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Ministerio Evangelístico y Pedagógico “La Verdad Os Hará Libres” (Mv)

ÍNDICE

Temas Páginas
Introducción…………………………………………………………………. … 02
¿Qué es la teología?........................................................................................ … 03
Definiciones y evolución del término……………………………………….. … 03
Toda religión sustenta una determinada teología…………………………… … 04
Quienes hacen teología……………………………………………………… … 04
El corazón hace al teólogo…………………………………………………... … 04
Las Fuentes de la Teología………………………………………………….. … 05
Las Sagradas Escrituras……………………………………………………... … 05
La tradición………………………………………………………………….. … 05
La historia…………………………………………………………………… … 05
Otras fuentes importantes para el estudio de la teología……………………. … 06
La Revelación e Inspiración………………………………………………… … 06
El significado de la Inspiración……………………………………………... … 06
Criterios de Inspiración……………………………………………………... … 07
Teoría del dictado verbal o mecánica……………………………………….. … 07
Teoría dinámica……………………………………………………………... … 07
Teoría de inspiración plena…………………………………………………. … 07
La autoridad de la Biblia……………………………………………………. … 08
Asuntos abordados por la teología………………………………………….. … 08
Diversas Ramas de la Teología……………………………………………... … 08
Corrientes filosóficas contrarias a la teología……………………………….. … 10
Breve Historia de la Teología en América Latina…………………………... … 12
La teología académica y la pastoral………………………………………… … 12
Importantes controversias…………………………………………………… … 13
Corrientes teológicas del siglo XX………………………………………….. … 13
Conclusión…………………………………………………………………... … 15
Bibliografía………………………………………………………………….. … 15

INTRODUCCIÓN
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El estudio de la teología ha sido siempre una gran necesidad. Los hombres de

Dios, a través de la historia se han visto en la notable urgencia de formular y
organizar los conceptos bíblicos teológicos para proteger a la iglesia de Dios de
las concepciones herradas y heréticas planteadas por los que han concebido la
falsa idea del Dios verdadero y salvífico.

El bombardeo ideológico, es decir, los ataques en contra de la iglesia del Señor

por parte de las diferentes teologías o doctrinas erradas han estado latentes y es
por ello que Dios ha levantado hombres con un corazón dispuesto para el estudio
de la teología y dispuestos a presentar defensa para resguardar la iglesia de Cristo
en el nombre del Señor.

¿QUÉ ES LA TEOLOGÍA?
DEFINICIONES Y EVOLUCIÓN DEL TÉRMINO
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a. Teología del griego θεóς, transl. Theos = "Dios" + λóγος, logos = "palabra", por
extensión, "estudio", en el sentido literal, es el estudio sobre Dios.
b. Etimológicamente TEOLOGÍA proviene de la unión de dos vocablos griegos,
theos (Dios) y logos (palabra o estudio). Por lo que "teología" es un estudio o
tratado acerca de Dios. En términos estrictos, referiría exclusivamente a la
persona de Dios; pero ha llegado a incluir el compendio de toda la doctrina
cristiana.
Como toda ciencia, tiene un objeto de estudio: Dios. Como no es posible estudiar
directamente un objeto que no vemos y no tocamos, se estudia Dios a partir de su
revelación, o, en términos seculares, conforme sus representaciones en las
variadas culturas. En el cristianismo, eso se da a partir de la revelación de Dios en
la Biblia. El teólogo suizo Karl Barth definió la Teología como un "hablar a
partir de Dios". Este término fue usado por primera vez por Platón en «La
República» para referirse a la comprensión de la naturaleza divina por medio de la
razón, en oposición a la comprensión literaria propia de sus poetas coetáneos.
Más tarde, Aristóteles empleó el término en numerosas ocasiones con dos
significados:
 Teología como la rama fundamental de la ciencia filosófica, también llamada
filosofía primera o ciencia de los primeros principios, más tarde llamada
Metafísica por sus seguidores.
 Teología como denominación del pensamiento mitológico inmediatamente previo
a la Filosofía, en un sentido peyorativo, y sobre todo usado para llamar teólogos a
los pensadores antiguos no-filósofos (como Hesíodo y Ferécides de Siro).
San Agustín tomó el concepto teología natural (theologia naturalis) de la gran
obra «Antiquitates rerum divinatum», de M. Terencio Varrón, como única
teología verdadera de entre las tres presentadas por Varrón: la mítica, la política y
la natural. Sobre ésta, situó la teología sobrenatural (theologia supernaturalis),
basada en los datos de la revelación y por tanto considerada superior. La teología
sobrenatural, situada fuera del campo de acción de la Filosofía, no estaba por
debajo, sino por encima de ésta, y la consideraba su sierva, que la ayudaría en la
comprensión de Dios. Teodicea es un término empleado actualmente como
sinónimo de teología natural. Fue creado en el s. XVIII por Leibniz como título
de una de sus obras: «Ensayo de Teodicea, acerca de la bondad de Dios, la
libertad del hombre y el origen del mal», si bien Leibniz se refería con teodicea a
cualquier investigación cuyo fin fuera explicar la existencia del mal y justificar la
bondad de Dios.
El término "teología" no se encuentra en la Biblia, más su concepto se
desarrolla exuberante a través de sus páginas.
TODA RELIGIÓN SUSTENTA UNA DETERMINADA TEOLOGÍA
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Podríamos referir a la teología budista, islámica, judaica, cristiana y un largo

