti mismo (pues todo lo puede)
y entrégame a tu Padre eterno. Quiero convertirme en una hostia sacrificial ante
ti, pero una hostia ordinaria para la gente. Quiero que la fragancia de mi sacrificio
sea conocida solo por vosotros. Oh Dios eterno, un fuego inextinguible de súplica
por tu misericordia arde dentro de mí. Se y entiendo que esta es mi tarea, aquí y
en la eternidad. Tú mismo me has dicho que hable de esta gran misericordia y de
tu bondad.
Oración
CONCLUSIÓN
V. El Señor nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos lleve a la vida eterna.
R. Amén
LAUDES
INVITATORIO
V. Señor abre mis labios
R. Y mi boca proclamará tu alabanza
79
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
HIMNO
Cantaré eternamente la misericordia del Señor
Delante de todo el pueblo,
Ya que éste es el mayor atributo de Dios
Y para nosotros un milagro continuo.
80
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
SALMODIA
Ant. 1. Mi alma está unida a ti y tu diestra me sostiene. Aleluya.
Salmo 62
¡Oh Dios!, tú eres mi Dios, por ti madrugo,
mi alma está sedienta de ti;
mi carne tiene ansias de ti,
como tierra reseca, agostada, sin agua.
En el lecho me acuerdo de ti
y velando medito en ti,
porque fuiste mi auxilio,
y a las sombras de tus alas canto con júbilo;
mi alma está unida a ti,
y tu diestra me sostiene.
Ant. 2. El Señor te ha dado su fuerza; por ello serás bendita para siempre.
Aleluya
Cántico
Dn. 3,57-88. 56
81
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
82
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
Ant. 2. El Señor te ha dado su fuerza; por ello serás bendita para siempre.
Aleluya
Salmo 149
Cantad al Señor un cántico nuevo,
resuene su alabanza en la asamblea de los fieles;
que se alegre Israel por su creador, los hijos de Sión por su rey.
LECTURA BREVE
(Rm 12, 1-2)
83
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
RESPONSORIO BREVE
V. Dios la socorre al despuntar la aurora
R. Dios la socorre al despuntar la aurora
CÁNTICO EVANGÉLICO
Ant. La señal por la que conocerán que sois discípulos míos será que os améis
unos a otros.
Cántico de Zacarías
Lc 1, 68-79
EL MENSAJE Y SU PRECURSOR
Bendito sea el Señor, Dios de Israel,
porque ha visitado y redimido a su pueblo,
suscitándonos una fuerza de salvación
en la casa de David, su siervo,
según lo había predicho desde antiguo
por boca de sus santos Profetas.
84
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
Ant. La señal por la que conocerán que sois discípulos míos será que os améis
unos a otros.
PRECES
Glorifiquemos a Cristo, esposo y corona de las vírgenes, y supliquémosle
diciendo:
Jesús, corona de las vírgenes, escúchanos.
Por intercesión de las santas vírgenes que te sirvieron siempre con fidelidad,
consagradas a ti en cuerpo y alma, ayúdanos, Señor, a que los bienes de este
mundo que pasa no nos separen de tu amor eterno.
Señor Jesús, esposo que has de venir y a quien las vírgenes prudentes
esperaban,
concédenos que aguardemos tu retorno glorioso con una esperanza activa.
Por intercesión de Santa Faustina, que fue virgen sensata y una de las
prudentes,
concédenos, Señor, la verdadera sabiduría y la pureza de costumbres.
85
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
Con sencillez y humildad digamos la oración que Jesús nos enseñó: Padre
nuestro.
ORACION
Señor Dios todopoderoso, que nos has revelado que el amor a Dios y al prójimo
es el compendio de toda tu ley, haz que, imitando la caridad de Santa Faustina,
seamos contados un día entre los elegidos de tu reino, por nuestro Señor
Jesucristo, Tu Hijo que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es
Dios por los siglos de los siglos. Amén
CONCLUSIÓN
V. El Señor nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos lleve a la vida eterna.
R. Amén
II VÍSPERAS
HIMNO
Honor a la Trinidad
por esta limpia victoria,
y gloria por esta gloria
que alegra a la humanidad. Amén.
SALMODIA
Ant. 1. Quiero ser solamente tuya, oh Cristo esposo, a ti vengo con mi lámpara
encendida. (T. P. Aleluya.)
Salmo 121
LA CIUDAD SANTA DE JERUSALÉN
86
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
Ant. 1. Quiero ser solamente tuya, oh Cristo esposo, a ti vengo con mi lámpara
encendida. (T. P. Aleluya.)
Ant. 2. Dichosos los limpios de corazón, porque ellos verán a Dios. (T. P. Aleluya.)