etcétera. Más no debemos confundir teología con religión. Religión proviene de
un vocablo latino (ione) que significa "ligar" y es todo intento del hombre por
relacionarse con la deidad o elementos sagrados, sea para adorarle, calmar su ira,
ganar su favor ... En distinción a ello, la teología es abstracta, es la reflexión, es el
análisis, es el "pensamiento religioso".
La teología es intelectual mientras que la religión es práctica. La teología afecta y
determina las formas en que se manifiesta la religión.

¿QUIENES HACEN TEOLOGÍA?

Toda religión posee teología.
Pero ¿quiénes son las personas que "hacen" la teología? Primeramente es
pertinente aseverar que existen teólogos eruditos, personas versadas en la
teología. Son hombres o mujeres que por su reflexión, investigación sistemática,
pensamiento crítico y dedicación de vida han llegado a constituirse en verdaderos
especialistas en el campo teológico. Luego de tal crédito, es preciso declarar que
TODA persona que reflexiona o dice pensar algo respecto a Dios, o a cualquiera
de los temas teológicos desde una perspectiva espiritual, está "haciendo" teología.

Si usted piensa que Dios es amor, está haciendo teología.

Si usted considera que Dios es un ser tan lejano de la existencia humana y que por
tanto sería imposible alcanzar a experimentarle de alguna manera, también está
haciendo teología. Es posible que dicha modalidad de "teología espontánea",
natural y rudimentaria no tenga argumentos, ni aún razones críticas en las que
fundamente sus posturas. Pero es ideal teológico al fin.
Al afirmar lo anterior pretendemos desafiar a todo creyente a interesarse por la
teología como aquella ciencia que se ocupa del estudio sistemático de Dios y las
doctrinas cristianas. Si de todas maneras desarrollaremos una teología, hagámoslo
de la mejor forma.

EL CORAZÓN HACE AL TEÓLOGO "PECTUS FACIT THEOLOGUM":

Tengamos corazón para estudiar analíticamente los temas relacionados con Dios y
sus propósitos. Agregando seriedad, reverencia y expectativas espirituales
¡nuestro corazón disfrutará palpitando al Soberano! No deberíamos buscar
conocer tanto los errores y herejías, como pretender especializarnos en la verdad
divina. La teología, en sus diversos ramos, nos otorga herramientas valederas para
la superación como comunidad evangélica cristiana, además de la personal.

FUENTES DE LA TEOLOGÍA.
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Las fuentes de la Teología son:

- La Sagrada Escritura.
- La Tradición de la Iglesia.
- De algún modo puede considerarse también la Historia.

1. LA SAGRADA ESCRITURA es la Palabra de Dios, en cuanto escrita por inspiración

del Espíritu Santo. Por eso la Escritura debe ser el alma de la Teología. Es la base
de las afirmaciones teológicas, por eso la exégesis hace posible una
profundización y un rejuvenecimiento de la Teología.

Las Sagradas Escrituras deben estar unidos a la Tradición para entregar el justo
sentido de los textos.

2. LA TRADICIÓN refleja la vida intelectual, orante y litúrgica de la Iglesia. Es

anterior a la Escritura misma y mantiene con ella una profunda relación. Es la
palabra de Dios no escrita, está formada por un conjunto de testimonios a veces
eclesiales que dan razón de la fe de la Iglesia.

La Tradición y la Escritura están estrechamente unidas, manan de la misma

fuente. La Iglesia no saca exclusivamente de la Escritura la certeza de lo revelado,
porque la Tradición recibe la Palabra de Dios (encomendada por Cristo y el
Espíritu Santo a los apóstoles) para que ellos (iluminados por el Espíritu) la
conserven, expongan y difundan.

Los lugares donde podemos encontrarla son los escritos de los padres de la
iglesia, Actas de mártires, autores místicos, enseñanzas de los concilios
eclesiásticos, la legislación canónica, etc.

3. LA HISTORIA no es propiamente una fuente, sí es cierto que puede ayudar mucho

en cuanto que puede colaborar a entender mejor cómo esas verdades se
interpretan y viven dentro de la Iglesia con el transcurso del tiempo.

Le corresponde al ministerio Cristiano estudiar y evaluar con la ayuda del

Espíritu de Dios estas fuentes para el estudio de la teología.

OTRAS FUENTES IMPORTANTES PARA EL ESTUDIO DE LA

TEOLOGÍA SON:
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LA REVELACIÓN E INSPIRACIÓN , Dos conceptos que se relacionan muy

estrechamente.

- La revelación es la actividad por la cual Dios se da a conocer y declara su

propósito al ser humano. Es origen de la verdad recibida.

- La inspiración tiene que ver con el método de recibir, interpretar y registrar la

verdad revelada por Dios.

Dios ha descubierto su naturaleza y su voluntad al ser humano por medio de

ángeles, sueños, visiones, naturaleza, escritos, voces, echar las suertes, la voz
interior de la conciencia individual.

Recuerda el siguiente texto “Dios, habiendo hablado muchas veces y de muchas

maneras en otro tiempo a los padres por los profetas, al final de estos días nos
habló por el Hijo” Hebreos 1:1, 2.

AQUELLO QUE DIOS REVELÓ FUE RECIBIDO, INTERPRETADO Y REGISTRADO

POR LOS PROFETAS.

El acto de recibir, interpretar y transmitir la revelación de Dios involucra

actividades tanto humanas como divinas. La revelación puede ser transmitida en
forma oral o ser registrada en forma de documentos. La actividad divina inspira y
guía al hombre en su trabajo de interpretar y preservar la revelación. La Biblia
tiene un origen divino y humano como la revelación corporizada de Dios. La
inspiración es la actividad divina por la cual el Espíritu Santo guía las mentes de
los hombres seleccionados y los transforma en órganos de Dios para la
comunicación de la revelación.
EL SIGNIFICADO DE LA INSPIRACIÓN.
En el texto original del versículo, el concepto inspiración se traduce en primer
término como soplo y luego como guía: Toda (la) Escritura es inspirada
(soplada) (guiada) por Dios y útil para enseñar, para reprender, para corregir y
para instruir en la justicia. 2Tim.3:16.
Este soplo o guianza es obra únicamente del Espíritu Santo. Cuando lo sautores
escribían el texto, el Espíritu Santo estaba presente en sus vidas dirigiéndolos,
influenciando su corazón, soplando a su mente y oído la Palabra de Dios. La
inspiración bíblica puede ser definida como la obra del Espíritu Santo para lo
cual, se hace uso de la personalidad y los talentos literarios de sus autores
humanos.
La Biblia goza de autoridad divina y sin error. (Es inerrable e infalible)
Otros conceptos unidos a la inspiración son la esencia y atributos de la Biblia,
decimos y afirmamos que la Biblia es inspirada por Dios y por tanto, es inerrante
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e infalible El término inerrancia e Infalibilidad sugiere que las Escrituras no se

desvían ni se aparten de la verdad.