Salmo 126
EL ESFUERZO HUMANO ES INÚTIL SIN DIOS
Sois edificación de Dios. (1 Co 3, 9)
Si el Señor no construye la casa,
en vano se cansan los albañiles;
si el Señor no guarda la ciudad,
en vano vigilan los centinelas.
87
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
Ant. 2. Dichosos los limpios de corazón, porque ellos verán a Dios. (T. P. Aleluya.)
Ant. 3. Mi alma se siente firme, está cimentada en Cristo, el Señor. (T. P. Aleluya.)
Éste es el plan
que había proyectado realizar por Cristo
cuando llegase el momento culminante:
hacer que todas las cosas
tuviesen a Cristo por cabeza,
las del cielo y las de la tierra.
88
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
RESPONSORIO BREVE
CÁNTICO EVANGÉLICO
Antífona Ven, esposa de Cristo, recibe la corona eterna que el Señor te trae
preparada. (T. P. Aleluya.)
PRECES
Alabemos con gozo a Cristo, que elogió a los que permanecen vírgenes, a causa
del reino de Dios, y supliquémosle diciendo:
Jesús, rey de las vírgenes, escúchanos.
Señor Jesucristo, tú que como esposo amante colocaste junto a ti a la Iglesia sin
mancha ni arruga,
haz que sea siempre santa e inmaculada.
Señor Jesucristo, a cuyo encuentro salieron las vírgenes santas con sus lámparas
encendidas,
no permitas que falte nunca el óleo de la fidelidad en las lámparas de las
vírgenes que se han consagrado a ti.
Tú que concedes hoy a tu pueblo alegrarse por la fiesta de santa N., virgen,
concédele también gozar siempre de su valiosa intercesión.
89
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
Oración
Tú, Señor, que te complaces en habitar en los limpios y sinceros de corazón, por
intercesión de Santa Faustina, virgen, concédenos vivir de tal manera que
merezcamos tenerte siempre entre nosotros. Por nuestro Señor Jesucristo, Tu
Hijo que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios por los
siglos de los siglos. Amén
CONCLUSIÓN
V. El Señor nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos lleve a la vida eterna.
R. Amén
90
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
IV ORACIONES FRECUENTES
Se pueden realizar a lo largo del día de manera individual, comunitaria o
en misión, según sea la necesidad
A ti Dios - Te Deum
Se realiza en la capilla los domingos después del almuerzo. También, en las
grandes festividades de nuestra comunidad y el 31 de diciembre (No se reza
durante el tiempo de cuaresma).
1- A ti la Iglesia santa,
por todos los confines extendida,
con júbilo te adora y canta tu grandeza:
1- Tú destruiste la muerte
y abriste a los creyentes las puertas de la gloria.
2- Tú vives ahora,
inmortal y glorioso, en el reino del Padre.
91
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
2- Sé su pastor,
y guíalos por siempre.
2- Dígnate, Señor,
guardamos de pecado en este día.
92
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
93
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
94
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
Te saludo, Herida abierta del Sacratísimo Corazón, De la cual salieron los rayos de
la misericordia Y de la cual nos es dado sacar la vida, Únicamente con el recipiente
de la confianza. Te saludo, inconcebible bondad de Dios, Nunca penetrada e
insondable, Llena de amor y de misericordia, siempre santa, Y como una buena
madre inclinada sobre nosotros.
Te saludo, Trono de la misericordia, Cordero de Dios, Que has ofrecido la vida por
mí, Ante el cual mi alma se humilla cada día, Viviendo en una fe profunda. (DSF
1321)
95
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
Oh Señor, has esparcido tanta belleza sobre la tierra y ella me habla de Tu belleza,
aunque es sólo un pálido reflejo de Ti, belleza incomprensible. Y aunque Te has
escondido y ocultado, y has ocultado Tu belleza, mi ojo, iluminado por la fe, llega
hasta Ti y mi alma reconoce a su Creador, a su Bien supremo y mi corazón se
sumerge completamente en una plegaria de adoración.
Aquí torrentes de gracias fluyen sobre mi corazón, aquí mi alma obtiene la vida
eterna. Oh Creador y Señor mío, además de ofrecerme estos dones, Tu Mismo Te
entregas a mí y Te unes íntimamente a Tu criatura miserable.
Aquí nuestros corazones se entienden sin buscar palabras; aquí nadie es capaz de
interrumpir nuestra conversación. Aquello de lo cual hablo Contigo, oh Jesús, es
nuestro secreto que otras criaturas desconocerán y por el cual los ángeles no se
atreven a preguntar.