La fuente de la genuina teología debe ser pura y exclusivamente la Biblia.

Sólo ella, como Revelación inspirada por Dios, es quien puede enseñarnos acerca
de su Eterno Autor. Como revelación especial, la Biblia y la persona de Jesucristo
son las brújulas fieles para el buen teólogo.

CRITERIOS DE INSPIRACIÓN
A. TEORÍA DEL DICTADO VERBAL O MECÁNICA:
Los ultraconservadores o fundamentalistas han sido acusados de enseñar la
inspiración mecánica o dictado verbal.

El criterio afirma que Dios dictó sus palabras a los profetas, que actuaron como
secretarios. Pocos teólogos aceptarían este modo de interpretar la inspiración para
toda la Biblia. Las objeciones a este punto de vista se basan en el hecho de que
Dios utilizó agentes humanos, no como receptores pasivos o robots, sino como
contribuyentes activos de la escritura de la Biblia.

B. TEORÍA DINÁMICA:
Algunos estudiosos de la Biblia proponen que lo que Dios inspira no son las
palabras sino los pensamientos o ideas. Dios comunicó a los profetas los
pensamientos, y ellos fueron libres para registrarlos con sus propias palabras. Este
criterio explica las diferencias de personalidad y estilo literario reflejadas en las
Escrituras. También sostiene que la Biblia es la Palabra de Dios porque el
significado verdadero, o el mensaje, viene de Dios. El escritor bíblico puso la
Palabra de Dios en sus propias palabras.

C. TEORÍA DE INSPIRACIÓN PLENARIA:

Algunos sostienen que esta teoría es el criterio ortodoxo. De acuerdo a esta teoría,
todas las palabras mismas fueron inspiradas por Dios. Dios dio expresión
completa (plenaria) a sus pensamientos en las palabras del registro bíblico. El
guió a los escritores a elegir las palabras que eran características de su tiempo y
cultura, pero que expresaban adecuadamente la revelación divina.

LA AUTORIDAD DE LA BIBLIA
La autoridad de la Biblia está basada sobre el hecho de que es la Palabra de Dios.
El grado de autoridad atribuida a la Biblia depende del criterio de inspiración y
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revelación que uno tenga. Las iglesias primitivas utilizaban un idioma que
adjudicaba alta autoridad al Antiguo y el Nuevo Testamentos. Dado que ellos
creían que el Espíritu Santo impulsó a los autores a escribir y que dirigió sus
mentes para escribir como lo hicieron, los cristianos primitivos hablaron de la
Biblia como las “Escrituras divinas”, los “libros sagrados”, etc. Se estimaba que
la Biblia poseía una autoridad que era divina.

ASUNTOS ABORDADOS POR LA TEOLOGÍA.

Los asuntos teológicos cristianos pueden ser infinitos. Decimos esto desde la
concepción de que cualquier asunto humano o celestial puede ser objeto de
análisis y reflexión para el teólogo. No obstante, a continuación mencionamos
algunos asuntos "típicos" dentro del análisis teológico:
- Dios (Teología Propia)
- El pecado (Hamartiología)
- La salvación (soteriología)
- La iglesia (eclesiología)
- Los acontecimientos finales (escatología)
- El Señor Jesucristo (cristología)
- El Espíritu Santo (Pneumatología)
- El hombre (antropología)
- Los ángeles (angelología)

DIVERSAS RAMAS DE LA TEOLOGÍA.

Dependiendo de los diversos temas, patrones que se emplean para crear u ordenar
cierto asunto, la teología puede dividirse en los siguientes ramos:
NOTA: ESTOS SON SÓLO ALGUNOS DE ELLOS
a. Teología bíblica, refiere al estudio de las doctrinas tal cual aparecen en la Biblia,
alguno de sus libros, en todos los escritos de cierto autor bíblico. Por ejemplo,
puede ser el análisis del concepto de perdón tal cual aparece en el Antiguo o
Nuevo Testamento, en las enseñanzas de Jesús, o en las Epístolas del apóstol
Pablo, Pedro o Juan.

b. Teología exegética, se ocupa de la extracción de la verdad bíblica tal cual aparece

en su contexto. "Exégesis" provine del griego "extraer" por lo que esta rama de la
teología realiza un análisis semántico, sintáctico, de las figuras retóricas, del
contexto histórico, de los pasajes paralelos y de las características especiales a
considerar según el género literario tratado. Recién entonces formula postulados
teológicos.
c. Teología sistemática, refiere a la compilación ordenada y racional de las
doctrinas. El teólogo para lograr su cometido, utiliza los demás ramos de la
teología y los ajusta con la herramienta de la "sistematización".
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d. Teología histórica, se aplica al estudio de las doctrinas cristianas a través de los

diversos períodos históricos que surcó la iglesia.

e. Teología pastoral, trata de la tarea del pastor como la Consejería y la Homilética;

es el estudio de la práctica de la teología en la esfera pastoral.

f. Teología natural. La teología natural, también llamada teología racional, es el

intento de encontrar evidencia de Dios sin recurrir a ninguna revelación
sobrenatural. Se distingue, así, de la teología revelada, basada en las Escrituras o
en experiencias religiosas (cosmogonía).
Esta expresión es usada en la actualidad por seguidores del diseño inteligente,
para tratar de dar valor a pruebas que consideran científicas, pero que son
descartadas y consideradas erróneas por las ciencias naturales; o usada por
algunos tipos de partidarios de la evolución teísta, como el posible origen de una
futura explicación natural de Dios.

g. Teología filosófica. de philo (amor) y sophia (sabiduría). La Teología Filosófica

ocurre cuando los hombres reflexionan, hablan y escriben acerca de asuntos que
son más amplios que los intereses de la Teología Sistemática, que no son asuntos
de dogma o de definición polémica, sino de sabiduría y reflexión.

h. Teología dogmática. O Teología Dogmatica Especial. La teología dogmática

puede definirse como la exposición científica de toda la doctrina teórica acerca de
Dios mismo y su actividad exterior, basado en los dogmas de la Iglesia. La
teología dogmática hace hincapié en la importancia de la verdad propuesta, por
encima de la experiencia, o las percepciones sensoriales.

i. Teología litúrgica. La Teología Litúrgica busca contestar la pregunta de cómo la

vasta cantidad de información litúrgica en la Biblia ha de aplicarse en la vida
litúrgica de la Iglesia en la Nueva Era del Evangelio. La liturgia, que es la actual
representación de la adoración y la liturgia, es una rama de la Teología Litúrgica.

j. Teología moral. es una rama de la filosofía que trata con el bien y el mal en el
comportamiento humano. La mayoría de las religiones tienen un componente
moral, religioso y de abordar el problema de la ética históricamente dominado por
la ética secular enfoques. Desde el punto de vista de teológico en las religiones,
en la medida en que la ética se deriva de verdad revelada de las fuentes divinas, la
ética se estudia como una rama de la teología.

k. Apologética. O teología fundamental. Se llama “teología dogmática general”

También considerada dentro de la rama de la teología. La Apologética en teología
y literatura consiste en la defensa sistemática de una posición o punto de vista. La
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palabra Apologética proviene del griego apología (απολογία), que designa la