Son los perdones secretos que conocemos sólo Jesús y yo, es el misterio de su
misericordia que abraza a cada alma individualmente. A causa de esta
inconcebible bondad Tuya. Te adoro, oh Creador y Señor, con todo mi corazón y
toda mi alma. Esta adoración mía es muy miserable e insignificante, no obstante,
estoy serena, porque sé que Tú sabes que es sincera, aunque tan imperfecta (DSF
1692)
96
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
la batalla.
Oh Espíritu de Dios, huésped amabilísimo de mi alma, Por mi parte deseo ser fiel
a Ti. Tanto en los días de alegría como en los tormentos, Deseo siempre vivir en
Tu presencia, oh Espíritu de Dios.
Oh Espíritu de Dios que penetras mi ser en su totalidad, Y me das a conocer Tu
vida divina, trina, Y me confías los secretos de Tu esencia divina, y unida a Ti de
este modo, viviré por la eternidad. (DSF 1411)
Oración de adoración (DSF 742, 1744, 1746, 1747, 1748, 1750, 356)
Adorado seas, Único en la Santísima Trinidad, Dios misericordioso, Insondable,
infinito, inconcebible. Sumergiéndose en Ti, su mente no logra comprenderte, Por
lo tanto, repiten sin cesar su eterno: Santo. (DSF 1742)
Gracias, oh Jesús, por la Santa Comunión, En la cual Tu Mismo Te nos das. Siento
Tu Corazón latir en mi pecho, Mientras Tu Mismo desarrollas en mí la vida divina.
97
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
Gracias, oh Señor, por los votos perpetuos, Por este vínculo de amor puro, Por
haberte dignado unir al mío Tu Corazón puro, Uniendo mi corazón al Tuyo con un
lazo de pureza.
Gracias, oh Dios, por todas las inspiraciones, De las cuales me colma Tu bondad,
Por estas iluminaciones interiores del alma, Que es imposible expresar, pero que
el corazón percibe.
Que Tu misericordia descanse en ellas, quítame todo, pero dame estas almas.
Deseo convertirme en la hostia expiatoria por los pecadores, que el cuerpo oculte
mi sacrificio, ya que Tú también ocultas Tu Sacratísimo Corazón en la Hostia, a
pesar de ser la inmolación viva.
Transfórmame en Ti, oh Jesús, para que sea una víctima viva y agradable a Ti;
deseo satisfacerte en cada momento por los pobres pecadores, el sacrificio de mi
espíritu se oculta bajo la envoltura del cuerpo, el ojo humano no lo alcanza, por
lo tanto, es puro y agradable a Ti.
Oh Creador mío y Padre de gran Misericordia, confío en Ti, porque eres la Bondad
Misma. (DSF 908)
98
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
Acto de ofrecimiento
Oh Jesús Hostia que en este momento he recibido en mi corazón y en esta unión
Contigo me ofrezco al Padre celestial como hostia expiatoria, abandonándome
plena y absolutamente a la misericordiosísima, santa voluntad de mi dios. Desde
hoy, Tu voluntad, Señor, es mi alimento. Tienes todo mi ser, dispón de él según
Tu divina complacencia.
Cualquier cosa que Tu mano paternal me ofrezca, la aceptaré con sumisión,
serenidad y gozo. No tengo miedo de nada, cualquiera que sea el modo en que
quieras guiarme; y con la ayuda de Tu gracia cumpliré cualquier cosa que exijas
de mí. Ya ahora no temo ninguna de Tus inspiraciones ni analizo con
preocupación a dónde me llevaran.
Guíame, oh Dios, por los caminos que Tú quieras; tengo confianza absoluta en Tu
voluntad que es para mí el amor y la misericordia mismos. Me haces quedarme
en este convento, me quedaré; me haces comenzar la obra, la comenzaré; me
99
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
Desde este momento vivo en la más profunda serenidad, porque el Señor Mismo
me lleva en Sus brazos. Él, el Señor de la misericordia insondable, sabe que lo
deseo solamente a Él en todo, siempre y en todo lugar.
100
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
Que otros sean más amados que yo, Jesús dame la gracia de desearlo
Que otros sean más estimados que yo,
Que otros crezcan en la opinión del mundo y yo me eclipse,
Que otros sean alabados y de mí no se haga caso,
Que otros sean empleados en cargos y a mí se me juzgue inútil,
Que otros sean preferidos a mí en todo,
Que los demás sean más santos que yo con tal que yo sea todo lo santo que
pueda.
Oración:
Oh Jesús que, siendo Dios, te humillaste hasta la muerte, y muerte de cruz, para
ser ejemplo perenne que confunda nuestro orgullo y amor propio. Concédenos
la gracia de aprender y practicar tu ejemplo, para que humillándonos como
corresponde a nuestra miseria aquí en la tierra, podamos ser ensalzados hasta
gozar eternamente de ti en el cielo. Amén.