posición de defensa militar contra un ataque.
l. Teología contemporánea. La teología contemporánea, en un sentido real, nació
en 1919 en el estudio de una iglesia de Suiza, a unos sesenta y cinco kilómetros al
sur de la frontera con Alemania. El iniciador fue un joven pastor, Karl Barth
(1886-1968), quien había ido a parar ahí en 1911, a los 25 años. Y la proclama de
este nuevo pívot teológico en la historia, el anuncio inicial de una nueva era
teológica, fue el comentario de Karl Barth al libro de romanos, en 1919.
m. Otras tantas teologías. Tales como: de la Esperanza, Católica, Evangélica,
Musulmana, Hebrea, etc.
CORRIENTES FILOSÓFICAS CONTRARIAS A LA TEOLOGIA.
SOLO ALGUNAS DE ELLAS.
IDEALISMO. En filosofía, Idealismo designa las teorías que (en oposición al
Materialismo) sostienen que la realidad extra-mental no es comprensible tal como
es en sí misma, y que el objeto del conocimiento está preformado o construido por
la actividad cognoscitiva.
DUALISMO. Se llama dualismo del latín (duo, dualis = dos, dual) a la doctrina
que afirma la existencia de dos principios supremos, increados, contornos,
independientes, irreductibles y antagónicos, uno del bien y otro del mal, por cuya
acción se explica el origen y evolución del mundo; y también, en un sentido más
amplio, a las doctrinas que afirman dos órdenes de ser esencialmente distintos,
con más o menos radicalismo: por ejemplo, ser ideal y ser real, Dios y mundo,
naturaleza y gracia (en el plano cognoscitivo razón y fe), materia y espíritu, orden
físico (de la necesidad) y orden moral (de la libertad y el deber) (en el plano
cognoscitivo constatación y valoración ética), conocer y querer (plano de la
actividad consciente), bien y mal (plano de la actividad moral), etc. En el primer
caso se trata del dualismo en el sentido más estricto y usual del término, y se
puede llamar dualismo teológico, cosmogónico (relativo al origen del cosmos) o
religioso; en el segundo caso se puede hablar de un dualismo metafísico, que se
opone de modo irreductible al correspondiente monismo, y ambos se oponen al
panteísmo.
MONISMO. Reciben el nombre de monismo todas aquellas posturas filosóficas
que sostienen que el universo está constituido por un sólo principio o sustancia
primaria. Así, según los monismos materialistas, todo se reduce, en última
instancia, a materia, mientras que para los espiritualistas o para el idealismo
(especialmente, el idealismo hegeliano), ese principio único sería el espíritu.
MATERIALISMO. El materialismo es una corriente filosófica que surge en
oposición al idealismo y que resuelve la cuestión fundamental de la filosofía
dándole preeminencia al mundo material; resumidamente, lo material precede al
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pensamiento. Según esta concepción el mundo y por extensión el universo es

material, existente objetivamente fuera e independientemente de la conciencia. La
materia es primaria y la conciencia y el pensamiento son propiedades de ésta a
partir de un estado altamente organizada. El pensamiento en tal sentido es un
nivel superior del conocimiento humano, proceso de reflejo de la realidad
objetiva. Sostiene además que la materia no ha sido creada de la nada, que existe
en la eternidad y que el mundo y sus regularidades son comprensibles.
POSITIVISMO. El Positivismo es una corriente o escuela filosófica que afirma
que el único conocimiento auténtico es el conocimiento científico, y que tal
conocimiento solamente puede surgir de la afirmación positiva de las teorías a
través del método científico. El positivismo deriva de epistemología que surge en
Francia a inicios del siglo XIX de la mano del pensador francés Auguste Comte y
del británico John Stuart Mill y se extiende y desarrolla por el resto de Europa en
la segunda mitad. Según la misma, todas las actividades filosóficas y científicas
deben efectuarse únicamente en el marco del análisis de los hechos reales
verificados por la experiencia.
EXISTENCIALISMO. El existencialismo es una corriente, movimiento o serie
de doctrinas filosóficas y culturales que tiene por objetivo y disciplina, el análisis
y la descripción del sentido individual de la vida humana en cuanto “existe”.
Sostiene que el existente humano piensa, actúa, se refiere y relaciona consigo
mismo, con su propia trascendencia, con sus contradicciones y sus angustias. Para
el pensamiento existencialista el individuo no es una porción mecánica o “parte”
de un todo, sino que el hombre es en sí una “integridad” libre por sí. Esta doctrina
filosófica considera qué es la existencia del ser humano libre y qué es lo que
define su esencia, en lugar de entender que su esencia o condición humana
determina su existencia. Para esta corriente del pensamiento la existencia del ser
humano no es nunca un “objeto” sino que, desde el momento que el ser humano
es capaz de generar pensamiento “existe”; en consecuencia el reconocimiento de
esa existencia tiene primacía y precedencia sobre la esencia. No obstante, la
existencia del hombre puede ser inauténtica o falsa si éste renuncia a su libertad.
La carencia de libertad es carencia de existencia. En un sentido estricto para el
existencialismo las cosas materiales en cambio "son", pero no "existen".
ATEÍSMO. Ateísmo es, en un sentido amplio, el rechazo a la creencia en dioses
o deidades. En un sentido más estricto el ateísmo es la posición que sostiene la
inexistencia de deidades, y en un sentido más simple es la falta de creencia en
deidades. Algunos la definen como una doctrina o posición que rechaza el teísmo,
que en su forma más general es la creencia en la existencia de, al menos, una
deidad.
PANTEÍSMO. El panteísmo es una doctrina filosófica según la cual el Universo,
la naturaleza y Dios son equivalentes. La ley natural, la existencia y el universo
(la suma de todo lo que fue, es y será) se representa por medio del concepto
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teológico de "Dios". La palabra está compuesta del término griego πᾶν (pan), que
significa todo, y θεός (theos), que significa Dios; así se forma una palabra que
afirma: todo es Dios.
El panteísmo es la creencia de que el mundo y Dios son lo mismo, es más una
creencia filosófica que religiosa. Cada criatura es un aspecto o una manifestación
de Dios, que es concebido como el actor divino que desempeña a la vez los
innumerables papeles de humanos, animales, plantas, estrellas y fuerzas de la
naturaleza.
AGNOSTICISMO. El agnosticismo (del griego α- a-, sin + γνώσις, gnōsis,
conocimiento) es aquella postura filosófica o personal que, a grandes rasgos,
considera inaccesible para el ser humano todo conocimiento de lo divino y de lo
que trasciende o va más allá de lo experimentado o experimentable. El
agnosticismo es una doctrina basada en observaciones y experiencias, y por lo
tanto declara como inaccesible todo fenómeno que escape de la experimentación
o reproducibilidad.

BREVE HISTORIA DE LA TEOLOGÍA EN AMÉRICA LATINA

LA TEOLOGÍA ACADÉMICA Y LA PASTORAL
Se estructura en tres partes siguiendo un orden cronológico: el ciclo colonial
(siglos XVI-XVIII); el primer ciclo republicano (siglo XIX); y el siglo XX. En
cada uno de estos períodos se presenta la teología académica (la que se enseñó en
Universidades, centros teológicos dirigidos por regulares y seminarios
diocesanos) y la teología pastoral en sus diversas acepciones y niveles; asimismo
se presenta la teología que sostiene a la religiosidad popular de tanta impronta en
América Latina hasta nuestros días.

Hubo en la América colonial autores de gran nivel teológico, expuestos en el

manual con suficiente amplitud. Por citar sólo los más relevantes, recordemos a
Juan de Zumárraga, Juan Focher, José de Acosta, Bartolomé de Las Casas,
Alonso de la Vera Cruz, Diego de Valadés, Bartolomé Frías de Albornoz, Juan de
Palafox y Mendoza, Diego de Avendaño, Juana Inés de la Cruz, Juan José
Eguiara y Eguren, y muchos más. Saranyana presta especial atención a los
teólogos pre-ilustrados e ilustrados, entre los cuales se cuentan muchos jesuitas; y,
quizá por vez primera, incorpora a su manual el estudio de los jesuitas
latinoamericanos extrañados en 1767 y emigrados a los territorios pontificios,
cuya labor editorial fue muy prolífica y de especial significación en el debate con
el tardojansenismo.

IMPORTANTES CONTROVERSIAS.
Con la emancipación de las repúblicas hispanoamericanas (Brasil tuvo su propio
proceso de independencia) y con la elaboración de las primeras constituciones
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republicanas se inició en América una importante controversia entre la tradición

católica y el regalismo y el tardojansenismo. Estas controversias eclesiológicas
tuvieron como telón de fondo la cuestión del patronato y la discusión, en última
instancia, de las bulas alejandrinas y su legitimidad. En definitiva, no sólo temas
eclesiológicos, sino también importantes cuestiones de Derecho público
eclesiástico.