101
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
V. OREMOS EN LATIN
Oremos con la lengua materna de la Iglesia
Per signum Sanctae (†) Crucis, de inimicis (†) nostris, libera nos, (†) Domine
Deus noster.
In nomine Patris, et Filii, et Spiritus Sancti. Amen.
Por la señal de la Santa Cruz, de nuestros enemigos líbranos, Señor Dios nuestro.
En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo. Amén.
Te Deum – A ti Dios
Te Deum laudamus:
te Dominum confitemur.
Te aeternum Patrem,
omnis terra veneratur.
102
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
in gloria Patris.
103
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
104
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
Tu septiformis munere,
Digitus Paternae dexterae,
Tu rite promissum Patris,
Sermone ditans guttura.
105
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
Credo
106
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
Ave María
Ave María,
gratia plena,
Dominus tecum,
benedicta tu in muliéribus,
et benedictus fructus ventris tui Iesus.
Gloria
Gloria Patri, et Fili, et Spiritui Sancto.
Sicut erat in principio, et nunc et semper,
et in saeccula saeculorum,
Amén.
107
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
Salve Regina
Salve Regina
Regina, mater misericordiae:
Vita, dulcedo, et spes nostra, salve.
Ad te clamamus, exsules, filii Hevae.
Ad te suspiramus, gementes et flentes
en hac lacrimarum valle.
Magnificat
Magníficat ánima méa Dóminum,
Et exultávit spíritus méus in Déo salutári méo.
Quia respéxit humilitátem ancíllæ súæ,
ecce enim ex hoc beátam me dícent ómnes generatiónes.
Quia fécit míhi mágna qui pótens est :
et sánctum nómen éjus
Et misericórdia éjus a
progénie in progénies timéntibus éum.
108
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
Angelus
V. Angelus Domini nuntiavit Mariae,
R. Et concepit de Spiritu Sancto.
Ave Maria…
Oremus.
Gratiam tuam, quaesumus Domine, mentibus nostris infunde, ut qui, Angelo
nuntiante, Christi Filii tui incarnationem cognovimus, per passionem eius et
crucem ad resurrectionis gloriam perducamur. Per Christum Dominum nostrum.
Amen.
V. Sanctus Deus,
R. Sanctus Fortis,
Sanctus Immortális,
miserére nobis et totius mundi. (x3)
109
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
Cantos en latín
Canto de piedad
Kyrie Eleison
Kyrie Eleison
Kyrie Eleison,
Christe Eleison
Christe Eleison
Christe Eleison
Kyrie Eleison
Kyrie Eleison
Kyrie Eleison
Laudamus te
Benedicimus te
Adoramus te
Glorificamus te
Gratias agimus tibi
Propter magnam gloriam tuam
110
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
Sanctus – Santo
Agnus Dei,
Qui tollis peccata mundi,
Miserere nobis.
Agnus Dei,
Qui tollis peccata mundi,
Miserere nobis.
Agnus Dei,
Qui tollis peccata mundi,
Dona nobis pacem.
Genitori, genitoque
Laus et iubilatio
Salus, honor, virtus quoque
Sit et benedictio
Procedenti ab utroque
Compar sit laudatio
Amén
111
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
Genitori, genitoque
Laus et jubilatio
Salus, honor, virtus quoque
Sit et benedictio
Procedenti ab utroque Compar sit laudatio.
112
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
Cantos
Se Cierra El Sagrario
(Reserva del Santísimo)
Jesús en ti confío yo
(Himno a la Misericordia)
Jesús en ti confío yo
Jesús en ti confío yo
confianza fe y misericordia
son cosas para llegar a vos.
113
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
Alma Misionera
Estoy Dispuesto a lo que quieras
No importa lo que sea
Tú llámame a servir
114
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
115
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
INDICE
IV BREVIARIO………………………………………………………………………71
I Visperas Fiesta Santa Faustina………………………..………………..71
Oficio de Lectura Fiesta Santa Faustina………………………………75
Laudes Fiesta Santa Faustina………………………..…………………...79
II Visperas Fiesta Santa Faustina……….……………..……….………..86
116
Sed Misericordiosas, como Su Padre es Misericordioso lc. 6, 36
Kyrie Eleison………………………………………………………………………110
Gloria in excelsis Deo…………………………………………………………110
Sanctus……………………………………………………………….……………..111
Agnes Dei……………………………………………………………………….... 111
Tantum Ergo Sacramentum…………………………………………..…..111
Pange Lingua……………………………………………………………………..112
117