En la primera etapa del XIX resaltaron figuras como Juan de Egaña Risco,
Gregorio de Funes, José Servando Teresa de Mier, Félix Varela y Morales,
implicados en los debates sobre la tolerancia civil y religiosa, la abolición de la
trata negrera y la manumisión de la esclavitud, las relaciones de la nuevas
repúblicas con la Santa Sede, la designación de los obispos, la confirmación o
abolición de los fueros eclesiásticos, la desamortización de los bienes
denominados de “manos muertas”, y tantos otros temas, que, de alguna manera,
casi han llegado al Vaticano II.

El repaso del siglo XIX ayudará a los latinoamericanos a conocer mejor su propia
historia y el papel relevante que la Iglesia católica ha tenido en la construcción de
su identidad nacional. Saranyana se detiene también (cosa poco usual en los
manuales) en señalar la trascendencia del Concilio Vaticano I y su recepción en
América Latina.

En el siglo XX y antes de 1965, América (sobre todo el Cono Sur) conoció el

apogeo del neotomismo con una incidencia decisiva de Jacques Maritain y
Réginald Garrigou-Lagrange, y, a partir de 1931, la creación de un buen
número de Facultades de Teología, que aquí son descritas con detalle. En esos
años nacieron las primeras revistas teológicas de investigación y muchas otras de
alta divulgación, que contribuyeron a un notable desarrollo de la práctica cristiana
y a la difusión de una rica cultura católica.

CORRIENTES TEOLÓGICAS DEL SIGLO XX

Muy interesante y detallado es el análisis que se ofrece en este manual de la
segunda mitad del siglo XX, es decir desde el Vaticano II a nuestros días, con
especial atención a la recepción de los decretos conciliares en las Conferencias
Generales del Episcopado de América Latina (sobre todo Medellín y Puebla) y a
la eclosión de las teologías latinoamericanistas (sobre todo, la teología de la
liberación y sus diversas variantes) Saranyana no olvida, por considerarlo un
fenómeno de especial relieve, la teología feminista latinoamericana.

Estas corrientes teológicas, tratadas con serena crítica, se enmarcan en el manual

en el contexto de los esfuerzos del magisterio pontificio para decantar los
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aspectos positivos de las nuevas propuestas, rechazando los planteamientos

caducos o poco conformes con la tradición católica.

Una bibliografía general comentada, que se inserta en la «Introducción» de la

obra, puede ser muy útil para los estudiosos. Facilitan la consulta del libro los
cuidados índices finales, sobre todo el índice onomástico, y los cuatro cuadros
sinópticos con los respectivos ciclos conciliares (colonial, carolino, republicano y
del siglo XX)

Merece destacarse, para terminar, el carácter pionero de este manual, útil no sólo
para la docencia universitaria, sino también para los estudiosos de la historia
cultural, especialmente filosófica, de América Latina.
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CONCLUSIÓN

Hemos concluido con éxito este tema que considero es un abreboca para
continuar en la búsqueda del conocimiento de las Escrituras para presentar
defensa ante todo aquel que demande acerca de la fe que hay en nosotros.

Dios se ha dado a conocer y solo nos resta ir en esa búsqueda, en esa dirección
teológica y mantener el cuidado y la debida atención por la iglesia del Señor
Jesucristo.

Cada estudiante de teología debe convertirse en un asiduo investigador de las

Escrituras y debe hacerlo de manera acertada y establecer su apologética frente a
la necesidad real que hoy vive la iglesia del Señor.

BIBLIOGRAFIA
- JOSEP-IGNASI SARANYANA. Profesor de Historia de la Teología en la
Universidad de Navarra.

- P. CLAUDIO M. BURGALETA S.J., S.T.L., Ph.D. GSRRE, Fordham

University, New York Introducción a la Teología,

- KARL BARTH (1886-1968) Extractos del manual de Teología Contemporánea.

- La organización y edición de este material ha sido realizado por el Pastor

MIGUEL VELOZ, incluyendo algunos conceptos y pensamientos teológicos. La
introducción y conclusión fue realizada por el autor de este material. (Mv)

- Algunos textos bíblicos tomados de la versión Reina/Valera Biblia Textual.

Nuevo Testamento.